Helado
Era una tarde hermosa y soleada. Los rayos del Sol pasaban a través de la ventana del departamento de un rubio de lentes. Dos jóvenes niños de no más de quince años se despertaban apenas con pereza y flojera. Ambos salieron directo a la cocina ya que olía algo rico proveniente de la cocina.
—Buenos días, Natsuo-chan, Youji-chan —Dijo un adulto rubio mientras ponía la mesa.
—Buenos días, Soubi-san* —Respondieron al mismo tiempo los dos jóvenes.
Uno de ellos, un peli verde de ojos morados, se sentó a la mesa, exactamente en la derecha y el otro, un pelirrojo de ojos morados, al lado contrario de su compañero peli verde.
—Hoy no estaré, tengo cosas que hacer —Les comento el adulto mientras tomaba sus cosas —. Les encargo la casa —Dicho esto salió dejando solos a los dos zero.
El día fue aburrido. El pelirrojo, de nombre Natsuo, se la paso leyendo todo lo que Soubi guardaba en su departamento, hasta leyó las revistas que Kio abandonaba por ahí, claro que no fue una experiencia linda, ese Kio era muy Hentai.
Mientras el peli verde se la paso pegado al televisor, aunque no había nada interesante, exactamente por ser Sábado ** y sólo pasaban películas aburridas, en especial ese día, el día del amor y la amistad. Puras películas de amor que empezaron desde medio día hasta las doce de la noche. Youji dio n largo suspiro, el cual, Natsuo escucho y rió.
Al poco rato, el peli verde sintió los brazos de su compañero a su alrededor, este muy impulsivamente le gritó que quería helado y que no lo soltaría hasta tener uno, el peli verde tubo que ir a buscar un poco en el refrigerador del rubio, por suerte, había un poco de helado de galleta oreo.
—Y ya no molestes, Natsuo —Le dijo mientras servía en dos recipientes una buena porción de helado.
Y así estuvieron un buen rato comiendo helado, cuando de repente, Youji se macho el labio inferior de un poco de helado, pero este no se dio cuenta. El pelirrojo lo miró por un momento hasta que se deicidio en hablar.
—Youji, tienes algo en el labio… —Youji iba a pasar el torso de su mano en el labio pero Natsuo lo detuvo —. Déjame, yo te limpio…
Y dicho esto, el peli verde espero sentir la servilleta pasar por sus labios, pero en vez de eso sintió la lengua de su luchador pasar por su labio y después de eso sintió como esta iba entrando en su boca para terminar en un apasionado beso entre ambos zero.
Youji quería más de ese sabroso beso, el cual sabía a helado, pero Natsuo se separó sin darse cuanta de lo que había provocado en su amigo. Aunque ellos no pudieran sentir, siempre que rozaban alguna parte de su cuerpo con el otro sentía una electricidad, igual a la que sentían cuando un luchador estaba cerca, y eso fue lo que ambos sintieron cuando se besaron.
El peli verde miró por un buen rato a su compañero pelirrojo; este, como si nada hubiera pasado, lamía sensualmente la cuchara, dejándola totalmente limpia. El sacrifice se relamió los labios, deseaba otro beso de su luchador y lo obtendría.
Youji tomo de los hombros a Natsuo y acerco sus labios a los de él. Primero el beso fue tierno hasta que Youji pidió permiso para meter la lengua, ahí fue cuando ambas empezaron una pelea entre ambas, donde no habría ganador.
EL sacrifice recostó a su luchador en el frío piso y, torpemente, empezó a desabrochar la camisa del del parche. Al haber quitado la camisa por completo tuvieron que romper el beso por falta de oxigeno, pero después de respirar, el peli verde bajo los besos hasta el cuello de su luchador y ya ahí dejo rastros de saliva por todos lados y así fue hasta llegar al bien formado torso de su compañero, el cual, dejo lleno de saliva.
Ambos se miraron por un buen rato, ambos estaban demasiado sonrojados, por vergüenza de estar en esa posición. Les daba miedo que Soubi llegara y los encontrara en ese estado, no podía faltar al respeto esa casa que ni suya era. Pero luego recordaron cuando lo encontraron con Ritsuka haciendo cosas indebidas y siguieron con lo suyo.
El pelirrojo empezó, torpemente, a desabrochar la camisa de su sacrifice, mientras este seguía con los besos en el cuello de su luchador. Ambos lanzaban gemidos al viento. Natsuo por esos suaves labios que le devoraban el cuello, y Youji por esas suaves manos que tocaban todo a su paso.
Ambos terminaron como Dios los trajo al mundo. El peli verde empezó a besar todo el cuerpo de su adorable amigo. Dejo rastro de saliva por todas partes y empezó a juguetear con el miembro de su compañero. Gemidos de placer salían de la boca del pelirrojo, el cual sólo acariciaba la melena verde-azul de su amigo.
Youji se pasó arriba de su luchador, poniendo sus piernas al rededor de este. Empezaron de nuevo con sus besos, mientras el luchador empezaba a acariciar cada rincón del cuerpo de su bello sacrifice. El peli verde gemía, pero estos eran callados por los besos del pelirrojo.
Se separaron y ahí fue cuando en peli verde empezó a lamer sus dedos sensualmente, cosa que exito más al pelirrojo. Youji voltio a Natsuo y empezó a besar y lamer la espalda de su luchador, al llegar a la parte trasera de Natsuo le susurro al oído, dejando helado y lleno de placer al pelirrojo: ¨Prometo que seré delicado¨. Aunque no era necesario, ya que no sentían nada, pero de todos modos, Youji quería que su primera vez fuera especial.
Youji metió un dedo en la entrada del pelirrojo, este al principio sintió asco o y repulsión, por alguna razón, empezaba a sentir algo más que la sensación de que un luchador estuviera cerca. Ahora podía sentir las caricias de su adorado sacrifice, y no se explicaba el porqué.
El peli verde metió un segundo dedo y empezó a moverse. Natsuo empezó a gemir con mucha más fuerza, ya no le daba asco, le encantaba y cuando empezó a gastarle, Youji saco de un sopetón sus dedos de él.
De repente, Natsuo dejo de sentir las caricias de su adorado sacrifice y sintió como la punta del miembro del peli verde iba entrando. Al principio dolió demasiado, no se explicaba el porque, pero no fue agradable hasta que empezó a sentirse cómodo y el peli verde empezó a moverse dentro de él.
—Yo… Youji… —empezó a gemir el pelirrojo mientras su compañero lo boletaba, sin salir de el, y empezaba a besarlo apasionadamente metiéndole la lengua y conociendo más la boca de su compañero.
Youji termino dentro de Natsuo y este en el vientre de su compañero. Youji salió de Natsuo y ambos se recostaron en el piso. Youji miró el brazo de Natsuo donde se encontraba su nombre *** y no vio nada, se sorprendió, pero a la vez le dio gusto que a su luchador le pasara los mismo que a él. Ahora estaba más que feliz, Natsuo había sentido todo eso y no sólo descargas eléctricas.
Youji pasó su mano por la larga cabellera de su compañero y arrancó las orejas de este, luego lo beso tiernamente en los labios y le susurro: ¨Te toca…¨. Natsuo, sin dudarlo, puso sus manos en las orejas verdes-azules de su compañero y las arrancó.
—Yo… Youji, creo que…
—Tu nombre despareció… sentiste todo, al igual que yo… —el pelirrojo se sonrojo intensamente, eso explicaba todo, y ahora era feliz de poder escuchar eso. Abrazó a su ahora más que amigo y lo beso tiernamente en los labios.
—Te amo…
—Yo también…
Y ambos se fueron a recostar a su cama, ya que Soubi les compro una hace más de un año, y se quedaron dormidos abrazándose y amándose. Estaban felices, felices por haber perdido las orejas con la persona que más amaban.
FIN