-Aunque fuera teatro lo que hice antes, mis palabras eran muy sinceras. Así que no puedes echarte atrás- Le acaricia el rostro con la mano y acerca mucho su rostro. -Te prometo que lo pasaremos bien los dos juntos- Le besa la mejilla -Se un niño bueno y quédate esta noche aquí-
-Hijo de…- Comenzando a ruborizarse después de mucho tiempo.
-No pienso quedarme aquí, ya he perdido mucho tiempo por tu culpa- Dándole mucho énfasis al “Tu”.
-Está bien- Dice como si nada, cosa que sorprende al joven -Pero a cambio tendrá que darme un adelanto de que vas a cumplir tu promesa-
-Y-yo no he dicho que fuera a cumplirla. Me has engañado- Sintiéndose ridículo al haber caído en una trampa así como un tonto.
-Escúchame bien, mono idiota- Comenzando a enfadarse –Deja de actuar como un mocoso llorica y se un hombre. Si no vas a cumplir con tu parte del trato, mátame, pero hazlo ahora mismo-
El chico se queda paralizado, era mucha la presión que aguantaba. Ahora además tenía a un enemigo viviendo en su casa y lo tenía “entre la espada y la pared”. Pero cuanto mas lo observaba, más se daba cuenta de que su enfado era comprensible. El estaba siendo muy egoísta no dejándolo vivir ni morir.
-¡Hazlo! ¡Matame!- Gritaba el villano. Para su sorpresa, el semi saiyan se abalanza a el y lo besa. Fue algo torpe, pero muy satisfactorio para el mayor, por lo que el muy gustoso movió también sus labios mientras le agarra del pelo de tal forma que parecía que le fuese a arrancar un mechón.
El chico de pelo púrpura deseaba no despegarse de los labios del mayor ya que sabía que al hacerlo, tendría que mirarle a la cara y esto ya era bastante violento. Pronto sintió como una lengua se habría paso entre los labios del joven hasta llegar a su boca e incitar a la de Trunks a que tenía juguetease.
-¡Trunks! Ocurre algo, escucho gritos- Era la voz de la madre hablándole mientras subía las escaleras para llegar a la habitación. Enseguida se separaron y el terrícola teniendo que parecer calmado le responde -Todo va bien. Solo una pequeña discusión pero ya pasó- Escuchan como los pasos se alejaba y poco después como salía del salón para entrar en su taller. Ambos se miran a la cara después de ello.
-¿Esto significa un “si”?- Pregunta divertido con su característica risa minúscula exenta de toda inocencia.
-Si. Pero debes saber que eres un bastardo degenerado.-
-Podré vivir con ello- Esta vez lo besa en la frente aprovechando que estaba a su altura en ese momento -Ahora se un buen chico y trae algo para vendarte los ojos-
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Tal como le ordenó el villano, el joven se vendó los ojos con un pañuelo y se limitó a quedarse de rodillas. Se podía ver como los pies del mayor se elevaban del suelo gracias al Ki. Por otro lado, Trunks estaba muy inquieto al no saber que tenía planeado el lagarto espacial. De algo estaba seguro y era que sus planes no eran nada puros, si no todo lo contrario. Se puso rojo como un tomate cuando sintió algo duro tocando su mejilla y que lo manchaba con algo viscoso.
-¡¿Que es eso?!- Preguntaba nervioso y avergonzado, esperando que la respuesta no fuera la que ya se imaginaba.
-Ssshh Tranquilo, solo mantén el silencio- Ahora el semi saiyan sintió como aquella cosa dura y suave se desplazaba arrastrándose hasta sus labios, los cuales temblaban. Freezer le aprieta con los dedos los cachetes para separar su mandíbula y que abriera la boca. -Abre la boca-
El muchacho obedece y nota como algo alargado entra. Hizo exactamente todo lo que el tirano le ordenaba. Como usar su lengua, cubrir sus dientes, a la velocidad exacta que tenía que hacerlo. Incluso cuando sacó lo que había metido en la cavidad bucal del terrestre; lo puso de nuevo en su mejilla, poniendo esta vez el tronco y como Trunks tenía que lamerlo y meterlo de nuevo en su boca a ciegas y sin usar sus manos. Todo este juego estaba siendo divertido y excitante para el mayor; y aunque no lo reconociera, para Trunks también era algo que lo excitaba.
Llegado a un punto, el extraterrestre ya no podía contener sus gemidos -Más rápido Trunks, voy a correrme- Lo agarra del pelo y comienza a mover sus caderas al compás de la cabeza del mas joven. Varios chorros calientes llenaban la boca de Trunks y este lo deja ahí sin saber que hacer.
-Parece que no fui el único que se lo ha pasado bien- Vuelve a quedar en el suelo y se agacha -¿Tanto te puesto que te has corrido tu también?- Tocando su entrepierna a través de aquellos pantalones mojados.
El joven se levanta y se disponía a salir de allí, pero la voz de Freezer lo detiene -¿A donde te crees que vas? ¿No me digas que quieres ir al baño a escupirlo?- Ante la afirmación del este, el mayor se acerca y vuelve a flotar para estar a la altura del terrícola. Lo toma del mentón y acerca mucho sus labios -Trágalo- Lo besa metiendole la lengua de nuevo y acaricia la del muchacho mientras le inclinaba la cabeza hacia atrás. Trunks no puede evitar acabar tragándolo todo para luego empujarlo y salir de la habitación y ducharse.
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El terrícola ya vestido entra en la recamara de Freezer, trayendo ropa de mas en las manos. Se lo arroja al mayor -Pontelo- Ante la cara del extraterrestre de no entender nada, prosigue -No sabía que pudieras hacer que apareciera un...-
-¿Hablas de mi pene?-
-¡Si! Y no me hace gracia que en cualquier momento te entre una erección y lo acabe presenciando mi madre. Así que es mejor si te cubres-
-No pienso ponerme esta ropa- Mirándola no muy convencido.
-Hicimos un trato y yo haré lo que quieras en el ámbito sexual. Pero fuera de eso soy yo el que manda ¿Entiendes?- Mostrando carácter.
-Está bien, está bien, me lo pondré. Veo que quieres ser el único en verme desnudo-
-¡Cállate!-
La ropa consistía en una camiseta tan morada como el cristal que tenía por cabeza, de mangas cortas y algo suelta. Unos pantalones muy ajustados de un color lila mas claro que se ajustaba perfectamente a su figura, aunque la entrepierna la tapaba la camiseta que era algo larga. Y por último unas botas grises oscuras, que le llegaban algo más arriba de las rodillas.
-Es la ropa que usaba hace unos años, cuídamela-
-Que lindo. Eres realmente adorable Trunks- Para después vestirse.
Justo después de haberse tomado una ducha fue a despedirse de su madre, pero ella le tenía una noticia -No vas a poder salir de momento, Trunks-
-¿Los androides otra vez?- Ante la afirmación de Bulma, este mira para otro lado con resignación y molestia.
-No te preocupes. Has entrenado mucho, así que no esta mal si estas esta noche aquí-
-Claro. No existe otra forma- Intentando parecer que lo comprendía, pero se notaba que se sentía muy enfadado consigo mismo por no poder matarlos de una vez, en vez de estar escondiéndose todo el rato.
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En la noche, Trunks le llevó la cena a Freezer en una bandeja. -¿Acaso ahora te gusta los “jueguecitos” de sirviente? Pero ¿No quedaría mejor con un uniforme?- Se burlaba el mayor.
-Cállate. Solo te traje la cena. Mi madre dijo que te gustaba el pescado, así que esta noche estás de suerte.-
La habitación había cambiado ligeramente desde la última vez. Ahora tenía un pupitre, una estantería con apenas cinco libros y un sillón muy mullido sin respaldar, al lado de la estantería.
Freezer agarró la bandeja, la colocó en el pupitre y se sentó a comer en silencio. Era la primera vez que lo veía comiendo y no le extrañó mucho ver que lo hiciera despacio, con buenos modales en la mesa. A fin de cuentas, Freezer pertenecía a una familia poderosa en más de un sentido.
Una vez terminó todo lo que había en el plato, se levantó –Dime Trunks. ¿Tienes miedo a perder la virginidad anal?- Dice como si nada.
-¡Deja de decir tonterías!- Completamente rojo -¿Cómo puedes decir eso y quedarte tan tranquilo?-
-No te alteres, solo quería saber. Pero por tu reacción me das a entender que si-
-Claro que si. ¿Cómo no tenerlo? Me siento como si me estuviera prostituyendo-
-No eres un prostituto. Piensa en ello como mi salvador-
-¿Otra vez con eso? ¿Y ahora que? ¿Me vengo acá? ¿O volverás a ingeniártelas para entrar en mi cuarto y hacer lo que te plazca mientras duermo?- En su voz se notaba un ápice de molestia.
-Iré a tu habitación cuando tu madre este dormida. Ahora que no tengo el collar, puedo andar libremente sin ser vigilado- Ante la cara de sorpresa del joven el prosiguió -Ella me lo ha contado ya. Me dijo que era tontería ocultármelo mucho más tiempo, por que me iba a dar cuenta.-
Habían pasado unas horas; Bulma dormía mientras que Trunks estaba esperando en su cuarto al extraterrestre. Dejó las luces encendidas para evitar caer dormido. Pero el esperarlo tumbado boca acabo en la cama con brazos cruzados no fue buena idea y terminó por dormirse.
Freezer ahora sin la ropa, entró allí, viendo al semi-saiyan tapado por las sabanas. Cual fue su sorpresa cuando lo destapó y lo único que podía contemplarse era un joven cuerpo desnudo -Buen chico- Sonrió. Era el físico que un saiyan debía poseer; una magnifica mezcla de musculatura bastante desarrollada con una figura muy estética. Un trasero firme y como no, ni rastro de vello.
Acercó sus dedos al cabello del joven y se lo acarició; bajó su mano, pasando las yemas de los dedos por la amplia espalda hasta llegar a su trasero y finalmente por una de las piernas.
-Trunks despierta- Inmediatamente el chico abrió los ojos después de parpadear. Una vez lo miró a los ojos, se dio cuenta; esto estaba pasando de verdad. Iba a dejar que alguien como Freezer se pusiera encima y lo usara como un juguete sexual. Más que sucio, se sentía dolido y nervioso. Eso no podía ser buena señal.
El mayor le acaricia por la cintura y le besa en la comisura del labio –Incorpórate ¿O prefieres quedarte como una mesa?- Al ver que ante sus caricias, Trunks temblaba y evitaba hablar, prosiguió -Como quieras- Baja sus dedos y le acaricia el trasero. Vuela hasta colocarse encima y toca ambas nalgas con delicadeza. El chico aprieta los labios mientras sus mejillas se encendían. Su vergüenza se hacía mayor cuando el villano le besa en esa zona suavemente para luego abrir paso hasta su entrada.
-Espera un segundo- En un intento de que parase. Pero Freezer prosiguió, pasando una goteante lengua en el ano del chico. Este hunde su rostro en la almohada mientras se encogía de hombros, era demasiado embarazoso. Mordió el cojín cuando siente como algo se introducía dentro de el. La sensación era extraña, como sintiendo ganas de ir al baño mezclado con escozor. -Es normal que te duela, estás tenso. Pero solo tengo uno de mis dedos dentro.-
-No quiero- Apenas puede gesticular por los nervios y el estar su cara oculta. -que me duela-
Sonríe maliciosamente -Entonces voltéate- Trunks obedeció y se volteó para quedar sentado en la cama. Al mayor le complacía lo que sus ojos podían ver. Ahora que lo observaba con mejores perspectivas, no parecía un saiyan. Por muy sexy que pudiera ser uno de aquella raza; siempre lucían rudos y desafiantes. En cambio el chico que tenía ahí mismo, era demasiado delicioso, lindo y con un aspecto muy sutil de inocencia; a pesar de quererlo ocultar.
Lo único que no podía ver era su miembro, cubierto por unas rodillas juntas, luchando por conservar algo de dignidad. -Abre tus piernas- Aun pareciendo imposible, nunca había escuchado el terrícola al extraterrestre diciendo algo con un tono tan malicioso. Tanto que lo hacía sentir indefenso.
-¿No me has oído? ¿A que esperas?- Cruzado de brazos.
Nunca hubiera pensado llegar a este punto en su vida, ni como llego a este extremo; pero con la mayor vergüenza del mundo abrió sus temblorosas piernas, mostrando una clara erección. Freezer posa sus manos en las rodillas del semi-saiyan y mirándolo a la cara con deseo, las abrió mucho más. Se puso entre ellas y besó los labios de Trunks mientras le dilataba la entrada con sus dedos.
Nada mas separarse del beso, el mayor le sacó los dedos, los cuales estaban mojados. Para hacer sufrir un poco más al sumiso, abrió sus dedos en abanico y se lo puso delante de sus ojos. El joven dice algo, como pensando en voz baja de tal forma que Freezer no lo pudo escuchar, pero creyó entender que era.
Justo después le da otro beso pero corto y se acerca a su oreja para decirle en un susurro -¿Quieres que te penetre ya?- No obtuvo respuesta así que le agarró un pezón y tiró de ella hasta escaparse de sus dedos para justo después escuchar un pequeño quejido -No seas tan tímido, quiero que te lo pases bien- Envuelve con su mano, el miembro del otro -Freezer- Respirando agitadamente.
-¿Si?- Mientras lo masturbaba.
-Hazlo. Entra…- Nada mas decir eso, el tirano lo empuja para que esté tumbado -Agarra tus piernas, Trunks- Al hacerlo, Freezer se desliza entre ellas y comienza a invadir su virginidad. El terrícola abre grande los ojos y de ellos salen lágrimas; cada centímetro que avanzaba, lo notaba más doloroso, como si lo partieran en dos.
Todas las ganas de que parase, las necesidad de que acabase pronto, todo eso se fue a la mierda cuando el villano comenzó a frotar con su virilidad algo desconocido para el. Era una sensación similar a la masturbación manual, pero mejor. Seguía doliéndole, claro que si, pero ni comparable al placer que el miembro de su amante le estaba proporcionando ahí dentro, en aquella zona tan extraña.
En ese momento, se relajó y ya no estaba tenso. Dejó de aguantar sus piernas y apoyó los pies en la cama para levantar un poco sus caderas y que fuera más fácil para el otro contornearse en busca de la mutua diversión. Además, quería sentir mas, muchos mas. Quería que se metiese en lo mas hondo de su ser y lo desgarrase. Pero esos pensamientos eran precisamente los que Freezer no debía saber, pero temía de se diese cuenta.
Todo era perfecto, pero aún había algo que el extraterrestre tenía que objetar; Trunks miraba para otro lado todo el tiempo. Para y hace que su amante sumiso gire la cara hasta tenerse frente a frente -No dejes de mirarme- Vuelve a moverse para disfrutar nuevamente con la estrechez del terrícola. Aunque de forma lenta para poder darle una última explicación -Siempre que lo hagas con alguien, míralo a los ojos; siempre a los ojos. Así siempre sabrán que aunque estés debajo, eres quien manda y no le temes en absoluto- Tras decir esto, se mueve rápido, ya que no aguantaba mucho más. Menos aún con Trunks moviendo sus caderas, intentando ir al compás de el.
-Freezer…- Su nombre sonaba mas como un ruego entre gemidos. No hacia falta más palabras, sabía de sobra lo que aquello significaba. Y el también estaba apunto de venirse. Dijo que haría que ambos lo iban a disfrutar, así que lo harían juntos. Se dispuso a usar todas sus habilidades para conseguir que se llegaran al mismo tiempo. Aunque era algo muy complicado; pero de conseguirlo, el terrícola por mucho que lo intentara, jamás podría olvidarlo.
-¡Me vengo, Freezer! ¡Freezer!- Una fuerte embestida fue suficiente para conseguir sentir el orgasmo de modo tan sincronizado.
A causa de la posición, el semi-saiyan manchó su cuerpo con su propio semen, mientras que el otro hombre lo soltaba todo dentro; se sentía caliente y delicioso.
Tras algunas horas mas de sexo; hasta no estar completamente descargados; hasta no tener energías para seguir y hasta no estar completamente lleno con la semilla del villano, no descansaron.
Una vez tranquilos los dos hombres, el más joven se levantó sin decir ni una palabra y fue a darse un baño.
El agua caliente de la bañera le ayudaba mucho a aclarar sus ideas. Entender mejor lo que había pasado y como se había dejado llevar de esta forma. Lo que era peor de todo, es el hecho de no saber cuanto durará y que pasará cuando acabe todo.
Volvió a su habitación con solo una toalla alrededor de la cintura y otra secándose el pelo. Para su sorpresa Freezer seguía ahí en la cama, pero dormido. Trunks estaba completamente seguro de que no fingía ya que su Ki había bajado bastante y que el supiera, el mayor no sabía bajarlo por voluntad propia.
Deja la toalla de la cabeza a un lado, se pone de rodillas en el suelo y apoya los brazos en la cama. Se queda mirando al villano hasta el punto en que se acerca a los labios de quien hace unos momentos fue su amante y los roza con los suyos sin llegar a dar un beso.
Aquello le recordó el momento que estuvo apunto de matarlo. Recordaba como en aquel tiempo había preparado su afilada espada para terminar con Freezer mientras se hallaba inconsciente. Sin embargo algo lo detuvo; fueron el recuerdo de las palabras de primero que mató. Le ofreció su hijo sin pensárselo dos veces ¿Cómo pudo hacer algo así? A su propio hijo ¿Era esto lo que siempre ha tenido por familia? Recordó algunos detalles que no había tenido en cuenta; Freezer tenía miedo y su padre no lo tuvo en cuenta. En vez de eso, le echó una mirada que decía claramente “Ni se te ocurra salir corriendo”. En ese momento se dio cuenta de que tanto el villano como el tenían algo en común; ambos estaban solos.
Tenía que matarlo, pero ahora no podía. Era algo mas que lastima, ni siquiera el lo entendía. Pero si no lo hacía, seguramente Goku se encargaría por el.
Para colmo el saiyan antes mencionado le comunica que no necesitaba matar a Freezer; siempre y cuando no fuera una amenaza.
Ya no cabía duda; se lo iba a llevar a su tiempo y allí decidiría que hacer con el. Lo agarró en peso, para acto seguido caerse el brazo robótico y quedarse entre escombros.
Poco sabía el que lo que acababa de hacer, era el principio de muchos quebraderos de cabeza.
Después de recordar todo aquello, volvió a la realidad. -Tengo que saberlo- Zarandea al mayor -Ya te he dicho que así no se despierta a un emperador- agarrándolo de la muñeca por sorpresa y luego besarlo. Al separarse ve el rostro serio del terrícola y suspira resignado -He estado dentro de ti hace un rato. No puedes ponerte así por un beso-
-Freezer. Necesito saberlo ¿Qué ocurrirá cuando te canses de mi? ¿Te vas a suicidar o vas a ingeniártelas para convencer a otra persona?- Se pone de pie y lo mira a los ojos mientras intenta contenerse de decir cosas de las que se arrepentiría.
-Buena pregunta. No lo había pensado- Se queda flotando para estar a la altura del joven -Pero no me cansaré de ti-
-Claro. Eso es lo que dices pero ¿Cuándo pase? ¿Habré hecho esto en vano?-
-Te preocupas demasiado. Además, no tan en vano como dices. Alguien que realmente le desagradara esto no le hubiera puesto tanta pasión. Piensa en esto como la forma de combatir el estrés.-
El semi saiyan no hizo otra más que callarse. Estaba apunto de soltarlo, pero no quería decir nada.
-Podemos hacerlo de dos formas- Prosigue el mayor –Puedes seguir negando que esto no te gusta y jugar al “señor decencia” ò…- Le pone un dedo debajo de la barbilla y sonríe –…Dejarte llevar y disfrutar de los placeres que te ofrezco- Se aparta. -No te preocupes por los demás, y por mí mucho menos. Ya te dije que no estoy enamorado de ti, pero eso no significa que me tenga que cansar de hacerlo contigo… tan pronto-
-¡Ese es el problema!- Estallando por fin –No puedo dejarme llevar- Con un notorio nerviosismo -¡Yo si! ¡Yo sí me he enamorado de ti!- Sintiéndose patético con esta declaración. -No puedo dejar que nadie mas que quiera muera. Por eso te dejo hacerme esto, aunque no me sienta bien con ello. Si al final te cansas y decides que tu vida ya no tiene sentido… Todo si que habrá sido en vano-
Freezer se queda atónito, pero rápidamente recobra la compostura -Voy a darte un consejo. En un mundo como este no existe lugar para el amor, solo hace daño. Ver como las personas que quieres se van, duele; por eso es mejor que no tengas amor por nadie. Lo más sensato sería intentar quitarte esos sentimientos por mí- Si antes se sentía patético, ahora con la contestación del extraterrestre se sentía peor. Pero al analizar bien esas palabras algo le impulsó a sonreír como lo hubiera hecho su padre
-No eres tan inteligente como aparentas- Dice el chico de cabellos púrpura. -Dices de ser egoísta y no tener amor por nadie, pero eso significa que no tendría que dejarte hacerlo conmigo; ya que no me importarías en absoluto y para hacerte sufrir más, no te mataría. Alguien inteligente simplemente me haría creer que me ama y ya ¿No crees?-
Freezer se notaba muy enfadado, lo había tomado por un idiota. No hizo otra cosa mas que irse.
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Bulma había escuchado por la radio que los androides estaban ya lejos de la zona por donde pasaba su hijo para entrenar; así que lo despertó y le preparó el desayuno.
Una vez que se había ido, ella se aseó, desayunó e inmediatamente fue a su taller. El trabajo y la investigación le hacían no sentirse tan sola y se distraía.
Lo que parecía una mañana tranquila cambió radicalmente cuando un reportero habló por la radio.
<<Parece que 17 a dejado a 18 en unas tiendas de ropa y vuelve por el mismo trayecto de antes. Aun no tenemos claro cual donde va a parar>>
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Freezer nota como alguien lo intenta despertar y sin tan siquiera abrir los ojos, agarra la muñeca de una de esas manos que lo zarandeaban -¿Aun no has aprendido a despertarme?- Fue a darle un beso en los labios, pero antes de poder hacerlo se lleva una bofetada. Abre los ojos y ve a Bulma.
-¡Eres un cerdo! ¡¿Esto le haces a mi hijo?!- Había tanta tensión en el aire que se podía cortar con un cuchillo. Aquel silencio incomodo despareció con las suplicas de aquella mujer -Por favor Freezer. Tienes que ayudar a mi hijo. Eres el segundo más fuerte aparte de los androides-
Aquella suplica chapucera no le agradó nada. Y menos viniendo de una mujer que lo había tratado con tanta indiferencia. -¿Y que te hace pensar que voy a obedecerte? ¿Sabes que podría matarte ahora mismo?-
-Por favor, uno de los androides esta ahora mismo luchando contra Trunks. Y aun no puede hacerle frente. Para colmo se trata de 17; el viola a las victimas que más les gusta y los va matando. Es un sádico- Llorando al imaginar que eso le sucediera a su hijo.
Al escuchar eso se levanta rápido de la cama y comienza a vestirse de nuevo con las ropas que Trunks le había dejado.-Necesitaré unas capsulas- Es lo único que dice.
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-¿Tienes idea de cuanto me estresa llevar a mi hermana de compras?- Dice el androide molesto -¡¿Verdad que no?! Así que no te quejes, necesito un buen polvo para relajarme- Lo agarra del pelo al semi saiyan. Este solo atina a escupirle sangre en la cara. -¡Atrévete a volver a hacerlo! ¡Te reto!- Le iba a dar un golpe en la cara pero una voz lo detiene.
-¿Cómo te atreves?- Para sorpresa de Trunks se trataba de Freezer. -¿Cómo te atreves a escupirle al amo 17?-
-Nunca te había visto en mi vida ¿Qué eres exactamente?- Se levanta el androide
-Mi nombre es Freezer, vengo del espacio-
-Eso si es interesante, un extraterrestre-
-Tu eres el gran 17 ¿No?-
-¿Tan famoso soy?- Sonríe complacido.
-Claro ¿Cómo no serlo?- Se acerca volando -He oído que te eres del tipo que no teme a disfrutar de los mayores placeres-
-¿Acaso tienes alguna objeción con eso? De ser así acabaré contigo enseguida-
-Todo lo contrario. Sería un honor mostrarle todo lo que se. Si sabe a lo que me refiero-
-Interesante- Le da una patada a Trunks en el pecho -Estas de suerte escoria- Se escupe al herido -Nunca me he follado a un extraterrestre así que dejaremos nuestra “cita” para otro momento-
Una vez que se fueron ambos, una reportera que estaba escondida fue en auxilio del joven y lo llevó a un lugar secreto donde le curarían todas las heridas.
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Era un nuevo día y el androide se encontraba durmiendo desnudo en una cama. Entre toda la ropa tirada en el suelo, estaban los pantalones que Trunks le había prestado a Freezer. Este sacó de los bolsillos unas capsulas “Estas son un nuevo tipo que aun no he probado. A diferencia de las otras, esta no emite sonido alguno ni suelta humo” fueron las palabras exactas de Bulma.
Las abrió y directamente apareció en el suelo unas cuerdas, una jeringa con un suero dentro, un bisturí, guantes aislantes y unos desechables, unas pinzas de batería, alfileres, una botella de agua y lo que parecía una batería.
Primero ata con las cuerdas al moreno a la cama. Se coloca los guantes desechables e inyecta en el torso del androide el suero, que era nada que un liquido que anestesiaba. Esperó paciente a que surtiera efecto, con un rostro inexpresivo.
Sostiene en sus dedos el bisturí y con mucha precisión clava hondo; traspasando la piel para hacerle un dibujo en forma de “+”
Con el mismo utensilio le abre la piel y la levanta; dejándola sujetas con los alfileres. Podía verse ya el metal que tenía dentro de ese aspecto humano y como se inundaba ese agujero por la sangre. Tira los guantes ya ensangrentados y se coloca los aislantes.
Las pinzas las pone en el metal y en lo que parecía una batería con una palanca.
Abre la botella de agua y vierte el liquido dentro de la herida, dejándolo como un estanque de agua y sangre.
Ahora solo quedaba la mejor parte. Lo despierta y este abre los ojos. No le dio tiempo a reaccionar cuando Freezer accionó la palanca y una gran descarga eléctrica recorre su cuerpo.
Los gritos de dolor no se hicieron esperar mientras convulsionaba. Después de tanta sobrecarga solo le quedaba fuerzas para ver y oír pero su visión era nublosa y sus oídos pitaban.
-Trunks solo me pertenece a mi. Esto es lo que pasa cuando le pones las manos encima-
Acto seguido de las palabras de Freezer, termina por perder la consciencia y quedar en un estado parecido a la muerte.