Durante todo el camino a casa Miyagi se mantuvo meditando en silencio y con la mirada perdida, parecía que había conducido en automático para llegar a salvo, una vez en su casa pasó lo mismo, pues por más que lo pensara, no encontraba respuestas para la manera extraña del actuar de sus amigos, y lo más importante… acaso estaban enterados todos, o es que sus amigos cada uno actuaba a espaldas del otro, eso era algo difícil de creer pues parecía como si en verdad estuvieran confabulados. Tan sumido estaba en sus pensamiento que no logró escuchar que Shinobu desde que lo vió entrar le estaba llamando.
-mmhhh –Miyagi se encontraba meditando en silencio y con una expresión seria, sentado en el sofá en medio de la sala-
-MIYAGI!!! –ya gritándole para que reaccionar, se había hartado de tanto insistir de manera delicada-
-ehh? –saliendo de sus pensamientos-
-y ahora, en qué tanto piensas? –Shinobu se acerca al mayor sentándose a su lado-
-cómo? –pregunta extrañado
-que en qué piensas, has estado así desde que llegaste, algo te molestó de camino a casa? –pregunta ya con el ceño fruncido-
-no, no es eso, solo que algo extraño pasó antes de regresar
-algo extraño? –lo mira confundido-
-si verás, mientras realizaba mi informe, de vez en cuando para distraerme un poco miraba por la ventana
-como siempre espiando a los demás –queriendo regañar a su mayor- no es nada bueno espiar a la gente!
-yo nunca espío a nadie Shinobu chin!, -reclama ofendido- solo observo el paisaje, ya si ocurre algo interesante me pongo a ver, eso no tiene nada de malo –se defiende con justa razón, mientras el menor rueda los ojos a un lado como diciendo, sí como no- solo déjame contarte!...
-ok ya suéltalo de una buena vez viejo
-bueno pues, algo extraño está pasando con mis amigos y sus parejas, la verdad no entendí nada, primero vi como Akihiko llegaba a la universidad
-pues seguro fue a recoger al profesorsete ese –dice hastiado-
-eso es lo extraño, si probablemente fue para eso, pero en ese momento apareció Misaki la pareja de Nowaki, hablaron o más bien discutieron un poco y Akihiko prácticamente metió a la fuerza al Misaki en su auto y partió como loco!
-no juegues!! –sorprendido- si es extraño, no querrá solo molestarlo?, que tal si Nowaki san le dijo que lo llevara a un lugar en específico para darle una sorpresa, qué se yo?
-lo dudo, porque poco después pasó lo otro raro, Hiroki se marchó de la oficina y después de 30 minutos volví a ver por la ventana y seguía en la entrada, probablemente esperando a Akihiko, pero después Nowaki llegó en su auto y se puso a hablar con Hiroki, el hecho de que hablaran me sorprendió, porque no creí que se conocieran, es decir Akihiko y Misaki si se conocieron el día del reencuentro, pero ese día Hiroki no fue, por eso; pero hablaron unos minutos y luego ambos se metieron en el auto de Nowaki y se fueron
-en serio? –pregunta muy extrañado- jump –se burla- vaya que mañas tiene ese profesor, si no lo logra contigo, se va con el otro amigo, si que no tiene dignidad –suelta sus pensamientos injustificados-
-epa!! Shinobu chin que malo, dudo mucho que Hiroki quiera algo con Nowaki, la verdad me intriga que estén tramando esos cuatro, no sé si es algo de los cuatro, pero si lo es me molestaré mucho con mis amigos por hacerme a un lado, pero si lo hacen a escondidas de los otros ya es otra cosa, aunque el tiempo de diferencia no fue mucho, pudieron haberse topado los cuatro al mismo tiempo, ahhh ya me duele la cabeza tanto pensar –mueve la cabeza efusivamente sujetándola con ambas manos-
-deberías hablar con Akihiko san y decirle que su pareja lo anda engañado –le dice sonriente- así se le caerá la máscara de hipócrita
-creo que tienes una idea equivocada de Hiroki por no mencionar los celos injustificados
-tu no entiendes Miyagi!! Yo te amo y cualquiera que pretenda acercarse a ti para alejarte de mí se ganará todo mi odio! –liberando su frustración le grita con una mirada seria y muy decidida-
-Shinobu chin ya hablamos de esto –se pone nervioso y trata de evadir la mirada del menor- fuffh –suspira pesadamente- primero nunca habría algo entre Hiroki y yo, es más, creo que él me odia –dice con una gotita de sudor bajando de su frente- segundo soy yo el que lo fastidia y ya te lo dije que es porque es divertido hacerlo, pero no va más allá y tercero –desvía levemente la mirada- jamás me alejaría de ti –menciona tapándose ligeramente la boca con una mano, como queriendo que no lo escucharan-
-Miyagi!! –grita emocionado lanzándose al regazo del mayor y así abrazándose de su cintura- yo tampoco me alejaría de ti, aunque me obligaran ni a rastras me alejaran de ti, te amo Miyagi, te amo con todo mi corazón!
-gracias pequeño… -acariciando los rubios cabellos del menor-
…
Entre tanto en las afueras de la ciudad, dentro de un restaurant elegante se encontraba el gran escritor Usami Akihiko observando el ostentoso menú para pedir algo de comer, mientras un universitario de ojos esmeraldas se encontraba muy molesto, con los brazos cruzados y mirando con supuesto odio a su captor, esperando a que este se decida a pedir algo.
-piensas pedir algo o seguirás perdiendo más el tiempo –reclama molesto-
-claro que pediré, pero estoy buscando lo más adecuado, casi todo lo que hay aquí tiene algo que no me agrada –sin despegar la vista del menú-
-solo pide lo que sea, dejas lo que no te gusta y ya! –no obtiene respuestas-
-suficiente, me voy!! –se levanta del asiento dispuesto a irse-
-y en que se supone que regresarás, te recuerdo que estamos a las afueras de la ciudad y por aquí no pasan muchos autos, además no creo que alguien quiera darte un aventón con esa cara –refiriéndose a la expresión de molestia del menor-
-pues es tu gran culpa que estemos tan lejos!, dijiste que nos veríamos en la cafetería del reencuentro y me trajiste hasta aquí!! –reclama casi a gritos-
-eso fue un castigo por intentar evadirme –dice con aires de grandeza- además si hubiésemos ido ahí te hubieras escabullido fácilmente para nuevamente evadirme
-eso tenlo por seguro!!
-ves que si? –le sonríe mofándose- ahora calma, ya decidí lo que quiero, siéntate –llama al mesero y hace su pedido- de seguro estás más molesto solo porque estás hambriento
-eso no es cierto, tú eres lo único que me molestas! –le dice enojado, pero su estómago lo traiciona gruñendo ruidosamente, haciéndolo sonrojar en un instante-
-jump –se ríe- tienes hambre…
-ok!!, si tengo hambre, es tan malo eso?... ya deja de perder el tiempo y dime para que haces este gran chantaje para vernos, porque dudo mucho que solo quieras comer conmigo y san se acabó, -frunciendo el ceño- puedo leer tus pensamientos y si piensas que puedes controlarme del todo estás muy equivocado!! –mostrando su pulgar hacia abajo-
-jump –ríe nuevamente- que divertido eres, pues eres muy perspicaz y si no solo quiero tomar el té contigo y te puedo asegurar que esta no será la única vez que nos reunamos
-qué?!! De qué estás hablando?, en serio crees que aceptaré a más de una reunión contigo, el que me hayas cubierto la última vez no lo vale!
-pues yo creo que si, no olvides pequeño acosador que a Nowaki no le gusta que lo anden checando a cada rato, ni si quiera le agradaba que sus padres lo controlaran, se llevará un gran disgusto si sabe que estuviste de espía cuando estoy seguro de que te dijo que era una reunión de amigos y que no vayas, o me equivoco? –lo mira y sonríe altaneramente- además con la escenita de ese día será peor
-pues yo pienso que me perdonará, al fin y al cabo soy su novio, además tú tampoco estas bien parado, seguiste mi juego no? –contra ataca-
-a diferencia de ti, a mí no me afecta en nada que Nowaki se entere, puede que se enfade un poco por haberte encubierto pero aun así se le pasará rápido, pero tú vives con él, se supone que te tiene mucha confianza, ese si que será un golpe duro –sonríe en forma de burla mientras el menor solo tragaba duro- así que haras lo que diga hasta que yo quiera, ok?, y mientras más resistencia opongas o excusas busques solo harás que esto dure más
-… -Misaki solo respondió haciendo un puchero-
-supongo que tu silencio es una respuesta afirmativa –dice feliz al ya no escuchar ninguna queja, mientras el mesero ya había vuelto con el pedido, colocándolo en la mesa- y bien, te gusta? –le pregunta satisfecho, al ver como el menor devoraba con los ojos la comida-
-todo se ve delicioso –dice casi babeando-
-adelante, como y si quieres más solo dilo –sonríe mientras mira maravillado cada movimiento que hacía el castaño, no cabía duda, Misaki era especial, sin mencionar que también tenía el carácter suficiente como para encararlo y eso era lo que más le gustaba-
-qué?, tengo algo en la cara?, –habla con la boca llena- si no comes se enfriará –traga lo que estaba masticado-
-claro –no quería quitar la vista de su objetivo ni la sonrisa de felicidad que tenía, pero debía relajarse y pensar que tendría mucho tiempo para disfrutar momentos con el oji esmeralda- buen provecho –dice susurrando y en doble sentido-
Por más que Misaki quería portarse muy cortante y bastante reacio con el escritor, no pudo hacerlo del todo ya que siempre que encontraba algo malo para echarlo en cara, el otro siempre lograba excusarse y salir invicto de ese ataque, asi y tras pedir algo más de comida, una vez terminaron el menor pidió ser llevado de vuelta a su hogar pero el peliplata tenía otros planes
-te dije que ya es tarde y que quiero regresar a casa! –Misaki estaba que explota, ya que luego de comer el escritor elucidó en que regresarían, mas sin embargo Misaki se dio cuenta rápidamente que el camino no era el que los llevaría de regreso-
-tranquilo Misaki, te prometo que será la última parada, además se que te encantará –sonriendo-
-pues no creo en tu palabra… -mira la hora de su celular eran las 5:50 y ya estaba por anochecer- Usagi san por favor, de verdad tengo que regresar, si no Nowaki se preocupará –dice en un tono angustiado-
-esto no tomará más de una hora, ok? –entrando a un puerto- mira ya llegamos –habían llegado a una hermosa costa, donde el sol que quedaba iluminaba de una manera maravillosa el mar que parecía no tener fin- qué opinas?, no te parece lo más bello que has visto-
-es… -maravillado por lo que sus ojos apreciaban- realmente bello
-y es justamente en estos minutos en los que se puede observar la belleza de este lugar en su máximo esplendor –mirando por el rabillo del ojo al castaño quien tenía una sonrisa pacífica, que lo hacía lucir muy hermoso- cuando era adolescente un día me enfadé tanto con mis padres que huí de casa y terminé en este lugar, estuve toda la tarde y antes del anochecer pude disfrutar de esta fantástica vista, creí que era una buena idea traerte a que la vieras, no estábamos lejos, hice mal? –le pregunta sonriente-
-ah… -sale de su ensoñación y al ver la sonrisa que le dedicaba el mayor no pudo evitar sonrojarse- no, gracias por traerme, nunca había tenido una vista tan majestuosa –desvía su vista, regresando a ver el escenario de luces, sin poder despejar su sonrojo-
-me alegra que te guste, ves que no soy tan malo? –solo recibe un bufido como respuesta- solo quiero conocerte un poco más, me caíste muy bien a penas te vi y por eso, quiero saber todo de ti, además creo que estoy…
-sebes, este es un lugar muy romántico, quisiera venir un día con Nowaki aquí –sonríe nostálgicamente- Usagi san también deberías venir aquí con tu pareja, apuesto a que le encantará y si no les molesta podemos venir juntos –no sabía que le pasaba, sentía que debía hablar y volver a la realidad, por alguna razón no quería escuchar lo que el mayor le quería decir-
-entiendo, tal vez tengas razón –la vista había terminado y la oscura noche volvió a cubrir todo alrededor- será mejor regresar –dice serio mientras se dirige a su deportivo-
-qué fue eso?, por qué dije eso así de repente?, no sé por qué me siento extraño y por qué Usagi san puso esa extraña expresión? –muchas eran las preguntas que Misaki se hacía mentalmente mientras caminaba hacia el auto para regresar-
Así sin mencionar nada más Akihiko llevó a Misaki a su hogar, no había dicho ni una sola palabra en todo el camino de regreso, se sentía triste, nunca lo habían bateado de esa manera, además, estaba por decir una estupidez, es cierto que el ojiesmeralda lo impactó de alguna manera, pero de eso a sentir algo más que atracción física en tan poco tiempo, en verdad si que era tonto pensar así; llegaron al departamento de Nowaki, al menos ya sabía dónde vivía su amigo y ese pequeño que lo cautivo de alguna manera, quizás ahora se sentía deprimido, pero ahora más que nunca estaba seguro que rendirse con Misaki no era una opción
…
Paralelamente a la cita inesperada que tuvieron Akihiko y Misaki y al mismo tiempo un tanto distinta, Nowaki y Hiroki tenían la suya propia, el ojiazul había llevado a comer a Hiroki a un restaurante bastante modesto, pero cuya comida era una delicia, no había nada de tensión en su plática, hablaron del cosas triviales, el clima, la época atareada y entre otros; luego a Nowaki se le ocurrió ir al lugar de su primer encuentro, ya que desde ese día se convirtió en el lugar favorito para el médico; Hiroki no estaba con muchos ánimos de ir a ese lugar con alguien más, pero aceptó de buena manera y aprovechó en llevar algunas de las flores favoritas de su madre para dejarlas donde descansaban parte de sus restos cremados
-y para qué son las flores? –pregunta curioso Nowaki-
-son para mi madre, el lugar donde nos vimos por primera vez, es donde descansan parte de las cenizas de mi madre –dice casi en susurro-
-oh, entonces visitaremos a tu madre, me alegra ser quien te acompañe en esta ocasión –no quería incomodar diciendo otra cosa y trató de ser lo más delicado posible, pero quería saber todo de Hiroki y ya al fin después de tanta plática trivial, se había abierto una puerta para una conversación para conocerse-
-gra… gracias Nowaki san, eres muy amable –ese comentario lo puso nervioso, como era eso que se alegraba de acompañarlo?, no, no debía hacerse ideas-
-ah!, es cierto, recordé que ese día traías algo de tierra en tu kimono, por eso también creí que te había sucedido algo y te pregunté, no me digas que fue ese día el que dejaste a tu…
-si, ese día enterre las cenizas de mi madre en nuestro lugar favorito, por eso estaba mal emocionalmente, pero tus palabras me aliviaron y me sentí mejor –llegando al lugar-
-vaya se ve que vienes seguido –ve como ya había algunas flores al pie del árbol-
-si, hice una promesa –deja las flores y hace una reverencia seguido de una corta oración, a lo que el mayor se aproxima a su lado y hace lo mismo- ah, no tiene por qué…
-quiero hacerlo –responde sonriente, haciendo sonrojar al castaño y sin mencionar más ambos continúan para luego sentarse en ese banco viejo que acompañaba al árbol- este lugar es muy hermoso para pasar una tarde espléndida
-si… lo es
-y?... –el ojimiel lo mira extrañado- que tal si me cuentas algo sobre ti? –sin quitar su hermosa sonrisa-
-sobre mi? –extrañado- la verdad no tengo nada interesante que contar
-vamos, es en serio?, eres docente en la universidad, no?, de seguro tienes muchas historias interesantes
-eres algo molesto sabes?
-me gusta indagar, además somos amigos recuerdas?, no tiene nada de malo conocernos un poco más –el menor solo lo mira seriamente- ok, entonces empezaré yo… bueno soy de aquí, viví casi toda mi vida en Tokio, estudié en Sakura una escuela de mucho prestigio, estudié medicina en Estados Unidos
-eres médico? –pregunta impresionado
-si, e incluso hice mi especialidad en pediatría ahí mismo
-wow genial, pareces muy joven y además no te veo cara de pediatra –comenta sonriente-
-en serio? –pregunta un tanto ofendido-
-ah, lo siento, no quise…
-descuida, no eres del primero que lo oigo –interrumpe para excusarlo- luego de eso regresé a Japón, pero hice mi pasantía en Osaka, un lugar muy lindo para vivir
-y por qué no lo hiciste aquí?
-no quería tener preferencias –dice un tanto serio-
-preferencias? –pregunta extrañado-
-si, lo que sucede es que el director del hospital central es mi padre –el menor se sorprende mucho- bueno y fue ahí donde conocía a mi novio –menciona un tanto desanimado, no sabía por qué estaba así, no es como si Misaki fuera alguien desagradable, al contrario era la persona más dulce que conocía, pero quizás era que temía que Hiroki se alejara al enterarse de eso-
-Novio?!!! –se sorprende de sobremanera- un hombre?
-si, te molesta?
-no!... de nin… guna manera –se pone un tanto triste- debe ser alguien hermoso y gentil, como tú? Digo! Es que supongo que siendo tú alguien tan bueno y amable de seguro tu pareja también lo es –responde súper nervioso y rojo como tomate-
-yo… creo, -lo observa un tanto atónito, luego desvía la vista, no quería quedar más cautivado aún con el castaño- si él es muy dulce y actualmente vivo aquí con él, trabajo en el hospital central, como médico de planta en pediatría, no podía huirle siempre a mi padre, no? jump –se ríe a lo cual el castaño solo sonríe tímidamente- ves no es tan difícil, te hice un resumen rápido de mi vida, ahora te toca a ti
-supongo que es lo justo… pues mi padre murió cuando apenas tenía 5 años, mi madre sufrió mucho por eso, tuvo que pasar por mucho para mantenerme, cuando cumplí 13 se enfermó, pero pese a eso seguía trabajando, decía que lo que más quería era que llegara a ser un buen profesional, pero ella empeoró, por eso cuando cumplí 14 viajamos a Londres para que se sometiera a un tratamiento experimental, solo así podría curarse y cubrir sus gastos y yo para mantenerme trabajaba por las noches y estudiaba de día
-vaya tuviste una infancia y adolescencia muy dura y pese a eso seguiste con tus estudios, me alegro
-eso mismo me dijo… -se quedó sin habla, no quería contarle sobre como había conocido a Akihiko, al menos no aún, pero no sabía como seguir, se quedó unos segundos en silencio- una persona que luego me ofreció un mejor trabajo, gracias a ello pude terminar de estudiar la secundaria y también la universidad, pero lastimosamente la enfermedad de mi madre le ganó la batalla
-cuanto lo siento, eso debió haber sido lo más duro por lo que pasaste –lo mira sentido-
-si lo fue, pero hubo alguien que me apoyó en todo, me enamoré perdidamente de él
-él? –pregunta no muy sorprendido- entonces tu también
-si… que coincidencia no –sonríe quedamente- y luego ambos regresamos a Japón, eso fue poco antes de que nos viéramos por primera vez
-oh, entonces fue reciente –desvía la mirada- y viven juntos?
-si…
-que bueno que tú también tengas a alguien a quien amar, seguro que es un hombre honorable, no?
-ja, ja, -ríe nerviosamente- si, algo así… -en realidad es un gran tonto e irresponsable que me obliga a mentir y hacer todo lo que él quiere –piensa mientras desvía su vista poniendo una expresión cansada-
-bueno, siendo así será mejor que te regrese, de seguro tu pareja se encuentra preocupada por tu ausencia y si es uno de eso tipos fuertes, puede que hasta me golpee si sabe que te invité a comer y te arrastré conmigo toda la tarde –ríe rascándose la nuca-
-no creo que haga eso, pero si, creo que es mejor que me vaya –se incorpora del asiento-
-de eso nada, yo te traje aquí y yo te llevo a tu casa –toma la mano de un sonrojado Hiroki y lo guía hasta su auto- dolo guíame –luego de decir eso Hiroki agradeció por la molestia y lo guio hasta su actual hogar- sabes?, me encantaría verte de nuevo usando un kimono, por qué ya no lo usas, en serio te hace lucir “hermoso”–pensaba- muy bien
-gracias, en realidad lo uso pero solo en casa, y no creo que sea prudente usarlo para dar clases, bueno… -saliendo del auto- será mejor subir-
-me sorprende que vivan en semejante lugar, tu novio debe ser adinerado para costearse semejante lugar… -ve el semblante de Hiroki que lo descoloca- lo siento, eso fue muy imprudente de mi parte – se disculpa-
-descuida, si gana mucho gracias a Dios, la verdad él es escritor, por eso
-oh… ya veo… genial! –dice entrecortadamente- bueno fue un gusto conocerte más y espero que podamos reunirnos nuevamente
-a mi también, y claro no hay problema, además pase una tarde muy agradable contigo, gracias –se despide para luego perderse a la entrada de su hogar-
-lo suponía!, -sonríe con algo de tristeza- eran demasiadas coincidencias para no ser así –piensa un tanto desanimado- Akihiko… que suerte tienes –dice lo último en susurro, para luego entrar en su auto y regresar a su hogar en el cual de seguro se encontraba su pareja esperándolo ansiosamente-