Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Idol. por KeikoHikari

[Reviews - 46]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

-         ¡¿Eh?! ¿Qué hace él aquí? – soltó Lyoner que ya se había vestido. – Oh no, si él me ve aquí, esto va a ser un desastre. Empezará a reñirme, y después se lo contará a Hiro y me echaran a la calle. ¡Tierra trágame! Me esconderé debajo de la cama, pero si no quepo... – Empezó a dar vueltas por toda mi habitación, me estaba empezando a poner nervioso. - ¿Qué voy a hacer? Quiero irme pero a la vez quiero quedarme, sin embargo, si me quedo y me ve, voy a estar muerto, ¡ya sé! ¿Y si yo...? – Antes de que acabara la pregunta, lo callé con un beso. Era la única forma de hacerlo callar. Cuando se ponía nervioso, empezaba a hablar y no había nada que lo callase, hasta que descubrí que si mantenía sus labios en otra cosa, paraba de hablar.

-         Me estás poniendo nervioso, cállate ya. Tranquilízate, esto es cosa mía.- dije riéndome por la cara de sorpresa que se le había quedado.

-         Yuu...

-         Te he dicho que te calles, o si no... – interrumpí. Metí mi mano por debajo de su camiseta y empecé a pasear mis dedos por su pecho, produciéndole placer a la vez. Lyoner comenzó a suspirar y a dar comienzo a sus gemidos. – Si no me haces caso te voy a hacer gemir tanto que te van a oír hasta los vecinos de en frente. – Cuando saqué mi mano de su camiseta, se desplomó al suelo, con la respiración agitada y su rostro enrojecido. – Apenas te he tocado y ya estás a punto de un orgasmo, llevabas tanto tiempo esperando por esto que a la mínima te enciendes.

-         Ryuu, Suichi se está impacientando... – avisó Allen. – Vaya, Lyoner, ¿se encuentra bien? Su cara está totalmente roja...

-         Sí, está bien, no te preocupes Allen, gracias por avisarme. - Para intimidar más a Suichi, abrí la puerta sin camiseta, simplemente con los pantalones puestos. - ¿Qué quieres, Suichi?

-         ¿Es que no tienes camisetas? – preguntó con tono burlón.

-         ¿Quieres ponérmela tú? Es que es verte y empezar a entrarme un calor por el cuerpo... – contesté con una risa pícara.

-         No sabía que te gustaba tanto.

-         Me pones a cien Suichi. – dije guiñándole un ojo.- Ya sé que me hechabas mucho de menos y que estabas loquito por verme, pero a parte de eso, ¿a qué has venido?

-         Sé que tienes a Lyoner aquí, y cuanto antes lo dejes tranquilo mejor. Ya te dije que eres un estorbo, ¿por qué has vuelto? Tan solo sabes fastidiar, ¡vuelve por donde has venido y no regreses nunca! – En aquel momento cogí a Suichi de la camiseta, lo metí dentro y cerré la puerta. Lo pegué a la pared de un golpe mientras lo tenía agarrado por la pechera.

-         Mira estúpido niñato, te voy a dejar claro un par de cosas... La primera, jamás de los jamases, voy a dejar a Lyoner de lado... ¡Jamás! Cometí un grave error al alejarme de él por tu culpa, por tus palabras. Después de estas tres semanas sin él he podido darme cuenta de que sin él no soy nada. Y la segunda, si te crees que te voy a dar a la persona que más quiero en mi vida, debes de estar soñando, ni por todo el dinero del mundo lo dejaría. – solté con rabia. – Tú nunca llegarás a ser ni la mitad de lo feliz que soy yo con él... Eres un egoísta, él es mío, así que olvídalo, tan solo cantáis juntos, nada más.

-         Como te atreves a decir eso... ¡Tú no me conoces! – exclamó. – Ya te dije una vez que no te lo iba a dar, él..., él nos quiere...

-         Como amigos, y nada más. Estuviste apoyándolo cuando lo dejamos estas tres semanas atrás, tú mismo viste como estuvo de mal, las noches llorando, días sin comer, los ojos rojos de tanto gimotear... Asúmelo, estás celoso de mí.

-         ¡Eso no es cierto! – gritó. - ¿Dónde está? ¡Quiero verlo!

-         No quieres verlo, quieres quitármelo.

-         ¡Lyoner! – exclamó apartándome. Corrió hacia la escalera, al darme la vuelta pude ver que Lyoner estaba allí. Suichi se tiró a su cuello. – Te hechaba tanto de menos, quería verte, todos están preocupados, para nosotros estabas en un paradero desconocido.

-         Suichi... ¿Es verdad eso? ¿Solo me elogias tanto para alejarme de Yuuto? – preguntó Suichi cabizbajo.

-         Bueno..., eso.... N-No es así... ¡No le hagas caso Lyo, te está mintiendo! Quiere alejarte de nosotros, ¿es que no lo ves? – suplicó Suichi. Obviamente se estaba haciendo la víctima. Después de ver la duda de Lyoner, contemplé en su cara que había tomado una decisión. Alejó las manos de Suichi de su cara, se separó de él y me miró.

-         Suichi... Yo no creo que él sea así... – dijo acercándose a mí. – Él es..., mi más preciado tesoro... – Yo acaricié su mejilla sonriendo y él puso su mano sobre la mía. – No quiero perderlo.

-         ¡Esto es ridículo! ¿Somos el segundo lugar? ¡Siempre hemos estado juntos! ¿¡Por qué tuvo que aparecer este individuo!? Estábamos muy bien los tres, siempre juntos, pero...

-         ¡Ya es suficiente! – interrumpió Lyoner. – Vamos a seguir estando juntos, seguiremos como antes, tal vez esté algunas veces aquí, porque necesito verle y tocarle... Eso es algo que no entenderías Suichi. Así que, por favor, regresa al hotel y cuéntale a los demás que estoy bien.

-         ¡Como quieras! – vociferó Suichi dando un portazo. Lyoner suspiró aliviado.

-         ¿Por qué has bajado? Lo tenía todo como yo quería...

-         Realmente pensé que le ibas a pegar...

-         Yo no uso la violencia... – Después de un tiempo mirándonos a los ojos, recordé algo muy importante y me acerqué a su oreja. – Me has desobedecido pequeño, prepárate para la mañana que te voy a dar. – dije mordiendo su oreja.

-         Pero Allen...

-         Allen no está aquí, se fue cuando Suichi entró. – Lo lancé contra el sofá y me puse encima de él,  le quité la camiseta y recorrí abdomen y su pecho con mi boca.

-         N-No puedo m-más... – gimoteó.

-         Pero si acabo de empezar. – Después jugué con su miembro. – Voy a entrar... – advertí.

-         S-Sí... ¡Ah! – gritó.

-         Lo siento... Quizá fui un poco bruto, seré más gentil la próxima vez.

-         Está b-bien... – Para compensarle le besé suavemente en sus dulces labios mientras oía sus pequeños gemidos.

-         ¿Duele?

-         Y-Ya no... – Se agarró a mi espalda con sus uñas. – M-Me voy a v-venir...

 

Y así acabó aquella mañana tan movida, los dos disfrutamos hasta llegar al orgasmo. Nuestros cuerpos terminaron sudorosos, pedían a gritos una ducha con agua fría. Lyoner, después del baño se tumbó en el sofá, lo veía cansado pero feliz a la vez. Todavía tenía la respiración agitada. Me acerqué a él y le susurré al oído.

-         Me encanta ver tu cara mientras lo hacemos. – Enseguida su cara se tiñó de rojo y tapó su rostro con el primer cojín que alcanzó.

-         ¡No digas cosas tan vergonzosas!

-         Eres increíblemente tierno. – dije besando su frente. En aquel momento apartó el cojín, tiró de mí y me lanzó a sus labios. Yo los tomé con cariño, aun que, me despedí de ellos con un mordisco.

-         Ah, se me olvidaba... A la semana que viene tengo conciertos, ¿vendrás a alguno?

-         No puedo, tengo reuniones y presentaciones de una nueva novela, lo siento...

-         Vaya, yo que te tenía una sorpresa preparada... Que mal...

-         Vale, ¡está bien! Intentaré acudir a alguno, ya te lo diré con más seguridad... - ¿Qué clase de sorpresa sería? Fuera lo que fuera, proviniendo de él, seguro que me iba a gustar.

Notas finales:

¡No os olvidéis del review

Espero que os haya gustado, he intentado meter más lemon... ^^

Un beso~!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).