El barco por sary_sary

Abrí mis ojos lentamente podía sentir el dolor intenso en mi cabeza al igual que otras partes de mi cuerpo, me sostuve con firmeza mientras trataba de recordar lo que había pasado, mire con cautela el lugar las luces estaban a pagas impidiendo que pudiera ver donde me encontraba.

Me levanta tambaleando dando pasos nerviosos que en cuestión de minutos me llevaron al piso, mis manos sintieron algo húmedo y espeso que no pude descifrar que era, me levante nueva mente para comenzar a caminar hasta una pared de aquella habitación, comencé a toquetear con cautela buscando un interruptor que prendiera la luz.

- Shuuu.. no pensé que te despertarías tan pronto..- susurro sensual mente una voz tras de mí, no era necesario preguntar quién era estaba seguro de que Alejandro estaba detrás de mí, aun me mareaba la solo idea de recordar lo que me dio a beber.

- Tu.. que pretendes..- me atreví a decir al sentir sus frías manos acariciar me por encima de la ropa mi pecho.

- Umm.. quién sabe..- mascullo mordiendo con sus afilados dientes mi oreja, me moví irritado tratando de alejar su cuerpo del mío pero la oscuridad parecía jugar a su favor, y mientras más trataba de alejarlo más cerca lo podía sentir.

- Déjame ir..- gruñí para ser callado por un intenso beso, que congelo todos mis sentidos para derretirse en el despertar de un increíble deseo.

- Si hiciera eso arruinarías mis planes y no queremos eso no..- susurraste a mi oído lamiéndolo de forma sensual y deseosa, bajaste lentamente por mi cuello dejando chupetones y mordisco en el proceso..

- Ahh.. Alejandro… basta detente.. - dije tu nombre confundido por el huracán de sentimientos que se alojaban en mi garganta, con brusquedad me quitaste mi camisa tratando de apreciar mis pocos músculos aun entre tanta oscuridad, una sonrisa volvió a surcar tus labios, mientras tus manos acariciaban mi pecho.

- Se mío.. – me pediste mientras comenzabas a lamer con sutileza mi tetillas ya endurecidas por el placer, un pequeño gemido salió de mis labios al sentir como tu pierna rosaba mi pene por encima del pantalón- estas deseosa- me susurraste arrancándome el pantalón, un gemido sonoro se volvió escapar de mis labios al sentir las corrientes de placer que me provoca mi miembro, tape con mi mano mi cara tratando de calmarme, observe tu rostro el cual sonreía complacido por mis gemidos.

- Alejan..dr Calla..te deja..- apenas pude susurra, sentí como mi última prenda era quitada con violencia, una corriente eléctrica recorrió mi espalda al sentir tu húmeda lengua en la punta de mi miembro- no saca..ahh.lo..- gruñí muerto de vergüenza y de placer no sabía qué hacer me encontraba desesperado y deseoso por que continuara- ¡¡¡¡¡Ahh!!!..- solté un gran gemido al ver como Alejandro, introducía todo mi miembro en su boca.. No pude evitar arquear me de puro placer sintiendo como las corrientes de deseo recorrían cada parte de mi cuerpo.

- en serio quieres que me detenga si se ve que lo disfrutas..- susurro lamiendo la punta de mi miembro..- o tal vez te guste mas así..- volvió a susurrar para hacer presión en la punta de mi pene, cerré los ojos con fuerza sintiendo que en cualquier momento me daría algo.

- -ahh.. me voy.. ah.. core..rr.- trate de advertirle al sentir como un liquido caliente y transparente salía de mí, observe detenidamente a Alejandro el cual se lo había tragado completo relamiéndose los labios..

- Delicioso- me murmuro para luego besarme con deseo- ya me toca a mí- me dijo mientras me tomaba de la mano y la llevaba a su miembro para darme cuenta que lo tenía duro, un sonrojo adorno mi rostro mientras negaba asustado de lo que quería hacer.

- No por favor ..- fue lo único que dije para luego ver como se desnudaba dejando me apreciar con más claridad su enorme pene, lo mire aterrorizado cerrando con fuerzas mis piernas, no quería que eso entrara ahí me dolería un montón...

- Vamos es hora de que correspondas lo que te di- mascullo burlón- ya no puedes echarte para atrás voy a entrar- me advirtió mientras me tomaba por mis glúteos, obligándome abrir mis piernas de forma brusquedad, sentí su punta en mi ano para luego comenzar a arquear por el dolor que me provocaba al ser penetrado por su enorme miembro - calma ya.. pasara ah..— me dijo mientras yo trataba de aguantar el inmenso dolor, unas lagrimas salió de mis ojos mientras trataba de alejarme de su pecho, su mano se acerco a mi miembro tratando de provocarme placer.

- Alejan..dro.... – murmure al sentir su gran miembro dentro de mí, me dolía horrores solo podía llorar y maldecir al bestia que me estaba poseyendo. Lentamente comencé a sentir grandes cantidades de placer, moví mis caderas tratando de sentirlo más, era tan caliente que me gustaba aun cuando trataba de negarlo- ah..- gemí mientras me movía con mas fuerzas sintiendo el placer recorrer cada gramo de mi piel.

- Leo.. eres tan.. ah.. estre..cho..- gruño en mi oído moviéndose con más intensidad, mire su rostro sus ojos estaban cerrados y sus labios entre abiertos una imagen realmente exquisita, sentí como me venía en su mano que aun tenia preso mi miembro, apreté mis paredes internas para luego sentir como su liquido me llenaba- leo..- pude escuchar antes de que se corriera, se separo de mi levantándose con una sonrisa satisfactoria en sus labios.

- Porque haces esto – gruñí con los ojos cerrados de la rabia, me recosté en la pared accionando con mi brazo izquierdo el interruptor de la luz, parpadee varias veces tratando de distinguir lo que había a mi alrededor.

- Porque me gustas- gruño mire fijamente sus rostro, una sonrisa de burla lo adornaba al igual que varias gotas de sangre, mire mi cuerpo atemorizado dando me cuenta que también estaba cubierto de ese liquido rojizo.

- Pero qué..- dije con horror al ver el cuerpo sin vida de uno de los invitados detrás de Alejandro.

- Umm valla Leo no creí que fueras de esos..- gruño acariciando mi rostro espantado.

- Yo no lo mate lo juro..- susurro que ahogue en mi garganta, mientras mi cuerpo chocaba con más fuerza contra la pared.

- Lo sé yo lo asesine..- una respuesta que me dijo sin compasión, mientras sus manos acariciaban mi cuerpo con deseo nuevamente.

- ¿Qué?.. pero..- no hallaba que decir no entendía lo que estaba sucediendo, yo me había acostado con un asesino.

- No me mires así que se que tu también lo disfrutaste, además este es solo el comienzo si te sorprendes por tan poca cosa no me duraras mucho… amor..- me confesó.

- Aléjate les diré la verd..- grite pero fui callado por una navaja que voló hacia donde estaba, haciendo un superficial corte en mi mejilla.

- No lo creo..- mascullo para acercarse y tomar la navaja para seguido lamer mi mejilla.

- ¿Qué me vas a hacer?..- le pregunte asustado, no podía comprender su forma de pensar ya había tomado mi virginidad, no podía ofrecerle dinero pues era pobre solo podía pensar en lo peor.

- Umm.. de verdad quieres saber..- mascullo relamiéndose los labios a tan solo cinco centímetros de mi rostro.