Disclaimer: Los personajes de Naruto no me pertenecen, sino a su autor Kishimoto-sama, este fic lo hice solo y únicamente como diversión.
Parejas: OCxNaru SasuxNaru.
Aclaraciones y Advertencia: Este fic contiene Mpreg (tal vez), Violación, Violencia, Spoiler del manga y lo que se me ocurra nnU
Beta: Usarechan
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Capitulo 12.-Lo que nunca fue parte I
Hikawa era un maestro en el manejo de los elementos, pero también lo era del combate cuerpo a cuerpo, ninjutsu y genjutsu, convirtiéndolo en un formidable adversario.
—El viento y fuego son elementos que se complementan, al igual que la tierra y el agua —explicó Hikawa —. Cada uno de estos tiene una cualidad única. Todo ser viviente posee dentro de sí un poder y personalidad parecida, es decir, poseen alguno de los elementos en su interior.
—Pero hay ninjas que poseen dos elementos distintos —habló Sakura confundida.
—Cierto —la apoyó el zorro maestro —. Hay humanos y youkais con esas características… pero incluso ellos poseen un elemento principal.
Hikawa se quedó callado por unos segundos, meditando lo que diría a continuación.
—Sakura-san, Sai-san, ustedes son del elemento agua. Naruto pertenece al elemento viento… es su elemento principal.
“Quizás Naruto también posea el poder del fuego o la tierra a causa de Kyuubi” pensó el youko para sus adentros.
—Aquí aprenderán a controlar su elemento más allá de los límites ningen; serán uno con su elemento. Podrán enfrentarse a un youkai y darle pelea.
Hikawa; el antiguo shinhan-sama era famoso por ser alguien amable y bondadoso, pero cuando se trataba de entrenar a un nuevo discípulo. Era estricto y algo cruel, recordándoles que él, a pesar de su naturaleza tranquila, seguía siendo un youkai y uno de los más poderosos.
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Sasuke se encontraba sentado bajo la sombra de un frondoso árbol. Acababa de despertar de un extraño sueño. Se llevó las manos al rostro para intentar recuperar la respiración que aquel suceso le había quitado.
Definitivamente no volvería a comer ramen en lo que le restaba de vida. ¿Cómo era que el dobe no tenía pesadillas comiendo? Era todo un misterio.
Se levantó del suelo, sacudiéndose la tierra del pantalón, debía regresar a la aldea antes de que el dobe enviase a alguien a buscarlo, sonrió como solo lo hacía cuando estaba solo o con el Uzumaki, ¿Quién hubiese imaginado que ese dobe se convertiría en el más joven Hokage?
Kagura miraba con atención al joven Uchiha; sonrió levemente. Sasuke había caído completamente en el poder de la ilusión.
—Mientras más grande sea tu deseo, mayor será el poder de las puertas —dijo la loba —. Si no eres capaz de liberarte terminaras siendo devorado por el poder de tus propios anhelos como tantos otros antes de ti… ¿Serás capaz de darte cuenta antes de ser absorbido?
Aunque Sasuke inconscientemente sabía que aquel mundo era tan solo una ilusión; no le importaba. Su deseo era más grande que su razonamiento, cegándolo a la verdad.
—Te permitiré disfrutar un poco de aquello que se te fue negado… al menos hasta que el poder de la ilusión comience a corromperse y el sueño se vuelva pesadilla —habló a la imagen del azabache.
Hacía ya más de seis años de los exámenes chunnin. Sasuke nunca se fue con Orochimaru. Al final el amor que sentía por Naruto había podido más que sus deseos de venganza.
“No hay poder más grande que el amor”. Aquellas palabras dichas por su madre no podrían ser más ciertas; era el amor que le tenía a Naruto quien lo había hecho fuerte y sería ese sentimiento el que lo ayudaría siempre.
—Sasuke-teme, ¿Dónde estabas? —lo reprendió el rubio Hokage.
—No molestes, dobe —le respondió con molestia.
— ¡No le hables así a Hokage-sama! —lo reprendió Konohamaru.
Sasuke bufó con molestia. Ese niño era un verdadero dolor de muelas; si no fuera porque Naruto lo quería como a un hermanito, lo habría matado hacía mucho tiempo atrás.
—Raikage-sama ha convocado una reunión en el país del acero. Es tiempo de ponerle fin a la amenaza de Akatsuki —dijo el rubio, interrumpiendo la posible pelea —. Quiero que vengas conmigo, Sasuke-teme ttebayo.
—¿Cuándo partimos? —preguntó el azabache.
—Mañana por la tarde —el Uchiha asintió antes de desaparecer.
Mientras tanto; Sakura y Sai habían sido tomados como pupilos por el ama del agua: Mizuno, de esta forma Hikawa se encargaría de enseñarle a Naruto lo secretos de los youko.
En esos momentos, el zorro maestro se encontraba sentado bajo la sombra del gran árbol; Kyuubi había tomado posesión de Naruto y ahora miraba al youkai con recelo.
— ¿En verdad crees que mi contenedor será capaz de aprender habilidades de un kitsune? —le preguntó en tono de burla.
—Naruto tiene todo lo necesario para aprender las técnicas de nuestra especie —le respondió el zorro maestro.
—Eres un iluso, Hikawa —gruñó el Kyuubi —. Siempre lo fuiste, es por eso que todos los que conociste en tu juventud murieron.
—El pasado son solo sombras en la mente de los seres vivos. Si no miras al futuro… jamás podrás ser feliz —concluyó con una sonrisa dulce, cosa que molestó al Kyuubi.
Kyuubi deseaba destruir aquellas defensas de Hikawa; desde que lo había conocido lo odiaba y deseaba hacerlo sufrir.
— ¿Por qué ayudas a mi contenedor después de lo que te hice? —Hikawa tan solo le sonrió con cariño.
—No funcionará, Kyuubi —le dijo con voz dulce haciendo que el aludido lo mirara confundido —. Hacerme enojar no te molestara.
Kyuubi sintió hervir la sangre al verse descubierto, pero inmediatamente sonrió con malicia al pensar en otra cosa.
—Olvide que solo Yoma es capaz de hacerte reaccionar —por un instante, la mirada del zorro maestro había adquirido un brillo melancólico pero inmediatamente como apareció, desapareció.
—…l fue alguien muy especial para mí… —aceptó —pero eso ya forma parte de mi pasado y ahora solo es un dulce recuerdo.
Kyuubi rodo los ojos, ¡¿Es que a ese idiota nada le provocaba?!
—Podrías permitir a Naruto tomar posesión de su cuerpo —le pidió amablemente —. Estamos atrasados con su entrenamiento.
En consecuencia el Kyuubi bufó molesto y desapareció, no sin antes decirle que no sería la última vez que hablarían.
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Naruto había retornado temprano a su casa: el barrio Uchiha.
Era un secreto a voces que Uzumaki Naruto y Uchiha Sasuke más que amigos, eran amantes; lo que por supuesto era de esperarse: “esos dos estaban destinados a estar juntos”.
Tan pronto como Naruto entró a la casa, fue asaltado por Sasuke quien comenzó a besarlo apasionadamente, siendo correspondido inmediatamente.
El deseo de ambos era tan grande que apenas y pudieron separarse de la entrada; tumbándose en el pasillo, disfrutando del contacto del otro, su aroma… su sabor.
Al día siguiente, Naruto, junto con Sasuke, Sakura, Sai y Kakashi, partieron al país del acero, llegando en pocos días.
— ¡Gaara! —exclamó el rubio al ver a su amigo pelirrojo —Me alegra verte ttebayo —dijo abrazándolo.
—Lo mismo digo, Naruto —respondió el aludido.
— ¿A nosotros no nos dará un abrazo, Hokage-sama? —habló la rubia mayor, sacándole una sonrisa al rubio jinchuriki antes de ser abrazada por éste.
Sasuke miraba la escena de reencuentro desde un punto un poco apartado. No quería interrumpir aquella escena por causa de sus celos sin sentido, pero es que no podía evitarlo.
—Bienvenidos —dijo un joven que a Sasuke se le hacía muy conocido —. Mi nombre es Yoru, estoy para servir a sus excelencias —dijo mirando a Naruto de una manera que al Uchiha no le gustó.
Sasuke tenía un mal presentimiento y encima Naruto parecía muy interesado en aquel joven de ojos bicolor, ¿Por qué se miraban como si quisieran arrancarse la ropa ahí mismo? Definitivamente ya odiaba a ese tipo.
Continuara…
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