Joey bajo al suelo y le dijo-¡Oye Kaiba basta ya de mirarme así!-exclamó.
-¿Mirarte como?-preguntó el castaño fingiendo inocencia.Estaba molesto consigo mismo tanto como con el rubio.
-Tu sabes como.Así.Directo a la cara-exclamó molesto también el rubio.
-Pues no tengo muchas opciones si estoy frente a ti ¿Verdad?Si no quieres que te mire a los ojos ponme de espaldas a ti-rezongó el ojiazul a lo que el rubio tuvo una fugaz visión de él de espaldas a sí con el cuerpo pegado al suyo y dio un respingo con la cara toda ruborizada.
-Bueno no creo que sea para tanto-exclamó Joey tratando de disculparse.
-Claro que no perro.Solo estas ladrando sin sentido como siempre-acotó el otro,ganándose una mirada de odio por parte del otro.
-¡Oye Kaiba que ya me disculpe!-acotó el rubio.
-Era tu deber- afirmó el castaño.
-Me estas cansando-dijo el rubio.
-Para lo que me importa-aseguró el otro.
Y Joey no pudo más así que se le tiró encima.Ambos rodaron por el suelo y Kaiba se defendió muy bien.Tanto que quedó sobre él y sostenía pegados al suelo los brazos de Joey con sus manos sobre la cabeza de éste que pretendía pegarle.
-¡Sueltame!-escupió Joey.Seto se quedó mirándolo como rato antes y puso de nuevo nervioso al rubio.-¡Kaiba!¿No me oyes?¡Sueltame!-dijo el rubio todo sonrojado.Pero Kaiba no le soltó sino que irremisiblemente acerco su rostro al del otro.-¿Ka…?-intentó preguntar pero su boca se vió invadida por una lengua calida y posesiva.
Las manos se soltaron de su agarre y bajaron hasta la cintura del otro.Para entonces Joey correspondía al beso.Los brazos del rubio se cruzaron tras el cuello del castaño.Seto apretó con fuerza la cintura del otro apretándole contra sí y frotandose contra él.Joey no pudo evitar gemir dentro de su boca.Se sentía débil e indefenso en los brazos de Seto.
De pronto el ojimiel abrió grandes los ojos y bajo sus manos hasta colocarlas entre ambos,luego empujó a Kaiba separándolo de sí y desviando su cara a un lado dijo rápidamente con respiración agitada-¡Kaiba para!¡No podemos!No esta bien-.
Molesto el CEO soltó una de sus manos,tomó con ella el rostro del otro para voltearlo hacia él e invadirlo nuevamente.Wheeler se sentía atrapado en los brazos del otro y eso aunque pareciera mentira lo exitaba más.Separo su rostro contorsionado por el placer que estaba sintiendo y enterró su nuca en la tierra mientras las oleadas de placer se adueñaban de él .Su entrepierna dolía pero era un dolor que le causaba deseo.¿O era causado por el deseo?Ya no era capaz de razonar.
Seto por su parte se sentía raro.Nunca había sentido esto antes.Esta atracción.Era deseo puro que lo arrastraba irrefrenablemente a poseer sin límites al rubio y ver su cara sonrojada y contorsionada solo lo empeoraba todo.Fue a su cuello y lo mordió consiguiendo como premio un grito de placer del otro.-Por favor,no.Seto detente.Esta mal-gimió el otro.
-Conque ahora soy Seto-dijo Kaiba con una media sonrisa.Disfrutaba molestar al rubio no importaba la situación.
-Perdón.Kaiba.Déjame ir.Por favor-dijo el otro.
Sumisión.El rubio sumiso y exitado bajo el.¿Acaso había algo que le exitara mas que el rubio frágil y sumiso entre sus brazos?Apretó su cara contra la mejilla del otro y le susurró con voz ronca al oído-No.No te dejare ir.Voy a hacerte mío quieras o no-.
Esa sentencia sonó como algo irremisible a los oídos del rubio.Y de pronto descubrió que aunque su mente le decía a gritos que no su cuerpo deseaba ardientemente entregarse al castaño.
Kaiba le bajó de un tirón los pantalones y bóxers.Joey gritó-¡No!-y miró a los ojos del otro.La mano de Kaiba rozó el miembro erecto de él causando que su cuerpo temblara . Seto gimió ante la reacción del ojimiel y este le miró el rostro arrebolado.Kaiba se veía angelical y adolorido a la vez en ese momento.Joey arqueó la espalda empujando el bajo vientre del otro y causándole así una intensa oleada de placer que el otro aprovechó para empujarle.Las posiciones quedaron invertidas y Joey quedo semisentado sobre la entrepierna del otro.Sentía claramente el duro bulto bajo él.Intentó flojamente retirarse de el pero Kaiba lo sujeto con fuerza,acercó su rostro al del otro y le dijo-No escaparás de mí-.
Kaiba se volteo y quedó sobre él.
-Ahora serás mío-sentenció Seto Kaiba.