Tomo con una mano la cintura de Joey y con la otra agarró su muslo y lo separo del otro rozando así ambas entrepiernas.De los ojos de Joey escapaban lágrimas de placer.La mano se coló entre la tierra y el trasero del otro y lo levantando obligandolo a rozarse con él.El rubio se encogió ante el y apoyó su coronilla en el pecho del castaño.Mientras con sus manos se aferraba fuertemente a sus solapas deseo que Kaiba desapareciera y que estuviera dentro de él a la vez.
Arrastró su rostro hasta el cuello del otro y gimió mientras Kaiba le empezaba a embestir pasionalmente.Solo la ropa de Kaiba evitaba que tuvieran sexo.-¡Quitame la ropa!-ordenó el CEO.Joey empezó a temblar y a obedecer.Todo a la vez.Seto gimió en su oído al sentir que su ropa se deslizaba por su piel y liberaba su endurecido miembro.Joey deslizó entonces sus manos por el pecho del otro abriéndole la camisa y con su boca empezó a rozar el pecho del otro que quemaba como una braza encendida.
Joey tomo su nuca y jaló su cabeza para que la boca del rubio llegara a su cuello,luego sus manos retiraron la ropa del otro que le quedaba sobre los hombros y mordió con fuerza su clavícula,sin dejar de morder y descargar así su pasión en el otro ni aunque su boca se lleno del sabor a sangre del otro.
Las embestidas rítmicas debajo y el dolor intenso arriba hicieron que Joey imaginara a Seto como un lobo que se alimentaba frenético de su presa mientras se refregaba con lujuria sobre el cuerpo al que intentaba succionar la vida.
De una sola embestida Seto entro en Joey desgarrando la entrada y lubricandose con el rojo liquido que manaba de su entrada.Seto era verdad se comportaba como una bestia en celo.Pero a Joey también le tocaba algo de culpa porque en ningun momento se quejó de los maltratos a los que estaba siendo expuesto.Es mas los disfrutaba tanto como el castaño.
Joey arranco la cabeza de Seto de su hombro y cubrió sus labios con los propios sintiendo en su boca el sabor de su propia sangre.Ese sabor aumento más las sensaciones de placer y lujuria.
El orgasmo les llegó pronto y con fuerza brutal cuando sus rostros se separaron la sangre aún bajaba de sus comisuras.Seto quedoó aún dentro del otro medio derribado sobre el cuerpo del rubio y apoyado en sus codos.Las respiraciones agitadas y los cuerpos exhaustos.Joey quedó con su rostro de lado y los ojos cerrados avergonzado de sí mismo.
Seto miro el rostro ruborizado bajo él y no pudo evitar su reacción.Bajo su rostro hasta tenerlo frente al otro y con su lengua lamió la comisura manchada de sangre del otro.Joey intento voltear su rostro hacia el otro lado pero Seto rápidamente le detuvo el rostro con una mano e invadió su boca.
-Ahora me perteneces perro.Eres mío.Solo mío-susurró Kaiba mientras Joey perdía la consciencia.