Seto seguía desnudándose frente a él perturbando sus sentidos.No lo iba a permitir.Hizo palanca con sus brazos para levantarse pero Seto lo embistió.El roce con la tersa tela de su pantalón lo hizo derrumbarse nuevamente y mientras aún sostenía con su mano el erecto miembro del otro de nuevo atacó su boca con gula y aprisionó así sus sentidos mientras acariciaba con su mano libre el costado del rubio que se sentía invadido en sus sentidos.Tomándo desprevenido al castaño se impulso y haciéndolo tambalear logro sentarse y tomo por detrás el cinturón de él alejándolo para luego embestirlo nuevamente.Joseph no era del tipo sumiso y si iba a pasar otra vez Wheeler lo haría pagar tributo.Con su lengua recorrió desde el tórax hasta el cuello el cual mordió con anhelo.
Seto jadeó y sintió sus piernas débiles.Por un momento pensó que no lo sostendrían y temiendo caer uso su mano libre para sostenerse del escritorio.
-¿Qué…..que haces?-dijo casi sin voz el CEO japonés.
-Lo mismo que tu bas…bastardo-respondió el rubio.
-Sé que me deseas y sabes que yo a ti-le dijo y la lucha de voluntades siguió mientras su mano libre siguió luchando sola por abrir el dichoso pantalón sus ojos volvieron a encontrarse y entonces algo ocurrió y Joseph pudo pensar mas que en ponerle el pie encima a Kaiba y Seto pensó en algo mas que obtener su venganza,se lanzo a sus labios mientras soltaba su virilidad y Wheeler comenzó a quitarle el pantalón.
-Por favor.Lo….lo necesi…..to Kaiii……Kaiba-dijo el rubio en forma de entrecortado ruego.
-Dime-le dijo separándose de sus labios para luego volver a besarlo.Se separó.-Dime cuantas veces fuiste suyo-le dijo antes de continuar con el beso.
Le rodeó el cuello con los brazos dichoso de oír los celos en esa voz aterciopelada.
Hablando con sus labios a centímetros de los suyos le dijo-Nunca he sido suyo-.
-Significa que……-preguntó Seto con una sensación extraña en su pecho.
-Que tu has sido el único-completo el rubio para dicha del CEO.
Lo abrazó atrayéndolo mas a su cuerpo y luego recorrió con su lengua su cuello mientras Wheeler no pudiendo esperar mas se corrió ante él.
Kaiba sostuvo sus caderas en el aire un momento después de que pantalones y ropa interior se deslizaran por sus piernas y con un grito de placer empaló el cuerpo del rubio en su erguido miembro.
Joseph se apretó un momento contra el cuerpo del mas alto temeroso de que el otro se moviera.
Cuando el otro aflojo su apretón,Seto supo que era el momento de actuar y suavemente empezó a moverse dentro de él de tal forma que sacó desesperados gemidos de pasión del otro pues Joseph ya no soportaba la lentitud y el placer agónico que el otro le proporcionaba.
Seto sintiendo la urgencia del otro y la suya propia empezó a embestirlo cada vez mas rápido hasta que el orgasmo se hizo presente.Con un jadeo y una embestida profunda todo termino para Seto Kaiba en elo escritorio de Joseph Wheeler.