-Eres un gran…….-le dijo Jouno pero su boca fue cubierta por un beso posesivo y su cuerpo fue vertido en el suelo.
El empujo al otro y le preguntó enojado-¿Qué crees que haces?-
-Eres mio¿no?-le preguntó el CEO dejándolo en estado de estupefacción con sus ojos cargados de deseo.
-¿Cómo puedes preguntar algo como eso en una situación como esta?-le reprochó el otro.
-Porque no puedo desearte mas-dijo antes de besarlo de nuevo.Jouno lo alejó nuevamente.
-No te das cuenta de que usaran esto en tu contra.Te chantajearan.Ellos quieren que pase esto para después someterte con tu sucio secreto-le dijo el rubio sintiendose en parte mal por hablar así de lo que hacían porque sabía que para el eso era lo de ellos.
-¿Quién dijo que esto es un sucio secreto para mí?-pregunto Kaiba tomando por sorpresa al otro.Luego añadio después de besarlo de nuevo-¿Y acaso no querías que ellos tuvieran poder sobre mi para salvarme?¿No es así que ellos se sentiran confiados para soltarme?Entonces dale lo que quieren.¿No querías salvarme?-
Jouno confuso por el razonamiento que en teoría estaba bien y que sin embargo le causaba un extraño resquemor en las entrañas le dijo al otro-¿Y a santo de que yo iba a querer……-
-Porque me amas como yo a ti-le dijo el castaño dejando helado al rubio que no podo articular palabra.-¿O acaso piensas que estoy aquí por trabajo?Vine por ti porque te amo-añadió dejando en un estado de colapso el mundo del rubio.
-Cállate-le ordenó el de ojos café todo colorado y sin poder mirarlo a la cara.
-¿Por qué lo dices?¿Por que te hace sentir deseos de entregarte a mi?-preguntó el astuto castaño sintiéndose por fin vencedor en esa contienda.-Te amo-repitió y un espasmo de deseo recorrió la espalda del rubio haciéndolo gemir y aferrarse a la chaqueta del de ojos azules como si en ello se le fuera la vida.
-Te amo.Te amo-repitió con voz sensual al oído del rubio haciéndolo estremecer una y otra vez.
-No me hagas esto-pidió con una voz cargada de agonía Katsuya.
Seto como depredador que era viendo a su victima herida y sin fuerzas dio el golpe de gracia al que estaba acostumbrado a proveer.-¿Qué no te haga que?¿El amor?Si eres mío.Lo eres desde esa noche en tu apartamento.¿No lo recuerdas?-dijo sutil y eróticamente atrayendo imágenes a la mente de su amante que le proporcionaron a su deseo ya enorme proporciones mayúsculas.
Fue a su cuello mientras sus manos hábilmente desprendían los botones del saco y la camisa del otro para dejar su torso descubierto.
Vió la magulladura bajo las costillas del lado izquierdo y las beso con devoción.
El dolor y el placer se mezclaron en el cuerpo del otro volviéndose una sensación intensa y avasalladora.-Por-fa-vor-no-me-ha-gas-tu-yo-pidió el rubio.
-¿Que no oíste?Tu ya eres mío-le dijo el castaño y le bajo los pantalones descubriendo así la erección del otro y mirándola con atención.
Los ojos ya cargados de deseo de Jouno vieron a su amante mirando su erección y eso lo hizo arquearse sin poder contenerse.Fue tanto así el placer que sintió al descubrir sus ojos azules que lo despojaban de todo pudor para volverlo completamente suyo.
Seto lo vió observarlo y como un gato curioso se acercó al otro viendolo directamente a los ojos gateando sobre el descubierto cuerpo del rubio.
Jouno vio sus electrizantes ojos azules y se perdió en esos profundos lagos mientras el enrojecido y anhelante rostro que lo acompañaba hacía mella en sus sentidos.
Rodeó su cuello con sus brazos y así acercó sus rostros con sus labios a milímetros de los del otro le desnudo su alma-Te amo-dijo para luego besarlo con ímpetu mientras su pierna buena era levantada por un Seto que se introdujo en su interior mientras no dejaba de besarlo.
Si, amaba al engreído y frío Kaiba que para su asombro era tan apasionado en la cama llevándolo a delirar de placer.
Sus bocas solo se separaron cuando el éxtasis los obligo a arquearse y ambos se vinieron al unísono.