Fueron llevados a unas grandes habitaciones.
Una niña de pelo gris salio al encuentro de todos.
-Ay que linda niña-dijo Tea sin poder evitarlo.
-Comportate ¿Quieres Tea?-le dijo su castaño amigo por la comisura de la boca.
Lo unico que los nuevos visitantes habian entendido era que el lugar en que estaban era Shin Makoku y eso porque Joey, a saber como, entendio lo que la peliverde decía.
-La niña hablo en un lenguaje igual de raro y el rubio les tradujo nuevamente.
-Ella es la Geshin Miko sacerdotiza de este templo y se llama Ulrike-les dijo.
-Ohio-dijo un muchacho de anteojos de mas o menos la edad de ellos entrando por la puerta.-Mi nombre es Murata Ken pero pueden llamarme Ken.¿Como estan?-saludo el pelinegro.
-Que bueno que estas aquí.Yo tengo que hacer algo así que te los dejo-dijo el rubio y corrió de prisa hacia la salida.
-Joey-gritaron Yugi y Murata a la vez pero el rubio los ignoro y se fue hacia el patio a encontrarse con unos mazokus muy preocupados.
-Gracias por salvarme-le dijo a Conrad y a Yozaku.
-Espera que te envíe la cuenta-dijo Yozaku con su sonrisa de bromista.
-Ya deja de esas cosas Yozaku-le dijo Gwendal von Walde un castaño de ojos violetas que tenía un permanente ceño fruncido que escondía un a veces tierno corazón.
-Como mande jefe-dijo Yozaku con sorna pero su rostro traslucio seriedad.
-Así que Seraphine ha vuelto a atacar en la tierra-exclamo el castaño con preocupación.
-Así es-le contesto Conrad a su hermano.
-Esto parece preocupante-dijo el del ceño.
-Dímelo a mí-dijo el del pelo rubio y Yozaku y Conrad sonrieron pues el hobbye de Joey era sacar de sus casillas a su tio el “Ogro von Walde”.
-No es momento para cosas como esas Joseph.Esto es serio.Contigo hasta ir al baño lo es-le dijo con solemne rostro el rubio y los dos espectadores se tentaron.
-¡Conrad controla a tu hijo!-le reclamo el hermano mayor del castaño.
-¿O si no que?¿Me golpearas con un oso de peluche?-preguntó el rubio sacandole la lengua.
-No.Yo te atravezare con mi espada si no acallas tu molesta voz-dijo un rubio entrando en el patio.Sus ojos verdes parecian despedir fuego pues Wolfram von Bielefield era una persona muy irascible y acostumbrada a hacer valer su voluntad y no le importa usar la fuerza para conseguirlo.Por ello su sobrino calló al instante.Con el tío Wolfram mas valía no meterse si quería salir indemne.-Vete inmediatamente a cambiar y ustedes también.Estan todos mojados y deplorables a la vista-les dijo el rubio de ojos verdes a Yozaku, a Conrad y a Joey.
Joey se fue furioso.
-Ya después hablaremos de lo de esa vieja.Ahora cambiense-ordenó y Conrad sonrió.
-Como ordene su excelencia.Aunque jamas admitirá que lo hace por nuestra salud se lo agradezco.
Wolfram lo miro y fruncio el ceño.
Advirtiendo la señal de peligro el pelirrojo puso pies en polvorosa y Wolfram cuando estuvo fuera de su vista se relajo.
-Me molesta que esto pase justo ahora-dijo el rubio y su hermano mayor gruño y asintió.
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-Momento.Momento-le dijo Murata asustado a todos los humanos que le hablaban al unísono tratando de saber en el caso de Tea, Tristán y Yugi y gritando improperios y exigiendo que lo devolvieran a su hogar en el caso de Kaiba.
La Geshin Miko miraba la escena asombrada pero confiaba en las habilidades del Gran Sabio para librarse de la marea embravecida.
-Oigan no hay necesidad de tomarse tan a pecho al traductor-dijo Joseph volviendo a ellos habian pasado horas desde que los dejara y seguían igual de tensos.
-Tu perro tienes la culpa de todo esto-le dijo el castaño volviendose pero dejo de gritar al verlo.-¿Pero que te has puesto?-pregunto al ver al otro con un uniforme militar verde y rojo con un cinto del que pendía la vaina de una espada envainada.
-Si hermano.Si esos locos ven que le has robado uno de esos uniformes se pondrán furicos-le advirtió su amigo castaño.
-No hay cuidado-le contestó el rubio y le guiño un ojo.
Tras el entraron el castaño y el pelirrojo de antes junto con un rubio bajo pero de bellos ojos verdes y un castaño alto de ojos violetas.
-Hey tu bobo sobrino diles aq tus amigotes quienes somos y que pronto los enviaremos a la Tierra-le ordenó el tío rubio al sobrino de ojos mieles.El otro se hizo el desentendido y este bramo después-¿Acaso no me oyes Joseph?-
-Tu dijiste bobo y yo pense que hablabas con tu reflejo-exclamo el otro rubio para enfado de su tío.
Todos los humanos miraban la pelea sin sentido sin entender en verdad lo que decían pero el de ojos verdes saco su espada y la blandió mientras gritaba furioso y entonces todo mundo se tensó.Joey dio dos pasos atrás pero tambien grito en ese extraño lenguaje.
Murata vio lo que ocasionaban y les pidió-Chicos por favor no peleen así frente a ellos que se asustan-.
-Yo solo le dije a este inútil que……-decía Wolfram cuando el otro rubio le interrumpió gritando-¿Inutil?Inutil tus calzones-.
-Te lo has ganado-dijo esta vez Wolfram y lo ataco mientras su sobrino sacaba su propia espada para defenderse entonces Conrad y Gwendal se interpusieron para evitar el enfrentamiento parando las espadas de los dos con las propias.
-Esto parece Disney World-dijo Tristán emocionado.
Ulrike grito-Sirvanse respetar el templo de Shinou-.
Tío y sobrino se miraron un segundo y luego el de ojos verdes le dijo al otro-Ya me ocupare luego de darte tu merecido-.
-Cuando quieras-dijo su sobrino de ojos de miel.
-Wolfram-le llamo la atención Gwendal a su hermano y el otro gruño y guardo su espada.
-Joseph-lo llamo su padre.
-¿Qué?El empezó llamandome bobo-dijo el rubio a modo de defensa.
-Basta.Ninguno de los dos es un niño así que basta de tonterías-les reprendió.
-Aquí estoy-anuncio una pelirroja desde la puerta y Gwendal puso cara de espanto haciendo sonreir por su reaccion a sus familiares por el pavor que le producía la pelirroja.-Yo Annisina von Kareshnikov resolvere todos sus problemas en un santiamén-dijo la de ojos azules de modo que los humanos le entendieron y puso en sus oidos un aparatito como un audífono a algunos pero cuando iba a ponerselo a Mokuba, Kaiba le saco de la mano el aparato y se lo coloco el después de inspeccionarlo concienzudamente a modo de prueba lo colocó con cuidado en su propio oído mientras miraba el efecto causado en los demas que empezaron a hablar entre ellos en la extraña lengua.
Ni bien lo coloco Annisina que lo miraba con interes le dijo-Es usted un hombre precavido.¿Como se llama?-
-No le interesa-le dijo a la extraña mujer con desinteres.
-Veo que es un hombre rico.Sino no me contestaría así.Pues sepa señor rico que yo soy una noble y aunque no me importa hablar del tu por tu con algunos hombres le dejare en claro que es usted un maleducado-le dijo la de azulina mirada.
-El lo es siempre-acotó Joey al lado de Anissina.
-Joseph no has cambiado nada.Lastima que no tienes maryoku bueno.¡GWENDAL!Necesito tu ayuda en un nuevo invento-dijo volteando.
El otro la miro como a un oso y le dijo-Lo siento.Tengo unos papeles que firmar-.Y salio corriendo por la puerta mientras la pelirroja corría tras el y le decía-Pues tendrán que esperar pues el futuro de Shin Makoku depende de este invento-.
Todos los con espada al cinto sonrieron y tambien Murata.
-Esa Anissina tampoco ha cambiado nada-dijo el rubio de ojos melados riendo.
-Desde que la conozco-le confio Murata tambien divertido.
-¿Y de que la conoces tu Joey?-le pregunto su amiga castaña con las manos en la cintura.
-¿Annisina?Es mi tía-le contestó Joey sonriente.
-¿Tu tía?-preguntó con pasmo Tea.
-¿Osea que esta es tu familia?-preguntó Tristan y el otro a modo de respuesta sonrió.
-Yo siempre supe que el no era normal-acotó el castaño y la sonrisa del rubio se borró.Mientras Mokuba se ponía el aparato que Annissina le dio después de que su hermano aprobara el otro.
-Debemos encargarnos de devolverlos antes de que aquí se desate el caos.Ya tenemos suficiente con los humanos de Sho Shimaron como para preocuparnos de estos estorbos-dijo el tio rubio de Joey.
-Wolfram-le grito Conrad.
-Ya se que nos pueden entender y no me importa.Es bueno que sepan que aquí estorban-dijo el de ojos verdes despreocupado molesto.
-Pues a mi si me importa.¿Como puedes decir algo así Wolfram?-dijo un recien llegado de pelo negro que parecía de la edad de ellos y que venía seguido de un peligris alto de ojos violetas que gritaba-¡ALTEZA!¡ALTEZA!-
-Siempre he dicho que eres un enclenque demasiado amable con todos-dijo von Bielefield.
El padre de Joseph igual que el repitieron las palabras del peligris.
-Dejen de decirme así¿Ya?Soy Yuuri, Yuuri¿Eh?-les reprendió el otro y sonrieron todos menos el conocido por su ceño y genio.
Yuuri se acerco a los recien llegados y les dijo-Yo soy Yuuri-.
-¿Cómo te va Yuuri?-dijo el castaño amigo de Joey dandole un fuerte apretón en la mano.
-Yuuri es el rey de Shin Makoku-le dijo Joey sin poder contenerse a su amigo que se quedó helado.
-¿Juegas baseball?-le preguntó el Maou al petrificado Tristán.