Los aliados del Maou fueron a su lado y le dieron sus mas sinceros deseos de ayudarle.
Saralegui le sonrio y le dijo-Veras como juntos con nuestro poder y nuestros ejércitos lograremos hacer desaparecer a esta nueva amenaza como hicimos desaparecer la anterior-.
Conrad en silencio observo el afecto que los dos compartían en silencio.Sin decir palabra miro a otro lado.Solo unos ojos amarillos apreciaron ese sutil movimiento y Saralegui supo lo que el otro sentía solo con percibir su dolor.
Maou y Rey de Sho Shimaron se pararon sobre las empedradas murallas para defender su reino mientras estaba arriba Yuuri vio salir por la puerta a sus soldados y delante de todos iba su castaño protector.
-¿Qué hace Conrad?-pregunto y el rey rubio a su lado le respondió.
-Dejalo.Debe estar sediento de sangre.Es después de todo el león de Rutemberg¿no?Estar de niñera no debe ser divertido para el-.
-¿De que hablas.Conrad no es así-dijo enfadado el Maou y aparto los ojos del otro rey para ver como el primero de todos Conrad entraba en batalla.
-Conrad fue obligado a ello.No tuvo opción.Pero su corazón es gentil-dijo el Maou para luego convertirse y levantar sus acuiferas serpientes para defender su reino.
Saraloegui lo miro con cuidado y descubrio una sospecha que lo inquieto.
Las serpientes de agua atacaron tras Conrad porque este ya estaba muy dentro de las hordas enemigas pero algo no le iba bien por mas que golpeara el enemigo caía y volvía a levantarse y eso le hizo pensar en las gentes de Soshu.
¿Podía ser que ese horror estuviera volviendo?Jamás.Se dijo y de pronto por tal distracción sintió el frío agijón en su piel de la espada enemiga recordandole a Rutemberg.
Era mas joven pero luchaba por lo mismo.¿No era así?Penso en Yuria.En Yuuri.Peleaba por ellos para que estuvieran a salvo y luego una sucesion de imágenes paso por su cabeza.Una: Saralegui con Yuuri en la habitación de reuniones sonriendose.Dos:Berias cerrando la puerta y haciendo guardia para que no les molestaran.Tres:Yuuri y Saralegui tomados de la mano subiendo a las murallas antes de que el saliera del palacio.
No.No era lo mismo.Nadie lo esperaba a el.Nadie esperaba su regreso y así fue que el segundo aguijón atenazo cerca de su corazón y Yuuri a millas de distancia pudo sentir su dolor tan fielmente como el.
El rey de Dai Shimaron se lanzo con sus hombres ahora tras el para repeler el horror que volvía a poner sus garras sobre el dulce reino del Maou al cual pudo gracias a Shinou salvar de ese cruel personaje en que Soshu le convertiría con la mascara de la vieja como el lobo de caperucita.
Espoleo su caballo con fuerzas y se introdujo a golpe de espada en el tumulto mientras Saralegui imbuía en el enemigo autodestruccion aunque en mediana escala y Berias junto a sus soldados esperaba tras las puertas por si el enemigo lograba penetrar en el castillo.
Yozaku fue el primero en verlo caer y grito a su taicho que herido de muerte caía del caballo.
Joseph oyo el grito y fijo la vista en el lugar del que procedía y vio a Yozaku y luego mirando a donde este vio el caballo de su padre encabritado y sin jinete.
-¡¡¡¡¡¡¡¡¡No!!!!!!!-grito con todas sus fuerzas porque no podía creer que su amado padre fuera el sacrificio de ese juego de ajedrez que era esa cruel guerra.
Con su brazo como un latigo golpeo a los enemigos con la brutal fuerza de su espada y como vio que el camino le era difícil por la cantidad de enemigos a derrotar para llegar a el rogó a Shinou.
-Ayudame a salvarlo-.
Sus ojos se tornaron de pronto en violetas y un feroz viento abrazador de brutal calor lo envolvió para esparcirse como un incendio de verano por la paja fresca que el anonadado Maou y los que lo acompañaban miraron incrédulos.
El fuego se esparcio en serpenteantes lenguas que asolaron todo lo que encontraron a su paso y provocaron la retirada de su enemigo.
En el campo semivacío había un lugar donde muchos se dieron cita.Eran soldados mazoku para ver si podían ayudar a su lider caído que se sorprendieron cuando oyeron la cabalgata de un jinete solitario que al llegar descabalgó y que Yozaku intentó detener.
Joey casi sin fuerzas se apoyo en sus hombros y le dijo-Dejame verlo-.
Yozaku lo llevo con el.´
Tendido en el suelo Sir Conrad Wheeler parecía una roja muñeca rota