Pocas veces en su vida Seto Kaiba habia estado tan molesto por algo pero esa vision justo después de lo que el rubio le dijera y ahora estaba todo de cabeza porque aunque queria demostrarle a ese rubio quien mandaba no estaba de humor para sentirse humillado por el hecho de que el otro que gritaba a los cuatro vientos que el le habia violado ahora se revolcaba en un baño público con Carrigan.
Quería salir a golpear a Carrigan.
Quería ir por Wheeler y…
Se estaba sirviendo un wisky y tiro contra la cristalera el pesado vaso que se hizo añicos junto a varias copas que destrozadas como el vidrio cayeron al piso con gran estruendo.
La puerta de su despacho se abrió y por ella aparecio la criada y el mayordomo.
Seto parado en medio del lugar no los miro aolo prorrumpio con su voz colerica en una orden definitiva, unica e inapelable—Vayanse de aquí inmediatamente--.
Nadie quedo dentro ademas de Kaiba una vez la puerta fue cerrada sin ruido alguno.
Se sento en su sillon tras el escritorio moderno y llevo hacia atrás su cabeza tapanso con sus manos su cara.
-¿Rayos!¿Que rayos estoy haciendo?-se pregunto a si mismo en la vacía habitación con los ojos cerrados y en su mente vio al perro sobre el, siendo suyo.
--¿Por qué es tan difícil sacar de mi mente a ese desgraciado?—se pregunto y de repente oyó un sonoro estruendo.
Abrió los ojos para notar que ahora su casa permanecía a oscuras y ver el cielo palidecer por el haz de un rayo.
--Dime que necesito—dijo el de ojos azules mientras las primeras gotas de una arrasante lluvia caían en la ventana y otro rayo(como oyendolo)cayó tras la casa de invitados iluminandola con un tetrico resplandor digno de Alan Poe.
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--BRUM—sono el trueno en la casa donde Wheeler se estaba cocinando el solo su cena.
Todo se oscureció y vio hacia fuera con recelo.
--Rayos.Yo aquí solo y el que…--decía el ojos mieles cuando lo atacó una inesperada angustia.
*El*
--BRUMMMMMMM—se oyo de nuevo y la casa casi colapsa por el ruido que produjo.
--Un rayo cayo aquí.Un rayo—grito el rubio y sse fue a investigar donde lo había hecho y como seguia la casa.
Una sombra paso frente a la ventana de cerradas cortinas.Se acerco despacio a la ventana y abrio con cuidado la tela y todo se conjugo.Un relámpago en el cielo y la cara de Kaiba en la ventana.
Joey pego un salto y choco con una mesilla para caer atrás con aspaviento de manos.
Cayo asustado y se incorporó un poco para ver la ventana ahora vacía.
--Realmente eres muy escándaloso perro—dijo Kaiba a su lado.
--¿Qué haces aquí?—preguntó confuso el rubio.
--Estas en mi casa ¿recuerdas?—pregunto el castaño.
--Por poco tiempo si no recuerdo mal—dijo el rubio y de pronto otro rayo cayo.--¿Qué diablos tienes en esta casa que no dejan de caer rayos?-preguntó enojado el de ojos mieles y vio una extraña locura en los ojos del CEO.
Les dije que te tuvieran así para mi-le contestó el castaño mientras rodeaba con un brazo su cintura y lo atraía hacia si para después besarle.
Lo lanzo al sillon con el encima mientras los rayos no cesaban de caer y el viento empezaba a arreciar como la lluvia.
--Planeas hacer lo que me hiciste la otra vez ¿cierto?-pregunto el enojado ojos mieles.
--Al parecer con Carrigan lo haces gustoso en cambio yo tengo que obligarte—dijo el castaño perdiendo la paciencia.
--El muy maldito es como tu.Me ataco Azabeth e intento eso conmigo en el maldito baño de hombres.Casi le di una paliza pero tu entraste.Si estaba sobre el es porque lo había inmovilizado y planeaba golpearlo—dijo Joey al ver el ceño fruncido y como el otro se alejaba un poco de él se extraño y le preguntó--¿Acaso no me crees?—pero no recibio respuesta del otro que solo lo miraba poniendolo nervioso--¿Qué te pasa?—preguntó el rubio.
--No es eso—respondió Kaiba confundido con media voz.l
--¿Y que es?—pregunto algo cabreado el ojos mieles.
--Azabeth… me llamaste Azabeth—respondió y el rubio se dio cuenta de que en efecto asi lo habia llamado.