“Si el es mío primero no lo tocarás”le dijo mentalmente el hermano mayor al menor mientras el pensamiento cruzaba su mente sus alas antes de albo color se tiñeron de negro como si de pronto se revistieran de un color tan lugubre como los pensamientos de su amo porque asi era entre ellos.Cuando el limite entre la virtud y el pecado se traspasaba el color del plumaje avisaba de la impureza de su portador.
---------------------(Azabeth tomó a Alfión)
Ahora no sabía que pensar.Después de tenerlo en sus brazos parecía que había destrozado lo que en verdad intentaba que perdurara, pero su hermano… Necesitaba tiempo para pensar en…entonces lo oyó reir con ganas y miro hacia debajo de donde provenía su macabra risa.
--Se que jamas se llevará a mi hermano a la cama.No importa cuanto lo intente porque mi nii chan es muy inteligente y no es porque sea mi hermano.Jamás tendré que pagar la apuesta.De eso estoy seguro.Alfión no se llevara a Azabeth a su cama.Eso puedes ponerlo en piedra—le decía su ototo a otro alado mientras reía.
Azqabeth que pasaba volando por ahí se quedo petrificado.
¿Todo había sido una sucia apuesta?¿Alfión había jugado todo el tiempo con él?¿Se había reído de él?
Sintió que su corazón se vaciaba de golpe y que su sangre se helaba.
Usado.
Burlado.
Su mirada se torno opaca mientras volaba en u para ir al lugar en que moraba aquel que lo había utilizado tan vilmente.
Su hermano menor levantó hacia el cielo su vista en una sonrisa nada digna de un alado.
Porque el manchado por la culpa de un amor insano siempre pretenderá hundir lo que mas odia en el mismo barro en que se hundio porque tenerlo a la par no lo hara mas fuerte pero sin dudas el otro se haría mas debil.
Encontro su casa vacía de habitantes y en un ataque de ira de inconmensurables proporciones ya que el que buscaba ahí no estaba destrozo todo lo que encontro a su paso hasta que en medio de su arranque lanzo una silla y esta dio contra algo que perdio pie y con sonido metálico que llamó la atención del castaño y hallo en el piso una fría espada que recogio con mirada hipnotizada.
Después de recoger casi cada paraje en la tierra le vio y no pudo evitar sentir un horrible rencor de saber que aquel ser que creía suyo habia jugado con el de tal manera.
Despacio aterrizó a su espalda mientras el otro volteaba con su nombre en los labios y una sonrisa que le delataba.
¿Quería burlarse de él?No le dejaría.
Con la fuerza que dan el rencor y la locura hundió la fina hoja de lado a lado de aquél que le había hecho semejante humillación mientras los ojos del otro demostraban dolor e incompresión y un porque escapó de sus labios antes de dejar ir su vida ante sus ojos.
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Las autoridades le encarcelaron y como las antiguas leyes demandaban su sacrificio sería hecho al mismo tiempo que se maldecía su alma por la eternidad.Como homicida.
Estaba sentado mirando hacia la puerta por la que vendrían a llevarselo para su sacrificio cuando oyo que chistaban desde la ventana.Miro.Azaquier le miraba con una cara compungida.
--Nii sama.¿Como te atreviste a hacer semejante cosa?Nunca me lo hubiera imaginado—dijo el otro castaño con voz de pesadumbre.
Azabeth por su orgullo no contesto prefiriendo esperar su ejecución.
--El era un alma noble—profirio su hermano menor obligandole a hablar por la furia.
--Un alma noble no se juega su cuerpo en una apuesta—dijo con la ira consumiendole.
--¿Apuesta?—pregunto su hermano fingiendo estar atónito.
--No intentes ocultarlo.Lo he oído…--decía cuando su hermano con una carcajada maliciosa le interrumpio.
--¿Cuándo me sobrevolabas eh?—Carcajeó con la risa del que esta satisfefcho con el resultado de una maldad y no puede evitar el disfrutarla vivamente.--Esta mal oir las conversaciones ajenas hermano—dijo viendo su cara de sospecha lo que le causo mas risa.—Hermano.Para ser tan listo es demasiado facil engañarte—añadió ya serio el otro.
Azabeth abrió grande sus ojos de cielo.
--¿Quiere decir?—pregunto.
--Que le has matado por nada.Que le hiciste vivir un infierno por nada porque nada el a mi me prometio tampoco.Toda la culpa es tuya y Alfion una simple victima de todo esto—declaró el menor y el peso de lo que había hecho aplasto el corazón de Azabeth.
--Maldito bastardo—dijo corriendo hacia el otro.La ventana enrejada le ofrecía protección al traidor.
--Esto te pasa hermano por no haber elegido mi lado.Por haberme dejado solo ante los perros—dijo y se despidio con la mano riendo.
La ceremonia con su maldición fueron ya poca cosa para el después del saber lo que le había hecho a Alfión.