Habían pasado varios meses desde que se mudara con sus padres a la ciudad y ahora tendría que empezar las clases en ese lugar que no le agradaba con gente ruidosa y a Kawamura no le gustaba la gente ruidosa.
A el solo le gustaba el Kendo.
Ese era un arte como la gente solia decir.
Despues del acto de inicio de clases caminaba despacio cuando un ropero de casi una tonelada le cae encima.
Se retiro justo a tiempo y una voz le grito la sempiterna pregunta—¿Estas bien?—
--Si pero no gracias a ti—le dijo levantandose y lo miro a los ojos que estaban a milímetros de los suyos y se sintio transportado a otro mundo.
--¿Oye Frederick estas bien?—preguntó un peligris llegando a su encuentro con cara de preocupado.
--Si Yukito--le respondió sonriente el rubio.—Pero casi lo mato a el—añadio riendo y señalando al moreno alto.Lo cual molesto al otro sobremanera.--¿Por cierto¿Cuál es tu nombre?—pregunto mirandole con sus intensos ojos azules.
--No tienes por que saberlo—dijo el moreno y se fue sin darle mas escuza pero el rubio sonrio malignamente y lo siguió.
Furioso por ser perseguido el otro se detuvo en seco y se volteo de tal manera que sin poder evitarlo el rubio termino chocando con el mientras el moreno de exoticos ojos rojos preguntaba que le pasaba y los dos terminaron cayendo al suelo.
--Parece que hoy es mi dia de caerte encima—le dijo al otro con cara sonriente desde muy cerca.
El moreno se sonrojo extremamente.Tanto que sus ojos parecían blancos en comparación.
--Oye.Te ves lindo cuando te sonrojas—le dijo con cara feliz el rubio.
El moreno avergonzado y halagado a la vez le empujo y el otro fue a caer a unos metros de distancia de el con las posaderas en el suelo.
--AAuch—dijo frotandose el adolorido trasero con la mano.—Tu fuerte no es hacer amigos ¿Verdad?—le preguntó el rubio.
--Eso es para que dejes de fastidiarme—dijo el moreno levantandose.
--¿Y si no quiero?—preguntó el de ojos azul profundo haciendo que el otro que se iba volteara a verlo.
--Ese es tu problema—dijo el moreno antes de perderse en el patio del instituto.
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DIA SIGUIENTE
En el salón de actos el Club de Magia haría una demostración con los mejores en ese arte que tenían para atraer mas gente como cada club lo haría.
Tenían un escenario y en el lobby habian varios de ellos desperdigados enseñando a los de primer y segundo año las ventajas de ser un mago.
Kawamura no estaba muy convencido y uno de sus compañeros de Kendo rio viendo a uno de los chicos del club sacando un peluche de un sombrero.
--Si sacas uno vivo te pago 5 dolares y me lo llevo para comer—grito el chico con desden.
--¿Qué modo de comportarse es ese para un practicante del Kendo?—le dijo Kawamura mirando al chico que se habia quedado algo herido por el comentario.
--No te preocupes.Eso es comun por aquí.Los que practican deportes desprecian a los tios como nosotros—dijo alguien a su lado cuya voz el moreno reconoció.
El rubio sonrio cuando sus ojos se encontraron.
--Pues a mi eso me parece deplorable—dijo el de ojos rojos y el otro se tapo con la mano la cara para reir.
--¿Qué?—pregunto el otro levantando una ceja.
--“Me parece deplorable”¿De donde saliste?¿De una peli de samurais?—se burlo y al ver cuan molesto se puso el otro le dijo—Lo siento no quería….—
--Dejalo.No importa—dijo el mas alto entrando al teatro y tomando asiento.
Un rato después cuando la gente se hubo sentado en el salon de actos frente al escenario las luces fueron apagados.
Una voz en off dijo mientras un reflector salumbraba algo que a Kawamura le resultó familiar.
--Es el ropero…--dijo.
“Señoras y señores vamos a presentarles una de las mas impactantes ilusiones que nuestro lider ha logrado dominar con su talento”.
Entonces la luz se movio para iluminar a un rubio que se había cambiado.Lucía un smoking negro y una varita de punta blanca.
Lucía elegante penso el pelinegro y el otro lo miro dentro del publico sonriente.
¿Me mira a mi?se preguntó el de ojos rojos y después empezo a llevar a cabo su demostración de que nada había dentro del ropero.
--Para este truco necesitare la amable ayuda del público—dijo el rubio sonriendo y el moreno miro a otro lado.
Después de un momento sintio un toque en el hombro.
--¿Me ayudaría?—preguinto el mago a su lado extendiendo su mano.
--Ni lo sue…--respondía el otro cuando el primero lo jalo del brazo exclamando un “muy agradecido”.
Sin dilacion lo puso ante la gente en el escenario y como supuso el miedo al ridiculo del otro pudo mas y nada refirio a que no queria estar ahí.Solo mostro su expresión seria a la platea con lo que el de ojos azules disfruto.
--Pretendo desaparecer a este joven…—dijo mientras el otro lo miraba con cara de “¿Joven?”--…en este ropero—añadio señalando al susodicho y al objeto.
Kawamura le miro con cara de “si como no” y con una sonrisa el rostro lo empujo dentro del abierto objeto y cerro la puerta.
Lo ultimo que el ojos rojos vio ofue la cara de satisfacción del otro.
--Mago idiota—dijo antes de que todo quedara oscuro.