Estaban bajando los escalones principales de la casa del príncipe cuando Kurogane escucho la voz que susurraba.
--Deberíamos seguir.¿Que tan rudos pueden ser?¿Viste?Los gobierna una niña enclenque--.
Los ojos rojos de él se encendieron al punto de parecer dos brazas.
De un salto estuvo ante el sujeto entre la multitud mientras su hermano ponía cara de hastío.
Uno de los consejeros de la princesa excflamó—Nooo—temeroso de que la guerra recrudeciera pero ya era tarde pues Kurogane ya había lanzado su katana contra el desdichado que profiriera esas palabras.
El golpe estaba por alcanzar al paralizado bocon cuando un bok paro su ataque en seco.
El miro a su rival momentaneo para ver que era el rubio de ojos azules.
--¿Qué se supone que haces?—preguntó enojado el de ojos rojos.
--¿Defender a los mios?—preguntó Fye.
El moreno entrecerró los ojos e intento mejorar su ataque pero una voz le detuvo.
--Kurogane detente—le dijo la princesa.
Para asombro del rubio el otro se detuvo.
--¿Por qué no has intentado detenerle Touya?—preguntó Tomoyo al hermano menor de Kurogane.
--Yo no soy su mama.Ademas jamas me haría caso—dijo el moreno.
--Es cierto.A la unica persona a la que Kurogane obedece es a la princesa Tomoyo.Es ella la que siempre guarda en lo mas profundo de su corazón—dijo uno de los consejeros de Tomoyo.
Algo se remiovio dentro del rubio al oir eso y al ver como el otro obedecía a su princesa.
Aunque eso era de esperar le chocaba.
--Podrías haber causado un incidente nii san.Si Tomoyo no te supiera mandar todos estaríamos en apuros—dijo Touya.
--¿Acaso no respetas a tu princesa jounin?—preguntó el que había aludido a Tomoyo causando el incidente.
--Tu no te pases.El que te hayas salvado der Kurogane no es cosa para celebrar.Yo que tu me escondería bajo una piedra porque no solo has ofendido a nuestra princesa.Sino tambien a nosotros—dijo Touya y después de una tenue despedida todos partieron de allí.
5 meses mas tarde.
Kurogane y Touya fueron llamados a la presencia de la princesa Tomoyo.
--Quiero decirles que hemos sido de nuevo invitados al hogar de los Hiro no Inu—informó.
--¿Se sabe cual es el motivo?—preguntó con cierto desgano el mas joven de los hermanos.
--El principoe Yuukito celebrara su boda pasado mañana.Nosotros hemos sido invitados a pasar el dia previo, el de la boda y el del banquete—informó ella.
Al moreno la noticia le cayo como un balde de agua fría.
Su nii chan estaba en otro mundo desde que oyó decír que volverían a ese lugar.Recordó al rubio y lo sucedido aquella noche.
Llegaron a la aldea y fueron recibidos por el príncipe Yukito en su casa.
--Agradezco su amable invitación—dijo la princesa.
--Es todo un honor recibirlos en este nuestro hogar—dijo el príncipe de cabellera gris.
Los hermanos se sentaron a ambos lados de su princesa a disgusto conmovidos por las presencias de los seres que atrapaban su atención.
Despues de la cena se fueron con la princesa a su lugar de alojamiento pero no pudieron dejar de pensar en esos dos.