Capitulo 4 Reencuentro...
Nataku corrió y corrió, asta que sus piernas sus piernas no pidieron mas y cayo al suelo, cansado, triste y sin esperanzas.
-Se… Sesshomaru-sama… -dijo con un hilo de voz mientras gruesas lagrimas dibujaban el contorno de su hermoso rostro
Su cuerpo era azotado por ligeros espasmos causados por el llanto, y es que se negaba a creer que después de esperar poder volver a verle fueran en vano, sonrió tristemente para si, aun cuando el continuara con vida, era posible que no le recordara, ¿Quién podría culparlo?, El era el dios mas débil de todos, desde pequeño siempre fue una carga para todos los que lo rodeaban, era natural que alguien tan poderoso como lo era el Tai Youkai olvidara fácilmente a alguien que ni siquiera era digno de ser una deidad.
Los pensamientos del joven dios fueron interrumpidos por un grito, rápidamente, Nataku se puso de pie y corrió en dirección de donde provenía aquel grito desesperado. Olvidando así, todo lo que había pasado por su mente.
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Lin se encontraba buscando sus alimentos acompañada por el pequeño youkai con apariencia de duende, cuando, de pronto, un feroz youkai con apariencia de una feroz bestia los ataco, lo que hizo que la pequeña soltara un sonoro grito, inmediatamente Yaken, intento defenderla del youkai, pero este, siendo ciertamente mas grande y fuerte, lo derroto fácilmente.
-Yaken-sama, Yaken-sama –decía la pequeña mientras trataba desesperadamente de despertarlo
-Que exquisito bocado –dijo la horripilante bestia para luego lanzar un ataque dispuesto a matarlos de un solo golpe pero…
Un Kekkai fue creado entre la bestia y sus victimas lo que causo el enojo de la criatura
-¿Quien se a atrevido? –gruño
-Pequeña… vete de aquí –le pidió el dios apareciendo frente ala pequeña
-Pero…
-Tu… -gruño cada vez mas enfadado –Morirás por tu osadía –dijo en tono amenazante.
El youkai comenzó a atacar el Kekkai, lanzando golpe tras golpe, asta que logro romper el campo de energía y lastimar, levemente a Nataku
-Muere…
Nataku, inconcientemente, abrazo ala pequeña, esperando el golpe de la bestia, golpe que no llego.
-ahhh -gimio la bestia y callo al lado del dios, manchándolo con su sangre
-Pero… -el dios estaba confundido por lo sucedido, pero su confusión no duro mucho, pues, frente a el se encontraba la razón de la muerte del youkai
-¿Se encuentra bien Nataku-sama? –dijo una voz femenina
Era una youkai, sus ojos eran como los de un felino, de color amarillo, el color de su cabello era naranja, con algunos mechones negros, su piel era como la de un tigre y poseía filosas garraras, tenia cola y orejas felinas, usaba un vestido estilo chino con aberturas a cada lado dejando ver sus piernas, poseía dos espadas, entrecruzadas que traía en la espalda.
-¿Se encuentra bien Nataku-sama? –repitió nuevamente mientras se arrodillaba frente a el.
-Si estoy bien… La pequeña –dijo recordando a Lin -¿Estas bien pequeña? –le pregunto colocando una mano en el hombro de la pequeña
-Si, gracias señorita -dijo la pequeña sonriendo.
-¿se… señorita? O.o –dijo para luego recordar que aun vestía como una chica, suspiro pesadamente.
-Será mejor que nos movamos –dijo la youkai mientras les daba la espalda –El poder que utilizo para crear el kekkai de seguro fue captado por Oroshimaru.
-Si tienes razón –dijo bajando la mirada –Pero la niña…
-Yo haré lo que usted mande y ordene
-No podemos dejarla aquí –dijo mientras se acercaba ala niña –Dime nena, ¿Cómo te llamas?
-Me llamo Lin, ¿Yaken-sama se pondrá bien?
-Si, no te preocupes
-Nataku-sama –dijo la tigresa mientras se ponía en posición de defensa –Alguien nos vigila
-¿Oroshimaru? –pregunto aterrado mientras temblaba ligeramente.
-No… Es un youkai…. Uno muy poderoso… -le respondió –Tal vez el olor a sangre lo atrajo
-Hay que irnos…
-Es tarde… Esta aquí…
De las sombras salio el mismísimo Sesshomaru quien veia al dios y ala youkai de forma asesina.
-Amo Sesshomaru!! –exclamo Lin para luego salir corriendo en su dirección.
-Se…Sesshomaru-sama –dijo la deidad
-¿Quién eres? –el olor que despedía el peliazul le resultaba muy familiar pero… no podía ser el mismo, después de todo quien tenia enfrente era una chica y no y chico
Nataku comprendió y una luz cubrió su cuerpo haciendo que sus ropas cambiaran por las tropas que tenia cuando conoció a Inuyasha y a los demas
Ante esto, Sesshomaru se quedo sumamente asombrado, ahí, frente a el se encontraba ese magnifico ser que siempre dominaba su mente, dio un paso con la intención de acercarse ala deidad pero el rugido que soltó la youkai saco a ambos de sus pensamientos.
-No permitiré que lastimes a mi señor –dijo mostrando los colmillos y rugiendo cual tigresa defendiendo a sus cachorros
-Ranko… -intervino el dios al darse cuenta de la inminente pelea.
La felina comprendió y se arrodillo frente a su dios
-Se… Sesshomaru-sama –dijo atrayendo la atención del Tai youkai –Yo… Me alegro de verle… -mientras hablaba las lagrimas salían de sus rubíes ojos –Yo… Creí que había muerto…
-¿Muerto? –repitio confundida la pequeña
-Su hijo, Inuyasha-san me lo dijo
-Ese idiota no es mi hijo –dijo el Tai youkai en tono ofendido –Es mi hermano
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-
Después de algunas explicaciones, Nataku y la hembra youkai se unieron a Sesshomaru.
-Usted es el youkai que libero a mi dios –no lo preguntaba, lo afirmaba
Sesshomaru miro ala youkai, ambos estaban a cierta distancia, vigilando a Nataku y Lin quienes jugaban a orillas de un lago
-¿Qué relacion tienes con el? –esta vez fue Sesshomaru el que hablo
-Soy su guardián
-¿Un mortal guardián de una deidad?
-SE lo que piensa, una deidad no necesita de ningún mortal, sea ningen o youkai –dijo –Sin embargo… Nataku-sama no es como los demás dioses…
Sesshomaru la miro sin entender
-Vera, los demás dioses son capaces de luchar o siquiera defenderse pero… Nataku-sama no, el a duras penas puede si quiera crear un kekkai lo suficientemente poderoso como para protegerse de un ataque múltiple, sin embargo… Posee un extraño poder
-¿Poder extraño?
-Nataku-sama no se da cuenta del poder que tiene sobre los demas
-No te comprendo
-El es capa de hacer que cualquiera le ayude –le respondió -Lo se, yo fui influenciada por ese poder, antes de ser la guardian de Nataku-sama yo era la líder de uno de los ejércitos de Oroshimaru y su guerrera mas fiel… Pero cuando se me ordeno vigilarlo…
-Te convertiste es su protectora
-Si
-¿Por qué ese tal Oroshimaru quiere a Nataku?
-Por que mientras el amo estuvo bajo su poder ningún dios se atrevió a atacarlo por temor a que Nataku fuera lastimado
-Pero lo hera
-Si… Oroshimaru abusaba de el incontables veces –esto hizo enojar al Tai youkai –Sesshomaru-sama, se lo que usted siente por mi señor y le pido que por favor le proteja
-No tienes que pedírmelo
-¿Entonces puedo dejarlo en sus manos?
-¿Dónde iras?
-Buscare a Nyanta… Ella es la única que puede hacer que Nataku-sama este a salvo
El Tai youkai asintió mientas la youkai se alejaba en busca de aquella que tal vez, seria la única esperanza del peliazul
Continuara…-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-