--¡No ayudes, Shinobu!¡No ayudes!—pidió con desesperación su compañero de viaje.
De pronto Misaki dejo de mirarlos para ver a su lado.La figura que le acompañaba parecía francamente divertida y una sonrisa zorruna destacaba en su rostro.—¿No estarás pensando en lo que creo que estas pensando, verdad Usagi san?—preguntó conociendo la afición del peliplateado de escribir basado en lo que lo rodeaba historias yaoi.
--¡Ya tengo el final de mi historia!—dijo el otro triunfal.
--¡USAGI SAN!—exclamo el castaño menor molesto.
--¡Otro!—dijo Hiroki.
--¿Otro que?—preguntó Nowaki curioso.
--¡Otro con paciencia de santo!—contestó sin pensar su compañero.
--¡Así que admites que Nowaki te soporta porque tiene paciencia de santo!exclamó You feliz de haberle ganado.
--¡Yo!¡Yo no admito nada!¡Y tu… tu…!—le dijo Hiroki apuntandole con su dedo acusador.
--¡Hiro san!¡Por favor ya deja esto!—pidió el tifon.
Hiroki gruño mirando a Miyagi y luego vio al joven que frente a él estaba.Se había interpuesto entre ambos y de pronto recordó algo.Una macabra sonrisa recorrió su rostro y el otro profesor sintió miedo por su vida.
--¿Miyagi?¿El hace esos bentos que tu siempre tiras a la basura, ne?—preguntó el castaño mayor.
You abrio los ojos como platos.
“¡Rayos”¿Estará mal desear un ataque talibán ahora?”se preguntó.
--¿QUE?Pero si tu dijiste que… que estaba mejorando… que te gustaban y que… --dijo el menor mientras sus ojos se llenaban de lágrimas y luego salió corriendo.
--¡Eso fue muy cruel!—le recrimino You a Hiroki antes de salir tras el.
--¡Hiro san!¿No crees que se te paso la mano?—preguntó Nowaki y el castaño lo miro.
--¡Definitivamente!—dijo Usami interviniendo.
--¡Shinobu parecía muy triste!—dijo Misaki algo preocupado.
--¡Esta bien!Me disculparé.¡Pero solo con el chico!—aclaró Kamijou antes de salir acompañado del tifón.
--¿En que estábamos?—preguntó Akihiko rodeando la cintura de su compañero castaño por detrás haciéndole subir los colores. De inmediato lo introdujo en el privado de antes, metiéndose él después.
--Yo quería pedirte disculpas—dijo algo incómodo el demonio Kamijou al joven rubio.
--¡Esta bien!—dijo este alegrando y aliviando al profesor castaño.—You ya me lo explicó—agregó.
--¿El que?—preguntó confundido Hiroki.
--Que usted parece ser un ser antisocial con complejo de villano pero que en realidad solo es un idiota que no sabe ser cortés—explicó calmadamente Takatsuki.
--¡Ah no!¡YO LO MATO!—grito Kamijou.Miyagi agarró al joven y salio volando de ahí con la poca suerte de chocar aparatosamente contra unas personas que pasaban.Se acariciaba la cabeza adolorida mientras el otro profesor se aproximaba hecho una tromba cuando una voz de mujer le preguntó--¿Qué haces aquí?—el y Shinobu la miraron.
--¿Tu que haces?—preguntó el mas shockeado.
--¡No me digas que tu también vas a Inglaterra!—dijo Takatsuki con cara de “Oh, por favor.Otro mas no”.
--Pues no. Vamos a Estados Unidos—dijo la mujer.
--¿No haces escala en Londres?—preguntó el rubio.
--¡No!¡Oye!¿Por que ambos de pronto lucen tan felices?—preguntó ella.
--¿Tu no eres la ex mujer de Miyagi?—pregunto de pronto Hiroki que se detuvo al ver que hablaban con esa mujer que le resultaba familiar.
--Si—respondió ella.
--Entonces eres…--dijo el castaño.
--Mi hermana—terminó Shinobu.
--¡Esto es de no acabar!—grito Kamijou consternado.Nowaki a su lado sonrio resignado.
Cosas raras pasan en los lugares menos imaginados.
FIN