Capitulo 4 El rol entraría en funcionamiento ese mismo día, y le tocaba a Aioros, se despidió de todos, tomo de la mano a Pairos y procedió a bajar las escaleras rumbo a su templo, como niño con juguete nuevo, y en realidad así parecía, el arquero no aparentaba más de 18 años que fue con la edad que lo revivió la diosa, cuando entraron a sagitario Aioros comenzó a llamar a su aprendiz,
-- Seiya, Seiya,¿ donde estas? traje visitas
-- al adentrarse más al templo llegaron hasta la sala y en la mesita del centro el santo de sagitario encontró una nota. –Maestro: me fui con los demás caballeros de bronce al rio regresamos en la tarde. Pdta. Los demás ya dejaron avisados a sus maestros, nos vemos. –desilusionado Aioros se dejo caer en uno de los sillones, --¿caballero?
-- Se atrevió a preguntar Pairos
,-- no es nada Pai, es solo que quería preséntate a mi aprendiz,
-- Pai, Pai, ¿Por qué me llamas Pai, que acaso tengo cara de pastel?
—no pero es más corto y se oye dulce, --en el rio un distraído Ikki, no podía concentrarse en los juegos de su hermano y compañeros de armas, era la quita vez que le golpeaba la pelota en la cara,
--¿Qué te pasa hermano?, estas muy distraído desde esta mañana,
-- nada Shun no te preocupes,--trataba de no pensar en el castaño que seguramente ya habría abandonado el santuario,
--Ikki, estas más raro de lo normal, hasta has suspirado varias veces sin motivo alguno,
--comento Seiya,
-- y eso que era el mas despistado de los cinco,
--¿tan evidente soy?,
--¡si hermano!, ya dinos que te pasa
—Bueno,-- contesto algo dudoso Ikki,-- pero lo que les cuente no tienen que divulgarlo ni contárselo a nadie más, ¿entendido?
—y todos asintieron con la cabeza,
-- mientras Ikki contaba con lujo de detalles el incidente de la noche anterior en el templo de Aries, un muy aburrido caballero de oro suspiraba en la sala de su casa,
-- ¿Por qué no salimos a caminar?,
-- no, -- fue la escueta respuesta del que estaba en el sillón
—¿y si vamos al rio a reunirnos con tu discípulo y sus amigos?, al fin que es buena hora , apenas es mediodía,
-- esto intereso al dorado y le puso de buen humor,
--pero no podemos aparecernos así sin más tal vez los incomodaremos
—por esa parte no hay problema, solo les explicas que me estás dando un paseo por el santuario y disimuladamente nos quedamos con ellos, además ya tengo preparado el refrigerio,
-- ¡pues en marcha!—y salieron del templo con rumbo al rio,
--Ikki había terminado de contar lo sucedido y sus compañeros no daban crédito
—en serio fénix, ¿en verdad quieres que te creamos que te enamoraste de ese chico en dos vistas que le diste?, si que el calor por fin frio tu cerebro,
--recibiendo el cisne un codazo en el estomago por parte de Shun
--piensa lo que quieras Hyoga, pero Ikki tiene todo el derecho de enamorarse de quien le plazca
-- defendió Shyru—Seiya iba a comentar algo, cuando oyeron voces y risas acercarse hacia ellos,
--¡ no te lo puedo creer, tan serio que se veía mi hermano!, ¡que bajo hemos caído!,
-- hablaba con falso pesar el de sagitario y una mueca boba en el rostro que hizo que su acompañante no pudiera contener sus carcajadas ,--¡¡jajajajajajajajajajaja!!
¿Y si lo hubieras visto como yo?, la cara roja, rojísima como si le hubieran arrojado pintura al rostro.
--Tubo que jalar aire para controlar su risa y limpiarse las lágrimas con el dorso de su mano,
—para cuando se dieron cuenta cinco pares de ojos los miraba con cierta sorpresa e incredulidad
-- hola muchachos, ¿Qué tal esta el agua del rio?
—Muy fresca maestro—se apresuro a contestar el Pegaso,-- ¿Qué no estabas en reunión?—sí, pero termino más rápido de lo que pensé, chicos, les presento a Pairos, el será mi escudero todos los viernes
--mucho gusto Pairos-- saludo Shyru,-- el rubio se llama Hyoga, el de pelo verde es Shun y el castaño a su lado es Seiya y por ultimo
—si ya sé quién es el peli azul-- ¡si?—pregunto Seiya
—si, es el otro degenerado que te venia contando, sin dejar de ver acusadoramente al fénix,
-- no cabe duda que son tal para cual, alumno y maestro—comento el arquero
-- ¡si, como a ti no te vieron en cueros!
—y rompió a reír de nuevo el de sagitario junto con el escudero, mientras Ikki trataba de emprender la graciosa huida, siendo atajado del brazo por su hermano,
-- si desapareces ahora quedaras en evidencia,--susurro Shun
—además mira lo esta tomando de una manera muy relajada,-- Ikki se relajo y se atrevió a mirar a Pairos que ya platicaba muy quitado de la pena con Seiya y Shyru
—Si , así como les dijo Aioros atenderé a un templo por día,--se quedo sorprendido Seiya—te vas a cansar mucho, imagina cuanto tardaras en atenderlos a todos,
-- no, no te confundas Seiya—intervino Aioros—déjame explicarte—y así el caballero de Sagitario procedió a contarles lo que había pasado en la reunión—….y como ven chicos mejor compartir que pelear, ¿no les parece?
—eso si maestro, pero me parece raro que el mío no haya peleado porque Pairos por lo menos nos ayudara un día, siempre se anda quejando que nadie le ayuda a mantener el templo en buen estado,
-- comento Shun pensativo,
--y el mío ¿que tendrá en la cabeza? Siempre se anda quejando que necesita alguien que sepa cocinar, tender las camas y lavar la ropa, porque para eso el y yo somos un desastre y nadie quiere trabajar en acuario porque parece que estamos siempre en Siberia—comento Hyoga con pesar
—Ikki no dijo nada, ellos tenían dos escuderos y no necesitaban ayuda con las labores del templo, pero no se entristecía, podría ver a Pairos cuando le tocara atender el templo de cáncer y visitar a sus muy queridos compañeros Shyru y Seiya cuando el castaño le tocara atender los templos de libra y sagitario,
--por su parte estos últimos estaban felices tendrían al castaño un día a la semana
--pasaron la tarde refrescándose en el rio, el refrigerio desapareció como por arte de magia, ¿Cuál?, ninguna si el Pegaso ya había asaltado la cesta y devorado la mayoría de los sándwiches, si no fuera por Shun que lo descubrió a tiempo los hubiera dejado sin nada, Regresaban al santuario y uno a uno de los chicos se despedía cuando llegaban al templo donde les toca quedarse con su maestro, el primero en despedirse fue Ikki, que tratando de aprovechar el pequeño momento en que Pairos se retraso del grupo admirando una pintura, se acerco por detrás le abrazó y le planto un beso en la mejilla, prácticamente en la comisura de los labios, y antes de soltarlo le susurro al oído,
-- me gustas y ten por seguro que empezare a cortejarte,
-- y sin mas lo soltó para que alcanzara a el grupo antes de que notaran su ausencia, ya habían llegado a sagitario y Hyoga se despidió de ellos y continuo su acenso rumbo a acuario, No hubo cena Pairos arreglo las habitaciones de Seiya y Aioros preparo las cosas para el desayuno, al día siguiente le tocaba atender a capricornio, y debía estar descansado para ello, trato de no pensar en lo sucedido con el fénix y se fue a dormir.