Capitulo 5 Muy, muy temprano en la mañana, Pairos ya se había levantado, bañado y en ese momento estaba en la cocina preparando el desayuno, eran aproximadamente las 6 de la mañana, y el olor iba expandiéndose poco a poco por todo el templo y fuera de el llegando hasta los templos de escorpión y capricornio, Shura ya se había levantado y cuando le llego el olor proveniente del templo que estaba más abajo, recordó que ese día le tocaba a la pequeña cosa, como le decía despectivamente Afrodita, pero que a el se le hacia un apodo de lo más tierno, lo atendería todo ese día y no desperdiciaría ni un solo minuto de el, ya arreglado bajo al templo de Aioros a recoger a su escudero por ese día
--buenos días Shura
-- saludaron Seiya, Aioros y Pairos a coro
—buenos días contesto este
—a que debo el honor de tu visita tan temprano, todavía ni siquiera son las 7 y tú te apareces por lo regular como a las 9
--no es obvio vengo a almorzar
-- o más bien quieres aprovechar que te toca Pairos como escudero
—comento Seiya divertido, mientras se le coloreaban las mejillas a Shura
—iba a replicarle a Pegaso cuando se escucho una voz saludando e ingresando a la cocina
—buenos días a todos, saludo Milo
--¡vaya, que sorpresa! Ahora a todos los caballeros se nos ha dado levantarnos temprano,
-- comento con falsa molestia Aioros,
--Milo era un granuja de primera, pero también muy divertido y un seductor empedernido, había ido a sagitario por dos cosas, la primera por el delicioso olor que emanaba del templo del arquero, y la segunda para ver con sus propios ojos a la pequeña cosa detestable que le habían dicho Camus, Afrodita, Shaka, y aun sin creérselo el propio Aldebarán que nunca hablaba mal de nadie, porque si no tenía que decir algo bueno de alguien, simplemente no decía nada, le habían dicho que era insoportable el castaño que estaba sirviéndole una gran taza de café junto con unas tostadas, a Shura ya le había servido unos huevos estrellados con tocino y unos panecillos de arándanos y una taza de café tanto o más grande que la de Milo, el desayuno transcurría amenamente con los 4 caballeros que estaban platicando cuando ingresaron a la cocina otros 3,
--buenos días—saludaron los recién llegados,
-- buenos días contesto Pairos,
-- si se hubieran tardado más, no hubieran alcanzado desayuno,
-- poniendo frente a ellos tres platos con huevos revueltos una copa con frutas y yogurt y tres vasos enormes de jugo de naranja y zanahoria, los recién llegados estaban fascinados con el desayuno frente a ellos se veía, y sobre todo olía delicioso, inclusive Ikki que tenía dos escuderos en el templo de leo no le habían servido un desayuno como el que ahora estaba disfrutando, solo en un lugar habían comido así de delicioso y era en la mansión Kido
,--¿y que los trae por aquí?—pregunto Seiya
—no es obvio—contesto Shun—dando un gran trago a su jugo, mientras Ikki y Shyru devoraban sus platos, pues tenían muy poco tiempo antes de que sus maestros notaran que no estaban en sus templos, con Shyru no había tanto problema, tampoco con Ikki, Aioria sabia del interés de este por Pairos, el del problema era en ese momento Shun, y muy pronto Hyoga que llego la final de todos,
-- ¿Qué paso pato frio, no pudiste escaparte de tu maestro? Cuestiono el ave de fuego —¿Como si fuera tan fácil?—contesto este
—lo siento Hyoga pensé que ya no vendrías, nada mas quedo esto,
-- le acerco tres tostadas mermelada dos lonjas de jamón y verduras al vapor y un gran vaso de jugo de zanahoria
—Hyoga agradeció con una gran sonrisa—es más de lo que podría pedir, gracias Pairos,
-- y los caballeros de oro solo escuchaban la conversación de los más pequeños, al terminar todos ayudaron a recoger la cocina y antes de que capricornio saliera con Pairos rumbo a su templo Seiya se aventuro a preguntar
-- ¿podemos ir a la hora de comer a tu templo? A lo que Shura solo asintió con la cabeza y los cinco de bronce junto con los dorados bajaron emocionados al coliseo a entrenar, el dueño de capricornio puso al tanto a su nuevo escudero y este procedió a poner en orden el templo, tubo que apresurarse mucho para tener la comida lista ya que en lugar de preparar comida para una sola persona, tendría que hacerlo para aproximadamente unas 10 u 11 comensales, se preguntaba si al caballero de capricornio le molestaría mucho si le asaltaba la alacena para preparar comida para tantas personas
—cuando llego la hora tal como lo había previsto la liebre, venían mas de los que se habían ido al entrenamiento, aparte de los que habían desayunado en sagitario se sumaban el maestro de libra y uno de los gemelos, al parecer Kanon con su novio uno de los jueces, se apresuro a servir los platos extra, la cocina de capricornio parecía el comedor de los soldados, aunque no era muy pequeña pero tampoco muy amplia, y cabían apenas, justo sin estar apretujados, como en la mañana, la comida fue amena, tranquila y relajada, todos ayudaron en la cocina, agradecieron al anfitrión y se retiraron a sus respectivos templos, mientras bajaban Minos le hizo un comentario que alcanzo a escuchar Dhoko,
-- Kanon cuando te toque semejante maravilla de cocinero ¿podrías prestármelo para impresionar a mi señor Hades con una cena así de exquisita?
-- Le pregunto suplicante con sus ojitos de borrego a medio morir, y Kanon le contesto
—veremos, recuerda que también tiene que atender a Saga el día que nos toque a nosotros. —y el de libra supo que tenía que aprovechar al máximo el día que les tocara a ellos la visita de Pairos, se sentía afortunado de no haberle hecho caso a Shion y haber obtenido un día de la semana para que este les atendiera, mientras tanto en capricornio este ayudaba a su escudero y sacar cosas de su templo que eran completamente inútiles y que el mismo no sabía porque conservaba.
Liberaron espacios, arreglaron habitaciones que Shura no recordaba que estuvieran allí, la tarde fue muy provechosa para él y su escudero, en el tirar de trebejos y cosas viejas del templo de capricornio Pairos encontró un libro antiguo que le llamo la atención, cuando terminaron, Pairos aprovecho para pedirle al de capricornio que le regalar el libro y este accedió, se prepararon para la cena, al día siguiente tendría su primer día libre en mucho, mucho tiempo, y quería despejarse y relajarse de todo y prepararse para la semana siguiente.