SOBRE KANAME.
TAMBIEN ME GUSTAN LOS SEMES POSESIVOS Y CELOSOS. COMO MI SETO. Y SASUKE.
MAS ADELANTE DARE A LOS TRES MOTIVOS PARA CELAR Y POSEER.
DE ESO NO TENGAN DUDAS.
¿De que rayos están hablando? ¿Acaso creen que soy idiota?—preguntó el Uchiha muy molesto.
No preguntes si no quieres saber—dijo el de la capucha.
¡Naruto no empeores las cosas!—le ordenó Kiryu también molesto.
El otro levanto su muñeca engrillada y el peliplateado le disparó a esta, antes de que Sasuke pudiera reaccionar, destrozándola.
Puedes intentar esconderte Naruto pero sabes que te seguiré al fin del mundo si es necesario—dijo el pelinegro.
El otro ladeó su cabeza.
Eso sonó muy romántico Sasuke—dijo el de dorada cabellera.
Molesto e incómodo por la mirada amatista del tercero y por su propia sandez el de ojos negros advirtió a su ex compañero— ¡No juegues con tu suerte, dobe!—
El de la capucha sonrio tristemente bajo su máscara. De pronto recordó aquellos tiempos en que eran inocentes de tanto mal y aprendían juntos las artes ninjas. Su mirada se tornó triste y su pecho se oprimió como tantas veces al recordar que esa época jamás retornaría.
¡Fue bueno verte Sasuke!—dijo el de ojos rojos por el deseo de sangre que pulsaba en sus entrañas con un evidente tono amargo que ambos escuchas supieron identificar. –Vuelve con los que vinieron contigo y vayan a Konoha de una vez. ¡Yo no volveré! Y no es porque no quiera. Si lo hago es para proteger a todos—añadió Uzumaki. Kiryu le miro con un nuevo respeto naciendo en su interior.
Siempre con tu cantaleta de proteger a los demás. Pues eso no me importa. ¡Te llevaré a Konoha te guste o no! ¡Es la misión que me han dado y la cumpliré!—dijo el otro con su semblante serio e inexpresivo.
Había olvidado con quien hablaba—dijo Naruto. --¿Nunca te han importado los sentimientos de los demás, no es cierto?—preguntó luego con un tono herido que no pasó desapercibido para ambos.
No me importan tus sentimentalismos inútiles y tus ganas de sacrificarte por los demás. Eres demasiado bakka como para que alguien te tome en serio y mas cuando te pones con estupideces como las de ahora—dijo refiriéndose a lo de ser vampiro pero el otro entendió que hablaba de sacrificarse por Konoha.
Tu nunca lo entenderías Sasuke porque estas demasiado lleno de odio para entender algo más—dijo el rubio frustrado. El pelinegro lo miró con ganas de matarle. --¡Vamonos Kiryu!—dijo el de ojos azules. Y se fueron. Y como Sasuke prometió lo siguió.
Seiren llegó con su amo como siempre silenciosamente. Kaname estaba reclinado en el sillón de su despacho.
¿Averiguaste algo sobre ese sujeto?—preguntó refiriéndose al encapuchado que conociera esa noche y al que mandó a vigilar por la peliazul. Estaba convencido de que era un sangre pura ya que solo uno de su especie podría tener tal poder. En la pelea sintió varios cambios en su aura que solo podía augurar un gran poder multiforme. Quería saber quien era y porque defendía a los de nivel E en esa pelea en que debiera estar de su lado. No lo admitiría jamás pero se encontraba fascinado, intrigado y algo temeroso de que un poder que rivalizaba con el suyo se hiciera presente y de que su enemigo no tuviera un rostro.
Si, mi señor. Después de que dejó la pelea lo seguí como me ordenaste. Fue atacado por un humano y apresado. Al parecer dicho humano quería llevárselo pero Kiryu Zero le rescató. Luego ambos se fueron a una casa donde estaban los demás niveles E y el humano les siguió. Entró pero no fue atacado. Les deje para darle la información. ¿Vuelvo?—informo Seiren.
Lo que le decía descolocó un poco al sangre pura ya que nunca hubiera pensado que el peliplateado defendiera a alguien como él. ¿Qué estaba sucediendo en verdad?
Si. Pero no irás sola. Tengo cosas que discutir con esa gente—dijo casi con desprecio el castaño tocándose la frente hace un rato herida pero ya sanada. Alerta a todos menos a Yuki. Iremos a su guarida—dijo Kuran.
¿Por qué yo no puedo ir?—preguntó Yuki abriendo la puerta. Últimamente se había vuelto tan sigilosa como su guardaespaldas pero era mucho más curiosa.
No quiero que te les enfrentes de nuevo. Ya ves que yo salí herido y me preocupa que te hieran—dijo el de ojos borgoña.
Yo iré—dijo esta decidida. –Onii san quiero hablar con Zero. No me gusta lo que hiciste con la hermana de Wheeler pero lo acepté porque dijiste que sería una forma de pacificar las cosas y así poder hablar con él. Ahora deja que yo lo intente. Sé que podré. ¡Déjame por favor!—pidió la castaña.
Yuki estaba llena de buenas intenciones y aunque su ingenuidad era peligrosa el castaño decidió aceptar su idea y asintió. La alegría que vio en la cara de la menor y su abrazo lleno de cariño hicieron que se sintiera conforme con darle el gusto. Pero no por eso bajaría la guardia. Estaba dispuesto a hablar pero llegado el caso de enfrentarse… no tendría misericordia.
La peliazul miraba la escena y evaluaba la ingenuidad de la castaña y lo torcido que podía ser su jefe pues a él no se le había ocurrido raptar a una persona nada más para conversar con el asesino de su mentor. Fue a cumplir el encargo de su amo.
¡Seiren!—la llamó Kuran. Ella volteó a verlo. –Si puedes evita que Hanabusa se entere de nuestra expedición. Contemplando su comportamiento de hoy, solo lo echaría todo a perder—añadió. La peliazul asintió mudamente.
Al rato ella volvió y le dijo—Todos excepto Hanabusa e Ichijou han sido informados señor. No encuentro he podido encontrar a su secretario--.
No importa. Eso después lo averiguaré por el mismo—dijo algo intrigado el castaño pero también confiado en el criterio Takuma.