¡Sangre virgen!—respondió el ojos violetas sorprendiendo a todos y avergonzando a algunos. Kaiba miró la cara sonrojada del rubio—¡A eso se refería con su presa! Para ellos esa sangre es la más sabrosa y poderosa. Difícil de encontrar en personas de cierta edad y mucho más difícil de mantener así. ¡Es su presa y la defenderá con uñas y dientes! ¡Incluso de los de su propia raza!—dijo todo eso manteniendo sus ojos en los azules y después acotó con algo de malicia—Es por eso que pregunté si conversar era todo lo que hacían—
Seto se sintió entre las cuerdas. Ese idiota había planeado esa emboscada todo el tiempo y él no tenía forma de ref…
¡En verdad estabamos peleando!—mintió Joseph de pronto. Todos le miraron. Parecía demasiado calmo para haber inventado todo eso de pronto. El castaño fue el que quedó más sorprendido, no conocía esa nueva capacidad del otro—Kaiba y yo siempre nos hemos llevado mal y no es raro que llegáramos a los golpes. No entiendo porque ahora…--
El vampiro pudo haber sentido que su vida corría peligro—dijo el expèrto.
Pero me he peleado antes con Kaiba y…--explicó Wheeler.
Fue antes de los 18. ¿No?—preguntó Zero. El ojos mieles asintió—Eso fue porque hasta la mayoría de edad usted no fue su presa. Para que la sangre sea de verdad poderosa necesita ciertos parámetros como el añejamiento y el asentarse. La sangre de un adulto virgen es como un afrodisíaco para esos tipos—les explicó.
¿Insinúa que ese tipo quiere…?—preguntó entre molesto y preocupado el castaño.
Kiryuu le miro. Sus ojos eran zagaces aunque parecieran sin expresión el otro comprendió las referencias implícitas en ellos. No podía eludirlas esta vez ya que solo se había descubierto—Eventualmente ellos sucumben a quitarles lo que hace tan especial a sus presas o las matan por alimentarse en demasía. Eso es llamado frenesí de sangre. Tanto por su sabor o porque le arrebataron lo que hace tan especial su sangre, sus presas indefectiblemente mueren jóvenes como pasó con el tío del joven Wheeler—dijo a todos.
Tanto Joseph como Seto pensaron en las implicaciones de todo lo dicho por el otro.
Así que no tengo escape—dijo por lo bajo y todos sintieron su resignación. Zero reaccionó.
¡Yo no dije eso! Vine a acabar con ese tipo. Ahora que sabemos que le acecha él mismo se ha vuelto una presa. Mi presa—respondió el ojos violetas dando nuevos ánimos al otro que le miró a los ojos.
¿Una pregunta? ¿Por qué yo…?—trató de preguntar el rubio pero se vio cortado por el otro.
¿…no se acuerda de haber sido atacado?—terminó el cazador y la presa asintió—Al parecer cuando ellos encajan sus colmillos en su presa inyectan una especie de anestésico que anula las memorias a corto plazo de su víctima. Claro que eso solo lo hemos sabido después de ver un ataque y suspenderlo pues normalmente sus presas ocasionales no viven para olvidar nada—les informó.
Suenan a seres muy diferentes de los que nos hablan las leyendas—dijo el padre de Joey.
Por eso son leyendas. Parte realidad parte invento—dijo el joven sin demostrar nada con sus facciones.
Solo queda saber que es invento—dijo Seto todavía picado con él.
El ojos violetas le miró fijamente--¿Está dudando de lo que vio, lo que nos contó, tal vez?—preguntó acertando en el punto neurálgico y dejando al otro en evidencia ante todos.
Solo en su habitación el rubio tomaba un trago de un refresco mientras miraba sin ver su cuarto. Estaba recordando.
3 AÑOS ATRÁS.
Estaban ebrios. Volvían de una fogata hecha en los bosques, cercana a la universidad. Iba a dar un paso cuando el otro le tomó del brazo y lo haló hacia atrás.
¿Piensas matarte?—le preguntó Heinrich mientras él golpeaba con su cuerpo, inestable por el alcohol, el del otro y se quedaban frente a frente. Había estado a punto de caer por una pendiente.
Verde y miel se encontraron y sus labios fueron unos hacia los otros mientras las manos de Heinrich se colaron bajo la espalda de la sudadera y entonces dijo—No esto…--estaba a punto de ser besado por primera vez por un hombre y…
LA ACTUALIDAD
No recordaba nada más. Siempre pensó que por efecto de la borrachera. Cuando Heinrich no reapareció después de eso pensó que se había asustado por lo sucedido o que él lo había rechazado de alguna forma, incluso golpeado y él se había vuelto a su casa. Todo este tiempo ni siquiera estuvo seguro de si él y Heinrich… de si seguía estando intacto… Nunca pensó que podía haberle pasado algo grave y si ese tal vam…
Y entonces algo más cruzó por su mente.
Un hombre con la garganta cercenada tirado entre los arbustos.
Por años pensó que era una pesadilla.
Había despèrtado en su dormitorio con una vaga sensación de sed y hambre. Ahora pensaba que podía ser muy bien causa de…
Seto se disponía a irse de la casa cuando el tipo ese le llamó. No le agradaba y lo demostró su actitud.
Sospecho que no me agrada pero aún así deberá escucharme—le dijo Kiryuu.
¡Eres todo un genio!—le dijo el otro olvidando toda formalidad—Pero eso no me obliga para nada a escucharte—añadió mientras seguía de largo con toda intención de desdeñarle.
¿Acaso no quieres salvar a Wheeler?—preguntó Zero también olvidándola.
El CEO se volvió con una sonrisita en su rostro—Wheeler y yo no somos los mejores amigos. No sé si se ha dado cuenta. ¿Qué le hace pretender que me interesa lo que le pase?—preguntó.
La cara de piedra del otro no se conmovió—¡Dos cosas! Si no te importara te hubieras ido sin mencionar el vampiro y hacer dudar de tu cordura, veo que eres un hombre que no soporta que le refuten. La segunda es que ese vampiro te atacó. Signo de que amenazaste su alimento y eso solo pudo ser de una forma—
Wheeler ya te dijo…--dijo el ojos azules.
Un invento bastante creíble pero a menos que hubieras estado a punto de acuchillarle no es creíble que él te atacara. Además de haberlo creído en peligro real tu ya no respirarías--respondió el ojos violetas—¡Así que dime! Necesito tu ayuda para salvarlo. ¿Lo harás?—
En el caso de que acceda. ¿Qué pretendes que haga?—preguntó cauteloso Seto—No soy un asesino ni nada así—
De eso me encargaré yo llegado el momento. Tú solo deberías hacer lo más lógico. Algo que no te será difícil—respondió enigmáticamente Kiryuu.
¿Qué?—preguntó Seto harto de tanto misterio.
Deberás sacarle a Wheeler lo que lo hace tan especial—contestó el cazador.