Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

RIVALES Y OPUESTOS. por desire nemesis

[Reviews - 264]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

15 Bretes. Cómo sacar las papas del fuego.

 

…………………………….

 

 

 

Joseph se recostó en la cama. Estaba fundido y resollaba por la actividad acabada de realizar.

 

¡Déjame descansar un poco! En seguida me voy—le dijo el rubio acostumbrado como estaba a que el otro quisiera que lo vieran lo menos posible con él.

 

Echado a su lado el otro le preguntó--¿Cómo van las cosas con tu hermana?—

 

¡Terribles! Insiste en hablar con Hana pero ya lo resolveré. Ella le dirá que se va y asunto resuelto—dijo con modorra el rubio.

 

Voy a preparar la cena. ¡Moki debe estar hambriento ya! Puedes quedarte a comer si quieres. Dudo que mi padre llegue temprano hoy. Es el cumpleaños de su jefe—dijo el castaño levantándose y arreglando su atuendo.

 

Para su asombro el otro saltó de la cama y lo atajó antes de que llegara a la puerta con un semblante de alarma que le inquietó.

 

Es mejor que me vaya… pero antes… Seto antes quise decírtelo… Mokuba…--dijo el ojos mieles sin saber como seguir.

 

¿Mokuba que?—preguntó tenso el ojos azules agarrándolo de los brazos.

 

¡El lo sabe!—respondió el melado.

 

¿Sabe que?—preguntó alarmado el castaño.

 

Que soy Hana. Me lo dijo—respondió Wheeler.

 

¿Y de nosotros?—a Kaiba le preocupaba más que su hermano menor supiera de ambos.

 

No, al menos no me lo dijo pero si sospecha de cómo llegamos a lo de Hana—le contestó Joey.

 

Era malo. Lo supuso al ver los ojos azules tan fríos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Quedaban dos semanas para la graduación y desde que le dijera lo de Mokuba el castaño lo evitaba. No le hablaba y cada vez que iniciaba un acercamiento el otro fingía no darse cuenta de que lo intentaba y se iba para el lado opuesto. Joey fastidiado empezó a molestarle a tal punto que parecía que nunca hubieran estado juntos. Pero lo extraño era que incluso hasta ese punto el otro le evitaba. Si decía algo para molestarlo el otro fingía no oírlo. Esa manera de ignorarlo lo lastimaba. Lo lastimaba mucho.

 

Y fue así que en la última semana de clases se aisló de su propio grupo. Quedándose ratos en el patio mirando solo el paisaje. De pronto un día sintió una suave voz que le dijo mientras miraba sentado en el suelo con las piernas recogidas y abrazadas--¡Joey! No puedo entender por lo que pasas pero sabes que puedes contar con nosotros… ¿No es así?—

 

Era su siempre fiel amigo Yugi con cara de preocupación. Joey se compadeció de él. Era tan egoísta en su dolor que no pensó que los lastimara a ellos. Los había ignorado.

 

¡Oye! ¡A ti quería encontrarte—dijo de pronto un tipo que venía con otros tres por el patio. Era de otro tercero y estaba mal encarado--¡Tú tienes la culpa de que no ganáramos las regionales!—le acusó después.

 

En la semana anterior habían tenido el partido final de las regionales y por su mal estar no pudo concentrarse en todo el partido. Llegados a los cinco minutos finales y con un tanto menos en el marcador tuvo la oportunidad de tirar al arco estando solo frente al arquero pero tiró muy mal  aunque estaba en el área. Fue algo de no creer. Todo el colegio estaba estupefacto por todo error por un rato se quedaron mudos y entonces uno de los contrarios sacó y entonces el arbitro tocó el final del partido.

 

Todos estaban medio enojados con él pero al parecer estos tipos estaban más que la mayoría. Buscaban roña. Joseph lo supo en cuanto vio sus malencarados rostros.

 

¡Es mejor que te vayas Yugi! ¡Acá va a correr sangre!—le advirtió a su amigo preparándose para la pelea. En cierto modo le hacía bien, pensaba, pues era un modo de sacar tanto el enojo como la angustia de su cabeza.

 

¡No Joey! Te meterás en problemas. Estamos a fin de curso—le dijo el más pequeño.

 

¡Este idiota ya está metido en líos!—exclamó el corpulento  capitán de rugby junto con dos de sus jugadores que se tomaba muy enserio los deportes.

 

¿Qué no me oíste Yugi! ¡Vete antes…!—dijo el joven de ojos mieles que se había colocado entre ellos y su amigo de forma protectora.

 

¡No! Los amigos no se abandonan—dijo muy decidido su amigo colocándose a su lado. Se miraron y se sonrieron aprestándose para la golpiza.

 

Ambos cayeron golpeados pero los bárbaros se ensañaron con la fuente de su frustración. Wheeler estaba en el suelo con un labio sangrante y esa mirada desafiante que ponía cuando se metía en una trifulca cuando se dio cuenta que estaba muy adolorido para levantarse y pelear. Esos HDP pegaban muy duro. Lo cercaron. Estaba más preocupado por Yugi que estaba lastimado de un brazo y tratando de levantarse a unos metros de él.

 

¡Idiotas!—escupió como siempre desafiante.

 

Los otros se prepararon para atizarle y el capitán fue el primero en levantar una mano pero antes de que la bajara hacia él una voz habló diciendo--¡El perro no sabe nunca escoger sus peleas!—todos miraron hacia la voz aunque Joseph ya sabía de quien se trataba. Seto caminaba hacia ellos mientras agregaba—Se mete en bretes enormes y luego no sabe como salir. Nunca imaginé que yo tendría que sacarle las papas del fuego—

 

No tienes porqué hacerlo—dijo el ojos mieles con cara de pocos amigos aunque el otro estaba intentando ayudarle. No quería más nada de él y menos su lástima—Yo puedo con esto solo—

 

A las pruebas me remito—dijo señalando al rubio—No sabe apreciarse en la manera de lo que vale—añadió intentando convencer a los atacantes de que era un pobre idiota y cuando el melado vio en sus ojos que estaban por ponerse de acuerdo con él la sangre de este hirvió.

 

¡Métete en tus asuntos Kaiba! Yo ya no tengo nada que ver contigo—le dijo, era una declaración de que nada sentía por él, que si bien el otro le había dejado ya no quedaba nada que les uniera.

 

Seto lo miró de nuevo con esa mirada fría y luego miró a los otros de la misma forma—Si desean darle una tunda estoy de acuerdo pero… ¿Están seguros de querer arruinar la última semana del año en estas estupideces?—

 

Eso le dolió a Joseph. Era como si el otro jamás hubiera sentido nada en realidad.

 

¡Como dijo él! ¡Métete en tus asuntos! Ahora vete que si no también tendrás lo tuyo—dijo el más bajo de los tres y sin prestar atención al castaño pretendió pegar al rubio y entonces su mano fue atrapada en el aire por detrás.

 

En segundos el ojos azules se había colocado atrás de él y le tomaba del brazo, volteó su cara y pudo verlo--¿Acaso tu me amenazaste?—preguntó Seto y sonó como el siseo de una serpiente enroscada.

 

El intenso azul de sus ojos causó un miedo perenne en el cercano castaño de ojos marrones que lo paralizó. Jin nunca había sentido tal miedo, era cerval, como el que siente una presa cuando al doblar se encuentra con la mirada de un tigre agazapado y aunque no puede dejar de verla sabe que algo muy malo trae con ella.

 

Para resumir en los siguientes tres minutos los tres tipos estaban out. Si hubiera sido un partido de baseball habrían cambiado de entrada.

 

Seto estaba un poco más rústico de lo que había aparecido pero nada en comparación con los demás.

 

Sonó un tímido “gracias” proveniente de Yugi.

 

¿Y tu qué? ¿No das las gracias, perro?—preguntó al ojos mieles que agachado se limpiaba las perneras de su pantalón del polvo.

 

No lo hiciste por mí sino por ti, así que no tengo nada que agradecer—respondió con voz monótona Joseph y se fue sin dirigirle la mirada.

Notas finales:

^^

mi seto orgulloso al rescate

y mi wheeler herido

amo esta pareja

ja ne

^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).