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JOSEPHINE por desire nemesis

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Joseph tenía el día libre ese día e iba a procurar divertirse. Iría a tomar un helado y tal vez visitaría a un amigo o dos. Sonrió al espejo al pensar en que haría que el viejo gruñón se enfureciera un poco por tener que seguirlo en su trayecto, le buscaría algo para que se disfrazara, una gorra de su equipo de baseball favorito descansaba en un anaquel alto de su ropero, eso y anteojos oscuros, pensó, eliminarían cualquier posibilidad de que reconocieran a su novio.

 

¡Seto kun! ¿Podéis venir por favor?—le dijo asomando la cabeza por la puerta, sabiendo que el castaño debía estar ya en su lugar de siempre, el otro quedó tan sorprendido que se lo quedó mirando--¡Que vengas!—le dijo más fuerte esta vez tirando de él.

 

Una vez estuvo en medio del estar del rubio tomó uso de sus músculos y lo miró—Si otra vez vais a poneros a hablar de vuestra…--se atajaba el ojos azules pero el otro hizo caso omiso de la advertencia sacándole importancia con la mano pues no se trataba de eso.

 

¡Vamos a salir!—le avisó el ojos mieles y el otro se puso en plan profesional.

 

¿A dónde?—preguntó Seto.

 

Adonde se me dé la real gana. Y voy a llevaros aunque sé que seréis una molestia porque sois mi guardaespaldas, así que haced el favor de bajar esos humos que tenéis porque iremos en plan de incógnitos. ¡Tomad!—le dijo Joey y alargó la gorra y el saco deportivo al otro.

 

Kaiba lo agarró todo como se agarra una rata muerta o así lo pensó Wheeler.

 

¿Qué es esto?—preguntó el ojos azules.

 

¡Andad que no va a morderos! Es simplemente una ropa para que os cambiéis que no quiero que andéis por ahí anunciando vuestro empleo y de paso quien soy yo. ¿Queréis seguirme? Pues poneros eso o no podréis—le dijo el rubio.

 

¿Quién dijo que quiero seguiros?—preguntó algo molesto el castaño porque lo trataran de tal manera.

 

¡Ay, que novio tan rudo me he buscado! ¿Acaso no queréis acompañar a vuestra bien amada novia en una cita?—dijo el melado poniéndose una mano en la cadera con esa sonrisa tan burlona suya. El otro entrecerró los ojos.

 

Si no me pagaran para hacer esto…--dijo el ojos azules furioso con su destino.

 

¡Pues no lo haríais y listo! Pero como os están pagando y doble…--dijo Joey revoleando los lentes negros que le tocaría usar al otro.

 

¡Decidme!—exclamó el más alto mientras se colocaba el saco y la gorra--¿Qué fue eso de ahí afuera?—

 

¿Huh? ¿Lo de Seto kun? Lo inventé. Ahora que somos novios formales no puedo andar llamándoos Kaiba san o ogi san por ahí—le explicó el ojos mieles--¿Es que no os gusta que os llame Seto kun, Seto kun?—preguntó risueño el otro y el castaño tuvo que volverse. Joseph había creído erróneamente que ese era el caso pero es que era otro. Porque primero había llamado la atención de Seto y ahora había descubierto que le provocaba cierto escozor, pero jamás lo diría.

 

 

 

 

 

 

 

¿Esto que es?—preguntó sorprendido Seto.

 

Pues… ¿Es que tenéis mucha imaginación o qué? Es lo que dice el cartel, un consultorio dental. ¿O es que te imaginabais que me metería en otra clase de lugar?—preguntó divertido el rubio.

 

Después de pasarse media tarde esperando en una sala de espera junto a un niño que aterrado no paraba de llorar, una cuarentona que lo miraba de cierta manera y dos viejas que chismoseaban y que llegaron a ofrecerle diseños de ropa para gatos por si tenía mascota, Seto estaba un poco hastiado del lugar y agradeció que el melado saliera por fin de la consulta.

 

¿Y bien? ¿Qué os han hecho?—preguntó el castaño algo frustrado y enojado con el otro y su tardanza pero comprendía que esa clase de consulta a veces podía demorarse por prob…

 

¡No nada! Es un tío mío y teníamos mucho de que charlar—explicó el otro tan pancho que a Seto le dieron ganas de matarlo.

 

¿Cómo? ¿Y por eso os habéis demorado hora y media allí dentro?—preguntó el furioso ojos azules.

 

Os he dicho que teníamos mucho de que hablar—dijo aparentemente tranquilo el ojos mieles.

 

Podríais haberme hecho entrar—le dijo Seto.

 

Podría pero no tenía ganas—dijo el melado—Además… ¿Qué tiene de malo que os dejara esperando en una sala de espera? ¡No sé de qué os quejáis! ¡No es como si os hubiera dejado en un polvorín del infierno!—añadió el orondo Wheeler.

 

¡Para mí si lo fue!—dijo el molesto ojos azules.

 

¡Puedes creerme!—dijo Joey volteando de pronto hacia él--¡Hay salas de espera mucho peores que esa!—

 

Kaiba se sintió mal de pronto por él, recordando por lo que pasaba su familia y a lo que de seguro se estaba refiriendo.

 

¡Sumimasen!—dijo compungido el ojos azules—Entiendo. ¿Habéis tenido noticias de ella?—

 

Los ojos antes encendidos del muchacho se apagaron como velas al viento y sin expresión—Nada ha cambiado—

 

¿De eso hablaron, no es cierto?—preguntó Seto compungido.

 

¡En verdad, no! Hablábamos de la tía y de sus fajas—dijo alegre el ojos mieles.

 

¿Solo de eso?—preguntó el custodio.

 

Si—respondió el otro dándose vuelta y caminando a pasos largos dejando al otro con un mal sabor de boca.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Eran las 20 horas cuando llegaron a un pub donde tocaba una banda de rock. Seto se sentía nervioso por el ambiente oscuro lleno de roqueros que tomaban cerveza y hablaban fuerte. La banda que tocó era una de jóvenes muy agitados que parece que colmó las expectativas de la audiencia que pidió bises a los gritos.

 

Entonces, cuando Kaiba creyó que se irían el otro se fue directo a la mesa  de la banda.

 

¡Hi!—exclamó parándose al lado de ellos.

 

¿Joey? ¿Qué rayos estáis haciendo por acá?—lo reconoció uno de pelo negro y ojos verdes y el custodio supo que eran sus conocidos y por eso fue a verlos—Hermano, creí que estabais en Rusia o algo así—

 

Cerca, se pronuncia Suiza, bastardo—dijo alegre el melado y los dos se abrazaron.

 

¿Y qué? ¿Te trajiste un turista de allí?—preguntó el pelinegro mirando al ojos azules mientras el otro terminaba de saludar a la banda con apretones de mano estilo genial.

 

¿El?—preguntó el rubio señalando a Kaiba—El es Seto san, un amigo—

 

Al ojos azules no le agradó como el amigo de Wheeler le miraba. Tenía los anteojos puestos y también la gorra por mandato del jefe.

 

El ojiverde se acercó  a la oreja del ojos mieles y le preguntó--¿Es yakuza?—

 

¿Qué?—preguntó sorprendido Joseph--¡No!—

 

Es que… ¡Miradle la pinta!—dijo el pelinegro.

 

¡Duke, no! Seto san no es un yakuza—le dijo Joey.

 

¿Un yakuza?—se sorprendió el castaño que jamás en la vida había sido confundido de semejante forma.

 

Wheeler empezó a reír con ganas y luego todos se sentaron y hablaron de conocidos en común.

 

¡Hey! ¿Sabéis que pasó con Tano kun?—preguntó el melado.

 

Por lo que sé está en la universidad. Decidió que la música no era lo suyo o más bien sus papás lo decidieron por él—dijo Duke..

 

¡Que triste! Era un buen tecladista—dijo el melado.

 

¿Qué? ¿Pensáis formar una banda nueva? Si queréis podéis volver. Siempre hay lugar para vos en la banda—afirmó el ojiesmeralda y entonces Seto se dio cuenta que el otro era parte de esa banda antes de que todo lo de Serenity le afectara.

 

No, viejo. Os agradezco pero yo me vuelvo para allá. Es solo que quería saber como estaban todos y vi que tocabais aquí—dijo el melado.

 

¡Pues es una lástima!—dijo el cantante de la banda—Tenéis mucho talento, carnal—

 

En un descuido mientras el ojos azules se levantaba de la mesa uno del grupo, pudo ver, asomando por el fondillo de su saco deportivo, la culata del arma que guardaba entre el cinturón y su espalda y señalándolo dijo--¿Véis como si es un yakuza? Solo un yakuza iría armado así—

 

Kaiba dándose cuenta que en el momento en que los demás del pub se dieran cuenta de lo que el otro decía se armaría flor de alboroto se llevó de la mano al rubio sin mediar más palabras mientras este sorprendido se dejaba llevar y luego no tuvo más remedio que irse cuando se percató de lo que estaba sucediendo.

 

Se subieron a un taxi que el ojos azules paró satisfecho de irse pronto.

 

Eso te pasa por ir armado—le regañó el cantante y el otro lo miró feo para después con los ojos señalar al taxista indicando que este lo había oído.

 

 


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