5 Rescate
¡Lost emperor! Naves enemigas están cruzando el espacio cercano a nuestros límites. Se trata de naves de carga—dijo su lugarteniente al rubio.
Este lo miró pues estaban en medio de ciertas preparaciones y en realidad el otro estaba interrumpiendo--¿Por qué me lo explicas? Sabes lo que deben hacer. ¡Derríbenlas!—ordenó con hastío.
Es que majestad, esas naves provienen de la Tierra y tal vez…--dijo el lugarteniente.
Sorprendido y esperanzado el joven emperador le agradeció calurosamente—¡Gracias Ifos! Sabes lo importante que esto es para mí. Ordena que las capturen, es muy importante obtener su carga, tal vez…--
¡Como ordene, majestad!—dijo el sumiso empleado.
Todos en la nave estaban alertados y prestos mientras el convoy enemigo surcaba la zona de circunvalación del imperio. Cercanos a ellos y escondidos la flota Landson esperaba como lo hace cualquier predador. Era en suma superior en efectivos a los del enemigo pero la fiereza de las armas enemigas.
Las órdenes del lost emperor son recuperar las cargas con el menor daño posible pero no creo que eso se pueda—dijo el capitán de la flota de los Landson.
Aterrizaron junto a los miles de sobrevivientes atiborrados en las bodegas de las naves alienígenas que se los llevaron de la Tierra. Seto solo se preocupaba de su bienestar y del de su hermano pero junto a él y su familia viajaba un grupo algo conocido. Estaban Yugi y esa chica a la que, él no había podido entender porqué, su dragón cubriera en el ataque. Además de una pareja que ella presentó como sus abuelos paternos. Seto quiso preguntarles algo pero no supo como y además decidió que era desvalorizante hacerlo en público. Durante el trayecto ocupó su mente en crear un traductor para el lenguaje que sus nuevos captores hablaban.
Bajaron en la bahía de descarga de no sabía que lugar y todos fueron rodeados por hombres amenazantes. No sabían si tomarlos por aliados o nuevos enemigos. Entonces el abuelo de Setsuna hizo algo inesperado. Se adelantó hacia uno de ellos que le miró desconforme y le apuntó con su arma pues muchos se habían puesto fuera de control por el estress atacando a sus supuestos salvadores.
¡Abuelo!—le gritó la joven tirando de él.
¡Déjame Setsu! Sé lo que debo hacer—le dijo el mayor y ante la aterrada vista de su nieta mientras su abuela la agarraba y la miraba de tal modo que le infundiera confianza él se adelantó a las fuerzas y le dijo al soldado—¡Somos Acasians! ¡Debemos hablar con el lost emperor!—
Su nieta tanto como Yugi, Seto y Moki se sorprendieron de esas palabras dichas en el lenguaje alien, que extrañamente era el que su abuelo le enseñara desde pequeña diciendo que era un dialecto de su país de origen que su familia no debía perder.
¿El lost emperor?—preguntó el soldado sorprendido.
Soy su guardián. Me fui a la Tierra hace años, sólo comuníquenselo, es muy importante—dijo el ojos mieles al soldado.
¡Abuelo! ¿Qué pasa?—preguntó la joven cuando su abuelo volvió al grupo.
Tenemos que ir donde nos llevarán—le dijo él.
Pero…--dijo ella nerviosa mirando a un soldado joven aún más nervioso que ella que había aceptado escoltarlos hasta un puesto de comunicación.
¿Quieres ver a tu padre, verdad?—preguntó el ojos mieles.
¿Papá?—se sorprendió ella al igual que el grupo que los oía. Seto y Yugi se pusieron muy alertas.
Si. No lo menciones—le susurró el viejo—Pero tu padre está en un rango superior aquí. Nosotros no somos humanos, ni tampoco él. Nuestro lugar está con…--dijo el mayor.
Si verán al perro yo iré también—dijo Seto ansioso por verlo lo que sorprendió a los Wheeler, a su propio hermano y a Yugi.
Entró uno de sus lugartenientes muy agitado--¡Majestad! Hay noticias. Su padre se ha comunicado. Está entre la carga que el enemigo transportaba—
La alegría que su corazón sintió fue inmensa y luego de la siguiente conversación, incomparable.
¿Había alguien más con él?—
Por lo que me dijeron su esposa, su hija y unas personas que insistieron en acompañarlo—
El lost emperor está muy ocupado por el momento pero pidió que le esperaran aquí—dijo uno de los empleados del palacio a los recién llegados.
¿Qué? ¿También veremos al emperador?—preguntó la joven.
Es necesario—le contestó el anciano.
El corazón de Seto dio un vuelco al ver entre los asistentes a cierto ojos azules.
Creí que veríamos primero a ese lost emperor—aludió este con algo de desdén.
Pueden irse—le dijo a su escolta el rubio.
¡Si! Lost emperor—contestó uno de sus hombres y luego volteó.
Cuando quedaron solos Joey le sonrió a Seto triunfal mientras Yugi le preguntaba--¿Tu eres…?—
El se enfocó en la joven rubia de increíbles ojos azules--¿Tú eres mi padre, no es así?—Joey la abrazó como todo padre que ha sido separado por largo tiempo de su única hija a la que se le ha obligado a ocultarla.
Lo siento—dijo con sentimiento.
No te preocupes, papá. El abuelo nos dijo que era necesario que nos ocultáramos. Que hay un peligro que…—le contó ella mientras los mencionados se miraban.
Setsuna, debes tener cuidado. El peligro en que estás es más fuerte aquí, por ello te enviamos a la Tierra. Nadie debe saber quien eres realmente—le advirtió con premura el ojos mieles justo antes de que él se presentara.