17 Ataque
De pronto aparecieronOswald y Kisue y Joseph miró a su hija a los ojos provocando que ella se sonrojara y bajara la vista, incómodo el muchacho hizo lo mismo.
¿Y a ustedes que les pasa?—tuvo la oportuna idea de preguntar el rubio.
Eso mismo quiero saber yo—dijo Tristán que se acercaba en ese momento—Llevo rato buscándolos. Ese paseo por el monte duró horas por lo que veo—
¿Paseo por el monte?—preguntó perplejo el melado dándose cuenta de lo que podía ocasionar… su hija apenas lo miró de reojo y su rubor subió de tono antes de volver a bajarlos. Entonces Wheeler estuvo seguro.
Seto no estaba particularmente interesado u orgulloso de lo que sabía que estaba pasando, mientras Tris se encontraba algo consternado por las miradas entre padre e hija, algo se estaba perdiendo, se dio cuenta.
Entonces todo el complejo subterráneo retumbó. Todos se quedaron quietos observando mientras pequeñas piedrecitas caían del techo y los muros de tierra.
¿Qué está sucediendo?—se preguntó Kaiba.
A cien metros sobre la superficie uno de los pilotos informaba por radio mientras observaba las columnas de humo elevarse—Eliminado el primer objetivo. Puestos de observación inútiles. Procedemos a establecernos sobre el territorio para refuerzo. Naves de tropas pueden proceder a la descarga—
Copiado. Procediendo a descarga de tropas. Fase dos iniciada—respondieron mientras el grupo de cazadores del aire se dedicaba a rondar y las naves de transporte aterrizaban a metros de la entrada.
¡Nos están atacando!—gritó un hombre que venía de la entrada.
¡No digas!—le contestó Seto molesto por lo obvio que eso resultaba.
Son cargas Mirage—exclamó Oswald—Deben haber reducido los puestos de observación para dejarnos ciegos, están planeando entrar—
Kisue, tú y los demás vayan por los túneles de escape—le dijo su padre que ya estaba familiarizado con los planes de evacuación para esos momentos.
¡Pero papá…!—la chica no quería irse sin él.
¡Yo iré tras ustedes! ¡Vayan! Nosotros protegeremos el escape y luego iremos—le contestó el mayor y ella accedió con un nudo en la garganta--¡Oswald ve con ellos! ¡Protege a Kisue!—el otro asintió antes de seguirla.
El castaño y Joseph se miraron antes de proceder con los planes de protección. La situación era mala y lo sabían. Si el enemigo entraba, pero solo podían retrasarlo para permitir que los no combatientes escaparan.
Uno de los hombres abrió la puerta que tapaba la entrada del túnel de escape e intentó entrar pero se encontró con un hombre en traje de combate que le apuntaba directamente con un arma larga, estaban agazapados en el túnel esperando que lo abrieron. Las personas que estaban detrás de este, en las que se encontraban Kisue, Oswald, Serenity , Setsuna y su hijo no se dieron cuenta de lo que pasaba hasta que vieron como mientras el hombre, que no había dado la señal de avanzar, retrocedía un grupo de soldados avanzaba.
Sorprendida la castaña vio como una familiar figura salía del túnel y les decía--¿A dónde pensaban ir?—
Joey fue a recoger una palanca que necesitaba para lo que planeaba hacer a un cuarto a la vuelta del pasillo mientras Seto daba órdenes a uno de sus hombres cuando ambos oyeron a una voz que decía--¡Vaya, mira a quien me encuentro aquí!—
Wheeler se paralizó por un segundo. Esa voz… no podía ser. Oteó con cuidado y vio donde estaba el ojos azules parado para ver a un grupo de soldados rodeando al castaño y compañía y luego la cara que esperaba que no apareciera.
Gideon.
¿Qué haces tú aquí?—preguntó el ex CEO.
¡Que atrevido! Después de todo hay cosas que me pertenecen en este lugar. ¿No es así?—contestó el pelinegro y es cuando el rubio pudo ver a su hija y a todos los demás que eran conducidos a la nave central del complejo donde Seto estaba. Joseph veía en primer plano a Gideon y Kaiba, luego a los soldados a los lados y más atrás a la gente.
Tenía pocos recursos pero debía intentarlo.