Hermione había visto al grupo de chicos abandonar la fiesta, unos primeros luego los otros, presentía que planeaban algo, Ron no había querido decirle donde iban, pero ella estaba segura de que su novio no andaba en nada bueno, buscó a Ginny para que la acompañara a buscar a los chicos, pero ella estaba de lo más entretenida con sus amigas y no quería dejar la fiesta, Hermione le dijo que su novio y su hermano habían desaparecido desde hacia rato, esto puso a la chica en alerta, pensó que quizá Blaise estaba con alguna chica, si eso era así, sería capaz de matarlo y también a su hermano por permitir que la engañaran.
Las dos chicas salieron del gran salón y se fueron por iniciativa de Hermione hacia la torre de Astronomía, sabía que era el lugar de reunión de todo el grupo cuando estaba en alguna de las suyas.
Cuando llegaron a la sala en cuestión ambas chicas quedaron paralizadas, todos los chicos estaban en el suelo, en un primer momento se asustaron mucho, pero enseguida comprendieron que todos estaban borrachos a más no poder; lo que sí las asustó de verdad fue mirar hacia afuera, Harry estaba sentado en una cornisa bastante alejado de la ventana, las chicas se aterraron al comprender que cualquier movimiento en falso lo haría caer, Ginny reaccionó enseguida, le dijo a Hermione que iría por los padres de Harry y salió a toda carrera escaleras abajo.
Ginny en cuanto llegó a las puertas del Gran Salón buscó en medio de la multitud a los dos profesores, tardó bastante rato pues el lugar estaba abarrotado, pero finalmente los encontró junto al profesor de Pociones charlando animadamente, sin ningún preámbulo les dijo lo que ocurría, ambos palidecieron de golpe y salieron del salón con toda la rapidez que les fue posible, Ginny se fue tras ellos, mientras que el Profesor de Pociones buscó a alguien en medio de la multitud y cuando lo encontró se dirigió hacia él con paso decidido, Lucius se volvió para mirar al profesor que le hablaba, éste apartándolo un poco del grupo con el que estaba, le habló por lo bajo, al oírlo Lucius abrió los ojos espantado, su rostro tomó un tinte algo rosado y junto al profesor Snape también salió a toda prisa del gran salón.
Cuando Lucius llegó a la pequeña sala de la torre, reconoció a varios de los chicos, eran los que estaban con Harry cuando él había ido a saludarlos, todos estaban sentados en el suelo del pequeño pasillo, el estado de ebriedad era más que evidente, entró enseguida y ahí encontró a Sirius y Remus asomados con medio cuerpo fuera de la ventana
- Qué está sucediendo - preguntó Lucius temeroso
- Será mejor que te vayas puedes empeorar las cosas - dijo Sirius tratando de hacer pasar su voz hacia el interior de la habitación
- No, dónde está Harry - preguntó Lucius
Esta vez fue Remus quien dejó de asomar su cuerpo fuera de la ventana para responderle a Lucius
- Harry está sentado en la cornisa cualquier movimiento en falso y va a caer, está completamente ebrio -
Lucius abrió los ojos de espanto y miedo
- Y por qué no lo han bajado aún - dijo Lucius
- Te esperábamos a ti para que nos ayudaras - dijo Sirius con tono mordaz
- Black no es momento para tus idioteces - dijo Lucius molesto - qué clase de magos son que aún no han bajado a Harry de ahí, ni siquiera pueden realizar un simple hechizo levitador
- Será mejor que te calles Malfoy o no respondo - dijo Sirius - Remus ve tú allá abajo para asegurarte que Harry llegué bien al suelo
- No, iré yo - dijo Lucius
- No te metas en esto... Harry no es tu asunto - dijo Sirius
- Harry es mi asunto sobretodo si no está en sus cinco sentidos -
- Ya basta no es el momento para esta discusión... señor Malfoy venga conmigo - dijo Remus
Sirius miró furioso a Remus por darle parte a Lucius en aquel asunto, pero no dijo nada, lo más importante en ese momento era bajar a Harry de esa ventana sin que sufriera ningún daño.
Lucius y Remus llegaron finalmente abajo y corrieron a través de los jardines para ubicarse bajo la ventana desde la que colgaba Harry, Remus sacó su varita y con ella mandó una señal de luces rojas, era el aviso para Sirius, se quedaron mirando hacia arriba y pronto vieron un cuerpo que flotaba en el aire bajando hacia ellos, en cuanto el cuerpo de Harry tocó el suelo ambos se acercaron rápidamente.
- Harry... mi amor ¿estás bien? - dijo Lucius tomando el cuerpo del chico
- No puedo creerlo está completamente borracho - dijo Remus
- Creía que Harry sólo tomaba jugo de calabaza - dijo Lucius acariciando la mejilla de Harry
- Yo también lo creía - dijo Remus
En ese momento llegaban Sirius y Snape junto a ellos
- Será mejor que dejes a Harry - dijo Sirius amenazador
- No... no lo haré... sabes muy bien que yo tengo todos los derechos Black - dijo Lucius
- No lo repetiré otra vez - dijo Sirius
- Sirius no es el momento debemos llevar a Harry a la enfermería - dijo Remus
- No creo que sea buena idea la enfermería hay mucha gente por ahí siempre... si alguien se entera que Harry se emborrachó el día de su graduación... aparecerá en la primera plana del Profeta mañana - dijo Snape
- Dónde lo llevamos entonces - preguntó Remus
- A mi habitación en las mazmorras... nadie va por ahí -
- Sí es buena idea - dijo Remus
- Yo lo llevaré - dijo Lucius tomando el cuerpo de Harry entre sus brazos
- Te dije que lo dejaras - dijo Sirius
- Sirius... no lo tomes a mal, pero Lucius es quien tiene derecho estando Harry así... lo sabes - dijo Snape con tono conciliador
Sirius miró con odio a Lucius, pero se apartó para dejarlo pasar, mientras Lucius cargaba a Harry entre sus brazos no daba más de la alegría, mientras el chico descansaba la cabeza en su hombro aunque fuese en esas circunstancias podía tener a Harry entre sus brazos, eso era más de lo que se habría atrevido a soñar.
Finalmente llegaron a las habitaciones del profesor de Pociones, entraron a una sala amplia donde había una gran chimenea que el profesor encendió en un solo movimiento de varita, luego indicó a Lucius donde estaba la puerta de la habitación, Lucius entró con Harry y luego la puerta se cerró de golpe.
Sirius y Remus se miraron, el más preocupado era Sirius
- Creo que deberías ir... Harry no debe estar a solas con él, mucho menos estando así de borracho –
- Sirius no puedo entrar lo sabes... por más que nos pese Lucius es su esposo, tiene derecho a estar con él –
- Derecho... qué crees que dirá Harry cuando sepa que lo dejamos solo con él –
Lucius tras cerrarse la puerta de la habitación depositó el cuerpo de Harry con mucho cuidado en la cama, se quedó mirándolo por un momento, ahí a unos escasos centímetros de él estaba el objeto de su deseo y pasión, su amor, lentamente se fue acercando al chico que dormía profundamente, el jamás se había acercado a alguien que oliera a alcohol, era una regla de conducta, su naturaleza refinad no lo soportaba, pero ahora era diferente, era "su Harry", el que estaba borracho, no era cualquiera, sino el amor de su vida y no le importaba, no pudo evitar sonreír, hacia sólo unas horas había visto a Harry beber jugo de calabaza, esto le había divertido mucho, el Lucius Malfoy respetado, admirado y por que no decirlo también temido por la comunidad mágica estaba enamorado de un chico que bebía jugo de calabaza y que disfrutaba mucho haciéndolo.