Capitulo 2.- Recuerdos de un Ángel
El Ángel rubio, oculto al notar que un carruaje salía de la mansión y se alejaba asta desaparecer en las penumbras de la noche, Sin pensarlo mas, trepo por el muro para ingresar en la mansión.
-El Ángel de las presentes navidades debe estar arriba -se dijo y como si de un ladrón se trataba entro en la casa.
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La mujer pelinegra se encontraba en la habitación del rubio atendiéndolo.
-Mi pobre pequeño -dijo la pelinegra mientras acariciaba la mejilla del durmiente.
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Naruto se encontraba sumergido en un sueño profundo, se veía a si mismo en una tienda de campaña, se encontraba sentado junto a otro dos hombres mas, uno de piel oscura que aparentaba no tener mas de 30 años y el otro de piel blanca, de edad avanzada, vestidos con elegantes ropajes y hermosas coronas con incrustaciones de diferentes y preciosas joyas.
-Pronto llegaremos a Jerusalén -hablo el mayor de los tres.
-Si no estoy mal informado, el rey de ese lugar podría decirnos donde se encuentra el salvador -se escucho decir a si mismo.
-He escuchado que es un ser despiadado -hablo el mas joven de los tres (el de piel oscura)
-Yo también lo he escuchado -dijo el segundo mas joven (Naruto) -Pero no tenemos otra opción.
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Deidara abrió un poco la puerta, lo suficiente como para ver en el interior pero no lo suficiente para ser visto.
-Es el... -dijo al ver al rubio dormido en la cama.
El Ángel de la guarda entro sigilosamente a la habitación.
-Ángel de las presentes Navidades -lo llamo Deidara en un susurro.
-¿Quién es usted? -escucho de labios de la pelinegra.
-Tranquila... -le dijo -No he venido a lastimarlos.
La mujer le miro sorprendida al percatarse del aura que rodeaba al joven, revelando su identidad angelical, se dejo caer de rodillas en shock.
-Eres un Ángel... -dijo tapándose la boca con ambas manos y con lagrimas en los ojos, que se encontraban y con lagrimas en los ojos que se encontraban abiertos de par en par.
-Puedes ver a través de este disfraz -no lo preguntaba lo afirmaba.
-¿Q-que hace aquí ángel?
-Vine por mi hermano -dijo mirando al dormido de reojo.
-¿Naruto? ¿Un Ángel? -el Ángel de la guarda asintió lentamente -P-pe-pero...
-El es el Ángel de las presentes Navidades fue enviado a la tierra para recordarles a los humanos el porque nuestro señor vino, vivió y murió por los humanos.
La pelinegra estaba sin habla y con los ojos llenos de lagrimas que amenazaban con salir, el ángel se acerco a ella y le acaricio la mejilla.
-Shizune... Inocente y pura... -comenzó a decir -Los Ángeles te debemos mucho... Haz cuidado de nuestro hermano y todo lo que el representa y te lo agradecemos -dijo -Pero... Aun debemos pedirte un ultimo favor, permíteme llevármelo de aquí.... Este no es un lugar seguro para el.
La mujer asintió, ante esto el ángel no pudo evitar sonreírle en agradecimiento.
Deidara le dio la espalda y se acerco al otro ángel rubio quien parecía tener pesadillas, lo tomo en brazos y este pareció relajarse por el contacto, incluso se acurruco en busca de mas comodidad, el ángel de la guarda miro nuevamente ala mujer.
-Cuídelo mucho por favor -le rogó Shizune mientras cubría al durmiente con una manta -El es como un hijo para mi.
-No te preocupes... Shizune -dijo -Cuidare de el con mi vida.
-Gracias.
El Ángel salio de la habitación, seguido de la mujer quien, tan pronto llegaron a la puerta principal se apresuro a abrirla.
-Que la paz sea contigo -le dijo el Ángel de la guarda.
-Y con usted señor -le respondió la mujer.
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El Ángel de la guarda se dirigió al cementerio lejos de aquella terrible ciudad, lejos de aquel hombre cruel, entro a la catacumba en la que había despertado
-Ángel Deidara... -escucho el ángel de la guarda.
-¿Eres tu Ángel de la muerte? -pregunto al tiempo que recostaba al dormido en el ataúd en el que había despertado para que estuviese mas cómodo.
(YoukoSaiyo: ¬¬U Si eso es comodidad yo no quiero estar cómoda nunca Lizerg-chan: Ni yo nnU)
El aludido no le respondió, pero apareció frente a el.
-¿Sucede algo? -pregunto el ángel de la guarda.
-Te traigo un mensaje de los generales del cielo -dijo con seriedad.
-¿Un mensaje?
-Este lugar no es seguro ni para ti ni para el Ángel de las presentes navidades -dijo -Por ello deberás partir al sur, ahí encontraras un castillo en el que vive un ángel de la guarda como tu.
-¿Cuál es el nombre de mi hermano?
-Su nombre es Ino -dijo -Ella es la protectora del joven heredero de ese castillo.
-Tan pronto como el Ángel de las presentes navidades pueda moverse nos pondremos en camino...
-No.... Tiene que ser ahora.
-Bien... Pero antes quiero que me respondas algo.
-Dime...
-¿Cuál es el destino que le espera a la humana de nombre Shizune?
El Ángel de la muerte cerro los ojos y suspiro con tristeza.
-Aquella que cuido de nuestro hermano le espera una muerte terrible a manos de quien le causo daño a un Ángel -dijo -Pero será recompensado con el cielo y se unirá a nosotros como una hermana mas.
-Ya veo... -dijo el ángel de la guarda
Silencio....
-Ángel guardián Deidara
-¿Si?
-Ten cuidado -dijo -Recuerda que de ti depende la seguridad de nuestro hermano... Pero también el que Lucifer no se apodere de las almas de los humanos.
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El hombre pelinaranja retorno después de unas horas, no podía alejarse del rubio menor sin volverse loco (Youko_Saiyo:¬¬ muy tarde), entro a su mansión golpeando la puerta.
-¡Naruto! -llamo abriendo la puerta de la habitación de este de golpe y al no encontrarlo busco a su sirvienta.
-¡¿Dónde esta?! -le pregunto en tono que a cualquiera helaría la sangre.
-¿Q-quien amo? -le pregunto asustada.
-¡Naruto!
-E-el se fue.
-¿Se fue? -repitió mas molesto cada vez -¿Y quien fue el fue el que le ha ayudado?
-Y-yo
-¡Tu! -dijo para luego darle un fuerte golpe en el rostro -¡Maldita puta! -gruño -¡¿Por qué?!
-Lo hice para que usted no lo tocara otra vez... -lo dijo con la boca ensangrentada.
El hombre le golpeo de nuevo y otra vez y otra, asta que ella cayo al suelo, pero no se detuvo ahí, continuo pateándola.
-¡¡Desgraciada!!
-Y-yo... Le... pro-pro... me-ti... a-a... Ku.... shi... ma... q... cui-da... ri.... A... d... Na... ru... To...
-¡¡Tu.... Y esa zorra son unas rameras que han alejado a las únicas personas que he amado!! -dijo con lagrimas en los ojos.
La mujer lo miro sin entender.
-No lo comprendes -dijo con un falso tono amigable -Es natural... Tu solo eres una pobre idiota -dijo acariciando su mejilla -Es simple perra, primero Kushina... Esa ramera que me quito a mi amado hermano y ahora... Por causa tuya, Naruto, ese exquisito ser que me ha cautivado se ha ido -le dijo para tomarla del cuello -¡Ustedes dos arpías me quitaron todo! -dijo presionando con mas fuerza su cuello hasta que se escucho un crack y los brazos de la mujer cayeron a sus costados inertes.
El hombre la soltó, como si de un juguete roto se tratara.
-Ya que iras al infierno a reunirte con esa ramera... -dijo al cadáver de la pelinegra -Dile que ni el mismo demonio me separa de MI Naruto.
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En aquellos territorios en olvidados por la manos de dios reinaba aquel ser que se revelo ante su creador.
Lucifer, el ángel mas hermoso de todos se encontraba sentado en su terrorífico trono mirando a través de aquellas llamas que le permitían espiar el mundo humano.
El hermoso rey de los infiernos sonrió con malevolencia mientras miraba al hombre pelinaranja deshacerse del cuerpo de quien fuera su sirvienta, en el rostro del hombre no existía remordimiento alguno ni en su corazón arrepentimiento, no era la primera vez que mataba, lo había hecho muchas veces.
Lucifer sonrió nuevamente al recordar a la primera victima de su servidor, una tierna chiquilla que había tenido la des fortuna de haber sido el primer amor de su hermano, su obsesión, aun recordaba la sublime manera en que la asesino, la manera en que la chiquilla lloraba y rogaba por su patética vida, como sus habilidades fueron mejorando con el paso de los años, pero lo que mas había disfrutado fue la gloriosa forma en que torturo al Ángel de las presentes navidades, como lo hizo desear, por unos momentos, el acabar con el, lo que lo hizo estar un paso mas cerca de caer al lado oscuro, condenando de esa manera a la humanidad entera a las llamas del infierno.
-¿Lo estas disfrutando? -le pregunto una voz a sus espaldas
-Sasori... -dijo en tono sensual
El Rey de los infiernos se levanto de su trono para encarar a quien le hablaba, un hermoso ángel caído de larga cabellera de fuego, ojos del mismo color, vestía una armadura negra estilo griego, sus alas eran de color negro.
-Vine tan pronto recibí tu llamado -dijo el pelirrojo haciendo una reverencia.
-¿Has escuchado sobre los Ángeles de las navidades?
-Si -le respondió confundido.
-¿Qué sabes de ellos?
-Se que en el pasado, los Ángeles de las navidades pasadas, presentes y futuras, fueron los tres reyes del oriente que le entregaron los tres regalos al mecías y que sus nombres eran Gaspar, Melchor y Baltasar, respectivamente.
-Correcto -le dijo Lucifer -Y ahora, uno de ellos ha sido enviado para recordar a los estupidos humanos el sentido de la vida y muerte de Jesús... Para recordarles a Dios -dijo en tono burlón -Pero para su mala fortuna cayo en manos de Pein
-¿Pein? -repitió Sasori -¿Ese miserable humano que dices es tu favorito?
-No es necesario los celos Sasori-chan -le dijo -Ese humano tuvo al ángel de las presentes navidades con el y lo hizo olvidar lo que es y su proceder... Gracias a todo lo que vivió en sus manos, incluso, por unos instantes lo hizo desear matarlo -dijo -Pero gracias a su estupidez... ¡A caído en manos de un ángel! -grito enojado, lo que ocasiono que todo el lugar temblara, como si temiera la furia del señor del mal.
-¿Y que sugieres?
-Ve a la tierra, encuentra al ángel de las presentes navidades, mátalo... O preferentemente conviértelo en uno de mis sirvientes.
-Como ordene -le dijo haciendo una reverencia y le dio la espalda comenzando a caminar.
-Ah y Sasori...
-¿Si?
-Mata a Pein, quiero que sufra el castigo de su error.
-Así será mi señor
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En los cielos dos arcángeles se encontraban discutiendo.
-¡No lo entiendo! ¡No lo entiendo! -dijo uno de los Arcángeles,, un joven de cabello corto de color negro, ojos de igual color, piel pálida
-Tranquilízate Sai -le dijo el otro Arcángel de largo cabello castaño, ojos blancos y piel clara -No ganas nada con ponerte así.
-¿Qué me tranquilice? -repitió -¿Qué me tranquilice? Es fácil decirlo para ti
-Sai... Escucha...
-¡No!, escúchame tu a mi, no es el Ángel de las futuras Navidades quien esta sufriendo en la tierra.
-Comprendo tu preocupación -le dijo -Recuerda que el Ángel de las futuras Navidades ha caído en un sueño del que puede no despierte.
-Lo siento... -se disculpo -Se que tu y Konan están en la misma situación que yo, pero es que... No lo entiendo
-¿Qué es lo que no entiendes?
-¿Por qué los generales del cielo enviaron a un ángel de la guarda que ni siquiera es guerrero?
-Según tengo entendido -hablo su compañero -Fue decisión del consejo y del mismo Dios.
-Pero nosotros no podemos quedarnos con los brazos cruzados -dijo -Tenemos que hacer algo.
-¿Qué sugieres?
-Ir a buscar al Ángel sanador.
-¿El Ángel Sanador? -repitió -El es un ermitaño dudo que quiera recibirnos.
-Tenemos que intentarlo -dijo el pelinegro -Estoy seguro que será de mucha utilidad.
-Tienes razón hay que ir a verle
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El Ángel sanador, también llamado el ermitaño, a curado a los Ángeles y Arcángeles desde el Principio de los tiempos y habita el lugar mas apartado del cielo al que solo los Arcángeles de mas alto rango tiene permitida entrada.
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<Flash Back>
En un desierto, en la época en que los romanos de dominaba, tres reyes provenientes del oriente viajaban guiados por un brillante estrella.
-¡Mirad! -dijo el mayor de los tres señalando una caravana que parecía ser un sequito real.
-Vayamos a su encuentro -hablo el menor.
-Gaspar, Baltasar -hablo el del medio
-¿Qué sucede Melchor? -pregunto Baltasar
-¿Creen prudente ir al encuentro de esa caravana?
-No veo porque no -le respondió Gaspar.
A Melchor no le quedo mas que acceder, después de todo eran dos contra uno, pero sentía que algo no estaba bien con aquella caravana.
<End Flash Back>
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El Ángel de la guarda condujo el carruaje por aquel camino de tercería que conducía a ese castillo perteneciente al Conde Uchiha, se detuvo frente a la puerta esperando al ángel que habitaba ese lugar.
-¿Eres tu Ino? -pregunto Deidara tan pronto vio a la mujer Ino.
-Si, y tu debes ser el Ángel Deidara -dijo la rubia sonriendo.
-Si -dijo mientras bajaba del carruaje.
-¿Dónde esta nuestro hermano, el ángel de las presentes navidades?
-Aquí -dijo mientras abría la puerta del carruaje dejando ver al rubio quien estaba recostado en uno de los sillones.
-¡Santo dios! -exclamo la rubia -Esta ardiendo en fiebre.
-Lo se -dijo suspirando pesadamente -Lo he intentado todo pero ha sido inútil.
-Que Dios nos ayude si el Ángel de las presentes navidades Muere
-Confiemos en que eso no suceda.
-No perdamos mas tiempo y llevémoslo adentro.
-Si
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Mientras tanto en los cielos, los dos arcángeles se encontraban en busca del Ángel sanador, aquel ser que era el único capaz de sanar a los seres celestiales.
-Estamos cerca -hablo el ojiblanco
-¿Estos son los territorios en los que el Ángel sanador vive?
-Si
-¿Falta mucho para encontrarlo?
-No -le respondió -Ya estamos cerca.
Frente a los dos, apareció un niño de cabellos negros ceniza, ojos negros, tenia puesto una túnica blanca y sus alas eran blancas
-Un querubín -dijo Sai en un susurro.
-¿Qué haces aquí pequeño? -le pregunto Neji en tono dulce -¿No sabes que este lugar esta prohibido?
El niño los miro con algo de seriedad
-Ustedes deben ser los que espera mi maestro
-¡¿Maestro?! -dijeron al unísono
-Veo que ya conocen a mi pequeño pupilo -dijo una voz masculina
Los dos Arcángeles miraron al dueño de esa voz, un ángel de largo cabello blanco, estaba vestido con una túnica blanca, sus ojos estaban cerrados y sus alas eran de un tono gris claro, su piel era un tanto tostada, el era el ángel sanador, su nombre era Jiraiya. (Youko_Saiyo: ¬¬ Si yo opino lo mismo que ustedes, este de ángel tiene lo que Orochimaru tiene de santo Lizerg-chan: nnU bueno es que no se me ocurrió otro para el puesto y no quería poner un inventado Youko_Saiyo: u.u Da igual sigamos con la historia)
-Ángel Curador -dijo Neji en tono de alivio -Necesitamos de tus habilidades.
-¿Qué sucede? -pregunto el aludido
-Son los Ángeles de las Navidades -hablo Sai -Mi señor esta en la tierra al borde de la muerte...
-Y si el muere... También mi señor y el Ángel de las Futuras Navidades.
-Ya veo... -Dijo -Bien iré con ustedes
-Gracias
-Itachi
-¿Si maestro?
-Vendrás con migo
-Como diga maestro -dijo el niño asintiendo con la cabeza
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Lizerg-chan: Bueno espero les gustara el fic n-n
Youko_Saiyo: ¬¬ Lastima que te salvaste de las fans de Itachi al convertirlo en ángel... u,u Mala suerte yo esperaba que de lincharan por eso
Lizerg-chan: ¬¬ Con esos amigos... n-n Bien nos vemos en la próxima