CAPITULO 10: PASO DEL TIEMPO PARTE 2
Las cosas no estaban bien, según los rumores que había escuchado en su escuela por algunos alumnos muchos de los estudiantes de Namimori habían sido atacados durante la ultima semana por lo que Tsuna se encontraba muy preocupado por su hermano Natsu y por los chicos que había conocido, pues no sabia nada de el de hace más de dos semanas y aunque al parecer ya todo había acabado estaba preocupado, hace tan solo unos días algo en su interior le dijo que seria un día importante para su hermano pero también peligroso por lo que no lograba estar tranquilo pese a los intentos de su amigo en calmarlo.
-Vamos Tsu, tranquilo el debe estar bien según los rumores ya todo paso hace unos días atrás y no creo que Natsu se involucre en peleas como nosotros –le decía Ryu para poder relajar a su amigo pues pese a que no hacia mayor escándalo el notaba la preocupación en sus ojos – además el es fuerte y por lo que me has dicho no creo que ese tutor deje que le hagan daño a su jugue… digo su alumno – dijo corrigiéndose rápidamente pero de todas formas es gano una mirada molesta del castaño quien luego le sonrió.
-Eres un maldito como que juguetes, no somos sus juguetes – le dijo intentando sonar molesto pero no podía de primera le era imposible molestarse con su amigo, segundo porque sabía que en parte tenía razón y tercero por que la pequeña sonrisa que tenia en la cara le acusaba.
-¿Ya más tranquilo? – le pregunto Ryu a Tsuna que solo suspiro dando vuelta su cara para mirar por la ventana del salón de clases pues aún estaba en el colegio.
-Hai, gracias y siento preocuparte es solo que no quiero que le pase nada malo – le dijo a Ryu.
-Lo se pero también debes pensar en ti Tsu – le dijo, Ryu no le decía por el nombre de Natsu solo le decía Tsu y pasaba desapercibido pues podría pasar como una abreviatura a Natsu – el no esta solo tiene a su madre, al sádico, a sus amigos en fin no esta solo, en cambio tu estas solo y enfermo debes pensar en ti recuerda lo que dijo el doctor Tsu, no puedes sobre exigirte demasiado y no creo que te haga bien estar intranquilo a cada momento – le dijo serio el rubio al castaño quien solo asintió recordando su visita al doctor hace unos días atrás.
FLASH BACK
Tanto Ryu como Tsuna habían llegado hace tan solo unos minutos al hospital por lo que ambos estaban esperando a que el castaño fuera llamado por el doctor lo cual no demoro mucho pues en tan solo unos minutos más ya estaban dentro de la oficina del doctor.
-Hola chicos ¿como están? – pregunto el doctor un hombre de unos treinta años de cabello corto para atrás y dos mechones largos adelante cada uno en un lado se su rostro de color negro, una tez blanca y de ojos dorados.
-Muy bien Akira-sensei y ¿usted? – dijo y pregunto el castaño al doctor de nombre Araki Akira quien le sonrió.
-Muy bien Natsu gracias por preguntar y tu Ryu ¿como estas? – pregunto ahora al rubio.
-Muy bien, gracias doctor –le respondió.
-Oh vamos no me digas doctor dime por mi nombre Akira – le dijo con una sonrisa recibiendo un asentimiento del rubio – bien entonces como te has sentido Natsu.
-Mmm bueno no tan bien – le respondió dudoso Tsuna al doctor el cual se puso serio.
-¿Qué ha pasado? – le pregunto mientras iba hacia unos muebles para sacar algunos instrumentos y con ademan de mano indicarle a Natsu que se acercara y acostara en una camilla.
-Bueno digamos que últimamente estuve un poco más cansado y con un poco de estrés y bueno eso me provoco un ataque estuve vomitando mucha sangre – dijo viendo al doctor el cual le revisaba sus pupilas, su pecho, entre otras partes.
-¿Cuantas veces se ha repetido? – le pregunto serio sin dejar de revisarlo.
-Tres veces en más o menos dos semanas – le respondió sorprendiendo al doctor.
-No creo que sea necesario decirte que no es algo bueno ¿cierto? – pregunto y Tsuna negó con la cabeza – Te hare un examen para podre ver como esta tu organismo estará para mañana – dijo y saco muestras de sangre del menor con el cual converso un rato más hasta que llego la hora de que tanto Tsuna como Ryu se fueran.
-Tsu ¿Por qué no me dijiste que habías tenidos más ataques? – le pregunto entre preocupado-molesto el rubio.
-No quería preocuparte, lo siento – le dijo y se fueron.
Ya al otro día ambos se encontraban frente al doctor Akira quien leía los exámenes – bueno, tal y como creía no estas muy bien al parecer el estrés y el desgaste físico te están pasando la cuenta algo que no estaba pasando antes, ¿dime algo a cambiado? Natsu – pregunto dejando de lado los exámenes.
-No nada, todo sigue igual del orfanato a la escuela y luego el trabajo – le respondió.
-¿Trabajo? – Le pregunto – antes no trabajabas, dime que haces.
-No mucho sacar cuentas, ordenar documentos entre otras cosas – le respondió y el doctor suspiro.
-Bueno si todo sigue igual no veo el porque tu salud se esta deteriorando – le dijo.
-Doc… Akira-san esto ¿traerá complicaciones para el futuro de Natsu? – pregunto ahora un preocupado Ryu.
-De momento no, pero si sigue así o empeora le traerá problemas para el futuro y me veré en la obligación de internarlo – le respondió y al ver la cara delos menores decidió seguir hablando – pero eso aún no pasa podemos evitarlo, el tratamiento te estaba manteniendo muy bien y por ahora estas bien dentro de lo normal – les dijo haciendo sonreír levemente al menor castaño y al rubio – por ahora te daré las pastillas debes tomarlas todos los días ¿de acuerdo? – pregunto y Tsuna asintió – también te hare una pequeña transfusión de sangre tienes una leve anemia no quiero que se agrave así que la detendremos ya… también quiero que te cuides Natsu el estrés y el desgaste físico no son buenos para ti, tendremos la próxima hora en un mes a contar de hoy ¿de acuerdo? – dijo y pregunto al castaño quien solo suspiro y contesto.
-Entiendo Akira-sensei me cuidare más – le respondió el castaño.
-Bien Natsu entonces vamos a hacerte la transfusión para que puedas irte a descansar – le dijo y así ambos se fueron ha otra habitación en donde hicieron la transfusión una vez lista el doctor le volvió a advertir preocupado, al castaño de que se cuidara, el cual después de asentir y despedirse se fue junto a Ryu del hospital.
FIN FLASH BACK
-Tsu…. Tsu, TSU – termino alzando la voz el rubio ya que el castaño se había perdido en sus pensamientos no prestándole atención y haciendo que este se preocupara - ¿estas bien? – le pregunto luego de que el castaño despertara de su letargo y le mirara.
-Hai, lo siento solo estaba recordando algo – le dijo pero al ver la cara de preocupación que tenia el otro le sonrió y hablo – en serio estoy bien, ya no te preocupes, te prometo relajarme y dejar de pensar en cosas que me puedan hacer mal.
-Eso espero Tsu –le dijo y no siguió hablando pues el celular de Tsuna comenzó a sonar llamando la atención de ambos jóvenes, pues el único que llamaba a este era Natsu, pero al ver que el numero no era el que ellos conocían se preocuparon.
-¿Contesto? – pregunto Tsuna a su amigo que solo le estiro su mano.
-Yo contestare no podemos correr riesgos – le dijo una vez Tsuna le paso el celular – pero antes salgamos del salón, ven vamos – le dijo y ambos salieron rápidamente de este antes de contestar – ¿Hai? – dijo el rubio mientras el y el castaño y se dirigían a unos de los patio traseros de la institución.
-Hola, Ryu soy yo Natsu – dijo una voz del otro lado sorprendiendo al rubio, lo cual no paso desapercibido por el castaño quien se preocupo.
-¿Qué paso Ryu? – le pregunto y el otro le miro con una sonrisa pasándole el teléfono.
-Es Natsu – fue todo lo que necesito decir para que Tsuna tomara rápidamente el teléfono y contestara.
-Hola Tsuna-nii ¿Cómo estas? – escucho la voz del otro lado y por fin todo su cuerpo se relajo.
-Natsu no sabes lo preocupado que estaba… yo estoy bien ¿y tu, como estas?, ¿Qué a pasado en Namimori, están todos bien? – le pregunto.
-Lo siento, pero no te preocupes Tsuna-nii todos estamos bien, ahora no te puedo contar mucho pero pronto lo hare – le contesto Natsu.
-De acuerdo, pero dime ¿de donde estas llamando? – le volvió a preguntar.
-Estoy llamando de un celular nuevo que me han regalado, según Reborn no es bueno que el próximo jefe de la mafia no tenga con que comunicarse – le contesto sacándole una sonrisa a Tsuna – y aunque no me guste la razón, es bastante bueno ahora podernos hablar más seguido.
-Claro Natsu, pero aún así no hay que descuidarse – le dijo Tsuna al otro – pero dime enserio esta todo bien, mira que hasta aquí han llegado los rumores de lo que paso con los estudiante.
-Bueno si tuvimos algunos problemas con respecto a eso, pero ahora todo esta bien no hay de que preocuparse, como te dije antes es peligroso de que te lo cuente ahora, me pueden pillar pero una vez nos juntemos te diré todo – le dijo Natsu al castaño mayor quien solo suspiro resignado pero contento de que su hermano este bien.
-Claro, por ahora me conformo con saber que estas bien – le dijo con una sonrisa.
-Jeje, gracias pero ahora dime ¿Cómo te fue en tu cita con el doctor? – pregunto Natsu a Tsuna que de inmediato se puso serio, claro que esto no fue notado por el otro castaño, pero si por un rubio.
-Todo ha ido bien, no hay de que preocuparse, o eso dijo el doctor, por ahora debo seguir con mi vida normal ya que no ha habido complicaciones – dijo fingiendo alegría de muy buena manera pues Natsu no se dio cuenta de la mentira soltada por este.
-Eso es genial Tsuna-nii, no sabes lo feliz que me siento – dijo un alegre Natsu – estaba muy preocupado, tenia tantas ganas de hablar contigo, y ahora no perdí la oportunidad y te llame, no sabes cuanto espero la oportunidad para vernos hay tantas cosas que te quiero contar – hablaba el castaño feliz al otro quien se sentía un poco mal por mentirle al otro, pero el escuchar la felicidad de este era su medicina en este momento.
-Eso parece, dime ¡a pasado algo bueno acaso? – pregunto al escuchar el silencio de la otra línea supo la respuesta – parece que así es, y dime ¿Cómo se llama mi cuñada? – pregunto con malicia suponiendo que ahora su adorable hermano estaba rojo y no supuso mal pues así era como estaba ahora Natsu.
-Qu-que di-ces Tsu-na-nii – decía tartamudeando el menor – no se de que hablas – dijo después mas repuesto de la vergüenza anterior.
-A otro con ese cuento a mi no me puedes mentir, y esta muy claro de que ya tienes o vas a tener novia, dime es rubia, morena, alta, baja, oye ten cuidado de que no sea una sádica mira que hoy en día uno ya no sabe con que se puede encontrar, pero bueno ya dime mejor como se llama tu novia – dijo con todas las intenciones de burlarse del menor quien del otro la do de la línea ya no cavia de la vergüenza.
-¡¡¡EL NO ES MI NOVIO!!! – grito por la vergüenza sin darse cuenta de lo que había gritado.
-¿El? – Pregunto sorprendido Tsuna al escuchar el grito de su hermanito – no puede ser acaso Ryu tiene razón con aquella teoría… por Kami no me jodan – pensó Tsuna un poco asustado y confundido.
-Eh, bue-no y-yo ve-ras… no es lo que pi-ensas – trataba de hablar el menor muy nervioso y con miedo por lo que podría pensar su hermano – no quiero que me deteste – pensó al extenderse un silencio en la línea, el cual no duro mucho pues Tsuna hablo.
-Eh, asi que no es cuñada, sino que cuñado, tengo un cuñado y bueno que esperas dime como es y su nombre – decía ahora Tsuna sacándole una vena a su hermano – vamos Natsu no te avergüences y dime como es tu novio, sexi, feo, alto, bajo, rubio, moreno, masoquista o sádico o ya se, dime es Activo o pasivo – dijo enojando ahora si al menor.
-¡¡¡QUE NO ES MI NOVIO, MALDICION COMO ERES CAPAZ DE PREGUNTAR TODO ESO!!! – Grito muy avergonzado haciendo reír a carcajadas a Tsuna quien había conseguido su objetivo – y yo que pensaba que podría detestarme– pensó mientras pasaba una rápida imagen por su cabeza – claro que no me iba a detestar después de todo estamos en el mismo barco jejeje es tu turno de avergonzarte Tsuna-nii – termino de pensar dejando ver una pequeña sonrisita maliciosa, una que claramente nadie vio – pero ahora que lo pienso, no me habías dicho que yo también tengo un CUÑADO Tsuna-niisan, bastante sexi, de tez blanca y unos ojos metalizados, mmm sin duda bastante bueno pero muy sádico al parecer, bastante celoso también y definitivamente activo – dijo callando de inmediato la risilla que aún mantenía su hermano quien había quedado perplejo – mmm si como se llamaba, ah ya me acorde HIBARI KYOYA ¿no? – dijo con clara malicia en su voz la cual no paso desapercibida por el Castaño mayor quien cerraba y abría la boca como pez fuera del agua.
-Y-yo no se de q-que ha-blas – decía aún my sorprendido el castaño y muy rojo, pues no se esperaba aquel contraataque de su hermano – acaso Hibari le habrá hecho algo – pensó enojándose un poco, mientras era mirado fijamente por su amigo quien estaba escuchando la conversación, mejor dicho lo que hablaba Tsuna.
-Me pregunto que esta pasando y que le habrá dicho Natsu, bueno de todas formas luego me enterare – pensó sin dejar de ver a su amigo y riendo al comprender por donde iba la cosa.
-Acaso. ¿Te hizo algo? – pregunto Tsuna un poco molesto a Natsu quien rio.
-No te preocupes Tsuna-nii, tu novio no me a hecho nada, es todo tuyo – le dijo con tranquilidad tranquilizando a Tsuna quien luego de entender lo que había dicho se avergonzó nuevamente.
-NO ES MI NOVIO Y NO ES MIO – le grito y ahora era Natsu quien reía, mientras Tsuna refunfuñaba por haber caído en la trampa de su hermano
-Ya, ya lo que digas Tsuna-nii y lo siento no quería molestarte pero tú empezaste – dijo Natsu un poco avergonzado por lo que había hecho.
-Lo se, también lo siento será mejor de que dejemos esta conversación para otro día – dijo ya más tranquilo Tsuna.
-Hai… Tsuna-nii – dijo llamando la atención del otro castaño.
-Dime Natsu
-Cuando nos veremos de nuevo, hay muchas cosas que me gustaría contarte, pero que ahora no puedo y también te extraño mucho – dijo triste y con un poco de ilusión de que fuera pronto su próxima cita.
-Emm… - Tsuna no sabia muy bien que contestar pues aún no podía cambiarse de lugar debía cuidarse no estaba en las mejores condiciones y no podía poner en juego su secreto por lo que tendría que esperar por ultimo a que pasara la cita que tenia con su doctor – aún no es posible que nos juntemos Natsu por lo que lo haremos en tres semanas más o menos – le contesto de forma seria.
-¿Esta todo bien? – pregunto Natsu triste al saber que no podría ver a Tsuna en todo ese tiempo.
-Si, claro que si pero recuerda que ahora es muy riesgoso cambiarnos más seguido, aparte vienen exámenes en mi escuela – le contesto diciendo la verdad pero omitiendo el principal impedimento para el cambio, pero al sentir de alguna forma tan triste a su gemelo decidió decirle algo más – vamos prometo que no pasare de tres semanas, una vez llegue el día hablaremos mucho todo ira bien – le prometió haciendo sentir mejor al otro.
-De acuerdo Tsuna-nii, esperare estas semanas, espero pasen luego – le dijo – bueno ya es hora de irme antes de que Reborn me pille, cuídate mucho por favor y guarda mi numero.
-Yo igual las esperare y tu también cuídate mucho, especialmente de Reborn y el señor carnívoro – le dijo y se escucho un monosílabo de la otra línea – bien adiós y cuídate y cuidado con tu novio – dijo y antes de escuchar el reclamo del menor corto – dejando ver una pequeña sonrisa – Mmm creo que tendré que tener mas cuidado, Reborn al parecer no es una buena influencia, Natsu esta aprendiendo más de lo que debería – dijo recordando la pequeña venganza y la malicia en las palabras de su querido hermanito, manteniendo su diminuta sonrisa.
-Aunque no aprenda de Reborn, aprenderá de ti, no eres un santo Tsuna, solo basta con escuchar tu historial por mi boca para darse cuenta – dijo con una sonrisa maliciosa y al ver que el castaño le reprocharía algo siguió hablando – y no digas que aprendiste de mi, porque cuando nos conocimos ya eras bastante retorcido, bueno lo éramos – dijo corrigiéndose y haciendo reír al otro.
-Oh vamos no es para tanto, digamos que nos complementamos – le dijo y el otro solo rio asintiendo – tu me enseñaste a pelear y yo te enseñe a controlar tus emociones ya que pese a ser bastante solitario era muy fácil leerte por aquel entonces – dijo riendo por lo bajo.
-Tampoco era tanto solo me faltaba un poco de control – le reclamo y al ver como el castaño alzaba una de sus cejas agacho la cabeza suspirando – Ok lo reconozco era como un libro abierto con guantes de box, si lo abrías te golpeaba – dijo recuperando su sonrisa y haciendo reír al castaño – en cambio tu matabas a todo el mundo con tus ojos, nadie sabia lo que pensabas o planeabas pero a la hora de pelear le dabas a los fantasmas, e incluso estos cacho eran mas fuertes – dijo haciendo sonrojar levemente al castaño – al final tienes razón nos complementamos y al mismo tiempo nos enseñamos.
-Fue divertido – dijo Tsuna soltando un suspiro seguido de Ryo, ya para estas horas habían comenzado las clases, por lo que lo mejor era quedarse a esperar a la otra.
-Tsu…
-Dime – dijo respondiendo al llamado del rubio.
-¿Por qué le mentiste a Natsu? – le pregunto con tristeza pero sin pisca de reproche.
Tsuna solo suspiro y mostro su serio e incluso triste rostro – Era lo mejor decirle la verdad no era lo correcto o eso creo yo, preocuparlo no me gusta y menos que se sienta culpable porque es obvio que si le decía se sentiría mal por según el robarme el lugar que me pertenece y hacerme sufrir solo y por no ser más inteligente y hacerme soportar los castigos de Reborn, siendo que no es verdad, todo lo que hago lo hago porque quiero y deseo, quiero que sienta el calor de una familia, la compresión de los amigos, la tranquilad de la vida lo mejor que pueda, que se divierta y disfrute, deseo no ser una carga para mi madre, no hacerla sufrir con mi enfermedad y con la verdad – dijo Tsuna con una sonrisa melancólica.
-Se que es lo que quieres y deseas pero no puedo evitar sentirme mal por ti Tsu, te estas sacrificando por los demás – dijo Ryu y el castaño negó con la cabeza.
-No lo siento como un sacrificio sino que como algo que debo y quiero hacer, le quite casi trece años de amor de familia a Natsu, mientras yo estaba bajo un techo cálido y con comida Natsu estaba solo, con hambre y frio, y ya mi madre me ha dado mucho deseo hacerla feliz y se que no lo haría si se enterara de la verdad de mi enfermedad como lo de Natsu – dijo y levanto su mirada mirando al cielo – aunque hay veces que me siento peor y creo que es Natsu realmente quien se sacrifica viviendo la identidad de otro, pues por mi egoísmo no de decir la verdad y hacer sufrir a mi madre le obligo a vivir negando su existencia, le obligo vivir siendo yo – dijo ahora mirando a su amigo con clara tristeza quien solo se acerco a el y le abrazo con fuerza, abrazo correspondido con la misma intensidad.
-Se que es difícil Tsu, pero quiero que sepas que pase lo que pase debes seguir adelante y que hagas lo que hagas seguiré a tu lado en las buenas y en las malas siempre juntos, ya sea tengas razón o no te apoyare y estoy seguro de que Natsu también lo hará, el entiende tu dolor y lo comparte de eso estoy seguro, jamás te recriminara nada, y no olvides que nada de lo sucedido es tu culpa, la culpa es de aquel que los separo sin corazón – le consoló logrando su objetivo pues Tsuna volvió a sonreír levemente.
-Gracias Ryu – le agradeció.
-Bien entonces cuéntame que es lo que esta pasando pues, vi sonrojos y sonrisas llenas de malicia, escuche burlas, exclamaciones de sorpresas y la palabra novio muchas veces – dijo mirando al castaño que sonreía angelicalmente – y no me mires así que yo no te creo esa faceta de ángel con la que engañas a otros, me dirás todo ahora mismo jovencito.
-Si mamá – respondió con una pisca de burla el castaño para después comenzar a relatarle todo lo que había hablado por celular con Natsu haciendo reír al rubio, pasando así un tranquilo y alegre momento, los cuales se siguieron viviendo durante tres semanas más, las cuales para alegría de estos pasaron rápido y sin contratiempo, incluso con buenas noticias pues en el siguiente control de Tsuna, ya estaba mejor que antes por lo que no fue necesario hacer alguna transfusión solo algunas recomendaciones, por lo hasta el momento todo iba bien, y ahora Ryu y Tsuna se encontraban en una plaza esperando por Natsu pues este era el día en que se cambiaban nuevamente.
-Ahí viene Tsu – dijo Ryu al ver como se acercaba a ellos un pequeño castaño que se tiro a los brazos del otro castaño el cual se encontraba encapuchado.
-Te extrañe mucho Tsuna-nii – dijo Natsu sin despegarse de su hermano quien le acariciaba la cabeza.
-Yo también te extrañe Natsu – le dijo regalándole una de esas autenticas sonrisas que solo mostraba a Ryu, su madre, Natsu y a veces a los compañeros que había dejado en Namimori.
-Jeje – rio Natsu y miro a Ryu – hola Ryusuke, ¿Cómo estas? – le pregunto al rubio quien le sonrió y contesto.
-Hola Natsu, bien gracias y tu ¿Cómo has estado? por lo que se muy bien ¿o no? - dijo con malicia y una gran sonrisa la cual creció al ver el sonrojo del menor quien se separo de inmediato de Tsuna.
-Y-yo n-no… - trataba de hablar el menor muy avergonzado.
-Vamos no te pongas así solo es una broma, tranquilo – le tranquilizo luego Ryu.
-Y bien ¿como van las cosas Natsu? – Pregunto Tsuna – antes no me has querido decir pero ahora me dirás todo lo que ha pasado empezando por contarme el como estas tu.
-Jeje lo siento pero no me podía arriesgar Tsuna-nii y no te preocupes que yo estoy muy bien, pero las cosas se anduvieron complicando un poco… ten – dijo alegre y luego un poco serio pasándole a Tsuna unos guantes con el numero 27 que a la vista de Tsuna eran unos simples guantes de cocina.
-¿guantes de cocina? – Pregunta una vez los tomo y por alguna razón se los puso, viendo con sorpresa que cuando se los puso estos cambiaron completamente – es-esto ¿Qué es? – pregunto un poco confundido y más aún al sentir como algo muy cálido salía de su frente, por lo que tomo su celular para ver su reflejo dándose cuenta de la llama que aunque no era desconocida si era distinta y ver también el cambio de sus ojos.
-¿Qué es eso? – pregunto también sorprendido Ryu.
-Esa es la llama de la ultima voluntad la cual ya conoces Tsuna-nii y esos son los guantes de la decima generación, en otras palabras son tus armas para pelear como jefe de la mafia – dijo sorprendiendo aún más a los otros.
-¿De donde los sacaste? – Pregunto ahora Tsuna – y ¿Por qué han reaccionado así? – dijo sacándose ambos guantes volviendo así a la normalidad.
-Reborn me los entrego para pelear tras la pelea que hubo, y del porque han reaccionado así no lo se, la llama de la ultima voluntad despierta tras una fuerte determinación supongo que al verse complementada con los guantes esta ha despertado a reconocido tu determinación y te han aceptado como su dueño – le dijo con una sonrisa.
-¿Dueño? – pregunto Ryu.
-Veraz yo no fui capaz de hacerlos reaccionar por así decirlo, por lo que supuse le pertenecían a Tsuna-nii – dijo y a ver las caras confundidas de los otros decidió explicar más – hace casi un mes atrás hubo una pelea, Leon la mascota de Reborn le dio a este, dos par de guantes y una bala, uno de esos pares fue los que use para pelear junto con la única bala, pero después de haber pasado todo intente con Reborn utilizar estos pero no pude, por eso llegue a la conclusión de que estos te pertenecían a ti, aunque me sorprende de que hayas podido utilizarlos sin que Reborn te dispare – dijo mientras que de unos de sus bolsillos sacaba otro par de guantes muy parecidos con la única diferencia de que estos traían el numero 72
-Se supone entonces que estos son para mi, pero… ¿Cómo fue que leon saco dos pares? – pregunto Tsuna mirando a los guantes de el y su hermano.
-No lo se, Reborn dijo que siempre cuando un alumno de el se enfrente a la muerte por así decirlo o a una decisión importante, Leon les da su arma, no dijo más – respondió Natsu.
-¿Y que dijo este al ver los dos par de guantes? – pregunto Tsuna.
-Se sorprendió mucho, especialmente cuando intento que los utilizara y no pude, pero al final no dijo nada solo que mi determinación era poco y que me entrenaría más hasta que pudiera utilizarlos – dijo con una mueca de cansancio.
-Bien, pero ¿que fue todo eso de la pelea? – pregunto Tsuna tranquilo y prestando total atención a Natsu.
-Como ya debes saber todo comenzó con varios ataques a alumnos de la escuela de Namimori, del menos fuerte al más fuerte según la lista que dio Fuuta, un chico que ahora vive con nosotros, luego te contare de el – dijo y siguió relatando – bueno luego ya de varios ataques, atacaron a los chicos y Reborn se dio cuenta que no eran peleas normales la mafia estaba implicada de cierta forma, bueno el provoco todo esto fue… Rokudo Mukuro el… - dijo con un pequeño sonrojo que no paso desapercibido por ninguno de sus acompañantes – el fue quien comenzó todo eso como invitación para una pelea contra el decimo Vongola… - así comenzó a relatarle todo lo sucedido a los otros dos que en ningún momento interrumpieron, escuchando así sobre Fuuta, sobre la pelea la cual Natsu gano, de la paliza que recibió Hibari, lo cual preocupo a Tsuna pero sin hacerlo notar o eso creyó el porque un rubio ahí presente se dio cuenta de inmediato, al final de casi todo lo sucedido durante aquel mes que paso viviendo como Tsuna, incluyendo lo ultimo vivido con Mukuro lo cual los sorprendió pero no dijeron nada.
-Vaya que han pasado cosas – dijo Ryu sorprendido y un poco preocupado por Tsuna, no quería que este tuviera problemas, no quería que recayera.
-Demasiadas cosas lo bueno es que estas bien Natsu – dijo Tsuna con un suspiro –pero aún no puedo creer que te guste aquel chico.
-Bueno… es no es malo, solo que a sufrido mucho – dijo intentando defender a Mukuro.
-Creo en tu juicio si tu dices que no es malo te creeré, pero si te hace algo no dudare en hacerle pagar – dijo serio y Natsu asintió – y dime ¿lo has vuelto a ver?
-No, desde que se lo llevaron los de Vendice, no le e visto, pero si le e sentido debes en cuando cerca de mí – dijo con un sonrojo haciendo sonreír a los otros.
-Ya veo – dijo contento pero al mismo tiempo un poco ausente Tsuna – Se a enamorado de quien era su enemigo, realmente tienes un gran corazón Natsu mereces todo lo bueno del mundo, hare todo lo que este en mis manos para poder hacerte feliz y que no vuelvas a la soledad en la que te encontrabas cuando te conocí, lo prometo Natsu, aún si no estoy a tu lado, aún si yo no llegara a sobrevivir, de donde sea que este te protege – pensó Tsuna.
-¿Que pasa Tsuna-nii, estas un poco ausente? – pregunto Natsu al darse cuenta de lo ausente de su hermano, el cual al escuchar la voz de Natsu le miro y sonrió.
-No pasa nada Natsu no te preocupes – le dijo sin desaparecer su sonrisa y engañando así al pequeño que solo asintió pero no así a su amigo que sabia perfectamente en lo que pensaba, por lo solo le acaricio la cabeza aun cubierta.
-Lo que pasa Natsu es que aquí mí querido amigo esta pensando en cierto carnívoro – dijo Ryu con la intención de alejar esos pensamientos de la cabeza de Tsuna, lo que dio resultado pues este se sonrojo, y dejo de lado sus antiguos pensamientos llenando ahora su cabeza con recuerdos del de ojos metalizados.
-¡Eso no es verdad! – Dijo Tsuna levantando la voz un poco avergonzado – No estaba pensando en el.
-Mmm así que era eso – dijo Natsu y sonrió – Bueno te contare que paso con el pues no te he dicho nada, pero sabes realmente no paso mucho – dijo y al ver que tenia la total atención de sus dos compañeros prosiguió – de primera pensé que tendría muchos problemas con el así que estuve escapando de el con ayuda de Gokudera-kun y Yamamoto, pero un día después de clase me descuide y pues vio su oportunidad y me acorralo contra la pared… - dijo y callo dejando a Tsuna con un muy mal sabor de boca pensando lo peor, lo que divirtió mucho a Natsu – oh vamos no pongas esa cara no me hizo nada, no te adelantes a los hechos – dijo queriendo reír y avergonzando a Tsuna – bueno como dije me acorralo contra la pared dijo algo sobre un tema pendiente, pero luego de estar unos segundos muy cerca mío se fue.
-Se fue, así sin más – dijo Ryu un poco desconcertado.
-Si, yo quede igual de desconcertado que tú, aunque lo agradecí infinitamente, realmente no sabes cuanto luche para no flaquear y caer ahí mismo de rodillas, es terrorífico – dijo y un escalofrió le corrió por la espalda – en fin luego de aquel incidente no se me volvió a acercar más, algunas veces lo veía mirarme de lejos por algunos segundos pero rápidamente se iba, nuestro contacto fue mínimo ni para la pelea contra Mukuro se me acerco – dijo mirando a Tsuna el cual no sabia si sentirse contento o triste.
-Ya veo, eso es bueno, realmente pensé que iba a ser un problema ese chico – dijo Tsuna fingiendo una sonrisa la cual fue rápidamente descubierta por sus acompañantes – ¿Qué pasa?, no ¿Qué me pasa? me siento contento porque no se le acerco a Natsu, pero al mismo tiempo me siento triste al pensar que para el no soy nada… pero ¿Por qué debería importarme eso? Debo dejar de pensar en el, no es bueno me esta confundiendo mucho… pero… Hibari Kyoya… ¿Qué es lo que siento por ti? – pensaba un confundido Tsuna, sabiendo la respuesta a su pregunta pero no queriendo aceptarla.
-Tsuna-nii… - dijo Natsu llamando la atención del otro castaño quien inmediatamente le miro.
-Mmm
-A ti te gusta ¿cierto?… te gusta Hibari Kyoya – dijo Natsu mas afirmando que preguntando y enfrentando directamente a Tsuna con aquella respuesta que tanto quiere evitar.
-…. – Tsuna no quería responder pese a que algo dentro de el le decía que Natsu tenia razón, no quería créelo, aceptarlo, no quería darse cuenta de la verdad – a mi no me gusta Hibari Kyoya, solo estoy confundido – pensó y decidió tajar ese tema de una – entonces Natsu ¿nada más que me tengas que contar? – le pregunta a Natsu dando por terminado el otro tema.
Natsu solo se quede callado unos segundos y decidió no presionar mas a su hermano – Mmm no realmente, ya sabes todo, la pelea fue lo más importante, lo demás casi todo sigue igual, los chicos, las clases, bueno se podría decir que los entrenamientos de Reborn se hicieron más infernales y peligrosos… Ah y también conocí a Dino-san – dijo llamando la atención de Ryu y Tsuna.
-¿Dino-san?
-Si es el alumno anterior de Reborn, también es un jefe de la mafia, pero es muy amigable me cae muy bien, y es muy chistoso sabes cuando esta cerca de sus subordinados es muy genial y fuerte, pero cuando esta solo es incluso más torpe que yo… - dijo y siguió hablando sobre como había conocido a Dino, como era este y otras cosas más, pasando horas así hasta que llego la hora en la que debían separarse por lo que se cambiaron de ropa tanto Natsu como Tsuna para poder irse al lugar que les correspondía.
-Bueno es hora de irse – dijo Tsuna un poco triste – cuídate mucho Natsu.
-Tu igual cuídate mucho Tsuna-nii y llámame cada vez que puedas – dijo y en ese momento cambiaron sus celulares.
-Por supuesto, Pero antes ¿Qué haremos con los guantes Natsu?
-Mmm, no se realmente no creo que los vallas a ocupar pero si llegases a tener que hacerlos tendrás que ocupar los tuyos, creo – dijo un poco confundido – lo mejor será que te lleves ambos pares – le dijo finalmente pasándoles los de el.
-¿estas seguro? – pregunto y Natsu asintió con una sonrisa.
-Hai, no creo que yo valla a necesitarlos.
-Bueno, entonces creo que a llegado la hora de irme, luego ya veré como le hago con los guantes si es que debo ocuparlos – dijo dándole un fuerte abrazo a Natsu – adiós, cuídate mucho – le dijo para después dejar aquel abrazo.
-Tu igual Tsuna-nii – le contesto Natsu con una sonrisa la cual fue correspondida por Natsu que luego dirigió su mirada a Ryu, caminado hacia el y dándole también un abrazo.
- Nos vemos Ryu, cuídate también y cuida de Natsu – le dijo y el otro solo asintió – bueno debo irme – dijo y se fue corriendo del lugar alejándose de la vista de los otros dos jóvenes.
-Bueno será mejor que nosotros también nos vallamos Natsu – dijo Ryu y el otro asintió comenzando a caminar lejos de aquel parque.
Mientras que ya muy alejado del parque iba Tsuna que de un momento a otro se paro sintiendo un frio escalofrió correrle por el cuerpo el cual le obligo a afirmarse de una pared que había cerca – ¿que pasa?, ¿que es esto? – se pregunto pues no le gustaba nada la angustia que le estaba llegando seguido del escalofrió, por lo que rápidamente saco su celular marcando un numero, sabia lo que aquel escalofrió y presentimiento significaba y no le gustaba nada – Halo, Ryu no digas mi nombre – fue lo primero que dijo una vez le habían contestado.
-Si claro, pero ¿que pasa?, ¿por que estas así? – dijo la otra voz la cual pertenecía a Ryu, intentando sonar lo más normal posible para no levantar sospecha de su acompañante.
-¿Estas con Natsu? – pregunto serio Tsuna
-Hai
-Bien no le digas que estas hablando conmigo – le dijo recibiendo un monosílabo como respuesta – Mira no se que ira a pasar, pero de seguro que algo va ir mal, así que por favor cuida mucho de Natsu, te lo ruego – dijo casi suplicante asustando aun mas a Ryu.
-Claro, pero y ¿tu? – dijo angustiado Ryu
-Yo estaré bien, o eso creo, no se que es lo que va a pasar pero no me gusta nada esta angustia que siento – le dijo aún preocupado pero ya más repuesto por lo que siguió su camino a su casa.
-No te preocupes hare todo lo que este en mis manos para ayudar – le dijo Ryu sabiendo que quería decirle más pero sus palabras ahora eran limitadas.
-Gracias estaremos en contacto, Sayonara – dijo Tsuna y corto una vez escucho que su amigo se despedía – lo mejor será que me apure y este pendiente – dijo y se fue rápidamente.
Mientras que con Ryu y Natsu estos seguían caminando muy callados ambos hasta que Natsu rompió el silencio.
-Era Tsuna-nii ¿cierto? – Pregunto Y Ryu se paro de golpe, no podía decirle nada – de seguro el también lo a sentido las cosas se complicaran algo va ir mal para ambos, pero no se lo que es – dijo Natsu tomando toda la atención de Ryu quien decidió hablar.
-Pues si estaba preocupado y me pidió que te cuidare mucho – le dijo.
-Tsuna-nii se preocupa mucho por mi, me gusta pero me da miedo que por mi culpa el se descuide y termine mal – dijo triste Natsu – en estos momentos también tengo miedo no me gusta lo que acabo de sentir y estoy seguro de que Tsuna-nii lo sintió aún más fuerte que yo, pero yo no puedo llamar a nadie para que lo cuide, solo confiar en que todo saldrá bien y que los chicos le ayudaran cualquier cosa.
-No te preocupes Natsu todo estará bien, Tsuna es muy fuerte, confió en el, no nos abandonara – dijo acariciando la cabeza del menor y sonriendo – eres todo lo que tengo Tsuna recuérdalo por favor, no hagas nada estúpido y vuelve, te estaré esperando, y no tan solo yo Natsu también, vuelve y disfrutemos nuestros días juntos – pensó Ryu preocupado por su mejor amigo – Bien aquí nos separamos, cuídate y vuelve rápido al hogar, nos vemos – le dijo con una sonrisa sincera al menor al cual empezaba a querer cada vez más, se estaba volviendo importante para el como otro hermanito.
-Hai, nos vemos Ryu - dijo el menor con una sonrisa y se fue corriendo por su camino mientras Ryu si iba por el suyo.
Mientras que ya luego de un buen rato Tsuna ya se encontraba en Namimori, este iba caminando por las calles de la cuidad perdido en sus pensamientos, sin fijarse en su alrededor – que será lo que ira a pasar ahora, estoy preocupado, espero no sea nada tan malo – pensaba sin fijarse que alguien le miraba y seguía de cerca – será mejor que me apure, quiero bañarme y dormir – dijo en voz alta y dándose cuenta de la presencia a su espalda por lo que giro rápidamente lleno de determinación y fastidio para encarar a quien quiera que fuera el que lo seguía, tarde se dio cuenta que fue un gran error pues para cuando reacciono ya estaba contra una muralla, con los brazos por sobre su cabeza siendo a sujetados por una de las manos de cierto azabache que sonreía feliz y con malicia.
-Por fin te veo de nuevo – le dijo su peor pesadilla, Hibari Kyoya.
-No se de que hablas me has estado viendo todos los días, crees que no me e dado cuenta que me observas de lejos – le dijo un poco nervioso y recordando todo lo que Natsu el había dicho.
-Así que si te diste cuenta herbívoro – le dijo acercándose cada vez más a el y sin importarle la gente que por ahí pasaba.
-Claro que si, no soy ningún estúpido – dijo ya fastidiado y haciendo sonreír a Hibari – Ahora te podrías alejar y dejarme ir.
-Por fin ha vuelto, otra vez puedo ver esos ojos que tanto me gustan, que tanto me excitan, pensaba que ya no volverías mi bipolar herbívoro – pensaba el de ojos metalizados – No esta vez no dejare pasar la oportunidad, recibiré mi recompensa – dijo dejando confundido al castaño que antes de si quiera expresar su confusión se vio perdido al sentir como sus labios eran apresados por otros muy suaves en un corto roce – esta vez no te dejare escapar mi herbívoro Bipolar – dijo y volvió a dirigirse a los labios del contrario los cuales beso con suavidad en un primer momento y luego con desespero por sentir mas al pequeño castaño que no sabia que hacer, sintió como su labio inferior era mordido e instintivamente entreabrió sus labios dejándole así paso libre a la legua del azabache quien no tardo en hacerla entrar a comenzar una lenta pero excitante danza con la lengua contraria pues poco a poco Tsuna comenzaba a corresponder aquel beso, el cual finalmente se volvió demandante y lleno de pasión, hasta que aquel elemento esencial se hizo necesario para ambos por lo tuvieron que separase uno feliz y otro muy confundido y sonrojado – recuerda que eres mío Sawada Tsunayoshi, me perteneces – dijo Hibari recuperado de la falta de aire con una sonrisa ladina al ver el sonrojo del menor, dándole otro roce a los labios y yéndose del lugar.
-Eh – decía Tsuna –un recargado en a muralla –no puede ser que es lo que acaba de pasar… e-el m-me be-so y yo co-rres-pondi… ya no lo puedo negar tu… creo me gustas Hibari Kyoya – pensó Tsuna aceptando la verdad con una mirada triste – pero aunque me gustes… aunque así sea, no podemos estar juntos… debo alejarme de ti… lo siento…
CONTINUARA….