-¿Onodera, estás listo? – pregunta el azabache mientras se vestía y seca su cabello después del baño, el castaño estaba en la cocina intentando preparar un desayuno decente, aunque sus pensamientos lo perdieran de la realidad.
-oye Onodera,¿ por qué no contestabas, te sientes bien? – pregunto el azabache, tomando del hombro al castaño, en verdad estaba preocupado, se niega a dejarlo dormir y ahora esta distraído “acaso… aun piensa en el idiota oxigenado” –esos pensamientos molestaban al ojimiel, su castaño pensando en otro hombre que no fuera él, pero lo entendía, el solo llego de golpe a su vida y cambio todo su mundo, “ahora que lo pienso cuando fue la última vez que lo vi sonreír sin mostrar desagrado, ni siquiera lo he visto escribir”.
-estoy bien Takano-san, desayunemos para irnos, entre más pronto salgamos, más pronto regresaremos – responde el castaño quitando la mano del azabache de su hombro “lo que menos quiero en este momento es confundirme más, Takano es amable pero no quiero confundirme más” –después de ese pequeño acto del castaño un silencio reino en el comedor, no incomodo pero tampoco placentero.
En el auto (desde aquí narra Onodera)
a donde planea ir, preferiría seguir escribiendo, es incómodo estar así, solo hay silencio. –Takano –san ¿A dónde vamos ya hace más de veinte minutos que salimos de casa a donde me llevas –ya no resto la esto, como es que me ponga tan nervioso, y aun así el tratar de decir una palabra amable o un cumplido me es imposible.
-no te impacientes, por casualidad vi que tienes muchos libro del mismo autor y en la librería que está cerca del aeropuerto, tendrán una firma de autógrafos de su último libro, al parecer es una firma privada, por lo tanto los boletos eran limitados tengo una conocida que consiguió dos pases al parecer el autor de debía un favor –no sé qué me sorprendió más, la sonrisa que sus labios expresaron tan descuidadamente, era cálida, como si el hecho de hacerme feliz fuese suficiente, o tal vez fue más sorprendente el que prestara tanta atención como para saber mis gustos …. ¿Mis gustos?….yo no sé qué le gusta Takano-san, no sé nada de él.
-gracias… muchas gracias, Takano-san…. ¡después permíteme compensarte! –que idiota fue lo más que pude decir, él no ha desviado la vista del camino, pude decir algo más rayos ¡porque mi cerebro y mis sentimiento no se ponen de acuerdo!
-sonrie – ¿qué dijo,? – Disculpa, pero a que te refieres – no lo entiendo –solo sonríe para mí, es todo lo que debes hacer….aunque si quieres compensarme con algo déjame tomar tu mano, cuando quiera. –esa sonrisa otra vez porque luce tan feliz, no lo entiendo, mi corazón se acelera y mi pecho se siente raro, tengo miedo de decir algo, que cobarde, habla di que sí di que tú también quieres tomar su mano, que quieres abrazarlo y besarlo ¡dilo! –sí…. Si no hay más remedio supongo que está bien – soy patético……
Por fin después de más de cuarenta minutos en carretera llegamos, no puedo negarlo estoy emocionado no solo por conocer a sensei, a quien admiro espero poder pedirle un consejo para un escritor novato, aunque también estoy emocionado de estar aquí con Takano él hizo esto por mi….. no él ha hecho mucho más. Parece que nos están esperando-a usted es Takano Masamune-san ¿verdad?, por favor síganme sensei los está esperando, la firma termino, sensei los espera solo a ustedes, parece que la pareja de sensei le hablo de que Onodera-san es un escritos, dijo que si lo quería podía dar algunos consejos a su kohai– cada paso me pone más nervioso, un minuto, ¿sensei sabe de mi como, nadie sabe que escribo además de Takano, pero ella dijo su pareja, Takano conoce la pareja de sensei ¿!sensei tiene pareja!? –que haces – me tomo por sorpresa Takano, sosteniendo mi mano –no estés nervioso es una buena persona – tonto, me pone más nervioso el que tomes mi mano, como es que no puedo expresarlo con palabras, soy prisionero de mi propio orgullo y miedo.
Un par de horas despues….. de regreso al auto…
-takano-san, takano-san. Fue estupendo, tenías razón sensei es buna persona aunque lo sabía, pero escuchaste dijo que mi historia es interesante, lo escuchaste verdad, y con los consejos que me dio puedo mejorarla aún más, ya lo veras será una gran obra y por supuesto que será dedicada a sensei –Dios estaba tan eufórico, jamás podre olvidar esto, mi corazón late como loco, mis mejillas están rojas y una estúpida sonrisa en mi rostro pero no puedo evitarlo estoy tan feliz que podría –eeee solo él, eso me pone celoso –no onodera no lo hagas no debes –claro que también a ti tonto, sino fuese por ti no lo habría conocido, muchas gracias Takano-san –no puede evitarlo corrí como idiota antes de entrar al auto para abrazarlo, nuestros labios están tan cerca…. Su aliento es a menta Takano ¿si te dijera que te amo, tú me corresponderías de la misma forma o solo jugarías con migo?
-onodera…… esta tan cerca por que no me besas, si lo haces te corresponderé, si me besas te diré que me enamore –entra al auto, iremos a almorzar –jajajajaja no puedo evitar reírme de mí, cómos si fuera a besarme después de rechazarlo constantemente, es mi culpa el haber provocado esta situación, pero tal vez está bien así, tal vez es porque no debo de decirle a Takano que lo amo, simplemente es una confusión de mis sentimientos, solo lo aprecio por ser tan amable él es un gran amigo solo eso.
Después de eso Takano-san me llevo a almorzar en un lugar muy discreto y agradable, cumplió su amenaza e hizo que tomara su mano todo el tiempo, hablamos de cosas sin sentido, que me hicieron feliz, saber que a Takano-san no le gustan los pimientos (tomado de usagi-san), que le gustan las películas de terror, el manga shojo, jugar ajedrez, el color negro y disfruta de un buen día de lluvia, que prefiere el frio al calor y que no le gustan las cosas dulces, cosas tan triviales, me hacen tan feliz, pero oprime mi pecho el estar tan confundido.
-onodera, está oscureciendo ven vamos a nuestra última parada- no replique, deje que tomara mi mano y regresáramos al auto, donde sea que vaya mientras sea con Takano, está bien.
El paisaje es hermoso llegamos a un mirador, al llegar Takano no hablo solo bajo del auto y abrió la puerta para mí, un detalle tan tonto me hace feliz tomo mi mano y me llevo hasta la barandilla de seguridad, ese paisaje jamás lo olvidare, las estrellas brillaban apenas visibles opacadas por las constelaciones que formaban las luces de la ciudad, tenía frio, pero la mano de takano sosteniéndome me mantenía en calor, lo que me dijo jamás lo olvidare –Onodera …. Dijiste que no confiabas en mí, pero doblegare tu orgullo, doblare tus miedos, te hare quererme creo que la manera de plantearlo para que tú no te opongas es …. Una competencia, si yo pierdo estaré junto a ti para siempre cuidándote y apoyándote, si tu pierdes tu deberás quedarte junto a mí y permitirme cuidarte. –de ambas formas gano yo -¡que eso es trampa de ambas formas pierdo yo!- porque no puedo decir lo que siento .
-es posible pero quiero ganarte, quiero que creas en mí y en que te amo –yo.. también te amo pero creo que seguir tu reto será perfecto para disipar mis dudas -¡bien! Entonces no perderé y…. te volverás mi esclavo y devolverás mi casa –bien no era lo que quería decir pero al menos de ambas formas Takano estará aquí –está bien – sello esas palabras con un beso en mi mano, la cual jamás soltó, hasta regresar a casa, hubiera deseado jamás soltarlo, y que todo fuese así para siempre.
Pero … la felicidad no es eterna y nos esperaban pruebas difíciles.