Haruno los vio pasar como una raya, venían de la otra cueva. La novedad no era que anduvieran juntos porque les daba por discutir a cada rato y sabía que Naru quería que volviera a ese lado de la cueva. La novedad era que estaba arrastrando a Sasuke kun de la mano como huyendo de algo y que el pelinegro se dejaba llevar.
Algo muy raro estaba aconteciendo, se dijo para si la pelirrosada con un mal presentimiento pues en frente tenía a otra pareja de Naruto y Sasuke que eran un ejemplo muy claro de lo que podía pasar. Podía soportar que la Ino le quitara a Sasuke pero si lo que creía pasaba…
IMAGINACION DE SAKURA.
Su Konoha, camina por la calle principal y se topa con Ino, Shikamaru, los Hyuga, Aburame, Lee e Inuzuka con Akamaru que conversaban.
¡Hola, Sakura! ¿Ya volvieron? ¿Encontraron ayuda?—le grita toda feliz Ino de que Sasuke volviera aunque solo ve a Sakura y a Kakashi sensei al lado de ella.
Y luego…
…tras ellos…
…Naruto y Sasuke kun caminando de la mano.
Todos se quedan con los ojos muy abiertos.
FIN DE LA IMAGINACION DE SAKURA.
¡Que horror! Se dijo ella con la respiración agitada.
¡Guau! De la que nos salvamos—dijo el rubio sentándose luego de soltar al pelinegro.
Sasuke miró hacia la otra caverna y vio al otro par de Kakaobi salir de allí, entonces pretendió meterse de nuevo allí. Después de lo visto quería estar un rato alejado de todos.
¡Oy! ¿A dónde vas? Acabo de sacarte de ahí—le dijo el ojos azules.
Y yo voy a volver a meterme. ¡Rayos! ¿Cuándo crecerás y dejarás de ser tan molesto?—le preguntó el cabreado Uchiha antes de irse.
Sakura que los veía con atención respiraba más aliviada. Estaban siendo como siempre. Había olvidado que los otros Naruto y Sasuke habían pasado por lo mismo.
Los ojos de Naru se apagaron un poco mientras lo miraba marcharse. “Tal vez deje de molestarte antes de lo que crees” pensó el rubio con congoja en su corazón. Luego se levantó sacudiéndose el polvo de los pantalones con su risa de siempre “Pero hasta entonces molestaría otro tanto a ese teme”.
Sasuke no se hubo terminado de sentar que ya tenía a cierta persona delante. Naruto en cuclillas con su risa de “Yo sé algo que tu no sabes, jeje” que tanto le fastidiaba.
¡Dije que te dejes de molestar! ¿Acaso ahora también eres sordo?—le dijo.
¿No te da miedito?—preguntó Naru—Otra parejita puede venir a retozar mientras estas solito. ¡Jeje!—le dijo el rubio—¡Estamos un poco rodeados, dattebayo! ¿No? Si hasta parece que Kakashi sensei se está… involucrando—añadió con su sonrisa zorruna.
¿Cómo era posible? Se preguntó el Uchiha.
¿Tú… todo el tiempo has estado… viéndonos la cara usuratonkachi? Todo el tiempo tú…--dijo el pelinegro fastidiado de haber sido engañado por ese idiota.
¡Era muy divertido, jeje!—dijo el otro riéndose de lo lindo en la cara del orgulloso Sasuke Uchiha que quería comérselo crudo.
Todo este tiempo. Hasta aquella vez—Sasuke recordó todo aquello del seme y uke que para ahora sabía muy bien de que se trataba o él creía porque es de recordar que en su cabeza él y Naruto tienen los papeles cambiados—¡Debería fulminarte! Tú te ríes porque tienes la mejor parte en aquella pareja—dijo el pelinegro apuntando hacia la otra caverna. El ojos azules lo miró sorprendido.
¿Eso crees?—preguntó el rubio pues en esa pareja él estaba embarazado.
¡Claro!—dijo Sasuke quien pensaba que el embarazado era él.
¿Quisieras cambiar de lugar?—preguntó, hasta sorprendido de sí mismo, Naruto.
¡Seguro!—dijo el pelinegro antes de darse cuenta de que había caído en una trampa--¡Idiota!—le dijo metiéndole un golpe en la zona en que estaba vendado.
¡Auch!—gritó Naruto, entonces el pelinegro se preguntó que estaba pasando, no por primera vez. El rubio debía haberse repuesto rápido de ese golpe, después de todo no era una herida como en otro tiempo había recibido, era algo menor y sin embargo.
¡Tú estás ocultando algo!—dijo el ojos negros con mirada acusadora.
¡No sé de que estás hablando!—fingió Uzumaki.
¡No lo engañaras con eso Naruto! ¡Los Uchiha son buenos para descubrir debilidades y éste te conoce muy bien!—advirtió Kurama. Naru sabía que tenía razón. El chacra de ambos estaba muy agotado debido a la maldición. Tanto que hasta le costaba mantenerse de pie pero no lo dejaba notar. Por eso su herida no había sido curada. Todo el chachra estaba siendo consumido. Pronto el kyuubi y él no aguantarían más.
¡Déjame ver eso!—dijo el Uchiha y antes de que pudiera evitarlo había arrancado la ropa y el vendaje que cubría su hombro. La línea de sangre seguía tan fresca como si recién se la hubiera hecho. Se miraron a los ojos. Sasuke sabía que algo iba muy mal. Se lo decían sus entrañas. Además estaba el hecho de que no se defendió como lo hubiera hecho antes con Orochimaru y el Akatsuki—Ahora mismo vas a decirme que pasa—le advirtió--¿Es por eso que estamos aquí, no es cierto? No es que necesitemos más de un Kurama, algo le pasa al tuyo y a ti y no puedes defender Konoha de Orochimaru. Aunque sabes bien que…--añadió antes de ser cortado.
Naruto supo que era el momento de dejar de fingir y puso cara seria--¡Escucha bien Sasuke! Sé que no le tienes tanto aprecio como yo a Konoha pero ahí están nuestros amigos de toda la vida, la gente que nos protegió y crió como Kakashi sensei, también tengo a Tsunade Oba san y es algo que Jiraya Ero senin también querría porque siempre él la protegió, tenemos que encontrar un sustituto y rápido.
¿Era eso el por qué de tanto apuro por lograrlo? Tanta impaciencia de tu parte. Pensé que simplemente no querrías dejar a Konoha por tanto tiempo pero ahora veo que hay otra razón idiota. ¿Por qué no me lo dijiste antes? Apuesto a que Sakura y Kakashi ya lo saben. ¿Es que no confían en…--dijo Uchiha antes de ser detenido por el movimiento de cabeza de su amigo.
¡Solo la abuela Tsunade y yo lo sabemos! Es mejor guardar el secreto sino capaz que Konoha cae en pánico—dijo Naru con semblante serio mientras con los ojos entornados el otro lo miraba.
Dime que pasa o yo…--dijo el pelinegro pero esta vez una mano alzada lo detuvo.
No es necesario que amenaces, Sasuke. ¡Que bendita costumbre se te ha vuelto, dattebayo! La verdad…—dijo Uzumaki parándose--…no es necesario que sepan que pasa, solo que podemos arreglarlo si llevamos a otro Kurama para que yo pueda descansar y reponerme—
¡No te conocía esa fase de mentiroso, chico! Hasta para mi guardas sorpresas—exclamó en su interior Kurama, descansaba en sus cuatro patas con sus ojos cayéndose de sueño por su falta de vitalidad a raíz del robo del chacra.
¡Se hace lo que haga falta! Si ellos están perturbados no se enfocaran en encontrar a otro Kurama sino en cuidarnos y eso sería malo para Konoha—dijo el chico en su interior. En verdad quería decírselos pero hacerlos sufrir tampoco era su idea de ser amigo.
Pero la falta de fuerzas ya no podía dejar de ser notoria y entonces se derrumbó justo sobre Sasuke quien sorprendido de verlo derribarse lo atrapó.
“¡Está muy frío!” pensó sorprendido Uchiha mientras rodeaba con los brazos al que estaba ahora de rodillas frente a él con la cabeza derrumbada en su pecho. ¿Qué le estaba pasando en verdad? Lucía enfermo. Sacó el protector para ver si tenía fiebre y es cuando su corazón se agitó al percibir algo muy familiar entre los cabellos que caían sobre la frente de Naruto, algo negro se extendía tras las hebras doradas. Despacio las apartó--¡Naruto, esto es…--dijo.
Una maldición de las de Orochimaru aunque no es como la tuya. No creo que él me la pusiera porque parece no saber nada de ella—le explicó el muy cansado Uzumaki arrebujado entre sus brazos.
¿Entonces quien?—preguntó el ojos negros.
¡Creo que fue Kabuto!—dijo el otro antes de perder la consciencia. Ultimamente se le daba demasiado dormir por la falta de energía y Sasuke estaba tan calentito.
¡Uy si! Eso se siente muy bien. ¿Verdad Narutin?—dijo Kurama burlón mientras sentía también esa acogedora calidez a través del cuerpo del ojos azules.
¡Cállate!—le dijo Naruto en voz alta sorprendiendo al ojos negros.
¿Qué?—preguntó el pelinegro pero se dio cuenta de que el otro se había dormido.