-¡MIENTES!-grito golpeando la mesa
-¡Claro que no!-replico furioso-¡¿CUANTAS VECES VOY A TENER QUE DECIRLE QUE NO PASO NADA?! ¡DEJE DE MOLESTAR!
-¡No te creo!-dijo mirándolo con burla-Vamos, no seas así. Dime, ¿Qué paso anoche? ¿Cuántas veces lo hicieron? ¿Se te metió hasta dentro? ¿Las embestidas fueron rápidas o fuertes? ¿o ambas? Te lo suplico, cuéntamelo
-¡CIERRA LA BOCA! Y CONTROLE SU PODRIDA MENTE, YA LE DIJE QUE NO PASO NADA-grito sonrojado
-¿En serio?-pregunto dudoso-Entonces, ¿Por qué estás tan sonrojado?
-Isaka-san, ¡Ya basta!
-¿Ehhh? ¿No se supone que “Isaka” eres tú?
-¡No!, lo único que tengo de usted, es su odioso aspecto
-¡Oye! Eso ofende
-Pues, se lo tiene merecido. Y entienda que no puede andar por ahí, preguntándole a cualquiera como fue su noche con su pareja, ni exigiendo detalles del…del..-se sonrojo más-…de “eso”
-¡Ah ja!-exclamo señalándolo-Entonces si hubo sexo, anda, dime ¿Lo disfrutaste? ¿Qué tan bueno es?
Ante las preguntas tan desvergonzadas de Isaka, Yokozawa perdió toda paciencia, para tomar una carpeta muy gruesa llena de papeles y lanzársela a l cabeza, con tal fuerza que lo tumbo. El peli azul, se retorció en el suelo, sobando su cabeza justo donde lo había golpeado
-¡Aaaaaaaaaahhhhhhhhh!-grito-Idiota, ¿Acaso quieres matarme?
-Precisamente, eso era lo que quería
-¡Maldito! Lo pagaras-dicho esto, se levantó rápidamente y se le abalanzo encima, así ambos comenzaron a forcejear
En eso, la puerta de aquella oficina se abrió, dejando entrar a cierto castaño de ojos miel, quien soltó una carcajada ante tal escena
-Ajajajajajajajaja
-¿Eh?-al oír la risa, Yokozawa e Isaka se separaron, intentando disimular
-Ammm…ejem, K-Kirishima-san, ¿Q-que haces aquí?-pregunto Yokozawa
-Jajajajaja. Bueno, vine porque anoche me había invitado a desayunar juntos, ¿Lo recuerda?
-Ah, sí. Jejeje, tomare mi maletín-se acercó a la mesa donde había dejado sus cosas, junto a una cafetera
-¿Desayunar?-le pregunto Isaka a Kirishima
-Sí, Isaka y yo iremos a desayunar juntos, pero Yokozawa no tienes por qué ponerte celoso, yo te amo solo a ti-respondió acariciando su mejilla
-¡No estoy celoso!-replico frunciendo el ceño
-Waw, eres tan lindo
-¡¿Qué?!
Yokozawa, comenzó a enfurecerse ante las palabras del castaño. Termino de guardar sus cosas, tomo su maletín e inconscientemente, también tomo la cafetera llena de café, sumamente caliente, y comenzó a caminar hacia Kirishima
-Vamos amor, que no te de pena, Isaka-san ya sabe de nuestra relación, así que no tienes por qué contenerte-dicho esto, lo abrazo por la cintura y se acercó lentamente a sus labios
-¡Quítate tus sucias manos de encima!-se removió tratando de zafarse
-¿Por qué? Sé que también quieres
-¡No es cierto! ¡Aléjate, aléjate!
-Hummm, que dulce-sonrió ligeramente, y rozo sus labios con los de Isaka
-Tsk-con esto, Yokozawa les paso de lado, arrojándole el café caliente a la cara de Kirishima
-¡Waaaaaa!-grito el castaño, soltando a Isaka y limpiándoselo con rapidez
-Hay, lo siento. Se me derramo-dijo fríamente
-¿Qué? Usted lo hizo a propósito-lo acuso el mayor
-Lo que digas, ¡Vámonos ya!
-No nos vamos, hasta que…¡Hey!-ni siquiera termino de hablar, porque Yokozawa empezó a jalarlo fuera de ahí
-Ryuuchirou-sama, ¿Adónde cree que va? ¡Tiene trabajo!-pero el simplemente ignoro a Asahina y desapareció en los pasillos
MEINTRAS TANTO…
-Pero mi Señora…
-¡PERO NADA!-grito furiosamente, una voz en el aire-Takayama, ese contrato tiene que ser sellado, no debemos dejar que esos hombres lo interrumpan, ¿Tienes idea de lo que perderé?
-Mi Señora, tenga piedad, ¿Qué tal si ellos aprenden la lección?
-Jajajaja-se rio de su “ingenuidad”-Los hombres nunca han sabido ni sabrán lo que significa Amar a alguien, son tan arrogantes y egoístas, absolutamente nada cambiara eso. Escúchame bien, tienes que detenerlos a toda costa, ¿Entiendes?
-Afrodita-sama, ¿Qué le hicieron los hombres para que sea tan cruel?
-¡Eso no es de tu incumbencia!, te ordeno que los detengas, tendrás que desaparecer a uno de ellos
-¿Desaparecer?-pregunto con espanto
-Sí, envíalos al reino de Hades, es la única manera de evitar que interrumpan sus deseos. Recuerda que si mueren, también se sella antes de tiempo. Mata a Yokozawa y a Isaka
-¡No lo hare!-protesto con firmeza-Ellos son mis amigos
-No te lo estoy preguntando, es una orden
-¡No!
-Takayama Kurumi, como mi sacerdotisa, debes entender las consecuencias de desobedecerme, ¿Verdad?
-No me importa lo que hagas
-Oh, ¿Y tampoco te importa lo que le haga a tu querida hermana menor?
-¡Con Akari no te metas!-grito enojada
-Pues si no quieres que sea ella a la que transporte el barquero, entonces, ¡Haz lo que te digo! Recuerda que apenas es una niña, en sus 8 añitos cumplidos, sería una tragedia que muriera tan joven
-…-
-Tú eliges Takayama, o es ella o ellos los que lleguen al reino de HADES
-¡…!-“Perdón…perdóneme chicos, pero…ella es mi hermana, es lo único que me queda”-Ellos-contesto tristemente
-Buena chica-con esto, la peli negro se dejó poseer por la diosa, cambiando su color de ojos por un rojo sangre…sangre de todas las parejas que murieron por culpa de sus deseos egoístas y que ahora sufren las consecuencias
CON YOKOZAWA…
Como no podían ir tan lejos debido al poco tiempo que tenían, optaron por entrar a Pandaway, donde ordenaron algo sencillo y ligero. Apenas se fue la mesera, ambos comieron en completo silencio sin siquiera intercambiar miradas. Así estuvieron, hasta que terminaron su desayuno, y Kirishima comenzó a hablar
-Isaka-san, ¿Qué tiene en mi contra?
-¿Qué dices? Yo no tengo nada contra ti, ¿Por qué lo preguntas?
-Porque anoche, me grito y me golpe con una almohada, luego, hace unos momentos, me arrojo café caliente a la cara, es más, que obvio que se trae algo conmigo
-No sé de qué me estás hablando-volteo hacia otro lado
-¿Quién cree que soy?-cambio a un semblante muy serio-Por cierto, últimamente ha estado muy cercano a mi novio
-¿Eh?-se volvo hacia el
-Al principio lo ignore, pero después de lo que hizo contra mí, empecé a dudar
-Perdóname, pero no te entiendo. ¿Qué quieres decir?
-¡Claro que lo sabe!-golpeo la mesa- Usted me odia por ser amante de Yokozawa, ¿verdad?. Escúcheme bien, no porque sea mi jefe quiere decir que tiene privilegios, no quiero que se le acerque, que lo toque o que siquiera le dirija la mirada o le juro que no respondo. ¿Me entendió?
-No sé qué diablos se está imaginando, pero yo no quiero nada con Yokozawa, simplemente es mi amigo
-No le creo nada
-Pues no es mi problema. Y si no vas a controlar tus malditos celos, mejor ya vámonos-dijo levantándose de la mesa
-Bien, de acuerdo-se levantó-Pero la advertencia va enserio
-Lo que digas
Ambos, pagaron la cuenta y salieron del local. Caminaron en silencio, hasta llegar al semáforo, el cual estaba en rojo y tuvieron que esperar a que cambiara
-Lo dejare más claro Isaka-san, si se acerca a Yokozawa, lo matare
-¡Ya le dije que no quiero nada con el!-“Dios,¿ Con quién me fui a meter?”-Además, ¿No cree que está siendo muy posesivo?
-No, cuando se trata de la persona que amo
-Sí, pero no es como si yo quisiera estar con el
Sin darse cuenta, Takayama apareció detrás de ellos y se ocultó en las sombras de un callejón de donde podía verlos perfectamente, así como escucharlos
-Pues, sus acciones me demuestran lo contrario. Sé que él puede ser muy seductor, pero no significa que usted puede aprovecharse de el
-¡¿A QUIEN DEMONIOS LLAMAS SEDUCTOR?!-grito, al momento en que el semáforo cambio a verde y comenzando a cruzar la calle, dejando a Kirishima en la acera
-No sé por qué se pone así, no se lo dije usted y no…-entonces, comenzando a discutir, uno desde la acera y el otro parado a la mitad de la calle
“Jum, esta es mi oportunidad”-pensó la ojos rojos. Extendió su mano hacia donde el semáforo marcaba las luces y apretó su puño, haciendo que la luz cambiara de verde a roja, luego extendió su otra mano hacia un extremo de la calle, pronuncio unas palabras incomprensibles y de la nada, apareció un gran camión de carga pesada-“Tienes una cita con Caronte, Yokozawa. No quiero que llegues tarde”
-…además, a mí se me hace muy extraño que de la nada, se hicieron tan buenos amigos
-¡Eso es algo que a ti no te concierne! Controla tus podridos celos, ¿Quieres?
-Y, ¿cómo quieres que me calme si…-en eso, vio al gran camión conducir a toda velocidad hacia el peli negro, y ya estaba muy cerca-¡ISAKA-SAN, CUIDADO!
-¿Eh?-confundido, vio a Kirishima correr hacia él y abalanzársele encima, empujándolo al otro lado de la calle, justo cuando el camión paso detrás de ellos-¡Ah!-se quejó del dolor al azotarse al suelo con el castaño encima de el
-Huff-suspiro aliviado-¿Se encuentra bien?-le pregunto, levantándose y ayudándolo a ponerse de pie
-Sí, g-gracias
-No fue nada. Vamos, regresemos a la empresa
-C-Claro
Ambos, regresaron a Marukawa y continuaron con su trabajo sin prestarle tanta atención al extraño suceso. Aunque, realmente se les había hecho muy raro, en primera, el semáforo había cambiado de verde a rojo en tan solo un segundo, y luego, el camión que salió de quien sabe dónde que casi los mata, pero prefirieron dejarlo de lado, convenciéndose a sí mismos de que tan solo había sido un descuido.
Afrodita ardía en furia, su plan fallo. Apretó los puños y rechino los dientes, para luego incendiarse en flamas azules
“Yokozawa-san, Isaka-san, prepárense, que Caronte los espera…y Hades reclama sus vidas. Deben morir”