Desde ese día, Yokozawa comenzó a acercarse demasiado a Kirishima, aún en el cuerpo de Isaka. Empezó con pequeños ataques de celos...
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-Kirishima, ¡Suéltame, imbécil! ¡Estamos en el trabajo!-decía tratando de empujarlo
-¿Y qué? Al fin, ya todos saben de lo nuestro, no vamos a morir por besarnos, ¿no lo crees? Mmm, déjame saborearte un poco-se acercó más a sus labios
-¡No quiero! ¡Aléjate bastardo!
-Yo creo que si quieres, admite que me amas
-¡Claro que no!...¿Q-Qué crees que haces? ¡No te atre-nnnnnmmmgh-sus labios fueron sellados por un apasionante beso
Kirishima lo estrechó con más fuerza, para luego estrellarlo contra la pared, bajó lentamente sus manos, acariciando su cintura. Por más que Isaka se resistía, sus fuerzas no daban para empujar al mayor, estaba prácticamente encarcelado en sus brazos. En eso, sintió un aura oscura contaminar el ambiente, volvió sus ojos hacia la entrada del departamento de Ventas, encontrándose con nadie más ni nadie menos, que a Yokozawa mirándolo con una mirada fulminante. El peli negro, se acercó rápidamente hacia el castaño, lo jaló hacia atrás y le metió el pie, haciendo que cayera de espaldas
-¡Auch!-se quejó Kirishima-¡OIGA! ¡¿Qué diablos le pasa?!
Yokozawa ignoró sus palabras, y miró penetrantemente a Isaka, quien se asustó ante aquella mirada. El menor, simplemente, salió de ahí dejando a un muy furioso Kirishima y a un muy asustado Isaka
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...luego, siguió con las visitas cada vez más constantes a la residencia Kirishima, donde por alguna razón, siempre terminaba cocinando con la dulce Hiyori...
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-¡Isaka-san!-gritó emocionada, y abrazándolo por la cintura
-Hola Hiyo-chan, vine a traerte unas pastas dulces-le entregó la bolsa con una tierna sonrisa-Lamentó molestarte
-Nada de eso-se acercó y tomó la bolsa-Oni...Isaka-san, usted nunca será una molestia, ¿verdad papá, Oni-chan?-preguntó volteando a verlos
-Claro Hiyo-chan-respondió Isaka
-Si-dijo con desganó el mayor
-¿Escuchó? Hummm, ¿le gustaría ayudarme a cocinar?
-Ah, lo siento Hiyo-chan, tengo mucho tra...
-Vamos, por favor-insistió arrastrándolo hacía la cocina
-NO creó que....¡¿QUÉ DEMONIOS SUCEDIÓ?!-exclamó sorprendido, al ver la cocina humeada
-Oni-chan trató de cocinar para nosotros, pero...
-Se incendió la camisa-respondió Kirishima sentándose en el sofá
-¿Qué?-molestó, se acercó al oído de Isaka y le susurró-Escucha imbécil, esa camisa era una de mis favoritas, ¡Ten más cuidado!
-¡Yo no tengo la culpa!-replicó-Tu estufa no sirve, trate de encenderla, pero no funcionó
-¡Tal vez porque mi siquiera le abriste al gas! ¡Idiota!
-¿A quién llamas idiota?
-A ti, ¿o es qué también eres sordo?
-¡¿QUIÉN DEMONIOS ES SORDO?!-gritó, atrayendo la atención de los Kirishima, lo que hizo que se sonrojo-Ah...jeje...ammm...yo
-Hiyo, ¿comenzamos?-preguntó Yokozawa, tratando de desviar su atención
-¿Eh? ¡Ah!, sip. ¿Hacemos curry?
-Claro, lo que quieras
Así, ambos empezaron a cocinar. Al paso de unos minutos, ya estaban jugando a embarrarse de comida, soltando risitas que resonaban en todo el lugar. Mientras Isaka, los miraba asombrado por la tan amorosa relación que mantenían, era como si estuviera viendo a una madre cocinando con su hija, sin duda, había cosas que el "Oso de Marukawa" tenía muy bien ocultadas. Por su parte, Kirishima solo fruncía más el ceño
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...y por último, sus insistencias al castaño para establecer una relación más estrechas. Sin embargo, sus intentos siempre terminaban en rechazó total. Como la vez en la que trató de compartir el elevador los dos juntos, pero apenas entró, Kirishima se salió asegurando que se le había olvidado algo. O la vez en la que trató de invitarlo a salir, pero este se rehusó rotundamente. También estaba cuando ambos coincidieron en la sala de descanso, donde extrañamente, solo estaban ellos dos, sin embargo, lejos de platicar de, por lo menos, cosas de trabajo, como una charla de simples compañeros, solo se lanzaban miradas muy serias, y la de él era muy fría. Después, él solo se levantó y salió de ahí sin decir nada y aunque Yokozawa trató de detenerlo, Asahina llegó y lo arrastró de vuelta al trabajo. Parecía que cada vez que intentaba acercarse o se daba una oportunidad, siempre era arruinada por el peli café y sus "problemas" de trabajo, por Hatori, Takano, Iokawa y Takayama, capaz de que siempre perdía su oportunidad. Por su parte, Isaka solo se mantenía al margen de todo, trataba de no interponerse en los intentos de Yokozawa, ya habían pasado tres días, solo les quedaban dos y el peli negro trataba desesperadamente, de acercarse al editor en jefe, pero aunque tenía a Hiyori de cómplice, nada de lo que hacían, servía de algo. El castaño seguía creyendo que, a quien veía como Isaka, trataba de quitarle a su novio, por eso se alejaba de él. Sin embargo, el verdadero gerente, no hacía nada para salir del problema, ni se acercaba a Asahina ni le hablaba, y cuando solían coincidir en alguna área, simplemente se ignoraban. No es que quisiera seguir como el "Oso gruñón", sino que no quería volver a esa vida tan sola que llevaba con el secretario, pero así como no quería eso, tampoco quería seguir ahogándose en las imparables demostraciones de cariño, por parte de Kirishima, eso sin contar sus intentos de violación que cada vez se hacían más constantes-"¿Por qué no puede existir alguien equilibrado?"- ¿Por qué Kamisama o Zeus no crearon a alguien así? Uno que no fuera tan pervertido, pero tampoco tan frío, alguien que estuviera en medio de ambos, eso sería perfecto. No es que no lo amara, sino que no estaba seguro de que él lo hiciera, lo que lo hacía pensar que solo estaba con él por lastima-"Tal vez, siempre fue así. No tengo por qué ponerme tan mal, es una vida que yo escogí, supongo que así es el Amor, ¿no se supone que es verdadero solo cuando se demuestra con acciones en vez de palabras?"-pero lamentablemente para él, ni eso le daba el peli café. Rara vez llegaba con rosas y cuando lo hacía, era para disculparse por algo-"Milagros, eran cuando me invitabas a salir y me hacías el amor"-tomó sus cosas y salió de la empresa, dispuesto a descansar. Apenas salió, vio a Yokozawa tratando de hablar con Kirishima, pero este parecía estar muy molesto con él, al grado de que comenzaron a forcejear
-Kirishima, escucha, hay algo muy importante que tienes que saber-decía el peli negro
-¡No quiero oír nada que venga de ti! ¡Suélteme! No porque sea mi jefe quiere decir que seré considerado
-Arrgg, ¡yo no soy tu jefe!
"Tal parece que se lo dirá"-pensó desinteresadamente. Caminó, pasándoles de lado, no quería verse envuelto en problemas, así que decidió ignorarlos. Comenzó a irse, escuchando que los gritos aumentaban, hasta que escuchó una fuerte bofetada y al voltear, se encontró con Kirishima con la mejilla roja y rechinando los dientes de la ira. El castaño, se dio la vuelta, y corrió cruzando la callé, Yokozawa quiso ir tras él, pero...se detuvo a la mitad de la callé, una luz cubrió sus ojos, una que se acercaba cada vez más, cegándolo temporalmente, hasta que sintió un tremendo golpe en su estomagó, creyó haber separado los pies del suelo durante un momento, el aire frío golpeó su cara, al igual que su cuerpo, para luego sentir su fuerte aterrizaje en el suelo, fue tal el impactó que no pudo siquiera gritar, el dolor lo consumió, quitándole sus fuerzas para hacerlo
-¡ISAKA-SAN!-gritaron Kirishima e Isaka corriendo hacia él
Intentó abrir los ojos, pero no pudo, le era tan dificultoso. Su respiración comenzó a complicarse, sintió un liquidó empezar a empaparlo lentamente. Poco a poco, todo se volvía borroso, escuchó a Kirishima llamando a una ambulancia desesperadamente, a Isaka asustado y tratando de mantenerlo consiente, y...las manos de Asahina estrecharlo con fuerza, sus cálidas lágrimas mojar su rostro, y su desesperación porque alguien lo ayudara
-Te amo...te amo Ryuuchirou, por favor, ¡No me dejes!
Fue lo último que escuchó, para luego caer inconsciente debido al dolor
CERCA DE AHÍ...
Cierta peli negro de ojos azules, lloraba silenciosamente, recargada en la pared de un oscuro callejón. Escuchaba los gritos y el llanto de un hombre que creé estar perdiendo a la persona que ama, cuando no es así, y quién debería estar en su lugar, solo esta parado y desinteresado por la situación, sin saber que es él quien lo pierde todo. Y llora, Takayama llora con más fuerza, porque sabe que ella fue la culpable de todo, fue ella quien apareció el camión justo cuando Yokozawa cruzaba la callé, fue ella quien lo provocó todo...y fue ella quien le esta arrebatando la vida a la persona que ama
-Deja de llorar-escuchó la voz fría de Afrodita hablarle en el aire-Sabes que odio que te pongas así por cositas de nada. Deberías estar feliz, hiciste un excelente trabajo. Además, sabes las razones, si interrumpían el contrató, yo perdería parte de mi belleza y juventud, ¡No puedo permitirlo!
-A...no importa eso, le acabó de hacer algo horrible al hombre que amo...no soportó la culpa
-Haz tenido que hacer peores cosas
-Pero...ellos no se merecían esto
-Eso debieron pensar antes de invocarme. Además, recuerda, ¿o son ellos o la linda Akari? Tú decides
-...-
"¿Quitarle la felicidad a quienes sí la tienen?...¿Acaso no sería egoísta?"
-Jum-rió divertida-Hades estará complacido conmigo cuando llegué a su reino y me quemé en las flamas del castigó
Solo dos días más...
Un accidente cambiará todo...
¿Padre Tiempo les tendrá piedad?