Ya todos los guardianes estaban llegando a la base vongola a la cual entraron lo más rápido posible para ir a buscar a cierto hitman para preguntar por su amigo el cual se había adelantado y por el cual estaban muy preocupados, lamentablemente cuando llegaron donde el bebe a preguntar por su jefe y amigo se encontraron con la respuesta de que el joven castaño no había llegado aún a la base lo que los preocupo aún más después de todo el joven debió haber llegado antes que todos ellos, más no eran nos únicos preocupados pues el hitman bebe estaba igual o más preocupado que ellos, le preocupaba la conversación, el escape de su alumno y su ahora desaparición.
Ya era de noche y pese a haber buscado al menor por cámaras y de haber salido de la base en su búsqueda no lo encontraban, habían hablado con Irie y este no sabia nada de el pues según él, el castaño le había dicho que se adelantaría y nada más, lamentablemente algunos como Gokudera y Hibari no le creían y comenzaban a pensar que este le había hecho algún daño a su cielo por lo que ya planeaban macabramente la muerte del pelirrojo, más sus planes se vieron perdidos al sentir llegar a alguien a la habitación en donde todos se encontraban.
-Hola chicos – saludo el castaño con una gran sonrisa sorprendiendo a más de uno en la habitación.
-Juu-juundaime – la tormenta fue el primero en lanzarse a ver como estaba Tsuna – ¿Cómo se encuentra?, ¿Qué le hizo ese maldito? – preguntaba refiriéndose en la ultima pregunta a Irie, lo que supo Tsuna quien soltó una pequeña risita.
-Estoy bien Gokudera no te preocupes – le respondió sin quitar aquella radiante sonrisa la cual todos admiraban menos dos personas pelinegras que sabían que aquella sonrisa era la más falsa que jamás podrían ver, y eso les preocupaba ¿Qué le pasaba a su cielo? ¿Por qué su sonrisa estaba tan muerta?
-¿Dónde estabas Dame-Tsuna? – pregunto el sicario mirando directamente al castaño el cual desvió su mirada para no mirarlo y aún con la misma sonrisa respondió.
-Luego de hablar un poco con Irie-san me adelante a la base pero me gano la curiosidad de cómo era Namimori en este tiempo por lo que fui a dar una vuelta, me perdí en el tiempo lo siento – le respondió sin mirarlo ninguna vez, lo que molesto y preocupo más al hitman que solo oculto su mirada.
-¿De que hablaste con ese sujeto? – pregunto esta vez Hibari quien no dejaba de ver al castaño, que en todo momento le evito su mirada.
-Nada importante Hibari-san – fue la rápida respuesta del castaño para después quedarse el lugar en un tenso silencio, hasta que Tsuna volvió a hablar – lo siento pero estoy cansado lo mejor será que me valla a dormir – dijo sonriéndole a sus amigos.
-¿Quiere que lo acompañe decimo? – pregunto su autoproclamada mano derecha.
-No gracias voy solo – le respondió y luego sin dejar de sonreír y con sus ojos cerrados dio las buenas noches a todos para después salir de aquella habitación la cual quedo en un total silencio.
Mientras que ya fuera de la habitación el castaño caminaba por los pasillos en total silencio y sin rastro de la sonrisa que antes había mostrado, su expresión y sus ojos no denotaban nada, pero a diferencia del exterior en su interior aún no se recuperaba de lo que anteriormente había sucedido con Irie, más solo cerro sus ojos, al momento de llegar a su habitación entro acostándose de forma casi inmediata en la cama y sin abrir sus ojos saco un frasco de entre sus ropas y comenzó a recordar la tan armoniosa calidez que había sentido en su crisis y lo que había pasado tan solo una hora atrás.
FLASH BACK
Sentía que su cuerpo comenzaba a reaccionar, más no quería sentía aún sus parados pesados y no quería alejarse de aquella fuente de calor, realmente sabia que su cuerpo quería despertar más el no quería, deseaba seguir entre esos brazos que tanta calidez le daban ¿desde cuando no se sentía tan bien? No lo sabía y por ellos quería seguir así más sintió como ahora el frio le rozaba, aquella calidez se alejaba de el, por lo decidió abrir sus ojos para ver que sucedía, más para cuando los abrió todo rastro de aquella calidez había desaparecido, no había nadie con el, estaba solo en el mismo lugar en el cual antes había caído preso del cansancio.
-No hay nadie – se dijo así mismo el castaño mirando a toda dirección, pero sintió la calidez que brotaba de su anillo por lo que levanto rápidamente su mano viendo como aquella joya brillaba entre sus dedos, otorgándole aquella calidez que antes le había invadido – así que fuiste tu – dijo mirando fijamente al anillo – no se como lo haz hecho pero te lo agradezco – agradeció sintiéndose un poco tonto por hablarle aún anillo más sentía que era necesario, sentía que era escuchado – realmente te lo agradezco, lo necesitaba – repitió con una pequeña sonrisa triste, mirando el camino que debía seguir, ya era hora de volver con sus amigos – de seguro deben estar muy preocupados, debe de ser tarde, tendré que disculparme con ellos – dijo bajito dirigiéndose al anillo algo que le sorprendió pues lo había hecho inconscientemente – espero algún día saber que ocultas – se dijo luego comenzando a caminar, el camino era largo todavía.
FIN FLASH BACK
Claramente aún no se sentía bien, pero el hecho sucedido con el anillo lo alejaba un poco de aquellos tristes recuerdos y sentimientos que le provocaba su verdad, realmente deseaba saber más sobre aquel anillo que tanto le sorprendía, claro que no ahora, por ahora solo quería descansar más no pudo hacerlo al sentir que alguien se acercaba y luego golpeaba la puerta de su habitación, deseaba ignorar a quien quiera que fuese y así lo hizo más aquella persona no se dio por vencida y siguió golpeando aquella puerta para desgracia de Tsuna, que sin ánimos se tubo que levantar de su cama a abrir la puerta, encontrándose con quien menos quería ver en esos momentos por lo que intento cerrar la puerta pero aquel lo evito adentrándose a la habitación y cerrando la puerta tras de si.
-¿Qué es lo que quiere Hibari-san?, ahora mismo estoy muy cansado – dijo el castaño dándose la vuelta para no mirar lo ojos metalizados de su acompañante.
-¿Por que no me miras a los ojos Tsunayoshi? – pregunto molesto Hibari al ver que su castaño no le miraba.
-… Estoy cansado quiero dormir ¿se puede retirar? – dijo sin responder a la pregunta del mayor, el cual se molesto aún más.
-¿Donde has estado? – pregunto sin creer lo que antes este había dicho.
-…
-¿Qué hablaste con ese herbívoro? – hizo otra pregunta al ver que la otra no seria contestada.
-…
-¿Qué ha pasado Tsunayoshi? – pregunto esperando esta fuera la excepción y si fuera respondida más tampoco lo fue, el castaño seguía son hablarle y sin mirarle, por lo a paso lento se acerco a el abrazándole por la espalda sobresaltando al castaño que de inmediato quiso soltarse más no pudo librarse del azabache que lo apretaba más fuerte contra su pecho, para después comenzar a caminar dirigiendo a la cama del castaño en la cual ambos cayeron, estando Hibari encima de Tsuna el cual ocultaba sus ojos tras su cabello – ¿Por qué no me miras? ¿Por qué no me hablas? – le preguntaba mientras afirmaba las manos del castaño sobre su propia cabeza, pues este en todo momento quiso librarse del agarre del carnívoro.
-… - Tsunayoshi nuevamente no le contesto, no deseaba ni podía aún le dolía y recordar las palabras de Natsu en la carta sobre esta persona le daban ganas de llorar, no podía mirarle a la cara ni a el ni a su tutor, se sentía la peor persona en el mundo.
-Tsunayoshi… - exclamo con cariño y amor el cual llego a los oídos del castaño quien solo se sintió peor, mientras que Hibari esperaba aunque sea tan solo un monosílabo de aquella persona la cual tanto le preocupaba, a la cual tanto amaba.
-Lo siento – dijo sin pensar el castaño aguantando aquel mar de lagrimas que se asomaba a sus ojos.
-Por que te disculpas mi pequeño gatito – dijo Hibari depositando un casto beso en su cielo esperando ver aquellos ojos que tanto le enamoraron, más cuando lo hizo sintió que algo se rompía en su interior, ver aquellos ojos tan solos y tristes llenos de lagrimas, le dolía, por otro lado Tsuna solo quería disculparse con esa persona y dejar salir todo de una vez quería dejar salir aquella palabra que por tanto tiempo a estado reteniendo con el fin de no lastimar a nadie – Tsuna...
-Lo siento, lo siento, lo siento – repetía el castaño mientras se aferraba la ropa del mayor quien había soltado sus manos y ahora le abrazaba con delicadeza – lo siento tanto.
-Shh tranquilo todo esta bien no tienes nada por lo que disculparte – le decía la nube a su cielo el cual no se soltaba de su agarre.
-…Yo tengo miedo, mucho miedo – dijo luego ya sin aguantar sus lagrimas, no quería reconocerlo, nunca quiso decirlo pero desde mucho tiempo el miedo lo carcomía por dentro.
-Shh no tienes que tener miedo de nada, jamás dejare que alguien te haga daño, mientras estés a mi lado no tienes porque sentir miedo pequeño, miedo de nada, y déjame recordarte que siempre estaré a tu lado – le dijo abrazando fuertemente al castaño que de tan solo escuchar aquellas palabras logro sonreír de forma contradictoria, por lado le hacia feliz escuchar aquello y por otro le dolía escuchar el siempre a tu lado – así que no vuelvas a asustarme de esa forma, me preocupe cuando desapareciste antes en nuestra época y ahora también, no desaparezcas de mi vista Tsunayoshi.
-Lo siento Hibari-san pero llegara el momento en que nos tendremos que separar es inevitable así es la vida y ese es nuestro destino – le dijo el castaño separándose del agarre y mirando directamente al azabache con una pequeña y triste sonrisa.
-Eso no pasara, jamás dejare que te alejes de mi, eres mío Tsunayoshi recuérdalo – dijo muy serio no le gustaba para nada lo que decía su cielo.
-Tuyo, si lo otra vez dije que era tuyo y de cierta forma lo soy después de todo eres la primera persona a la cual e amado y seguramente la única a la que amare, porque aun que no pueda decirlo en voz alta te amo Hibari-san, no, te amo Kyoya, pero no puedo quedarme a tu lado, no es posible que estemos juntos y yo lo siento, pero es necesario que te alejes de mi que me olvides y ames a otra persona que si pueda estar a tu lado, aunque eso me mate por dentro – pensó con total tristeza, realmente amaba a ese carnívoro y le dolía pensar que no podrían estar juntos y aún más que este podría olvidarlo y amar a alguien más, pero sabia este tenia derecho a ser feliz – Hibari-san lo siento pero debe alejarse de mi, yo no puedo estar con usted eso no va a ser posible, en algún momento lo abandonare por que yo no le quiero ni amo, será mejor que se olvide de mi y busque… y busque a alguien que pueda estar a su lado – dijo dando todo de si para que su voz no se rompiera ¿alguna vez había actuado así? No nunca jamás había sido tan débil ante alguien, no le gustaba ser débil pero no podía evitarlo, no podía evitar ser un total herbívoro ante Hibari.
-… - Hibari por otro lado al escuchar las palabras de su amor se sintió desolado no quería creer aquellas palabras y no lo haría porque pese a que le dolió escucharlas sabia no eran ciertas, el se quedaría con la verdad que el sabia, con la verdad que le mostraba el fuerte latir del corazón del castaño y con aquella verdad que solo el podía ver en los ojos de Tsuna, con aquella verdad que Tsuna quería ocultar, por que el sabia su cielo sentía lo mismo que el – Sabes que eso no es verdad Tsunayoshi, y aunque lo fuera, no por eso me alejaría, ni me olvidaría de ti, ni muchos menos buscaría a otra persona, solo te quiero a ti, y a ti te tendré a nadie más solo tu sin importar que, ¿sabes por que? Porque solo a ti te amo – le dijo dejando a un sorprendido Tsuna que no dejaba de mirarlo por lo que aprovecho el corto Shock del castaño para comenzar un beso que aunque en el principio fue lento y dulce con el tiempo y una vez el castaño correspondió se hiso uno demandante y fiero hasta que el aire hiso falta obligando a ambos separarse – solo tu Tsunayoshi solo tu, no lo olvides.
Tsuna escucho cada palabra y no pudo evitar sentirse feliz por aquello, esperaba su carnívoro le perdonara en un futuro aquello.
Los días pasaron y ya todos estaban devuelta en su época en un principio Tsuna se había alejado de los demás guardianes y de su tutor, los cuales claramente se dieron cuenta pero no dijeron nada solo dejaron al menor solo, de alguna forma sabían que el pequeño cielo necesitaba pensar pero con el pasar de los días todo volvió a ser tal y como antes, Tsuna ya había tomado una decisión y aunque era doloroso y difícil no la cambiaria, aprovecharía esos cortos momentos que le quedaban al lado de sus amigos y guardianes lo más posible hasta que llegara el momento de decir adiós.
Una vez en su época sabían lo primero y único que harían seria centrarse en la prueba de los arcobalenos, pese a que Reborn les había hablado un poco de todos ellos mantenían muchas interrogantes, más sabían no podían hacer mucho solo esperar a que alguno de ellos se decidiera a ser el primero en hacer su prueba.
El primero de todos los arcobaleno en aparecer fue Colonnello, este seria el primero en las pruebas de los arcobaleno y quien observaría cada prueba seria Lal, en esta prueba se vería sus habilidades de combate. Los que dieron la primera prueba fueron Tsuna y Gokudera quienes lograron quitarle la insignia a Colonnello ganado así la primera prueba y el sello correspondiente, la segunda prueba fue de Skull quien con ayuda de Viper crearon ilusiones involucrando así en esta prueba a Hibari, Mukuro y Tsuna, aunque los dos primeros se pudieron a pelear entre ellos dejando de lado cualquier otra cosa siendo Tsuna quien al final tubo que separarlos, ganando así la segunda prueba del encanto y el sello de Skull, la tercera prueba llego de mano de Viper y era la prueba de la adaptabilidad en esta participaron Tsuna, Ryogei y Yamamoto, quienes resolvieron cada pregunta de Viper y lucharon con los primeros prototipos de las cajas armas, para al final lograrle ganar a la ilusionista quien les entrego su sello, así llego la cuarta prueba por parte de Fon, seguida de la quinta prueba por parte de la arcobaleno del cielo, ambas pruebas superadas, ahora solo les quedaba dos pruebas más para completar todos los sellos, gracias a las nuevas capsula Tsuna no tenia gran problema con las batallas y su cuerpo se sentía bien, no había dolor, no había nada y eso lo calmaba y le ayudaba a seguir adelante con la pruebas.
Llego la sexta prueba y para mal de Tsuna esta vez les tocaba contra la prueba de Reborn, en esta participaban todos los guardianes incluyendo al castaño quienes tendrían que pelear contra el sicario, más no todo fue como quisieron los guardianes fueron uno por uno derrotados por Reborn y cuando llego la oportunidad para Tsuna de ganar este no fue capaz de atentar contra Reborn, realmente este le había tomado un gran cariño a ese macabro bebe al cual a veces asemejaba a un padre, no pudo, al final no pudo disparar contra Reborn perdiendo así la prueba y sexto sello, el cual no sabia si podría obtener en otro momento, después de todo ya nos les quedaba tiempo solo el suficiente para el ultimo sello.
Tsuna no sabia muy bien que hacer sabia que todas las palabras de Reborn eran ciertas le había faltado determinación para atacarlo, seguramente si esto hubiese pasado tan solo unos meses atrás no el hubiese costado nada ir contra el o cualquiera de los otros guardianes pero ahora no era así y debía buscar una forma para que Reborn les tomara la prueba nuevamente, el nunca había sido débil ni había dudado, no lo haría ahora, no cuando tanto dependía de eso, era hora de traer de vuelta su verdadera personalidad, su verdadera forma de ser aquella muy pocas veces han visto y lo haría claro sin poner en riesgo su secreto.
Ya era el ultimo día y un ataque fue lo que recibieron, esta seria la prueba de verde la ultima prueba por lo tanto Tsuna como los guardianes ya mentalizados se prepararon para darle frente y superarla, más las cosas se salieron de control Verde estaba rompiendo el pacto y por ello eso ya no era una prueba por lo que los demás arcobaleno iban a interferir, lamentablemente no pudieron al caer en una trampa de Verde, que les hiso caer inconscientes, ahora Tsuna debía escoger o los anillos o su tutor y los demás arcobalenos , más ya Tsuna sabia lo que debía hacer y entregar los anillos no lo era por lo que un no puedo fue la respuesta que le dio a verde, no pondría tantas cosas en peligro otra vez por su debilidad, ahora todos los guardianes juntos otra vez comenzaron a pelear contra Verde y sus trampas en busca de una solución, más antes de llegar a una sus llamas fueron robadas, claro que no se rendirían ahí menos Tsuna, por lo con toda su determinación encendieron y sacaron nuevamente sus llamas para comenzar a pelear, Tsuna intento rescatar a Reborn peo antes de llegar este juntos a los otros comenzaron a explotar, un gran susto para el castaño y sus amigos, más todos los arcobalenos estaban bien pues e habían remplazado con uan ilusión, ahora estos y la decima generación se fueron contra verde ganándole al fin aquella batalla, la cual termino cuando Tsuna logro encontrarlo. Ahora tenían seis sellos solo faltaba el de Reborn por lo que el castaño fue donde este con la petición de que les repitiera la prueba más no fue necesario Reborn les dio su sello, ahora solo debían esperar a que saliera nuevamente el amanecer para ir de vuelta al futuro algo que muy en el fondo Tsuna no quería.
Ya era tarde por lo todos deberían estar en sus hogares durmiendo más Tsuna era la excepción, este luego de llegar a su casa, cenar con su madre y preparar las ultimas cosas para mañana se había ido a acostar, más pasaron las hora y en ningún momento pudo dormir.
-Realmente esto es de lo peor – se dijo en un susurro el castaño mientras se levantaba de su cama sentándose en esta ahora mientras miraba a su tutor el cual dormía – lo mejor será que salga por un momento, necesito estar solo – pensó mientras tomaba su ropa, se cambiaba y salía por la ventana con el mínimo ruido, sabia su tutor era ligero de sueño y se despertaría con el mínimo ruido más el era lo suficientemente bueno para salir desapercibido lo que hizo bastante bien pues logro que su tutor no se diera cuenta de su fuga.
Ahora Tsuna caminaba por las oscuras calles del lugar sin un rumbo fijo, o así era hasta que observo un parque cerca del lugar al cual se dirigió tranquilo, una vez ahí se dirigió a una de las tantas bancas vacías, en la cual se sentó mirando al cielo el cual era adornado por una gran luna llena la cual era acompañada por un sin numero de estrellas.
-¿Qué debo hacer ahora? – se pregunto sin dejar de mirar el cielo – porque pese a que se lo que debo hacer, pese a que ya tome mi decisión aún dudo, porque tengo tanto miedo a que ellos me odien a que me olviden pese a que lo que deseo es que nunca sepan de mi – se dijo mientras una pequeña y única lagrima salía de sus fríos ojos y corría por sus mejillas – después de todo tengo miedo a estar solo, a pasar mis últimos días solos y que nadie… - no termino de hablar solo cerro sus ojos mientras sacaba su celular de sus bolsillos, sabia que era tarde y posiblemente el estaría durmiendo pero aquella persona lo conocía mejor que nadie y era la única que podía darle aquellas palabras que ahora necesitaba, por lo que sin tardar más marco aquel número y espero a que contestaran.
-¿Tsu? – preguntaron de la otra línea y el castaño sonrió al escuchar la voz de su amigo.
-Lo siento Ryu te desperté – se disculpo un poco apenado y con tristeza.
-Si, pero no te preocupes Tsu, dios me tenia preocupado que has hecho todos estos días que no has ni tenido tiempo para llamar o contestar una llamada – le reclamo un poco molesto el rubio, recordándole así al castaño que antes no había querido comunicarse ni con el ni con su hermano por que no sabría que decir ante aquellas personas que tan bien le conocían ante todo lo que estaba pasando y lo que pasaría.
-Lo siento… - fue todo lo que dijo por su parte el cielo.
-¿Tsu que sucede? – pregunto preocupado el rubio por el tono de voz de su amigo algo le pasaba eso era seguro y el hecho de que el llamara a esta hora lo comprobaba – Tsuna…
-Yo… yo – Tsuna no sabia que decirle, menos ahora que recordaba que en la carta salía que Ryu habia desaparecido luego de su muerte y jamás le habían encontrado ¿Qué paso con su amigo? ¿Qué el hiso a su amigo? Se preguntaba el castaño mientras más lágrimas salían de sus ojos, jamás se perdonaría si a este la pasaba algo por su culpa.
-… - por otro lado Ryu conocía a su amigo y sabia perfectamente que a este algo le sucedía, algo lo suficientemente malo como para que ni siquiera pudiera hablarlo con el – jamás debí haberlo dejado ir, ahora se enfrenta a algo nuevo nuevamente, algo que le provocara mucho daño, mi amigo porque te tiene que pasar todo a ti – pensó Ryu triste por saber que no era de gran ayuda para el castaño – Tsu vuelve, vuelve conmigo y vallamos a tomar nuestro helado tal y como prometimos ¿si? – dijo Ryu tratando de hacer volver a su mejor amigo, a su hermano, a su única familia, era lo único que tenia no quería perderlo por nada del mundo.
-Yo… - Tsuna al escuchar las palabras de su amigo se sintió aún peor – a esta hora nadie nos atenderá Ryu – le dijo intentando que su voz sonara normal más no lo lograba muy bien.
-No importa buscaremos juntos una solución – dijo rápidamente Ryu, más no recibía respuesta de la otra línea – por favor Tsu vuelve, no quiero perderte sabes que eres lo único que tengo, por favor – rogo Ryu intentando convencer a su amigo, más sabia no lo lograría.
-Lo siento no puedo Ryu, no puedo ir – dijo el castaño lego de escuchar a su amigo – por favor perdóname – se disculpo.
-… - Ryu se esperaba esa respuesta sabia no podía hacer nada solo esperar y apoyar a su amigo y es lo que haría – de acuerdo pero tendrás que volver y ahí si cumplirás tu promesa Tsu – dijo intentado sonar con más ánimos.
-Mmm volveré, volveré Ryu lo prometo – dijo el cielo sabia que volvería daría todo de el para volver lo prometía, más sabia no podía prometer cumplir su promesa anterior, sabia seguramente no podría cumplirla y de eso se dio cuenta el rubio más no dio comentario alguno de aquello, solo callo y rezo por tener de vuelta a su amigo sano y salvo – ya me tengo que ir Ryu, te dejo descansar por favor cuídate mucho y cuida de Natsu y… por favor no le digas nada.
-De acuerdo y no te preocupes no le diré nada, así que no te preocupes, solo preocúpate por ti y por volver con nosotros – dijo Ryu tranquilo pero serio a la vez, más aún quería decirle algo a su amigo, sabia se lo había dicho ya muchas veces pero sabia y quería recordárselo siempre – Tsunayoshi… - le llamo lo mas serio que pudo llamando la atención del castaño.
-¿Que sucede Ryu? – pregunto
-Se que te lo he dicho muchas veces, pero estoy seguro de que en este momento necesito recordártelo para que lo lleves presente ahora y siempre – dijo con un tono de total cariño, ciertamente ambos no eran de los que expresaban fácilmente sus sentimientos pero era muy diferente cuando estaban entre ellos, juntos no había mascaras ni mentiras, solo la realidad y la verdad – No importa lo que hagas, lo que escojas, lo que decidas, no importa si todos están en tu contra, nunca estarás solo porque YO siempre estaré a tu lado a lo mejor no en persona pero aún así separados nunca te abandonare y siempre te apoyare, soy tu amigo, tu hermano y familia por ello quieras o no siempre estaré a tu lado… se que ahora pasas por un momento difícil y que necesitas de mi apoyo y a lo mejor el de muchos, pero aquellos no te lo puedan dar ¿cierto? A lo mejor el mío no es suficiente pero no olvides que si tú me lo pides puede darte el apoyo de mil personas, mi querido amigo por favor no olvides, no olvides que ahora y siempre estaré a tu lado – dijo Ryu dejando salir unas lágrimas de sus ojos, la cual pese a no poder ser vistas por el castaño este sabia de su existencia – Tsunayoshi… si ya has escogido tu camino síguelo no dudes y mira siempre hacia delante yo estaré a tu lado sin importar que, seré tu pilar y cada vez que tropieces y te canses esteré ahí para darte mi apoyo – termino de hablar, le había dicho todo lo que necesitaba decirle a su amigo y este no podía estar más agradecido como siempre Ryu era capaz de decirle justo lo que necesitaba y de darle su apoyo incondicional.
-Gracias Ryu, nunca lo olvidare te lo aseguro y recuerda tú también eres muy importante para mi, realmente muchas gracias por estar ahora y siempre a mi lado y no te preocupes con solo tu apoyo me basta, el tuyo es más que suficiente para seguir adelante amigo mío… es más que suficiente… Adiós Ryu y nuevamente gracias – termino de hablar también cortando casi de inmediato las palabras de Ryu pese a ver sido las indicadas, le habían traído lágrimas las cuales no sabia definir si eren de felicidad o de dolor o una simple mescla de las dos – Muchas gracias Ryusuke, muchas gracias – repitió en un susurro mientras se secaba los rastros de lágrimas de sus ojos y mejillas, para después cerrar sus ojos y recostarse en la banca, quedándose sin darse cuenta dormido al fin en aquella tan larga noche.
Ya estaba pronto por amanecer y un hitman comenzaba a despertar de su sueño, este se acomodo y lo primero que hiso fue mirar al lugar en donde su alumno debería estar durmiendo más lo que vio no el agrado, en la cama al lado del se encontraba una cama vacía con solo una pijama tirada encima, clara muestra de que su Dame-alumno aparentemente no se encontraba ¿en que momento se levanto que no lo sintió, acaso eso era posible? Se pregunto más no encontró respuesta, por lo que con al idea de que estaba por la casa rápidamente se cambio y busco al castaño más no lo encontró preocupándose así por este y por el hecho de que pronto debían de encontrarse con los demás y no sabia donde estaba este, decidió ir a buscarlo fuera del hogar. Luego de buscar por los alrededores al hogar del castaño y no encontrarlo decidió alejarse un poco más hasta que llego a un parque en donde desde la lejanía localizo una cabellera castaña que le indico que había encontrado lo que estaba buscando.
-Si es Dame-Tsuna, pero ¿Qué hace aquí?, ¿en que momento salió? – pensó mientras miraba a su alumno dormir desde arriba de la banca – cada vez hay más preguntas sin respuestas a tu alrededor Tsuna, cada vez me intrigas más, ahora no puedo hacer nada pero una vez todo esto termine será hora de dar respuestas a esas preguntas y de eliminar mi intriga, ya sea quieras o no, solo espero no sea nada malo y que sea lo que sea pueda ayudarte – siguió pensando hasta que dio un corto suspiro y decidió despertar a su alumno de una forma muy cariñosa por preocuparlo tan temprano por la mañana.
Ya estaban todos de vuelta en el futuro para comenzar una nuevamente la batalla, una vez llegaron Irie miro atentamente a Tsuna, le dolió saber el posible futuro del chico más el ya no podía hacer nada por los que solo le sonrió y asintió, dándole a entender así al castaño que lo apoyaría en su decisión, algo que tranquilazo al castaño, más esto no duro mucho por el simple hecho de que su enemigo Byakuran se había presentado aunque no de forma física lo había hecho, entregándoles más información, una que desconocía y que complicaba mucho más las cosas, las verdaderas seis coronas fúnebres.
Luego de una no tan grata conversación se llego al acuerdo o más bien Byakuran llego al acuerdo de que todo se resolvería a través de un juego llamado choice, lo que tuvieron que aceptar con la promesa de volver a verse pronto, más Irie también les tenia una sorpresa por si algo así pasaba, y esta era las cajas armas vongola para los guardianes del castaño, ahora solo debían recuperar sus fuerzas para por fin ser capaces e abrir estas.
Los días pasaron y aunque la relación de Tsuna con sus guardianes había vuelto a ser casi igual que antes aún había un notorio cambio como el hecho de que Tsuna se mantenía serio y muy tranquilo ante lo que pasaba, descansaba y entrenaba, pasaba tiempo con sus amigos pero también durante ciertos ratos se encerraba en su habitación solo, o también el hecho de que mantenía lo mas lejos posible de Hibari, claro que esto solo lo notaban Reborn y el mismo azabache, mas no quería obligar al pequeño pues sabia las casos ahora mismo o eran fáciles, más este no era del único del que se alejaba si no que cuando no era necesario estar con el hitman también se distanciaba de este claro que mucho menos, de Reborn se alejaba porque sabia de sus sospechas, mientras que del otro por simple miedo y según el castaño por su propio bien.
Ya todos estaban preparados para la batalla, tan solo faltaban unas horas para que esta comenzaran, durante los días pasados se habían entrenado y habían logrado controlar y utilizar sus cajas armas, y no habían tenido muchos problemas aparte del que habían tenido cuando se descontrolo la caja del castaño o cuando tuvieron que decirle la verdad a las chicas con ellos, lo bueno de todo era que durante esos días había llegado Squalo a entrenar a Yamamoto y Dino el cual saludo efusivamente al castaño diciendo una y mil veces cuanto lo había estado extrañando, dándole a entender al castaño que el también sabia la verdad, algo que temió pues era muy fácil que este abriera la boca, más gracias a todos los dioses no lo hizo y hasta el momento lo hacia y seguramente tampoco lo haría, algo que agradecía infinitamente.
Las horas pasaron y ya estaban frente a Byakuran y sus guardianes el ambiente era tenso antes ya habían tenido que pasar una prueba para poder comenzar todo la cual consistía en justan y lograr una cantidad de llamas la cual pasaron sin problemas haciendo incluso más de las que les pedían, con la ayuda de sus cajas armas y de los animales que de esta salían, un juego de elección de se llevo a cabo, del equipo de Byakuran participarían Daisy, kikyo, Torikabuto y otro pelador de este ultimo el cual resulto ser Genkishi, mientras que del lado de Vongola participarían Tsuna, Yamamoto, Gokudera y Irie, el objetico de los primeros era Irie y el los segundos Daisy.
El juego comenzó y las primeras peleas venían la primera fue Tsuna contra Torikabuto, donde Tsuna demostró la fuerza que había ganado la cual no era menor, pero lo que más sorprendió era el pequeño leoncito que tenia a su lado perteneciente de su caja arma, al cual llamaba Ryutsu, pues le recordaba mucho a el en tiempo anteriores, unos muy buenos tiempos que paso al lado de su mejor amigo Ryu, este era capaz de convertirse en las que antes eran las armas de Vongola primo, tanto de forma defensiva como ofensiva, por lo que era muy fuerte la pelea no fue muy complicada dándole la victoria en aquel momento a Tsuna el cual siguió su camino mientras que por otro lado se debatían en una pelea Yamamoto y Genkishi el cual fue esta vez el perdedor, perdiendo incluso hasta su vida, ahora Yamamoto también se dirigiría al lugar en donde encontraría con Tsuna para ir juntos hasta su objetivo más no todo fue como lo planeado Tsuna había caído en una ilusión de Torikabuto de la cual no podía salir y una vez Yamamoto logro llegar donde Daisy aquí había una barrera que le impedía atacar a este, aparte estaba el hecho de que Kikyo había logrado pasar de Gokudera y ahora perseguía a Irie que se encontraba dentro de un refugio.
Tsuna ya cansado de estar dentro de la ilusión con un ataque ofensivo destruyo la ilusión y parte de un edificio, para después dirigirse con Irie dejaría el resto en las manos de Yamamoto, más antes de llegar Irie había sido atacado por Kikyo al mismo tiempo en que Yamamoto había logrado romper la barrera y atacar a Daisy, todo parecía un empate pero en ultimo minuto Daisy reacciono, era inmortal el no moriría, desde el principio era una batalla casi perdida, ahora Irie estaba muy grave y Byakuran quería todos los anillo Vongola, para logara sus objetivos, las cosas no iban nada bien y seguramente hubiesen ido peor si no es por una pequeña chica llamada Uni quien les ayudo como arcobaleno del cielo, quitándole la posibilidad a Byakuran de obtener los anillos y ayudando así a Tsuna y sus guardianes los que escaparon del lugar protegiendo a la chica que había pedido su protección, meintras otros se quedaban peleando, entre ellos Mukuro de esa época quien había aparecido en ultimo minuto.
Ahora tenían una nueva oportunidad pero sabían necesitaban más fuerza, por lo que una vez ya en su base todos vieron lo que debían hacer pues sabían en poco tiempo los de Milefiore vendrían por ellos, más en ese poco tiempo Tsuna se encerró en su habitación en espera de nuevas ordenes por parte de su tutor, para descansar un poco y tomar su medicina, la cual debía tomarse dos o hasta tres veces al día dependiendo de su estado físico y claramente ahora no se encontraba en el mejor momento pero no podía hacer mucho sabia que era normal y que su malestar era bastante menos al que debía tener gracia a las capsulas que le había dado Irie.
Todos estaban recuperándose después del Choise, estos se habían devuelto a su época en busca de más fuerza, y aquí aparece el Jefe Vongola primero gracias a Uni, y todos son asignados a su respectivo guardián y su respectivo arcobaleno como tutor para recibir la herencia de la primera generación cosa que impresiono bastante al castaño quien al momento antes de ver aparecer a primo vio como su anillo de iluminaba como cuando les daba sus recuerdos y como aquella calidez tan conocida para el le envolvía nuevamente, entendiendo por fin parte de aquel misterio. La persona que antes le había abrazado y ayudado por raro que parezca había sido Vongola primo el mismo que seguramente les entregaba los recuerdos desde el anillo el cual grababa la historia de Vongola se había sorprendido bastante más no hiso comentario alguno solo sonrió y demostró a través de su mirada todo su agradecimiento a Primo una vez sus miradas se cruzaron.
La primera prueba de parte del primer guardián de la lluvia, pone a prueba a Yamamoto, sin embargo este tras la presión no esta tranquilo y no logra pasar la prueba, más Asari le da una nueva oportunidad la que Yamamoto no desaprovecha, se da cuenta de su error gracias a sus amigos y el que hacia de su tutor, logrando así pasar la prueba ganándose la herencia.
Luego sigue la prueba del primer guardián del rayo Lampo para Lambo, en donde todos ayudaron siempre bajo la estricta vigilancia de Vongola primo quien observaba a su descendiente, le preocupaba el chico y su futuro más no podía hacer más por el de lo poco que ya había hecho, la prueba de llevo a cabo con ciertos inconveniente gracias a Verde pero aún así lambo logro obtener la herencia.
La siguiente fue de parte de G el primer guardián de la tormenta el cual suplanto la identidad de Gokudera para mostrarle a este que no era digno de estar al lado del castaño, más pese a no ser alguien perfecto aún así Tsuna lo quería y no aceptaría que este se fuera solo por no ser la mano derecha ideal, pues era un importante amigo, y lo dejo claro frente todos, así Gokudera siguió como su mano derecha y logro la herencia también. Así sigue las pruebas siendo las siguientes las de Ryohei y Hibari ambas pasadas perfectamente, quedando solo la prueba del guardián de la niebla y la prueba de primo, más los problemas no se hicieron esperar en la siguiente prueba, terminando todo en una pelea que involucro a todos los guardianes e incluso a los arcobalenos, aunque pese a las dificultades que estaban teniendo no se rindieron especialmente Tsuna, peleo y gano siendo ayudado también por Mukuro el cual miraba a Tsuna a cada momento fijándose en cada movimiento que hacia el chico preocupado de su estado algo que no paso desapercibido por cierto azabache el cual tenia un aura maligna rodeándole, más Mukuro sabia nuevamente era distinto no era como aquel joven al que se le había confesado y al cual tanto quería pervertir con sus sanos conocimientos pero aún así se preocupaba por él no como antes algo que el confundía, pero le importaba de cierta manera, al final este gano la herencia del primer guardián de la niebla Deamon junto con Chrome, ahora solo faltaba la prueba de Tsuna y este al saber que no tenían mucho tiempo se acerco a Primo para saber cual seria su prueba, más este le dijo que había superado sus expectativas, le había observado todo el tiempo y sabia perfectamente que el muchacho era digno por lo que dio su herencia, no sin antes dedicarles unas palabras que solo el castaño logro escuchar lo más recóndito de su mente junto con una cálido calor.
“Eres un buen chico decimo, sabes a veces la vida puede ser injusta con las personas que a lo mejor no lo merecen pero no olvides nunca renegar de lo que te a tocado vivir, vive sin importara que, con la cabeza en alto, protege aquello que quieres proteger, no te rindas y no dudes, recuerda las cosas buenas que has vivido y hazlas tu tesoro, sigue tu camino que aunque creas que estas solo no lo estas, todos aquellos quienes son importantes para ti estarán a tu lado pues tu eres importantes para ellos también Decimo, así que por favor no pierdas de vista tu camino, pase lo que pase no te pierdas en aquel abismo llamado oscuridad”
Fueron las palabras que Tsuna había recibido de su antecesor de aquel hombre que tanto le había estado ayudando y el cual ahora le daba con sus palabras una gran tranquilidad.
“Gracias Primo, gracias por todo, por favor ayude de igual forma también a Natsu, es todo lo que le pido, ayude y proteja de mi hermano”
Ya todos los guardianes tenían su herencia y era hora de volver al futuro para llevar a cabo ahora si la batalla final, y tal como debían hacer volvieron para terminar aquello de una vez por todas.
-Ya estamos aquí, esta será la última batalla en esta época y esta decidirá todo ya no habrá más oportunidades pronto se acabara todo, mi intuición me lo dice pero eso no será lo todo lo que acabara, una vez esta pelea termine todo para mi terminara, esta será la última vez que pelea a su lado chicos, esta será la últimas vez que los vea, una vez terminado todo tendré que irme, por que se mi cuerpo colapsara con suerte y me dará el tiempo justo para irme, me quedan pocas capsulas, solo las suficientes para esta pelea lo se y no saben cuanto me duele no poder despedirme adecuadamente pero es lo mejor, para mi, para ustedes, para todos, o por lo menos eso creo, por lo que aprovechemos nuestras últimas horas juntos lo mejor posible, aunque sea en el campo de batalla – pensó el castaño mientras miraba a todos sus guardianes más sus cavilaciones quedaron de lado, Milefiore ya había llegado era hora de pelear.
Los enemigos se habían infiltrado en su base y Squalo se quedo para que la decima generación lograra escapar, estos lo hacen pero no pasa mucho cuando ya son perseguidos nuevamente, conocen a un extraño y este los esconde y ayuda para extrañeza de todos más no había tiempo para dudar, mientras que por otro lado Hibari se encontraba ya en una pelea con Daisy descargando su rabia aquella que ya hace días tenia por el simple hecho de no poder estar al lado del castaño como quisiera, por tres razones, la primera era por todo lo que pasaba, la segunda porque el cielo evitaba estar cerca o a solas con el y la tercera el mantenía la distancia y aceptaba los deseos de su gatito porque no quería forzarlo a nada quería darle tiempo, claro que el no era un hombre paciente y no esperaría mucho más para hacerlo completamente suyo y demostrarle a la estúpida piña que el era el único dueño del castaño y que este solo le pertenecía a él, el tiempo que el estaba dando al castaño se acababa, y cuando lo hiciera el castaño tendría que aguantarse, pero por ahora destrozaría a, zombi que destruía la paz de Namimori.
Por otro lado Tsuna y sus amigos luego de un tiempo tuvieron que enfrentarse con el enemigo especialmente con Torikabuto, más nuevamente lograron salir del lugar ahora con Gamna y dos de sus compañeros, lamentablemente algunos estaban heridos, eso complicaba las cosas. Luego de escapar ya todos estaban en el bosque en donde pasarían la noche pues al día siguiente todo se acabaría, aquí planearon lo que harían, rieron y conversaron todos juntos, para después descansar durante las últimas horas de oscuridad, más un castaño aún no conciliaba el sueño por lo que se encontraba un poco más alejado de los demás, este miraba el oscuro cielo para después sacar un frasco el cual abrió.
-Tan solo… dos pastillas – se dijo en un susurro mientras volvía a cerrar el frasco y lo guardaba entre sus ropas para seguir mirando al cielo hasta que sintió una mano en su hombro derecho lo que le hizo voltear – ¿Uni?
-¿No puede dormir Tsuna-san? – le pregunto la pequeña regalándole una gran sonrisa.
-Solo no tengo sueño – le dijo correspondiendo la sonrisa, para después volver a mirar al cielo mientras Uni se sentaba a su lado – ¿tu tampoco puedes dormir?
-Mmm solo quería saber como estabas – le dijo también mirando el cielo sorprendiendo un poco al castaño.
-Yo estoy bien– le dijo sin mirar a la menor su vista siempre fija en el infinito cielo, la pequeña le volvió a mirar y sonrió sin contestar nada – no te preocupes.
-De acuerdo Tsuna-san.
-Ven es hora de dormir ya es tarde y mañana… mañana será un día largo y pesado – le dijo y castaño parándose junto a la menor para ir a descansar no entendía bien a que se debía aquella visita de la menor, pero realmente no el importaba la pequeña le reconfortaba.
-Si lo será, pero no importa que debemos ganar, mañana puede que se pierdan muchas cosas pero también ganaremos ¿cierto? – Dijo y pregunto al castaño que solo asintió – mañana terminara todo para nosotros… pero será una nueva oportunidad para todos los demás, una nueva oportunidad para su futuro, una nueva oportunidad de vivir – dijo sorprendiendo al castaño que solo paro su caminar con un semblante triste, sabia a lo que se refería la menor.
-Si es así supongo que no importa, si es así vale la pena mi sacrificio… pero ¿no hay otra forma para ti?, tienes dere… - no pudo terminar al sentir un dedo sobre sus labios.
-Para mi esta bien de esa forma Tsuna-san no se preocupe – le dijo con tranquilizante sonrisa a lo que al castaño no le quedo más que asentir.
Así llego un día nuevo y desde muy temprano las peleas comenzaron de distintos puntos, todo de acuerdo al plan, los guardianes se habían vuelto más fuertes gracias a la herencia que habían recibido y eso ayudaba bastante más aún las cosas eran complicadas para todos los que peleaban, especialmente para aquello que habían sido antes heridos, más aún habían más sorpresas de las cuales los guardianes no tenían conocimiento, varios ya no podían continuar como en el caso de Gokudera el cual estaba enfrente de dos coronas fúnebres, más fue salvado por Varia que había llegado a ayudar para suerte de todos, siendo una buena ayuda, pero no eran los únicos Hibari, Mukuro también habían llegado y todos se encontraban peleando pero luego no habían resultados optimista, y cuando el enemigo creyó haber ganado todo se fue en su contra al ver que todo era una ilusión, nuevamente la pelea comenzó, pero fue detenida alguien se acercaba un nuevo enemigo el cual absorbió por completo a dos de sus compañeros quedando solo Kikyo y ahora absorbía las llamas de los demás, poniendo aparte en riesgo sus vida, algo que no paso desapercibido por el castaño que encontró ya era hora de pelear el también debía ganar y proteger a sus amigos, por lo que sin que ninguno de los que se encontraban con el se dieran cuenta tomo una de las capsulas ahora solo quedándole una, luego mostro sus intenciones y con el apoyo de Uni y Reborn se fue con sus amigos, ya era hora.
Sin tardar el castaño se lanzo al campo de batalla intentando absorber al gran monstruo frente a el para alejara sus compañeros del peligro, más pese a haberlo hecho no todo sucedía con normalidad, más entendió todo cuando Byakuran estuvo frente a el, sabia no seria fácil pero había llegado la hora de enfrentarse a la peor amenaza y así lo hizo, Byakuran era fuerte, muy fuerte más el castaño no quería, ni debía perder, por sus amigos, por su hermano, por su familia, por su tutor, por todos aquellos inocentes, no podía perder y no lo haría, pues haría hasta lo imposible por ganar, sus deseos y determinación eran fuerte y sus llamas crecían cada vez más, lo que no esperaba era que lo que pasaba era justo lo que Byakuran quería, los anillos comenzaron a resonar entre ellos y una esfera se creaba a su alrededor una en la que solo ellos podían estar y la arcobaleno del cielo Uni la cual fue tras el resonar de los anillos con su pacificador hizo que este se hiciera presente en el lugar, ahora los tres estaban encerrados y nadie del exterior podía entrar.
Las cosas ahora si se dificultaban Tsuna no se encontraba bien, podía perder, Byakuran cada vez lo lastimaba más, gran parte de sus huesos estaban rotos y eso le dolía mucho, quería llorar y descansar no veía la hora de poder dormir, más no podía y eso lo tenia claro no importaba que debía ganar, debía buscar una forma para poder moverse de nuevo, eso no podía terminar ahí, debía ganar, sus amigos confiaban en el, no podía morir se lo había prometido a Ryu, este le esperaba tenia una promesa que cumplir. Sus deseos eran fuertes y todos lo sabían incluido cierto hitman quien confiaba en su alumno dejándolo claro delante e todos el sabia su alumno ganaría ante Byakuran, o por lo menos eso había dicho y aunque sus palabras causaron risa en el peliblanco, para cierto castaño habían sido un gran empujón, aquellas palabras habían sido muy importantes para el, para volver a pararse, para volver a luchar, no podía defraudar tampoco a su tutor favorito, no claro que no lo sabia y se pararía nuevamente lucharía y ganaría si o si, su determinación era más fuerte que nunca y aunque Byakuran también se burlo de el, no le importaba seguiría adelante, más una calidez conocida para el volvió a sentir, ahí al lado de el estaba Primo, este le reconocía nuevamente y con una cálida y cariñosa mirada, le hizo entrega del verdadero poder de los anillos Vongola, era un poder que merecía y era suyo, logrando este hecho cambiar todo pues Tsuna lograba golpear más a Byakuran, era mucho más fuerte y lo demostró.
La pelea ya estaba por terminar cada vez Byakuran estaba más lastimado, su poder ya no podía contra Tsuna, más tampoco se rendía, daría y haría todo para lograr su objetivo, y lo primero que tenia en mente era apoderase de de Uni y su poder, algo que el castaño no permitía pues seguía atacándolo protegiendo a la menor la cual daba todo su poder a los pacificadores de los arcobalenos para poder revivirlos, ese siempre había sido su plan, su meta, algo que ahora muchos quería evitar, mientras quienes estaban fuera de la esfera intentaban romperla, algo que lograron siendo Ganma quien entro para ir donde su pequeña jefa al cual aunque tuvo miedo ahora llena de determinación comenzó a dar su última energía, más ahora no estaba sola, Ganma estaba con ella y lo estaría siempre, ya no había más miedo ni dudas ahora solo estaba la calidez del mayor el cual sin dudar y lleno de cariño se fue con ella, dejando a muchos atrás con el corazón lastimado, más respetaban su decisión.
-Esto es tu culpa – recriminaba Tsuna al peliblanco el cual estaba muy molesto porque con la muerte de la menor sus planes se venían abajo, más no lo estaba tanto como el castaño nuevamente se lanzo a atacar – no te perdonare lo que le acabas de hacer.
-Yo no le hice nada, ella hizo todo eso sola, yo la necesitaba con vida – decía el peliblanco molestando aún más al castaño – pero dime porque te molesta tanto después de todo tu eres igual que ella – dijo haciendo que el castaño parara su ataque – o es que buscas echarle la culpa a alguien para aliviar el dolor y la culpa propia – le dijo sorprendiendo al castaño.
-No puede ser acaso el sabe algo – pensaba mientras miraba a sus amigos quienes no entendían las palabras del peliblanco – no puedo dejar que hable, no puedo
-Si lo se Tsunayoshi, dime ¿Qué crees que debo hacer? – le pregunto a un estático castaño mientras se acercaba, una vez a su lado le susurro – crees que deba hacer un buen acto y decirles lo que estas haciendo, de seguro te odiaran por lo que les estas haciendo, los estas abandonando por tus deseos egoístas, si se sintieron de esa forma por la decisión de Uni, me pregunto ¿Cómo será cuando les diga tu decisión?, ¿Cómo reaccionan cuando sepan de el, si de Natsu, quien les ha estado engañando ya por tanto tiempo? ¿Qué pasara cuando el mundo se entere de su existencia lo dejaran aquellos que antes lo separaron de tu lado? Diem crees que te perdón todas tus mentiras y engaños – le susurro al oído de forma que solo Tsuna escuchara, algo que claramente logro dejando en shock a este delante de todos quienes no entendían que pasaba con su cielo que miraba al suelo sin dejar ver sus ojos, mientras que el peliblanco los miraba directamente dispuesto a decir algo, nadie entendía lo que pasaba solo cierto castaño.
-No puedo, no puedo dejar que hable esto debe acabar aquí, esto es suficiente – pensó el castaño sabia lo que debía hacer no podía perderse, debía calmarse, no podía dejar que Byakuran cumpliera sus objetivos, ninguno de ellos – por mi bien y por el de todos debo acabar con el – pensó mirándose sus manos con aquellos guantes puestos, algo de lo cual todos sus amigos se dieron cuenta mirándolo extrañados, pero el castaño solo se dirigió contra Byakuran – es hora de acabar esto – le dijo y Byakuran también comenzó a pelear, más yo podía más contra el castaño y este daría su último ataque mientras Byakuran le seguía hablando.
- Somos iguales Tsunayoshi, tu y yo lo somos y lo sabes – fue lo ultimo que escucho de aquel ser que hizo desaparecer de la fas de la tierra, manchándose por primera vez la manos con sangre.
-Todo termino – fue lo único que dijo una vez vio ya no había nadie al frente suyo solo sus amigos y camaradas detrás del, por lo que sin aguantar más cayo dormido, ya no había nada más que hacer.
La todos la pelea había terminado, pero para cierto castaño mucho más había terminado, luego de que este se desmayara lo habían llevado al lugar en donde se encontraba la maquina del tiempo en donde había descansado durante unas horas mientras los demás se encargaban de lo que faltaba, todos estaban contesto y no podía negar que el también lo estaba, todos estaban a salvo y ahora podrían regresar a casa, más sabia su felicidad era opacada, los extrañaría, quería recordarlos siempre hasta el fin, a aquellas personas que tanto le dieron.
-¿Estas bien Tsunayoshi? – le pregunto preocupado Irie a lo que el castaño solo asintió – pronto deberán irse, seria bueno que te tomaras esto antes le dijo extendiéndole la última capsula – la saque de entre tus ropas antes de que alguien se diera cuenta.
-Gracias me hace falta – dijo bajito mientras se la tomaba sin dejar de mirara a sus guardianes – Veo que estas mejor, eso es bueno.
-Si… Tsunayoshi muchas gracias por todo y lo siento mucho – dijo y el castaño le sonrió.
-No hay necesidad de agradecer todo esta bien – le dijo y el pelirrojo asintió – Shoishi-kun se que tenemos que irnos pero me gustaría pedirle un favor antes – le pidió.
-Claro dime hare lo que pueda – le contesto a lo que el castaño solo le pidió lápiz y hoja para escribir algo
-Yo me encargo – dijo para ir a buscar lo pedido pero antes fue detenido.
-Me gustaría pedirte otro favor… por favor – dijo luego pero mas serio y con tristeza en sus ojos, a lo que Irie tan solo escucho asintiendo a su petición
Los arcobalenos habían regresado y sabían todo lo que había pasado les dolía la perdida de Uni pero también le estaban profundamente agradecidos y ahora por ella y por aquellos que habían viajado en el tiempo para ayudarlos era su turno de hacer algo, estos llevarían al castaño y a sus guardianes de vuelta dejándoles u regalo de agradecimiento, claro que esto solo ellos los sabían.
-Bien es hora de irnos – decía Reborn a los demás.
-Reborn-san tiene razón, bueno muchas gracias a todos, realmente estoy agradecido por su ayuda – dijo Irie contento a lo que todos asintieron para después también despedirse.
-Muchas gracias Shoichi-kun, realmente te agradezco toda tu ayuda y la oportunidad que me diste, por favor sigue cuidando de ellos – dijo el castaño antes de que se fueran dejando a muchos sin entender, pero eso no le importaba al castaño mientras el pelirrojo entendiera estaba todo bien.
-No te preocupes yo me encargo Tsunayoshi-kun, yo me encargare de todo es hora de que descanses pequeño, realmente fue un placer conocerte – dijo mientras hacia una reverencia quedando así para asombro de varios, y dejando aún más perdido a los guardianes del castaño.
-Adiós – dijo el castaño mirando por últimas vez a Irie, para después correr su vista a todos sus guardianes y tutor – adiós para siempre chicos – fue su ultimo susurro antes de desaparecer de aquella época sin dejar rastro solo dos notas donde expresaría aquello que no podría decir.
Para Natsu
Lo siento Natsu, realmente perdóname por el daño que te he hecho y por el daño que te hare, yo realmente lo siento, entenderé si me odias por mi decisión, estas en todo tu derecho, más por favor no olvides que te amo, mi querido hermano, que te amo y que te amare siempre, y créeme que soy feliz de saber que mi sacrificio a ayudado a que ahora ustedes estén bien, a que tengan un nuevo futuro lleno de oportunidades, así que por favor se feliz, tu y todos los chicos sean felices, forma tu familia ya no estarás solo “el” estará a tu lado estoy seguro, así que se fuerte y vive por ti, por ellos, por tus sueños y por mi, si vive y se feliz.
Tsunayoshi…
Para Hibari Kyoya.
Para cuando leas esto de seguro ya sabrás cual fue mi decisión Hibari-san, puede que esto te moleste pero déjame decirte que no me arrepiento, porque Natsu y todos ustedes están bien y estarán bien, tendrán un futuro en donde podrán vivir tranquilos dentro de lo que se pueda, pero lo importante es que estarán bien, puede que esto no quieres escucharlo de mi que no soy de vuestra época pero de seguro mi yo de tu época se sentiría igual… si hay algo de lo que me arrepiento y de lo que me seguiré arrepintiendo porque nuevamente le he hecho es de no haber dicho nunca mis sentimientos, sabes aquella vez en la azotea, lo que yo quería hacer era decirte que tu y yo nunca podríamos estar juntos, yo quería que te alejaras de mi lo más posible, pero jeje todo salió al revés y termine amarrándome más a ti, aunque no me arrepiento de haberme amarrado de ti, me arrepiento de haberte amarrado a ti a mi, ¿sabes por que? Simple no me arrepiento por que yo TE AMO Hibari Kyoya, si yo te amo aunque en un principio no lo acepte luego ya no podía y entendí que te amaba, entendí que me había enamorado de mi carnívoro jeje, pero me arrepiento por que debido a ello tu ahora no puedes ser feliz, por mi culpa no lo eres y no deseo eso… Kyoya deseo que seas feliz, así que por favor busca a alguien, haz una familia y se feliz, pero por favor no me olvides, tan solo no me olvides, no importa de que forma pero recuérdame, te lo pido y por favor perdóname, perdóname todo el daño que te e hecho… Adiós mi amado Kyoya.
Tsunayoshi….
CONTINUARA…