Naruto para sorpresa del pelinegro se paró a mitad de un claro y cruzado de brazos se quedó esperándolo mientras él llegaba hasta allí.
¿Quieres morir, cierto?—preguntó Sasuke.
Uzumaki sonrió, pero era una sonrisa triste y el Uchiha se dio cuenta del porqué. El rubio estaba condenado por la maldición y que el otro hiciera semejante pregunta parecía un chiste malo.
El pelinegro se relajó un poco y después de tomar aire se preguntó--¿Por qué te detuviste?—
¡Porque estoy cansado de correr, datebayo!—dijo el rubio y el otro lo miró preguntándose si hablaba en serio. Después de todo en sus tiempos de genin habían corrido distancias más largas--¡Yo no hice nada malo! ¡No tengo porque huir!—se quejó seriamente.
¿Qué no hiciste nada malo? ¿Me insultaste y luego largas eso?—preguntó el ojinegro sintiendo que su sangre comenzaba a hervir de nuevo.
¡No era contigo!—dijo el ojos azules y el otro lo miró sorprendido.
¡No seas idiota! Si no era conmigo… ¿A quién le dijiste eso?—Sasuke no se la creía.
Naruto sabía que tenía que aclarar su punto por la paz. Sino seguirían con rencillas sin sentido cuando lo importante era conseguir un Kyuubi para Konoha o en su defecto que el desgraciado de Kabuto soltara la papilla y lo liberara de la dichosa maldición.
¡A Kurama! ¡Le decía todas esas cosas a Kurama!—aceptó Uzumaki.
¿Al Kyuubi?—preguntó Uchiha algo confundido.
¡A Kurama!—recalcó Naru—No le gusta que le digan Kyuubi—añadió después.
¿Y por que tú...?—Sasu lucía confundido.
Es que empieza a hablar y no se calla. Siempre es así solo que a veces lo soporto en silencio pero esta vez fue demasiado—dijo el ojos azules para representar su suplicio y entonces el ojinegro entendió un poco por lo que estaba pasando y que aunque debiera ser lógico para él pues una vez entró en el rubio y habló con el bijuu, lo había olvidado.
Aunque eso le generó un poco de curiosidad--¿Y qué te dijo esta vez?—
Naruto lo miró con ojos muy grandes. Se congelaría el infierno antes de que él le contara sobre el pequeño chiste del incesto a Sasuke. Conociéndolo lo mataría el doble. ¡No gracias! Prefería la maldición. A menos así tendría unos días u horas de vida.
¡No tiene nada que ver contigo!—contestó el rubio tajante cruzándose de brazos y eso hubiera sido todo sino fuera porque Sasuke Uchiha es un Uchiha y un Uchiha bien entrenado y de categoría sanin es una cosa muy peligrosa a la cual mentir.
En la mente de Sasuke saltaron 2 items:
1-Naruto mencionó que: “no era asunto suyo”.
2-Naruto se cruzó de brazos con la vista a la derecha para no mirarle a los ojos.
Conclusión:
Si era asunto suyo pero el otro le ocultaba la razón.
Resolución:
Él averiguaría que estaba pasando ahí.
¡Eres un condenado idiota si piensas que yo voy a tragarme eso!—le dijo Sasuke.
Sin saber que dentro de la pobre cabeza del ojos azules otra voz le decía--¿POR QUÉ NO? LA TUYA NO ES TAN GRANDE NARUTO—
¡Y dale con lo mismo!—dijo el pobre asediado cerrando los ojos y poniéndose tieso—¿Te puedes callar de una soberana vez, soplapollas?—
Lo dijo sin pensar. Naruto nunca fue una persona reflexiva a la hora de que lo saquen de quicio.
Solo después de hacerlo comprendió lo que había dicho y a quien parecía habérselo dicho.
¡JAJAJA! ¡AYYYYYY! ¡ME MEO! ¡LE DIJISTE A SASUKE UCHIHA SOPLAPOLLAS EN LA CARA! TU NOVIA DEBE ESTAR HARTO ENOJADA CON LO DELICADITA QUE ES—dijo el bijuu muerto de risa.
¡Oye! ¡Para ahí!—dijo al incipiente enojo del ojos negros—¡No es contigo! ¡Es con el mendigo bicho este!—
¡BIJUU! ¡QUE SE DICE BIJUU IDIOTA!—saltó el zorro desde adentro.
¡Me importa una mierda!—dijo el malhablado Uzumaki y luego le dijo a Sasuke--¡Eso no fue para ti sino para él!—aclaró apuntándose al vientre—Sé que es mucho para el grandioso orgullo Uchiha que te arrastras pero no todo gira a tu alrededor, Sasuke. A este estúpido se le ha zafado la chaveta, quizás por causa de la maldición o que se está poniendo ceñil—añadió para explicar.
¿ME ESTAS LLAMANDO VIEJO?—preguntó sorprendido y algo cabreado Kurama.
¡Eso hago! ¡Si señor!—gritó el rubio mientras el pelinegro lo miraba hablar solo y se preguntaba si mas de uno no estaba siendo afectado por la dichosa maldición, de forma mental—Este bicho del demonio no para de atosigarme a todas horas. No para ni cuando voy al baño—
¡ES QUE MEAS COMO UNA NENA!—dijo el zorro.
¿Ves?—preguntó a su compañero que en realidad no podía ver nada—No tengo un segundo de respiro. ¡Que si la tengo larga! ¡Que si mejor me la mido! ¡Que como la tendrá Sasuke! ¡Y yo que m…!—decía el descontrolado ojos azules cuando se dio cuenta de que la última frase había estado de más. Miró a su amigo pues perdido en sus quejas había estado mirando al suelo y al cielo. Sasuke tenía una ceja levantada.
¿Por qué al bijuu le preocupa como la tengo?—preguntó el ojos negros. Era una pregunta excelente y mientras el pobre Naruto intentaba articular una respuesta coherente…
ES QUE ME GUSTARIA SABER QUIEN LA TIENE MAS GRANDE. ¿A TI NO NARUTO?—preguntó Kurama.
Naruto empezó a ponerse como semáforo que no deja cruzar y a Sasuke la ceja se le despegó más.
¿Qué te está diciendo el zorro ahora?—preguntó el agudo Uchiha.
¡No tiene nada que ver contigo!—dijo el colorado Uzumaki.
¡Si lo tiene!—refutó Sasuke.
¿SE LA VISTE ANTES? ¡ANDA! ¿SE LA VISTE? ¿SI? ¿NO?—preguntó el nueve colas insistente.
¡Sí!—contestó en voz alta el rubio y al entender que el pelinegro podía entender que le contestaba a él agregó--¡Digo no! Le dije que sí a Kurama—
¿EN SERIO? ¿CÓMO LA TIENE?—preguntó el interesado bijuu.
¿Y que te preguntó?—preguntó a su vez el ojos negros.
¡ANDA DIME! ¡A QUE LA TIENE COMO UN BATE DE BASEBALL Y POR ESO LE TIENES MIEDO!—dijo el zorro dentro del genin.
¡No!—estalló el ojos azules y luego con cara de extrañeza preguntó--¿Y tú como sabes cómo es un bate de baseball?—
¿Un bate de baseball?—preguntó Sasuke algo confundido.
SÉ MUCHAS COSAS QUE TE SORPRENDERÍAN—acotó Kurama.
Si algo no soporta el ego de Naruto es que traten de refregarle en la nariz que saben más que él, por instinto tiende a querer sonar superior y generalmente eso lo mete en problemas.
¡Pues sabrás mucho pero yo sé como la tiene Sasuke y tú no!—dijo inconscientemente Naruto Uzumaki, luego se dio cuenta y miró al sorprendido Sasuke Uchiha.