Un avión aterrizaba y luego de este bajaban sus tres pasajeros, todos cubiertos y abrigados al ser invierno en aquel país, el viaje había sido largo y todos se encontraban cansados, más sabían no podían descansar por lo menos no todavía, aún tenían cosas que hacer, antes de relajarse por unos momentos.
-Tsunayoshi ¿Cómo te encuentras? – pregunto el mayor con un tinte de preocupación en la voz.
-Estoy bien, no se preocupe Akira-sensei, he resistido bien el viaje – dijo tranquilo, más se sentía un poco ausente, algo que notaron perfectamente Ryu y Akira.
-Eso es bueno, estaba preocupado pasaste toda la noche afuera, llegando solo esta mañana para abordar el avión, espero realmente estés bien – dijo con clara preocupación pero sin preguntar más allá pues sabia aquello era difícil para el menor, quien agradeció aquello.
-No se preocupe enserio estoy bien, si llego a sentirme mal no dude en que le diré – dijo y le doctor solo suspiro.
-Bueno, de todas formas ya te revisare cuando tengamos tiempo, pues estoy seguro que no te detendrás a descansar e iras con ellos en este momento – dijo y Tsuna asintió.
-Claro, no quiero hacerlos esperar pese a que no sepan a quien realmente esperan, aparte es mejor terminar con esto de una vez por todas, aquella información sobre los Arcobalenos que me has dado es importante, por los recuerdos del anillo que vi y por lo que dijo Talbot, ellos son nuestra mejor opción, la batalla esta por comenzar no podemos perder tiempo – dijo serio comenzando a caminar junto con los demás.
-Lo sabemos Tsu-chan pero ¿funcionara? Aparte esta el hecho de aquel mensaje que les dejaste – pregunto un tanto dudoso Ryu.
-Funcionara, tiene que funcionar, si no funciona los chicos que estoy seguro participaran por aquel mensaje que deje pueden salir perjudicados y envueltos en una maldición que aún no termino de comprender, aparte si todo sale como lo planeo les devolveré su vida normal a ellos que es lo que deseo – dijo bastante serio y decidido – quiero evitar les suceda algo a los chicos y ayudar Reborn y los otros, aparte esto les servirá como entrenamiento y de esa forma también Reborn tendrá más movilidad, más fuerza estoy seguro y eso nos puede ayudar en un futuro lejano – termino de hablar de aquello para volver a suspirar – ellos investigarían pero no encontrarían nada, solo les deje algo que hicieran a futuro no se que logaran investigar pero, eso los mantendrá ocupados y no se ahogaran en la tristeza, aparte no crees que serian unos buenos enemigos, serán más fuerte y si el tiempo lo dice pueden incluso pasar a ser nuestros aliados sin que lo sepan, claro que eso será solo si es necesario, realmente no espero y quiero que me alcancen es mejor eliminar todo lazo – dijo y no hablo más y tanto Ryu como el doctor entendieron aquello.
-Aún pensando así, se que muy en el fondo deseas volver a verlos, no fue mucho el tiempo juntos pero cada batalla los unió más y se anhelas poder vivir una vida con ellos como amigos y dentro de lo normal para ustedes, pese a que al mismo tiempo deseas no tener algún contactos con ellos, por el miedo que sientes de que descubran todo y se alejen por cuenta propia de ti – pensó Ryu sin decir nada mirando a su amigo – y aquel mensaje que les dejaste es prueba de ello, con este buscas que te busquen y salven o que te busquen y acaben contigo ¿no? ¿Me pregunto que será al final?
-Bueno si es así, no hay más que decir, arrendaremos un auto para ir, será más seguro de esa forma, aprovechen de descansar durante ese periodo pues creo esta visita será larga y cansada… ah y lo mejor será que desde ahora nos hablemos en Italiano, se que aún no se acostumbran pero es lo mejor, por algo lo estudiamos todo este último tiempo – hablo el doctor y los menores asintieron a todo, para luego dirigirse rápidamente a un lugar donde poder arrendar un auto, una vez lo tuvieron subieron sus cosas y Akira comenzó a conducir mientras que Ryu y Tsuna, trataban de dormir un rato, más aquello les estaba costando, tras lo múltiples pensamientos que pasaban por sus cabezas, pues pese a mostrarse tranquilos estaban nerviosos, inquietos y hasta asustados y a la vez impacientes, de todo lo nuevo que se les mostraba en frente.
Mientras que en Namimori ya a punto de cubrirse de negro por la llegada de la noche, un azabache ya en mejor condición física se encontraba en su oficina mirando por la ventana aquel tono anaranjado que tenia el cielo, aquel tono que poco a poco iba desapareciendo para volverse uno más oscuro y frio, este había estado todo el día en la oficina recordando y rememorando aquel sueño que tan real sentía, más sabia era imposible, por ello sentía una gran soledad y tristeza, más también sentía la tranquilidad de aquello que para el o ambos había sido una despedida, una cruel despedida imaginada por su cabeza, la cual le traía gran dolor y por alguna razón el hecho de sentirse completo.
-Tsunayoshi – susurro viendo como el tono anaranjado del cielo ya había desaparecido por completo – te has oscurecido al igual que este cielo a lo mejor, pero en nuestro interior siempre serás el brillante cielo, nuestro brillante cielo – dijo volteando para concentrase en los papeles que tenia aún que revisar, pero la voz de una segunda persona le interrumpió.
-Eso esta más que claro Hibari, Tsuna siempre será nuestro cielo – dijo un bebe de fedora parado en la puerta, serio y de mirad impasible.
-¿Bebe a que has venido? –pregunto fríamente para luego seguir mirando unos papeles en mano.
-Al parecer hoy hay estado muy tranquilo, por lo que dicen casi no has salido de tu oficina y no has mordido hasta la muerte a nadie – dijo y el bebe le volvió a mirar.
-Nos es propio de ti, irte por las ramas, así que dime, ¿a que has venido? – dijo un tanto molesto ahora haciendo sonreír al hitman.
-Tienes razón… bueno solo decidí hacer una buena obra y venir a decirte que se acerca una batalla con bastante fines ocultos – dijo llamando la atención de Hibari.
-Se que no eres un total ignorante de la situación así que te lo diré, esta será una batalla entre los arcobalenos y sus representantes, y será pronto, tanto que puede iniciar en un par de días más, esta compete mucho con los arcobalenos y pese a que no confió en lo que se oculta tras esta voy a participar en esta… deberías hacer lo mismo – dijo mirándolo fijamente a lo que el azabache menor resoplo.
-Por que debería participar, sabes que odio las manadas de herbívoros bebe – dijo volviendo a mirar los papeles más las siguiente palabras del hitman lo hicieron congelar.
-Lo se pero tal y como se lo dije a Mukuro, quien va a participar te lo diré a ti, no es seguro solo es una probabilidad, pero puede que este sea el inicio de aquel juego que aquella persona menciono en ese mensaje… y sabes que si es así es por que algo encontraremos al final, no se si este tiene alguna relación con quien organizo esta pelea o no, o que es lo que buscan ambos, pero aún así participare y llegare al final, Mukuro hará lo mismo… piensa y toma tu decisión, sabiendo que no sabemos con que nos encontraremos – dijo y salió de aquella sala dejando al azabache mudo y con muchas cosas más que pensar, pese a que la decisión ya estaba tomada.
-Participare – fue todo lo que dijo y sabía que el bebé tras la puerta lo había escuchado, por retomo su labor recordando aquellas palabras que habían resonada en su mente y corazón todo el día – “Se feliz Kyoya… olvídame y se feliz… te amo” – aquellas palabras que el llenan y le hacían sentir al mismo tiempo aquella soledad y tristeza – imposible Tsunayoshi, jamás podre olvidarte, jamás lo hare, no ha la única persona que ha visto lo peor y lo mejor de mi, no a ti, no a quien amo, viviré con tu recuerdo y con aquel sueño, mi deseo más guardado.
Mientras que no muy lejos de ahí un heterocromatico bajo la oscuridad de su hogar miraba a la distancia a través de la ventana recordando las palabras del hitman – “hay probabilidad de que ese sea el juego mencionada en aquel mensaje, no se si quien si él y quien lleva a cabo estas pelean trabajen juntos y tengan los mismos fines, pero legare al fin, pues si este es el inicio de aquel juego quiere decir que algo podemos encontrar al final, el que no lo se, pero aún así lo hare” – recordó aquellas palabras que por un momento lo dejaron helado, pero las misma también que le llenaron de determinación – seguiré cualquier pista, sin importar las consecuencias o los peligros si con eso puedo acercarme a la verdad, a aquellos que te hicieron daño mi pequeño Usagi, no descansare hasta encontrarlos y hacerles pagar el hecho de haberte arrebatado de mi lado – susurro dejando caer un par de lágrimas mientras miraba el oscuro cielo sin luna, ni estrellas que lo alumbrara, sin sus guardianes nocturnos que lo reconfortaban y acompañaban – ellos te oscurecieron, te alejaron de nosotros pero aún así aún brillas dentro de nosotros, pues para mi y de seguro para los demás eres nuestro eterno cielo – dijo cerrando sus ojos y apretando sus manos mientras en un efímero momento un nombre pasaba por su mente sin ser consiente de ello – Natsu.
Mientras que muy lejos de Namimori, con el pasar de un par de horas un auto con tan solo tres personas por fin paraba de su viaje al haber llegado a su destino, por lo que sin prisa los dos más jóvenes y el mayor bajan de este mirando la imponente estructura frente a ellos, rodeado todo de blanco por la gran cantidad de nieve acumulada.
-Así que esta es Vendicare – más que pregunto afirmo Tsuna quien al igual que Ryu traía puesta una capucha.
-Al parecer – le contesto Ryu viendo el lugar – ¿soy yo o este lugar da miedo?
-No eres tú Ryu, realmente este lugar da miedo y si Tsuna esta es Vendicare – contesto a ambos comenzando a caminar hasta la gran puerta – recuerden no descubrirse hasta que lleguemos con él – recordó a lo que Tsuna hablo.
-Si, no te preocupes lo sabemos, así que vamos a darle una sorpresa a nuestro amigo, a conversar y a exponerle mis planes – dijo serio andando tras el doctor quien asintió con una sonrisa, así una vez llegados a la gran puerta esta fue tocada por el mayor al cual sin hacer ninguna pregunta dos hombres de ropas negras y cubiertos de vendajes, dejaron entrar en compañía de los menores, guiándolos por unos oscuros pasillos hasta llegar a una gran puerta de metal puro, la cual abrieron lentamente para dejarlos entrar cerrándola de inmediato, dejándolos solos dejando ver así un cuarto oscuro, alumbrado solo con lámparas, teniendo dentro de su interior solo un escritorio con papeles y un gran asiento tras dando la espalda al escritorio, delante de este había dos asientos mas y por los contornos algunos libreros, más aparte de eso no había nada más, un adorno, cuadro o algo parecido no existía en aquella habitación.
-Te estábamos esperando Iraki Kira – se escucho la voz profunda y un tanto atemorizante del gran asiento el cual poco a poco se fue dando la vuelta hasta quedar frente al escritorio y los demás quienes miraban fijamente al gran hombre sentado en este sosteniendo en sus piernas a un pequeño bebé el cual había sido el que había hablado – soy Bermuda von Veckenschtein y mi acompañante es Jager – presento el bebé y los tres hicieron una pequeña reverencia en saludo y respeto frente a los dos “hombre”
-Encantado de conocerlo Bermuda-sama, como ya debe saber soy Iraki Kira también conocido como Araki Akira, encantado de conocerlo también a usted Jager-san – dijo una vez realizada la reverencia con sumo respeto Akira – gracias por recibirnos.
-Lo que digas, aunque no creo recordar que hayas dicho que vendrías acompañado – dijo mirando con desconfianza a Ryu y Tsuna quienes se mantenían callados al lado del doctor – pero bueno no importa, avancemos rápidos con lo que nos importa, ¿Qué es aquello tan importante que quiere decirme y proponerme, como para haber venido hasta aquí pidiendo una cita con tanta urgencia? – pregunto y Tsuna sonrió levemente dando un paso adelante ganándose así la atención de Bermuda.
-Eso se lo puedo responder yo Bermuda-san – dijo no con el mismo respeto que Akira pero sin llegar a faltarle el respeto mientras lentamente se sacaba su capucha – después de todo yo soy quien verdaderamente quiere hablar con usted, Akira-sensei solo fue un intermediario – dijo una vez libre mostrándose por completo ante los presentes, sorprendiendo así a vindice.
-Imposible tú eres… Sawada Tsunayoshi… pero como tu estas muerto – expreso entre exaltado y confundido Bermuda a lo que Tsuna sonrió complacido y con cierta arrogancia, cosa aprendida de as pocas veces que entreno con cierto Hitman.
-Pues como ve, no todo es lo que parece Bermuda-san – dijo quedando todo en silencio hasta que el Vindice quien en todo momento observo al castaño suspiro.
-No hay duda eres el Decimo Vongola – dijo afirmando lo que antes Tsuna le había dicho.
-Entonces supongo que me escuchara no – más que preguntar afirmo y Bermuda muy serio asintió indicándole que podía sentarse, cosa que Tsuna realizo al instante quedando tras el Akira y Ryu aún cubierto – Bien, pues como puede ver estoy vivo y he venido aquí para aclarar ciertas cosas, y proponerle algunas cosas, pues realmente me gustaría me ayudara usted y su gente en algo.
-Como antes dije lo escuchare Decimo pero, antes me gustaría que me explicara que esta sucediendo, pues hasta yo y todos saben usted murió hace más de tres mese atrás – dijo con voz fuerte. Seria y hasta tenebrosa más Tsuna solo sonrió mostrando que a él no lo intimidaba.
-Supongo que tiene razón si va a colaborar conmigo necesita saber la verdad, necesita una explicación – dijo conforme con el pedido del Bebé.
-Decimo he aceptado hablar con usted, más nunca he dicho que iba aceptar aquello que quiere pedirme – dijo ahora un tanto molesto, molestia la cual creció al ver la tranquilidad y la confianza del menor en sus ojos.
-Primero que nada, le pido me llame por mi nombre y no Decimo, segundo relájese nosotros no somos enemigos, es más me gustaría que fuéramos aliados, por lo que no hay de que preocuparse y tercero se que no ha aceptado pero como puede ver estoy seguro usted aceptara – dijo y vio directamente a Bermuda mostrando total sinceridad en sus ojos, sorprendiendo a Bermuda y al misto tiempo relajándolo.
-Eres un chico bastante extraño, puede hablarme como si nada, sin miedo ni nerviosismo algo que no cualquiera puede hacer, aparte eres capas de mostrar gran sinceridad y confianza en tus ojos pero a la vez peligro y frialdad… - dijo quedándose un rato en silencio – De acuerdo Tsunayoshi, puedes comenzar – dijo y Tsuna sonrió.
-Bien Bermuda-san se perfectamente que Vindice controla gran parte del mundo de al mafia por no decir toda la mafia con sus reglas, por eso estoy seguro usted sabe que fue lo que sucedió hace más de dieciséis años atrás en mi nacimientos ¿cierto? Ese 14 de octubre – dijo bastante serio – ¿Qué tiene que decir sobre eso? Y se sabe perfectamente a lo que me refiero.
-… - Bermuda se quedo en silencio durante unos momentos y luego hablo – nacimiento de Gemelos y la separación de estos, nadie se lo esperaba ni noveno, ni tu padre estaban cerca y cuando miembros de familias aliadas se enteraron con ayuda de los médicos también pertenecientes a la mafia los separaron ocultando aquel hecho dejando al mayor al lado de su familia y al segundo lo eliminaron… - dijo y callo durante unos segundos mirando al menor que lo veía sin emoción alguna – o eso era lo que creí hasta ahora, he visto dos veces al Decimo y no eres tu a la persona que vi durante esas ocasiones.
-Ya veo, así que diste cuenta, pensé que no lo habías hecho después de todo me has tratado como el Decimo – dijo y luego se puso a pensar – aunque pensando mejor desea forma era mejor pus yo no debería saber de aquello cierto, es realmente muy buen actor Bermuda-san – dijo aún sin emoción alguna.
-Igual que tu muchacho ahora dime quien eres tú ¿eres el segundo hermano? – pregunto y Tsunayoshi negó con la cabeza sorprendiendo al bebé.
-No, yo soy Sawada Tsunayoshi el Decimo Vongola y quien murió en mi lugar aquel día fue el segundo hermano, quien murió fue mi adorado Natsu – dijo y no pudo evitar sonreír al ver la confusión y la sorpresa del bebé.
-¿Cómo… - no pudo terminar pues Tsuna le interrumpió.
-Es una historia un poco larga de contar, pero se la contare para si luego pasar a lo importante y a las preguntas, pero antes me gustaría que me contestara una pregunta – dijo y Bermuda asintió a la espera – si usted lo sabia y buscan que se cumplan las leyes ¿Por qué no evito que separaran a mi hermano de nosotros, porque dejo que se lo llevaran? – pregunto y Bermuda logro ver el dolor en la mirada de aquel castaño, causando para su sorpresa gran pesar.
-… Como nieto de la cabeza de Vongola muy seguramente serias la próxima cabeza, pero cuando se supo eran Gemelos, nacieron las preguntas ¿Quién seria la próxima cabeza? ¿Qué problemas provocaría el hecho de tener dos posibles sucesores hermanos? ¿Qué pasaba si uno de los Gemelos traicionaba a Vongola, por quedar fuera?, siempre ha sido un sucesor, ustedes iban a ser los siguientes, pero eran dos, cuando desde el principio debieron ser uno, y al nacer los dos la fuerza de Vongola cuando asumieran iba a ser liderada por dos, es decir tu y tu hermano – dijo viendo como el menor le ponía total atención – no era seguros pero eso podría crear problemas por lo que los que se enteraron de aquello ocultaron a tu abuelo, padre y madre la espera y el nacimiento de Gemelos, dejando al mayor y eliminando al menor… nosotros supimos de aquello no lo niego no en el mismo momento pero si después y decidimos no intervenir porque era algo ya hecho y por lo mismo que antes, pues al igual que ellos pensábamos que era lo mejor, que no había necesidad de tener dos cabezas que luego podrían o terminarían enfrentándose creando un caos… pero por lo veo nos equivocamos y hemos causado aún más mal.
-Por un momento realmente pensé que había alguna razón más importante para hacer aquello pero veo que no, solo lo hicieron para seguir un estúpido ideal – dijo muy molesto el menor y Bermuda no le quedo más que asentir.
-Y aún más que por eso también por el hecho de obtener poder – dijo y al ver confusión en sus oyentes continuo – algunos querían lograr obtener más poder dentro de Vongola si no es que la Vongola misma y por ello se deshicieron del menor de los gemelos, entre menos sucesores mejor para ellos – dijo y vio como el castaño apretaba en puño sus manos para luego calmarse y suspirar.
-De acuerdo, le agradezco que haya sido sincero conmigo Bermuda-san – dijo el castaño mirando al bebé con agradecimiento – bien supongo que es mi turno le contare la verdad y como fue que llegamos aquí… - dijo y así comenzó a relatar a Bermuda y Jager como fue su encuentro con su hermano, su idea, su enfermedad, los cambios que hicieron, las batallas que vivieron, como fue que su estado fue empeorando, su decisión y sus planes, hasta que finalmente llego al momento en que se interno y el momento en que Natsu llego a despedirse, cuando sintió la muerte de su hermano, la decisión de la operación, su supuesta muerte en esta y la corta recuperación de tres meses en el hotel, le conto todo hasta el final dejando a un sorprendido Bermuda, pues nada de eso era conocido para el – eso es lo que ha sucedido Bermuda-san, así fue como llegamos hasta aquí, una larga historia ¿no?
-Ya veo así que eso fue lo que sucedió – se dijo Bermuda más para si mismo más aún así fue escuchado por los demás que se quedaron el silencio – debo decir primero que nada que lamento la muerte de tu hermano Tsunayoshi, puede que no me creas pero soy sincero, el no haber intervenido años atrás fue un gran error que ahora muy seguramente muchos pagaremos, también te agradezco haber sido sincero conmigo, pues se no debe ser fácil.
-Pues no, no lo es pero es necesario que sepas la verdad pues como dije antes hay algo en lo que necesito tu ayuda, pero antes que nada por lo que pudo ver y sentir tu no sabes nada con respecto a quienes fueron los culpables ¿cierto? – contesto y Bermuda asintió.
-Estas en lo correcto, nosotros no sabemos nada, aquel incidente debo decir fue bastante extraño, tu hermano sabia que aquello pasaría por lo que supongo sabia de que ellos estaban cerca, más al parecer nadie más sabia – dijo un tato confundido y bastante pensativo.
-Pero ustedes siempre están al tanto de todo lo que sucede con los mafiosos, se que no miente cuando me ice que no sabe nada pero entonces ¿a quien nos enfrentamos si incluso pasaron de ustedes? – dijo y pregunto el castaño ganándose un suspiro.
-Esto el solo una suposición Tsunayoshi, pero tal y como tu lo dijiste siempre estamos al tanto de lo que sucede con la mafia, entonces dime que pasaría si quien ataco y mato a tu hermano no pertenece a la mafia y es solo un humano normal – dijo causando asombro en el menor quien no contesto nada por lo que Bermuda continuo – cada detalle fue un bien cubierto, no hay pistas, un excelente trabajo sin duda, ni siquiera rastros de llamas o de que se llevo a cabo una batalla había en el lugar… para nosotros fue una sorpresa cuando nos llego la noticia de la muerte del “Decimo” y fuimos la lugar y o había nada… como te dije solo es una suposición pero creemos que quien mato a tu hermano no necesariamente pertenece a la mafia y por lo tanto no cuenta con llamas y aparte pensamos que aquí hubo una traición a ustedes, ¿Qué quiero decir? Quien los traiciono y ataco a tu hermano fue alguien cercano a ustedes, que no pertenece a la mafia pero que por alguna razón trabajo para esta – dijo dejando a los tres oyentes en silencio y bastante sorprendidos – créeme eso respondería al hecho del porque no nos dimos cuenta de aquel acontecimiento y del porque no hay rastros de nada, no podían dejar rastros de algo que no utilizan y de una batalla que no existió, pues si fue alguien conocido ¿crees que tu hermano hubiese atacado? – termino de hablar con aquella pregunta que luego de unos segundos en silencio fue contestada por el castaño.
-No, el no hubiese atacado… - contesto cubriendo sus ojos aquella información lo llenaba de rabia, pues si había algo que odiaba era la mentira, la traición y si aquello era verdad tendría que prepararse porque sin importar quien fuera mataría al culpable, más aún si era alguien quien traiciono vuestra confianza – pero también hay que recordar que Natsu iba porque deseaba ser el quien muriera… pero tampoco creo que fuera a morir sin siquiera dar un poco de lucha, él no era así – dijo para si mismo mientras con una mano echaba sus mechones para atrás pues su cabello le había crecido en el último tiempo – créeme que si es como dices me esmerare aún más en mi venganza cuando tenga a aquel frente a mi – dijo mostrando sus ojos anaranjados llenos de odio, tanto que hizo que los demás sintieran un pequeño temor – Pero bueno ya tendremos tiempo para ellos, es momento de continuar y pasar al tema que me trajo aquí.
-Si es así, te escucho Tsunayoshi ¿a que se debe tu visita? – pregunto y Tsuna volvió a tener sus ojos normales y a mostrar su ya tan conocida tranquilidad.
-Seré directo, lo que me trajo hoy aquí es la batalla que se viene… la batalla que habrá entre arcobalenos y representantes, la cual supuestamente es para poder revertir la maldición – dijo y noto el semblante serio y atento de Bermuda.
-¿Cómo es que sabes de aquella información? – pregunto Bermuda atento y cauteloso a cada expresión del menor quien sonrió.
-Eso no creo que importe Bermuda-san, solo importa el hecho que lo se y claramente usted también, dígame usted es un arcobaleno ¿cierto? Pero no necesariamente uno del grupo de Reborn, sino uno anterior, por lo que supongo usted es la mejor opción para poder cubrir los espacios en blanco de información que poseo – pregunto y Bermuda callo unos momentos.
-… Sin duda eres un chico interesante pero dime, ¿Quién dice que te ayudare y aclarare esos espacios en blanco como tu dices? – pregunto un tanto molesto ganándose una risita de parte del Vongola.
-Nadie pero lo se, después de todo así me lo dice mi intuición y por el simple hecho de que tanto usted como yo sabemos que desea saber de que se trata mi propuesta, la cual no escuchara si se niega a hablar – dijo muy seguro de sus palabras Tsuna lo que sorprendió a Bermuda quien luego soltó una escalofriante risita.
-Sin duda eres un chico interesante pero dame algún adelante Tsunayoshi ¿Qué gano yo con todo esto? – pregunto y Tsuna solo levanto sus hombros en signo de indiferencia.
-Quien sabe, supongo que eso depende de ti ¿que es lo que tú deseas ganar? – dijo bastante tranquilo sin inmutarse por la cara de incredulidad del doctor quien le miraba – no me mires así Akira-sensei, no lo voy a prometer algo que a lo mejor no pueda darle, lo mejor para los dos es que me diga lo que quiero saber pues con eso gana escuchar mi propuesta, luego de el dependerá si aceptar o no, él mismo vera que gana o que desea ganar de aquello… Bermuda-san no me gustan las mentiras pese a que vivo e una y hago vivir a muchos en una, no me gustas por lo que no le mentiré eso es todo lo que le puedo decir y que puede que tenga mucha diversión y tranquilidad su acepta – fue todo lo que dijo y Bermuda se mostro conforme, no sabia si haría bien, pero el chico le llamaba a confiar en él y seguirlo, con tan solo su presencia la cual pese a dar confianza, mostraba también el peligro que representaba tenerlo como enemigo, algo que desde que vio sus ojos anaranjados no deseo por nada del mundo algo bastante raro en él, sin duda el chico era un líder innato.
-Bien supongo que me conformo con eso por ahora – dijo Bermuda y Tsuna sonrió complacido – tal y como dices soy un arcobaleno o más bien fui un arcobaleno, uno de otra época anterior a la de tu tutor, pero antes de esto déjame explicarte quienes son los arcobaleno, aunque supongo sabes algunas cosas por lo que no te detallare todo, solo diré lo más importante – dijo y comenzó a relatar sobre estos y su debes como arcobalenos, de cómo era su vida anterior y como era que afectaba a estos a maldición – como puedes ver todos nosotros éramos en algún momento personas normales, pero debido a la maldición todos fueron transformados en bebé.
-Ya veo así que de eso se trata la maldición – se dijo a si mismo el castaño pensando por un momento las cosas para luego volver a mirar a Bermuda – Bien dime si tu eres un arcobaleno debo suponer que los demás que trabajan en esta prisión también lo son ¿cierto?
-Supones bien todos los de aquí una vez fuimos arcobalenos, los cuales luego de un tiempo fueron desechados por Checker face – dijo y Tsuna puso un rostro bastante serio no le gustaba nada lo que comenzaba a formular en su mente.
-Entonces es correcto también pensar que esta batalla la cual tiene como supuesto fin eliminar la maldición es para buscar a los nuevos arcobaleno y deshacerse de los que ya hay ¿cierto? – Más que preguntar aquella era una afirmación a la cual Bermuda respondió afirmativamente – ya veo después de todo aquel plan es el mejor, no dejare que se salga con la suya – pensó Tsuna mientras veía a Bermuda aún tenia dudas las cuales deseaba aclarar – Dime que pasa realmente con los arcobalenos luego de haber elegido a los nuevos.
-Simple a esos arcobalenos no les espera más que la muerte, se que tu pregunta es por nosotros y te lo explicare, la razón por la que nosotros sabemos de esta trampa es porque tal y como dije antes alguna vez fuimos arcobalenos que fueron desechados a los cuales justo a punto de morir el gran odio que sentían les hizo crear una nueva llama, la llama nacida de un gran odio – dijo mientras mostraba la llama tan oscura como la noche – esta llama puede llegar a ser tan fuerte como la llama del cielo, un llama fuerte pero llena de odio, esta fue la que nos permitió vivir, solo a los que pudieron contenerla sin ser tragados por su odio mismo, esta es la llama de la noche la cual solo yo he podido mantener hasta el momento – explico mientras desaparecía aquella la cual Tsuna ni dejo de mirar en ningún momento.
-Ya veo así que a Reborn y los demás tras la promesa de eliminar la maldición los están controlando para así poder sacar a los más fuerte entre todos los representantes luego estos serán los nuevos arcobalenos – dijo y una risita salió de sus labios – me imaginaba algo así pero esto es más de lo que creía, aún así mi plan es perfecto.
-¿A que te refieres Tsunayoshi? – pregunto con curiosidad.
-Desde hace tiempo supe del deber de los arcobalenos, más para llevar a cabo ese deber tienen una maldición, entonces cuando supe de esto, de la liberación de la maldición ¿si la liberaban que pasaba con el Trinisette? Algo definitivamente no cuadraba y mi intuición digamos me llevo por el camino correcto, supuse que algo se escondía y que muy posiblemente se trataba de la busca de unos nuevos arcobalenos, más desconocía el que pasaba con los antiguos, por eso vine a ti, como dije había espacios en blanco y quien mejor que un arcobaleno para cubrirlos – dijo entre molesto y satisfecho, lo primero por lo que pensaban hacerle a sus amigos y el segundo por haber ido por buen camino ahora no tenia duda de utilizar aquello que planeo – Dígame Bermuda-san ¿usted piensa irrumpir cierto y acabar con todo esto de una vez, eliminando a los posibles candidatos?
-Supongo entonces que el que estés aquí es para evitar que irrumpa y haga daño a tus amigos, pues estas en lo correcto nuestro plan es ir, irrumpir y eliminar a los posibles candidatos para arcobaleno, como venganza a ese tipo – dijo dejando claro con su tono de voz que lo mejor era no interponerse a lo que Tsuna solo rio levemente.
-Tranquilo Bermuda-san, ya antes lo habíamos dicho no somos enemigos y ahora menos que nunca quiero que lo seamos – dijo sorprendiendo un poco al bebé – y pues no quiero que se detenga al revés lo que quiero es que valla e irrumpa en el lugar, claro que con propósitos distintos a los que en este momento usted tiene – dijo tranquilamente sorprendiendo tanto al bebé como a su acompañante quien miraba también al castaño – Entonces ¿desea escucharme?
-… Dame una razón se que la tienes – fue todo lo que dijo y Tsuna sonrió.
-Creo haber encontrado una forma de eliminar la maldición sin la necesidad de tomar la vida de nadie y conjunto con eso creo haber encontrado la forma de mantener el Trinisette estable sin la necesidad de los arcobaleno – dijo y ahora si dejo sorprendidos a los dos de Vindice ahí presentes.
-Habla te escucho – fue todo lo que dijo nuevamente.
-Se que gracias a su odio es que están vivos y aunque entiendo que deseen tomar venganza pues vivo por el mismo motivo, no estoy de acuerdo en que la tomen lastimando a inocentes, porque eso es lo que son mis amigos inocentes – dijo fríamente el castaño para luego pararse de su asiento y caminar un poco por aquel lugar – lo que les propongo es simple Bermuda-san… quiero que irrumpan en las batallas y tomen control de ellas, y que delante de todos expongan su deseo de venganza, más sin revelar mucho, de eso se encarga el propio Checker face, que pelen contra mis amigos y todos los que participen ahí como si fueran a matarlos, ellos aún no son rivales para ustedes por lo que será un buen entrenamiento estar al borde de la muerte por ustedes les hará más fuerte, una vez vallan cayendo descalificados y queden los más fuertes los cuales Checker face usara para proteger el trinisette iniciara el verdadero plan, pues ustedes tendrán que exponer ante aquellos mi idea, aprovechar el momento en que alguno quiera hacerles cambiar de opinión ante su venganza de seguro alguno lo hará, no porque no estén de acuerdo sino porque ustedes piensan poner en peligro a gente inocente, una vez expuesta la idea ellos aceptaran y ustedes traerán ante mi a Checker face yo me encargare del, una vez el acepte ustedes llevaran a cabo mi idea, romperemos la maldición y no habrá necesidad de más Arcobalenos, el trinisette no esta en peligro y ustedes se encargaran de resguardarlo, al mismo tiempo en que se encargan de esta prisión – fue todo lo que dijo quedando todo el lugar en silencio, nadie hablaba y Tsunayoshi no hacia nada por romper aquel silencio.
-… Cual es ese plan del que hablas ¿Cómo aves que funcionara y no causara más daño? – Pregunto Bermuda y Tsunayoshi que en esos momentos les daba la espalda los volteo a ver.
-Funcionara, se que lo hará mi intuición no falla, no dejare que mis amigos sufran aquel futuro y librare a Reborn de aquella maldición, esta será la ultima vez que les pueda proteger esta será mi despedida de todos ellos, una vez esta batalla termine y mi plan allá funcionado no habrá nada más que nos ate, de esta forma pienso pagar la deuda que tengo con todos ellos, así Natsu no tendrá de nada de que preocuparse – dijo mirando directamente ha Bermuda quien no expreso palabra el chico se veía tan solitario pese a estar tan cerca de ellos, y no pudo evitar sentirse mal por el chico tan solitario y triste más aquella triste expresión cambio a una más tranquila y alegre cuando el otro encapuchado se le acerco y tomando su mano – Gracias.
-No puedo evitar pensar que todo el sufrimiento de ese chico fue provocado por mí a no haber intervenido hace tantos años ¿Qué habría pasado si lo hubiese hecho? – pensó sin dejar de mirar al menor sintiéndose enojado consigo mismo, siempre vivió por y con el odio y ahora todo estaba cambiado.
-Entonces que dice Bermuda-san ¿Me ayudara o seguirá con su plan inicial? – pregunto sin soltar la mano de Ryu mirando a Bermuda quien se paro de donde estaba subiéndose al escritorio donde estiro su mano hacia Tsuna quien el miro sorprendido.
-Acepto Tsunayoshi, te ayudaremos con este plan prometo no fallar en nuestra parte – dijo y Tsuna estrecho su mano para luego ver como Bermuda ante la mirada incrédula de todos se hincaba frente a él – al igual como prometo que tanto Vindice como Vendicare estarán a tu disposición una vez termine esta batalla, te ayudaremos y protegeremos, como pago por esto y como una forma de pedir perdón por aquel error de hace dieciséis años atrás – dijo y Tsuna sonrió con calidez hacia el bebé.
-No me esperaba esto pero te lo agradezco y tomo tu palabra y te lo agradezco – dijo el castaño mientras paraba a Bermuda y lo tomaba en brazo como si de un peluche se tratara pues había soltado ya a Ryu – y no hay necesidad de que te perdone no te culpo por ello – dijo mientras apretujaba a Bermuda quien se estaba comenzando a molestar.
-Se puede saber que es lo que estas haciendo Tsunayoshi – pregunto con voz ronca y molesta.
-Bueno para ser francos a diferencia de Reborn y los otros en vez de parecer un Bebé con esas ropas pareces un peluche, uno bastante llamativo y lin… - no alcanzo a terminar pues recibió un golpe en la cabeza de parte de Akira haciendo que soltara al Bebé que se fue con Jager – oh vamos no tenias porque golpearme – dijo al doctor quien le ignoro.
-Siento mucho las faltas de respeto de Tsunayoshi hacia usted Bermuda-sama – se disculpo y Bermuda solo negó con la cabeza en signo de no tener importancia pese a que muy dentro del quería encerrar al castaño en el ultimo infierno de Vendicare por intentar decirle lindo – si que tiene gustos raros este niño – suspira – que se va a hacer.
-Bueno lo mejor será que continuemos – dijo Bermuda llamando la atención nuevamente de todos - ¿en que consiste tu plan o esa nueva forma Tsunayoshi? – pregunto y así el castaño volvió a sentarse y de forma seria comenzó a explicar de que se trataba aquella nueva forma, de cómo los últimos que quedaran darían sus llamas teniendo así de todos los atributos, en donde con las llamas dadas, las más poderosas mantendrían estable el trinisette y si en algún momento las llamas se debilitaban solo habría que inyectar más y que para estar atentos y tener eso protegido lo mejor era que ellos la protegieran, pues como una nueva llama esta también iba a formar parte y seria un potenciador, aparte solo Bermuda podía utilizar aquella llama.
-Eso es no es totalmente difícil pero si se necesita de mucha fuerza, aparte no crees que es una buena recompensa por a cambio de tu venganza – dijo tranquilamente el castaño a lo que Bermuda suspiro.
-Sin duda no me esperaba algo así y si es una buena recompensa, creeré en que esto resultara y siguiere al pie de la letra cada acción – dijo Bermuda igual de serio.
-Funcionara no solo mi intuición me lo dice hay una persona que opina igual que yo, ella fue la que nos llevo a pensar en esta solución y sin duda no es alguien de quien se pueda desconfiar – dijo y Bermuda no pregunto más y solo asintió.
-Si es así supongo que es mejor que vallan a descansar puede que este no sea el mejor lugar pero les invito a permanecer aquí no tendrán problemas y parte será un buen lugar para empezar su entrenamiento, el cual estoy seguro quieren hacer, especialmente el tuyo Tsunayoshi no será fácil manejar aquella llama – dijo mirando seriamente al menor el cual se sorprendió.
-Así que te diste cuenta, jeje supongo que era de esperarse – dijo entre divertido y molesto el menor – pues cuento con su ayuda y le tomo la palabra Bermuda-san – dijo y vio como Bermuda miraba a Ryu – Ryu ya no es necesario puedes descubrirte te presentare – dijo y Ryu se descubrió dejándose ver – el es mi amigo Ryusuke, sabe todo como ya debes haberte dado cuenta me a ayudado mucho y también será entrenado para ser un hitman al igual que yo.
-Ya veo, pues de nuestra cuenta corre un buen entrenamiento y espero luego escuchar tus planes futuros, ahora lo mejor será que descansen – dijo y Tsuna sonrió levemente.
-Por supuesto una vez esto termine seguiremos hablando, por ahora tomare tu palabra pero antes de irme quisiera que me contestaras una pregunta – pidió y Bermuda asintió - ¿Cómo te diste cuenta tan fácilmente de que éramos diferentes?
-He vivido mucho Tsunayoshi y se diferenciar perfectamente a las personas, físicamente ustedes pueden ser iguales pero al mismo tiempo interiormente son muy diferentes, sus ojos son los que les diferencian Tsunayoshi, a diferencia de Natsu tu no estas limpio y tus ojos te delatan, estos saben lo que es vivir con la muerte, estos muestran cosas muy diferentes de los dos – dijo y Tsuna solo asintió – estoy seguro que ellos también debieron darse cuenta de los cambios más nunca supieron como interpretarlo – dijo y Tsuna soltó una risita y salió seguido de Ryu y Akira, no sin antes despedirse siendo guiados a las que serian sus habitaciones.
Así pasaron los días y Vindice marcho de la prisión, el torneo inicio y con la presencia de Bermuda todo se complico, pues nadie sabia de la existencia de un octavo arcobaleno, muchos de los participantes todos amigos y conocidos de Tsuna fueron gravemente lastimados por VIndice, más los guardianes hasta el final lucharon, todos sabían de la verdad de que trataba ese torneo, más no podían hacer nada Checker face se hizo presente y tras unas ultimas batallas dio inicio al verdadero plan de Tsuna, quien gracias a Bermuda logro cruzar algunas palabras con aquel hombre.
Todos estaban reunidos era el momento de terminar aquella batalla, todos darían sus llamas, para completar aquel plan, y una vez dio inicio la entrega de llamas, Checker face paso adelante con las últimas llamas necesarias para terminar aquello, por lo que sin prisa y con cuidado entrego unas fuertes llamas del cielo las cuales rodearon a todos quienes no evitaron sentir un calor familiar en estas, más no supieron saber de quien eran aquellas llamas que pese al gran calor que emitían estas también emitían tristeza y soledad una que llego a cada uno de los ahí presentes.
-Esta hecho chico tal y como querías los has librado – pensó Checker face justo después de entregar aquellas llamas y comenzar a desaparecer del lugar ya no tenia nada más que hacer ahí.
Mientras que los demás aún intentando identificar esa llamas no se dieron cuenta cuando una gran cantidad de llamas llego hasta cada uno de los arcobalenos rodeándolos especialmente la llama del cielo, una vez estos rodados dese el núcleo de llamas todo se alumbro por lo que todos cerraron sus ojos por unos segundos una vez los volvieron abrir no había signo de ninguna llama alrededor y solo estaban los guardianes y los demás, menos Vindice que había desaparecido del lugar, más todos quedaron sorprendidos cuando al ver al lugar en donde antes estaban los arcobalenos, ya no había ningún bebé pues todos los que antes poseían un cuerpo de niño ahora poseían cuerpos de jóvenes de dieciocho años, menos Yuni que permanecía con su mismo cuerpo que antes, más no tan solo eso les sorprendió sino que alguno de los arcobalenos botaban lágrimas, las cuales ellos pensaban era por haber recuperado su cuerpo.
No muy lejos de ahí tanto Vindice como dos jóvenes cubiertos observaban hacia donde estaban todos los demás.
-Mmm no me esperaba eso, pensé que recuperarían los cuerpos que tenían cuando paso lo de la maldición o que quedarían como niños y crecerían como uno normal haría – dijo uno de ellos.
-Pues yo tampoco me lo espera Tsunayoshi, pero al ser las llamas de jóvenes de entre dieciséis a veinte años, supongo sus cuerpos adoptaron una edad intermedia o ¿sabes cuantos años han vivido como arcobalenos? – pregunto luego un tanto dudoso Bermuda quien pese a saberse que era el estaba cubierto completamente poseyendo una estatura mucho mayor que antes.
-No ¿Por qué?
-ES una hipótesis pero a lo mejor esa tenga que ver con la edad que aparentan ahora – dijo y Tsuna levanto sus hombros en signo de indiferencia.
-Como sea ya no importa, lo que importa es que la maldición se rompió no creo que les importe mucho la edad que aparentan ahora – dijo y comenzó a darse la vuelta para irse del lugar – será mejor que nos vallamos no es bueno estar tan cerca – dijo luego comenzando a avanzar a una gran cantidad de niebla que aparecía no muy lejos de ellos, siendo seguido por Vindice más antes de acercarse mucho a esta hablo nuevamente dirigiéndose a su amigo – Ryu ya deja de mirar a Reborn se dará cuenta, su aturdimiento no durara mucho, no creo que quieres te vea con la baba colgando – dijo con un tono burlesco que saco a Ryu de sus cavilaciones.
-NO TENGO BABA COLGANDO, NI TAMPOCO LO ESTABA VIENDO – Grito entrando de inmediato a la niebla siendo seguido por los demás.
-Si, si como digas – fue lo último que se escucho antes de desaparecer del lugar, justo en el momento que un guapo azabache dirigía su mirada hacia donde sentía antes lo observaban, más dejo de mirar al escuchar su nombre.
-Reborn ¿que sucedió Kora? – pregunto un rubio de traje de militar al azabache quien miro su fedora botada en el suelo por lo que con cuidado se inclino recogiéndola, sacudiéndola y poniéndosela, para luego contestar.
-No tengo idea Colonnello – fue todo lo que dijo ocultando sus ojos recordando lo que seguramente todos los Ex-arcobaleno escucharon al momento re ser rodeados por aquellas llamas y la luz.
“Gracias por todo… adiós Reborn, chicos”
-Que es lo que esta pasando, aquellas llamas, aquella voz son conocidas estoy seguro pero, no logro llegar a la persona solo pude sentir el gran dolor y soledad que acompañaba a aquellas llamas – pensó Reborn mirando al cielo despegado que se cernía sobre ellos con gran incertidumbre y confusión, más sabia no había tiempo para ello ahora que tenia su cuerpo, uno más joven pero su cuerpo, podría seguir investigando lo que había dejado por este torneo – como sea esto ha terminado así que ahora todos ustedes espero sigan con las investigaciones ahora no descansaremos con esto – ordeno a los guardianes que sin emitir pregunta alguna asintieron – no importa el tiempo que pase llegaremos a la verdad – se dijo a si mismo mientras miraba su mano apretada en un puño y volteaba a mirar nuevamente a aquel lugar de donde antes se sentía observado.
TRES AÑOS DESPUES
Dos jóvenes de vestimenta completamente negras, y capas de igual color que cubrían sus rostros, con manchas liquidas rojas en estas observaban atentamente a cuatro hombre botados en el suelo desangrados, con distintos cortes profundos en varias partes de sus cuerpos y con signos de balazos, siendo alumbrados solo por la luz de la luna en aquel oscuro callejón.
-Mmm ya están muertos, no dieron mucha batalla que decepción – dijo uno con una voz sensual, un tanto divertida pero a la vez aburrida, mientras guardaba entre sus ropas una pistola y una espada corta.
-Son solo basura no había porque esperar más de ellos mi querido amigo – dijo el otro con una voz suave pero afilada, también con un tono sensual y divertido por los reclamos de su amigo, mientras también guardaba una espada más larga y una pistola.
- Bueno será mejor que nos vallamos estos infelices nos ensuciaron, me quiero cambiar – dijo viendo las mancha se sangre en su ropa y en las del otro quien asintió dándose así los dos media vuelta dejando ver uno unos largos mechones rubio y el otro unos largos mechones castaños, en compañía del brillo inusual de unos pendientes, a la vez que el de mechones castaños lanzaba al aire una pluma blanca y dos negras las cuales cayeron sobre los cuerpos casi mutilados de aquellos pobres hombres.
-Hoy iniciamos mis queridos guardianes, hoy es le inicio – dijo en susurros audibles solo para él y su amigo quien al igual que él rio levemente, mientras se perdían en la oscuridad – me pregunto cuanto han avanzado, lograran alcanzarme espero que no, pues antes de que lo hagan o lleguen a mi los destruiré yo mismo…
CONTINUARA….