Casi diez minutos después Chanyeol aún no lograba tranquilizarse por completo. El par de minutos que pasaron entre la salida de Yifan y la suya le parecieron eternos, afortunadamente cuando al fin se animó a salir no había nadie que pudiera verlo.
En aquellos momentos platicaba superficialmente con todos los que se encontraban en su camino, intentando actuar como si todo fuera normal. Como si no acabara de tener uno de los mejores orgasmos de su vida.
Cuando finalmente llegó al lado de Kyungsoo, quedó sorprendido porque su amigo ni siquiera parecía darse cuenta de su llegada. Aunque miraba en su dirección, su atención estaba puesta en un punto por encima de su hombro; intrigado por lo que fuera que hubiera capturado la atención de su amigo de aquella manera, se giró y trató de seguir la mirada de Kyungsoo. Cuando se dio cuenta de que era a Suho a quien su amigo observaba, estuvo a punto de caerse de espaldas.
A pesar de que los separaban un par de metros, se miraban con si ellos fueran los únicos presentes en el enorme salón. De hecho en ese momento se percató de la tensión eléctrica que fluía entre ellos. Pura y vibrante atracción sexual.
Consideró alejarse para concederles un poco de intimidad, por muy escasa que ésta fuera en un salón de fiestas abarrotado, pero Suho eligió precisamente ese momento para retirar la mirada y alejarse. Como si despertara de un sueño, Kyungsoo desvió la mirada y pegó un sobresalto al darse cuenta de que su alto amigo estaba a su lado.
-¡Vaya! ¿Qué pasó aquí?
-No sé de qué hablas-replicó Kyungsoo tratando de ocultar su temor pero completamente sonrojado-No pensé que fuera a venir
-Bueno, seguramente Yifan lo invitó como una cortesía. Nos volvimos…em…amigos durante el tiempo que duró el romance de ustedes
-Lo sé. Supuse que Yifan lo invitaría, pero estaba seguro que no vendría
-¿Por qué no vas a hablar con él en lugar de lanzarse miraditas?
-No gracias. La última vez que hablamos terminé con el corazón roto y no tengo intenciones de “recordar viejos tiempos”
-Quizá haya cambiado de opinión
-Aunque así sea, no me importa. ¿Te molestaría que cambiáramos de tema?
-¿Bromeas? Finalmente puedo desquitarme de todas la veces que te metes conmigo ¿por qué habría de dejarlo?
-Porque puedo voltearte la tortilla fácilmente. ¿Por qué tardaste tanto?-preguntó pícaramente
-¿Eh?-dijo torpemente-No sé de qué hablas
-Tuve que decir que estabas tomando aire para que a nadie le pareciera sospechosa tu ausencia. O peor y fueran a buscarte al tocador
Chanyeol agradeció mentalmente el buen tino de su amigo. De esa manera quienquiera que estuvo a punto de describirlos, considerando que fuera una de sus invitadas, no lo relacionaría con él.
-Así que… ¿qué estabas haciendo? Tardaste demasiado como para sólo haber ido a refrescarte…sin mencionar que regresaste más acalorado y sonrojado que cuando te fuiste
Se sonrojó de vergüenza y culpabilidad, pero trató de mantener una actitud distante y despreocupada para poder acallar las sospechas de su amigo
-Imaginaciones tuyas
-¿También es imaginación mía el que Yifan desapareciera casi el mismo tiempo que tú?
-Sí
Oh. Entonces supongo que esas marcas rojas que tienes en el cuello también son fruto de mi imaginación ¿eh?-preguntó con una sonrisa de suficiencia.
Completamente aterrado se acercó a un espejo para verificarlo, pero para su absoluto alivio y confusión, la piel expuesta estaba completamente blanca; pero cuando escuchó la risa de Kyungsoo comprendió que cayó completamente en su trama
-Que gracioso eres Kyungsoo-reclamó entre dientes
-Era muy obvio para mí lo que acababas de hacer, pero como lo negaste no pude resistir el impulso de tomarte el pelo. Apenas puedo creer que precisamente tú lo hicieras en un baño-lo dijo casi con admiración
"Ni yo" pensó sombríamente Chanyeol. Aunque ya habían pasado varios minutos, aún le costaba creer que el encuentro en el lavamanos en verdad ocurrió.
-Tengan más cuidado para la próxima. Pude cubrirlos ésta vez, pero a la otra quizá no corran tanta suerte.
A lo lejos escuchó la risa de Yifan y se giró para poder verlo. Estaba platicando animadamente con Jongdae y Jongin mientras su odiosa acompañante se pegaba a él como una lapa. Verla insinuársele de aquella manera tan descarada desató sus celos y a duras penas logró controlar el instinto de ir hacia ellos para dejarle claro a aquella resbalosa que él era suyo. Suyo.
Por muy atrayente que fuera la idea, sólo el convencimiento de que una escena de ese tipo no les convenía a ninguno de los dos logró detenerlo. Tratando de calmarse, concentró su mirada en los labios de Yifan, que se movían animadamente, seguramente contándoles alguna anécdota a sus compañeros. De pronto la imagen de sus labios configuró en su mente el recuerdo de lo que había pasado en el baño.
Más que el hecho en sí mismo, le sorprendía que fuera él mismo quien rompió su propia regla: nada de besos. No sólo no se resistió al beso, sino que él mismo lo buscó ansiosamente.
Trató de justificarse diciendo que perdió el control de sus actos al calor de la pasión, lo cual era cierto, pero eso no quitaba lo mucho que disfrutó con él. Sólo de recordar la sensación que lo invadió cuando sus labios se tocaron…
Inconscientemente llevó sus dedos hasta sus labios, asombrado de que aún pudiera percibir con claridad el sabor de los de Yifan. Tan deliciosamente pecaminoso como él mismo.
En ese preciso instante Yifan volteó en su dirección y las miradas de ambos se encontraron. Entonces comprendió exactamente cómo debió sentirse Kyungsoo cuando miraba a Suho, como hipnotizado, incapaz de apartar la mirada aunque de ello dependiera su vida, definitivamente se sintió como si fueran los únicos presentes en el salón. Casi se sintió tentado a pedirle que buscaran un lugar para encontrarse de nuevo, aunque fuera una pared oscura. Una sola mirada le bastaba para excitarlo.
El convencimiento de aquello bastó para asustarlo y romper el contacto visual. ¿Qué le pasaba? Nunca había sido. Nunca se había sentido tan consiente de su propio poder de seducción, de su necesidad.
¿A dónde lo estaba llevando aquella aventura? No estaba seguro de nada, excepto que de pronto se sentía tremendamente asustado.
∞
Un par de horas después la fiesta estaba en las últimas. Varios de sus amigos, sobre todo quienes tenían turnos que cubrir al día siguiente, ya se habían retirado. Él mismo se sentía muy cansado, pero sobre todo deseoso de reunirse con Yifan en su departamento y retomar las cosas que dejaron en el tocador. Aunque reconocía que si se limitaban a dormir en brazos del otros, no le vería problema.
Después de su fallido encuentro con Suho, el ánimo de Kyungsoo decayó tanto que sorprendentemente se retiró temprano, en compañía de Ryeowook que se ofrecido a llevarlo hasta su casa. Aunque comprendía la necesidad de su amigo por alejarse, eso lo dejaba en el predicamento de buscar alguien que lo llevara a su casa. Podría pedírselo a Yifan, pero teniendo en cuenta que él tendría que llevar a su acompañante, él no deseaba encerrarse en lugar tan pequeño como un auto con esos dos. Lo cual lo obligaba a buscar a Baekhyun.
Francamente eso era lo último que deseaba. Temía que si se quedaban a solas en un lugar tan reducido por más tiempo del necesario, terminara lanzándose contra su cuello. Aún continuaba furioso y nada le gustaría más que hacerle daño físicamente. La otra opción era llamar un taxi, pero esa idea le atraía aún menos.
Alguien le comentó que habían visto a Baekhyun dirigirse al baño, así que se dirigió a ese lugar para poder interceptarlo antes de que regresara con su…invitado y le prometiera llevarlo a casa. Si no estaba dispuesto a compartir auto con la acompañante de Yifan, mucho menos lo estaba a hacerlo con el amante de su novio.
Se recargó en la pared que daba al pasillo del baño, casi de inmediato escuchó abrirse una de las puertas pero no se giró hasta que escuchó una irritante y reconocible risa de hombre sin dignidad. Se dijo a si mismo que estaba equivocado, que no podía ser cierto, pero finalmente se giró para cerciorarse
Baekhyun y Xiumin salían del baño de hombres. Nadie que los viera en aquellos dudaría de lo que acaban de hacer y él que lo había hecho tan sólo unas horas atrás…lo tenía muy claro
De pronto se sintió físicamente enfermo y casi temió vomitar en ese preciso momento. Una cosa era saberlo, verlos juntos, pero enfrentarse directamente con una prueba de su desfachatez y cinismo…
Tuvo que alejarse de aquel pasillo más por su propia seguridad que por la de él. Caminó torpemente, chocando con las espaldas de algunos de sus compañeros hasta que logró vislumbrar por encima de sus cabezas a la única persona en quien confiaba lo suficiente como para necesitar su compañía.
-Yifan.
Le hubiera gustado estrellarse contra su pecho, fundirse entre sus brazos…pero con todos sus amigos rodeándolos ésa idea estaba descartada. Trataba de guardar las apariencias, de no parecer tan impactado como en realidad se sentía, pero al parecer Yifan lo conocía mejor de lo que pensaba porque de inmediato su mirada se tiñó de preocupación
-Chanyeol ¿qué pasa?
-Yo…-¿cómo podía explicárselo delante de tanta gente? Entonces por el rabillo del ojos alcanzó a ver a la acompañante de su chico y se dio cuenta de que tenía una testigo de excepción interrumpiendo aquel momento-Yo…quiero pedirte de favor que me lleves a mi departamento ¿podrías?
-Me temo que es imposible, Chanyeol. Yifan ha prometido llevarme al mío
Y estaba claro lo que pensaba que ocurriría después. La muy zorra.
-No hay problema. Puede ir a dejarte y luego llevarme a mí-se hizo él desentendido a propósito y tuvo el placer de enfurecerla al ver que echaba sus planes románticos por la ventana
-Entonces así lo haremos-indicó Yifan, concediéndole al peliplata la victoria en la disputa por pasar la noche con él-Vayan por sus cosas y los dejaré en sus casas.
Yifan se les adelantó por lo que no pudo ver la mirada desafiante que intercambiaron ambos. Él era el premio y ninguno de los dos renunciaría a él sin pelear.
∞
Casi media hora después, Yifan regresó al auto, luego de dejar a Jessica en la puerta de su departamento. Su acompañante trató de seducirlo para convencerlo de que se quedara a pasar la noche con él, sin importarle lo que pasaría con Chanyeol, pero el rubio se disculpó por rechazarla y le prometió llamarla muy pronto para verse nuevamente.
En aquellos momentos, mientras conducía en dirección a la casa de Chanyeol, lo observaba por instantes por el rabillo del ojo. En su ausencia había cambiado de lugar, del asiento trasero al del copiloto, pero estar sentado a su lado no significaba que le estuviera poniendo atención; por el contrario, estaba recargado en la puerta con la mirada perdida en sus pensamientos y no precisamente en las calles que recorrían. Llevaba así desde que salieron de la fiesta, exceptuando el momento en que regresó al auto y exhaló un suspiro de alivio porque él no se hubiera quedado con Jessica, pero fuera de ese momento su atención desapareció.
No hacía falta ser un genio para saber que algo debió molestarle al final de la fiesta, probablemente Baekhyun, aunque se moría de curiosidad por saber lo que había pasado para ponerse así, decidió que lo mejor era ser muy cauto al preguntarle.
-¿Estás bien?
-Mmmm-fue toda la respuesta que obtuvo
-¿Tiene esto algo que ver con ese tonto de Baekhyun? ¿Te hizo algo?
-No exactamente-se incorporó de su posición y volteó a verlo-Lo vi…otra vez. Estaban fajando descaradamente en el baño ¿puedes creerlo?-sabiamente el rubio no comentó algo sobre que ellos habían hecho lo mismo. Sabía que la situación era muy diferente-En un lugar donde cualquiera podía verlos-una inconfundible mueca de desprecio acompañaba sus palabras, pero Yifan se abstuvo de emitir su opinión-Era MI fiesta de cumpleaños y no sólo no importó llevar a su amante, sino que incluso no le importó llevar su traición un paso adelante, sin importarle que alguien lo hubiera visto y me lo dijera
-Todos son tus amigos, Chanyeol, no te lo hubieran dicho
-¿Lo encubrirían tan descaradamente?
-Más bien diría que intentarían protegerte
-Lo que sea-dijo con desgana mientras se dejaba caer contra el respaldo del asiento, pero sin dejar de verlo
-¿Te sientes triste? ¿Furioso?
-Un poco de ambas, pero creo por sobre todas esas emociones, me siento decepcionado.
-¿De él?
-De mí y de él. Por no darme cuenta de qué clase de persona es respecto a nuestra relación, me siento tan tonto y al mismo tiempo furioso con él por la manera tan egoísta en que se comporta. Tenemos una relación ¿es mucho pedir que mantenga cerrada la bragueta del pantalón? Y también me enojo conmigo mismo por permitir que esto me afecte, por no poder evitar cuestionarme mi atractivo cuando sé que el error está en él no en mí
-Eres absolutamente deseable, tienes mi palabra
-Viniendo de ti, créeme que valoro ese comentario
Yifan dejó pasar el comentario porque no estaba seguro de cómo tomarlo. Le gustaría poder consolarlo, borrar las preocupaciones e inseguridades que aquella situación habían creado en él, pero era algo con lo que el mismo debía tratar. De pronto tuvo un momento de iluminación y supo exactamente la manera adecuada para hacerla olvidar todos sus problemas
-¿Alguna vez lo has hecho en un coche?
-¿Cómo?-exclamó desconcertada-¿De qué hablas?
-Ya sabes. En el asiento de atrás de los coche, en un lugar apartado. Igual que los adolescentes
-¡No! Estás loco
-Vamos ¿no te excita la idea?
A él sí. Y por la forma en que la respiración se le había acelerado a Chanyeol y el rubor cubría sus mejillas, a él también
-¡Claro que no! Ya tuve suficiente de riesgos por esta noche ¿acaso olvidas lo que hicimos en el baño?
-Créeme, nunca voy a olvidarlo
-Ya tuvimos suficiente de que no nos atraparan, así que no voy a tentar a la suerte otra vez, ahora en el asiento trasero de un auto.
-Nadie nos verá
-¡Con tu coche naranja! No entiendo por qué tuviste que elegirlo precisamente de éste color tan llamativo
-Porque el rojo está muy trillado-dijo con una sonrisa descarada.-Cielos. Apenas lo dije y ahora no puedo dejar de imaginarte desnudo sobre el asiento de piel de atrás
-¡Quieres dejar de decir eso! Créeme, no va a pasar
-¿Eso es un desafío?
-¡No!-cuando miró detenidamente el lugar en dónde se encontraban, comprendió que su negativa no había servido de nada, porque Yifan ya estaba aparcando en una calle solitaria. Ni siquiera se había percatado del momento en que se desvió del camino.
-Vamos al asiento trasero (AQUÍ! Reproduzcan la canción!!)
Pensó en negarse una vez más, de hecho abrió la boca para externar su negativa, pero antes de darse cuenta ya se estaba soltando el cinturón de seguridad y abriendo su puerta. Durante el trayecto se había quitado los zapatos para estar cómodo, de modo que ni siquiera se preocupó en ponérselos nuevamente y pisó descalzo el asfalto.
Prácticamente entraron al mismo tiempo en el coche, aunque quisieron ir al encuentro del otro de manera inmediata, la parte trasera era algo angosta por lo que les dificultaba la movilidad
-¿Y ahora qué?-preguntó Chanyeol con la respiración entrecortada por la ansiedad y la excitación
-Pues…recuéstate en el asiento y yo me encargaré de lo demás
Y si, Chanyeol lo obedeció, preguntándose qué era lo que seguía a continuación. Estaba escandalizado y temeroso de que alguien los sorprendiera; aunque siendo sincera, el riesgo de que los descubrieran era mucho menor a cuando lo hicieron en el baño del salón. En aquella ocasión era más consciente del riesgo, del lugar en el que se encontraba, pero incluso aquel conocimiento en lugar de asustarlo aumentaba su excitación.
Yifan comenzó a besarlo en las mejillas y comenzó a bajar por su barbilla pasando por la curva de su cuello hasta el punto donde le latía aceleradamente el pulso, donde la mordió ligeramente.
-Ohh
-Relájate
-Para ti es fácil…
-No te creas
Cuando escuchó el sonido de los botones de su camisa siendo abierta, se sorprendió enormemente porque ni siquiera se percató del momento en que Yifan había abierto sus pantalones para bajarlos en conjunto con los diminutos boxers que se había puesto especialmente para él
-Levántate un poco para que puedas quitártelos
-¡No! Si alguien nos ve…
-Ya te dije que dejes de preocuparte por eso. Además me muero de ganas de verte desnudo tendido en el asiento de piel y no pararé hasta hacer realidad esa imagen
Sus palabras iban acompañadas por sus manos quitándole lo que restaba de aquel traje, por lo que Chanyeol no le vio sentido a seguirse resistiendo a sus intenciones, sobre todo cuando él mismo lo deseaba. Yifan tuvo que hacerse para atrás para darle espacio, pero finalmente se quitó lo poco que quedaba para sacar sus pantalones y los puso en el respaldo del asiento del copiloto, quedando vestido únicamente con una de las diminutas prendas de encaje que el rubio le había regalado por su cumpleaños
-Quédate así de momento-indicó Yifan antes de inclinarse y rozar uno de sus pezones con los labios
Él dio un respingo, y gimió. Decidido a continuar con sus caricias, cedió a la tentación y lo tomó entero en la boca. Comenzó a acariciarle el otro pezón al tiempo que succionaba el primero con fuerza, provocándole una deliciosa sensación que lo recorrió hasta el vértice de las piernas.
-Oh
-¿Te gusta?-le preguntó con suavidad mientras su mano dejaba el pezón y viajaba en dirección al bulto entre sus piernas
-Sabes que sí-su respiración estaba seriamente entrecortada y Yifan supo que estaba cerca del límite.
-Bien, espero que esto te guste aún más-retiró su mano cuando apenas empezaba a acariciarlo, a lo que Chanyeol respondió con un gemido quejumbroso-Calma. Esto lo hará valer
Se retiró para tener un poco de espacio y llevó sus manos hasta las caderas del menor para empezar a bajarle la ropa interior. Le sonrió con picardía antes de arrojarlas por encima de su hombro, yendo a caer justo en el espejo retrovisor. Sorprendentemente Chanyeol parecía repentinamente cohibido, con las piernas cerradas y los muslos ligeramente apretados
-Insisto en que esto no me parece una muy buena idea-su mirada era vacilante y su voz temblorosa, señal de que sólo era una pequeña parte de sí mismo la que lo hacía dudar.
-Nadie nos descubrirá. Sólo relájate y disfrútalo
Decidido a convencerlo, sobre todo porque se le planteaba como un delicioso reto, lo besó en el cuello y obteniendo a cambio un gemido de rendición. Al cabo de unos segundos deslizo su mano por su miembro acariciándolo de arriba abajo dándole un poco más de atención a la punta ligeramente humeda por el pre-semen. Después lo miró a los ojos y apretó con un poco más de fuerza.
Él abrió mucho los ojos.
- ¿Te gusta?
-Mmmm.
Yifan movió su mano creando un vaivén y él se mordió el labio inferior, moviendo las caderas para crear más fricción entre su mano y él.
-Ábrete para mí-le suplicó él-Por favor. – Le suplicó mientras colocaba un dedo en su entrada
Hubo un instante de vacilación, pero casi inmediatamente Chanyeol relajó completamente los muslos.
-Sí, así-giró el dedo y lo encogió para poder acariciarle el punto exacto con la yema-él gimió y se echó hacia atrás contra el respaldo-Más abierto, cariño. Eso es.
Mientras él abría las piernas, él retiró el dedo de mala gana para poder colocarse bien. Resultaba muy incómodo, pero estaba dispuesto a hacer lo que fuera con tal de saborearlo. Como pudo se arrodilló en el suelo y colocó las piernas de él sobre sus hombros.
Con las manos debajo de las nalgas, lo levantó un poco y empezó a chuparlo. Estaba en la gloria; el aroma de la tapicería de piel se mezclaba con el del sexo y los gritos apagados de Chanyeol retumbaban contra las paredes del automóvil.
Chanyeol le sujetó la cabeza con ambas manos y él supo que estaba a punto de llegar. Le temblaban los muslos y estaba tan caliente que él creía que faltaría poco para que le saliera vapor sólo un poco más...
-¡Ahhhh!
Exclamó Chanyeol con fuerza mientras echaba la cabeza hacia atrás y se dejaba llevar por el placer que Yifan le proporcionaba. Se sacudió con fuerza, pero él contuvo sus temblores sosteniéndola con firmeza y continuando con sus caricias por unos segundos más para poder disfrutar de su sabor. Cuando pensó que era suficiente se retiró y pareció contento con sólo verlo desmadejado por el placer; al menos pareció bastarle por unos segundos, hasta que hizo ademán de volver a inclinarse
-¡Para!-dijo él. Intentó apartar la cabeza de él y cerrar los muslos.
-No. Déjame...
-No-se debatió contra él-Quítate los pantalones. Te quiero, te necesito a ti dentro de mí. Vamos.
Yifan no estaba dispuesto a discutir ese punto.
-No te muevas.
Sin retirar las piernas de él de sus hombros, se apartó lo suficiente para quitarse los pantalones.
-Date prisa.
-No temas, ya me la doy-bajó los pantalones y calzoncillos y gimió de alivio cuando su pene quedó libre. Sacó un condón del bolsillo, abrió el paquete y se lo puso apresuradamente.
En lugar de aproximarse a Chanyeol en la postura tradicional del misionero, Yifan le deslizó los dedos por debajo de las rodillas, y lo atrajo hacia sí, mientras le abría más las piernas, que quedaron flexionadas a ambos lados de las caderas. Colocó los muslos de Chanyeol sobre los suyos, se inclinó hacia delante, y frotó la cabeza de su miembro contra su entrada, compartiendo su humedad antes de introducirse en ella un centímetro, y entonces...
Se detuvo. Chanyeol gimió frustrado y sus manos se aferraron como garras a la orilla del asiento. Alzó la vista hacia el rostro de Yifan para suplicarle que acabara con aquel tormento, pero las fieras emociones que danzaban en sus ojos lo pillaron desprevenido.
-¿Yifan?
-Me vuelves loco, Chanyeol. Absolutamente loco. Nunca dudes de tu atractivo, porque para mí eres absolutamente delicioso y sexy. Simplemente perfecto para mí.
Yifan se hundió de golpe en él, haciéndolo jadear por el impacto y el placer que lo golpearon. Apenas le concedió unos segundos para acomodarse a esa primera embestida, ya que se retiró y, haciendo palanca con los fuertes muslos, le abrió las piernas un poco más y lo penetró con mayor intensidad, haciéndolo gemir de nuevo.
Con los ojos brillantes, Yifan introdujo las manos por debajo de sus brazos, pasó las palmas por la espalda del menor, y las apretó finalmente contra sus hombros para atraerlo aún más hacia sí, sus piernas le rodeaban la cintura de un modo muy excitante e increíblemente erótico.
La ya familiar cadencia con la que se movían aumentaba con cada embestida. Cada vez que sus testículos rozaban contra la piel del menor lo escuchaba gemir con abandono. Chanyeol se agarraba al borde del asiento, tenía los labios entreabiertos y la respiración jadeante.
-¡Oh, Yifan! Me...encanta.
-A mí... también-golpeaba rítmicamente, apretando los dientes para contener el orgasmo.
Antes de que le fuera imposible pensara en algo más que no fuera enterrarse en aquel delicioso guante que rodeaba su erección, Yifan se detuvo y varió un poco el ángulo antes de reiniciar las embestidas.
-Ahí-gimió él- ¡Oh, sí, justo ahí!
-Llega conmigo, Channie—murmuró él, aumentando el ritmo-Por favor-temía sentirse más excitado y al límite que él. Estaba seguro de que si se iba primero podría brindárselo sin problemas, pero verdaderamente deseaba que ambos alcanzaran el placer al unísono.
-Sí...ya voy...ya voy. ¡Oh, sí!
Aún confiaba en poder conservar el control y aguantar un poco más, pero el oírlo anunciar el orgasmo y sentir sus contracciones fue más fuerte que él y llegó al clímax. Se dejó caer sobre Chanyeol, aplastándolo contra el respaldo. Pero a ninguno de los dos pareció importarles.
Cuando los espasmos de placer empezaron a disminuir y las respiraciones a regularizarse, Yifan se estiró hasta tocar su frente con la de Chanyeol.
-¿Qué tal estuvo tu primera experiencia en el asiento trasero de un coche?-le preguntó de manera bromista
-Oh. Está bien-respondió sonando indiferente
-¿Sólo bien?-le preguntó con tono ofendido y la pellizcó en el trasero
-¡Ohhh!-le sorprendió la electricidad que el pellizco provocó en él-¡Quiero decir, ayyy!
-Nada, nada. Escuché con claridad tu “Ohhh” y ahora sé que la próxima vez podría gustarte que te pellizcara un poco. ¿Te gusta lo rudo? Podría ser divertido
-¡Olvídalo!-exclamó con firmeza.
Sexo en un lugar público, luego en el coche, no pensaba explorar más los pellizcos o cosas similares. Con aquel día le bastaba de coqueteos con el lado oscuro.
-Gracias-Yifan lo miró interrogante por lo que fuera que le estuviera agradeciendo, así que él decidió explicarse-Por ser mi mejor amigo. Suena muy simple, pero definitivamente eres mejor amigo de lo que merezco; lo demuestra el hecho de que te molestara hasta obtener la razón de tu pleito con Yunho.
-No exageres. Yo exageré las cosas
-No, no me defiendas. Tienes todo el derecho del mundo a guardar secretos y a no revelarlos si no lo deseas.
-Olvídalo, yo ya lo hice
-¿Ves? Eres demasiado bueno para mí. Aceptaste ser parte de esta venganza mía para protegerme…
-Créeme, es un verdadero placer para mí-lo interrumpió con una sonrisa elocuente
-Aun así sé que es difícil para ti. El caso es que eres tan genial que hasta me defiendes de Baekhyun…
-¿Nos oíste?-le preguntó con preocupación. No le gustaba pensar que Chanyeol hubiera escuchado las cosas que dijo Baekhyun
-Sí, pero no quiero hablar de ello de momento. ¿Sabes? A veces me acuerdo lo maldito que era contigo cuando niños y me doy cuenta de que ni siquiera te he pedido una disculpa por eso
-No tienes que hacerlo. No te guardo ningún tipo de rencor por una actitud de niño…
-Te niegas, pero con cada cosa que dices no haces otra cosa más que probar mi punto-agachó su cabeza hasta apoyar la frente en el hombro de Yifan-Vente conmigo de vacaciones
-¿Qué?
-Mis padres me dieron de regalo de cumpleaños un viaje a la playa…y quiero que me acompañes
Suponía que lo había tomado por sorpresa y tendría que tomarse unos segundos para considerar su oferta, pero aun así la tensión repentina en sus hombros lo tomó por sorpresa. Esperaba un poquito de entusiasmo por el ofrecimiento
-¿Acaso no puede acompañarte Baekhyun?
Chanyeol se incorporó de golpe por aquella pregunta tan desconcertante. ¿Qué tenía que ver Baekhyun con eso?
-¿Baekhyun? ¿Qué importa Baekhyun? Evidentemente no se lo he pedido porque no quiero que me acompañe. Tú eres la única persona con la que deseo pasar a solas estos días de vacaciones. Tú y sólo tú ¿de acuerdo? Durante este tiempo que llevamos viéndonos a escondidas nos hemos cuidado de que nadie nos vea, y hemos tenido mucha suerte, pero si nos vamos a la playa podremos dejar de cuidarnos las espaldas y dedicarnos a disfrutar ¿no te agrada la idea?
-Claro que me agrada
-Entonces está decidido
-De acuerdo, pero tienes que prometerme de que yo me encargaré de pagar mis gastos
Como no vio ningún problema con esa condición, Chanyeol aceptó. Después de todo, ambos merecían ese tiempo sólo para ellos
-Genial. Nos vamos la próxima semana, así que tienes que pedir permiso en tu trabajo
-No te preocupes por eso, aún me deben unos días libres así que no debo tener problema en que pueda tomarme varios días. Pero por el momento… ¿qué te parece si nos vestimos y nos vamos a mi departamento para seguir esto?
-Aún tienes energía
-Para ti siempre estoy preparado ¿no te has dado cuenta?
-Claro que sí. Lo cual es genial, porque yo también siempre estoy listo para ti