Retorciéndose en el suelo, trata de aguantar las ganas de abrirle las piernas al sultán. El control de Nasri es impresionante, quiere que el mismo Allen le implore que se lo coja. El regordete siente su cuerpo arder, no puede soportar más. Comienza a masturbarse con torpeza. No, no lo satisface para nada. Necesita más. Necesita que un Alfa lo haga sentir un Omega. Con su cuerpo temblando por aún intentar controlarse, se incorpora. Sentado en el suelo, con las manos en ambos lados. Hace un gesto suplicante, está sonrojado a más no poder.
- Na..Nasri.. Porfavor, hazmelo. -Suplico, con los labios titubeantes.
- Oh. Pero no quiero. -Quiere jugar más con el.
- Nasri.. -Allen chupa sus dedos de manera lasciva, abre las piernas, y comienza a penetrarse el mismo.- Pero.. Yo te deseo aquí dentro..~
Nasri se para del sillón, y dirige hacia el Omega en celo. Suelta unos pequeños gruñidos, esta llegando al límite del auto control. Se despoja de las túnicas. Allen ve una horrible cicatriz en el hombro izquierdo de Nasri, pero le importa poco. En estos momentos, sólo quiere ser cogido. Mira el flácido miembro, se acerca, y lo toma entre sus manos.
- Vamos.. Despiertalo. -Ordenó Nasri.
Allen besa la punta, y comienza a lamer desde arriba hacia abajo el falo. Dejando rastros de saliva. Su pene goteando de tan sólo mamarsela al sultán. Es su primera vez, el primer celo que pasará con un Alfa, perderá la virginidad con su propio hermano.
Nasri mira desde arriba como Allen se la mama, y chupa sus bolas. Es tan.. Erótico. No tarda mucho en despertar su pene. Allen sorprendido porque se volvió duro y grande. Continúa con el labor, introduce el venoso pene en su boca, y se mueve lento. Pequeñas estocadas.
- Tsk -Nasri lo jala de los cabellos. Y hace que se la trague por completo. El sonido obsceno del chapoteo.
No puede respirar, pero tampoco evitar sentirse tan bien. Es como si pequeños corazones estuvieran en sus ojos. Estocadas tan fuertes que golpean hasta su garganta. Nasri se viene dentro de su garganta, haciendo que se trague todos los fluidos.
- ¡Mmh~! -Allen se corre de tan sólo sentir el caliente líquido pasar por su garganta. Saca el miembro de su cavidad bucal. La punta del falo unida a la comisuras de sus labios por los hilos de semen.- Ahh..~ Ah..~ -Gimoteo. Restriega el pene del Alfa contra su rostro. Allen toma sus pechos, y entre ellos pone el pene de Nasri. De algo sirve estar gordo, puedes hacer rusas.
- Allen.. -El Alfa gruñó el nombre del Omega. Masturbando el pene de tal manera, joder, Allen es tan lascivo y erótico.
Nasri se vuelve a venir, pero ahora sobre el rostro del regordete. Allen lame el semen que está cerca de sus labios.
- Rico... ~
Nasri lo jala del brazo y hace que se pare. Observa el erecto pene de Allen. No demora mucho al llegar a la cama, y lo avienta. Allen lo jala de los cabellos, acercando sus labios. Las lenguas entrelazándose con desespero, un beso tan húmedo y sucio. Llevan un buen rato besándose. La saliva escurriendo por sus barbillas. Allen siente tan mojado haya abajo, ya quiere que Nasri entre. Al separar sus bocas, hilos de saliva las unen. Nasri de sólo mirar el rostro tan lascivo de Allen, lo toma de los hombros, y voltea. Poniéndolo boca abajo.
- Ah.. Nasri.. ¡Nasri~! -Allen gimoteo al sentir el duro tacto del pene de Nasri contra su culo.
- Enseñame donde lo quieres.. -Ordena el Alfa.
- Aquí..~ -Allen levanta las caderas, y estruja las nalgas, separándolas. Exponiendo el mojado orto, pidiendo a gritos ser penetrado.- Quiero el pene de Nasri enterrado aquí~
- Je.. -Sonríe complacido. Sin esfuerzo desgarra la tela. Coloca la punta, rozándola contra la rosa entrada.- Bien dicho. -Y lo penetra de una estocada.- ¡Joder, Allen! -Pudo entrar sin problemas por lo mojado que está el Omega, pero dentro suyo, esta mortalmente apretado.
- ¡AHH~! -Allen entierra las uñas en las sábanas, al sentir como Nasri se abre paso dentro suyo. Lágrimas recorriendo las mejillas coloradas del Omega. Le duele horrores pero a su vez le encanta. Sensaciones tan confusas que amenazan con matarlo de placer.- ¡Nasri, Nasri! -Comienza a gemir el nombre del Alfa.
El sultán se mueve con brusquedad, sin darle oportunidad de acostumbrarse. No se contiene. Lo penetra hasta el fondo, enterrando su verga en el interior del Omega. Le importa poco si sale algo de sangre por lo duro que lo penetra. El sonido obsceno y morboso de sus bolas chocando contra el culo deseable y esponjoso del regordete. Brilloso al igual que todo el cuerpo, perlado por el sudor. Pasan los minutos, y Nasri no se detiene, golpea ese punto que gemir con descontrol al Omega. Quien abre la boca, los labios unidos por los hilos de saliva. Corazones en sus ojos. Por momentos sonríe por lo jodidamente bien que ya se siente.
- ¡Mas fuerte, más duro, rompe, entierramela mucho más, Alfa, Alfa!~ -El placer nubla su mente. No lo deja pensar con claridad. Nasri aumenta mucho más la velocidad, complaciendo al Omega.- ¡Sii,Siii! ¡Tan bueno~, ahhh, mmhh! ~ ¡Nasri~!
El Alfa acerca su nariz a la nuca del Omega, inhalando el empalagoso y excitante aroma que emana. Deja relucir sus dientes, y sin dudarlo, los entierra en la tersa y suave piel. Muerde como fiera, haciendo que sangre brote.
- ¡Nyaaa~~! -Al momento en que Nasri marco a Allen, el menor sintió como el mayor lo llena con un líquido espeso y caliente, la punta del falo se engrosó, formando el nudo. Allen se viene sobre las sábanas. Después de un rato pegados, Allen pudo respirar sin agitarse. Pero en cuanto el nudo se deshizo, Nasri volvió atacar con feroces embestidas. Y comienza a morder cada parte de su espalda, hombros.. Tras cada posición, deja más mordidas sobre su cuerpo. Lo ha marcado por completo. Y así estarán durante seis días enteros cogiendo sin control, dejándose llevar por el placer y sus instintos. Pero algo si es seguro, los cachorros de Nasri, ya están en el vientre de SU Omega. El Omega que tanto deseo por años, y ahora es suyo. Sólo suyo. Lo ha marcado. Le pertenece. Pero sólo su cuerpo, porque no hay manera que mande sobre su corazón, el cual pertenece a un idiota Alfa.
- Le..Leto.. -Gimió. Con lágrimas acumuladas. La pizca cordura que le queda, le hizo gemir el nombre del que tanto ama.- ¡...! -El sonido estruendoso en toda la habitación. Ha recibido un puñetazo por parte de Nasri. Aterrado por la faz del mayor. Serio.. Pero con ojos desquiciados, una mirada sombría.
- ¿Es así como se llama? -Pregunta con tono siniestro.- No te preocupes, este donde esté, morirá pronto.
- ¿Que?
- Allen. -Lo toma de los cachetes, ejerciendo mucha fuerza.
- Me..Me lastimas...
- TE VOY A JODER TANTO QUE SÓLO ME ABRIRÁS LAS PIERNAS A MI. TE LASTIMARE DEMASIADO, QUE SOLO PENSARÁS EN MI. TIENES QUE ENTENDER, SOLO ME PERTENECES A MI.
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