11-Coito
Joseph y los demás salieron más tarde del apartamento luego de que le explicaran las reglas del juego. Obedecer, no pasarse de listo y que Hao sería su jefe inmediato por lo que también estas cosas aplicaban para él, especialmente cuando el tipo no miraba con buenos ojos al rubio.
Llegaron a la discoteca que era propiedad del grupo al que pertenecía Ikabe y se notaba porque desde que llegaron no hicieron más que atenderlos como si fueran los dueños del lugar y apareció el gerente del establecimiento que saludó cordialmente a este. Les trajeron mucho sushi caro y saque que nunca había probado el melado. Al rato también aparecieron un puñado de bailarinas en sexys atuendos porque salvo por la comida todo era occidental. Estaban en un reservado entre paredes pero que dejaba oír la música de la pista de baile.
De a poco el ambiente relajado regado con sake fue caldeándose y empezaron las bromas y anécdotas entonces Hao miró a Wheeler y con los ojos chiquitos para fijarlos en su objetivo levantó un dedo y le apuntó mientras reía con Ikabe que al parecer no se dejaba llevar tanto y no tomaba tanto alcohol y le dijo—Al parecer el nuevo tiene una novia bien fogosssssa. ¿Te llevasss bien con tu novia, ne?—
Los ojos melados se abrieron estupefactos mientras otro decía—Ssssí, se ve que esss bien fogossssa. Y posessssiva. ¡Jejeje! Dejó bien marcado a ssssu hombre. ¡jejejeje!—Como Wheeler lo mirara con pasmo añadió—¡Y no lo nieguesss! Traess un chupetón bien cargado en el trassero. ¡Jajajajajaja! Bien que te lo vimosss cuando tenías el culo al aire—
Para ese entonces todos los del lugar menos Ikabe lo miraban y se reían, Ikabe solo sonreía mientras Joseph se sentía tan humillado. Debió habérselo dejado Seto la última noche y ellos verlo cuando le obligaron a desnudarse. Estaba furioso con el castaño por haber hecho algo como eso y con su suerte porque justo coincidiera todo.
Las chicas comenzaron sus rejoneos con ellos una sentada a cada lado de uno de ellos y dos para el aniki que les sonreía mientras se dejaba alimentar con sushi por una de ellas y otra se colgaba de su hombro.
De pronto la de Joey comenzó a susurrarle cosas mientras la cabeza del rubio daba vueltas por efecto del alcohol que desconsideradamente Hao le había obligado a tomar y es que el melado tenía poca tolerancia a la bebida.
De pronto ella lo empezó a toquetear en su pelvis y como siempre esta reaccionó. Imágenes de Seto la noche anterior pasaron por su cabeza mientras la chica avivada de que su miembro había reaccionado le desabrochó el pantalón y sin pudor descubrió el falo ante todos. Pero la mayoría ya estaba en lo suyo y pocos le prestaron atención y nada más como al pasar.
Joseph al sentir los labios atenazando su duro miembro no pudo evitar levantar su pelvis para acercarla más a la boca succionadora y mientras ella llevaba a cabo tal trabajo se agarró del respaldo del sillón de cuero rojo en que se sentaba por la parte de arriba poniendo sus brazos por sobre su cabeza que estaba de lado mientras su trasero se había adelantado al borde del sillón y sus caderas se movían con cadencia al contacto de los finos labios.
De pronto sorprendió los ojos de Ikabe mirándolo pero al pasar porque su mente estaba ida con el éxtasis mientras el otro se sorprendía de que por primera vez ver un hombre en ese estado le pareciera tan sexy como ver a una mujer en el coito.