3-MALDITA EXISTENCIA
-que te quede bien claro-advirtió Yuki saliendo de aquel lugar
-Ei---Eiri-llamaba Tohma con voz débil.
-Shuichi y sus amigos han encontrado mejor apoyo en Musical Paradise-continuo el joven escritor-y yo me voy con ellos-
-Eiri-intentó replicar Tohma-no puedes; lo entiendo de parte de ellos como grupo, pero… ¡¿POR QU… ME NIEGAS TU AMISTAD?!-preguntó al borde de las lágrimas.
Yuki volteó a verlo con su mirada capaz de asustar a cualquiera.
-Solo has visto por ti y te has vuelto insoportable para todos, ya no eres el Tohma que conocí y parece que nunca volverás a serlo, por eso no quiero volverte a ver-dijo con frías palabras-Entiendo que lo de Sakuma-san te halla lastimado, pero en vez de salir adelante has empezado a echar abajo todo lo que tienes-sin nada más que decir, el escritor salió dejando a su ex-amigo olvidado.
Pasó un mes desde esto y Tohma había encontrado un nuevo grupo, “Babylon” que aunque eran casi tan buenos como Bad Luck, pero eran unos mocosos egoístas de 19 años, que solo veían por sus placeres. Toru, Kyo, Ran y Akemi.
Cierto que comenzaban a tener éxito, pero Bad Luck seguía a la cabeza, seguido por ASK, que trabajaban en Extreme Music, luego 2 grupos más y al final, Babylon.
Los chicos eran también sumamente atractivos para todas y todos.
Era de noche en NG Record, las luces del edificio estaban casi apagadas, solo la luz de la oficina del presidente seguía encendida.
Los gemidos se escuchaban, dolorosos y placenteros gemidos.
Tohma estaba desnudo, tomando con fuerza a Ran, el más joven del grupo y su favorito para “jugar”.
Las arremetidas eran cada vez más rápidas y violentas, haciendo al joven castaño sacar lágrimas de sus violáceos ojos.
-ahhh…más rápido-suplicaba el chico sintiendo como Tohma seguía penetrando fuertemente en su interior, haciendo explotar sus sentidos- te digo que…ahhh…más…rápido-dijo sacando un gemido de sus tiernos labios.
-como quieras…Ran-chan-contestó el rubio lamiendo maliciosamente la espalda del chico para susurrarle al oído-tocaras el cielo y el infierno al mismo tiempo-dada su advertencia, entró con más violencia en el chico que dio un grito.
-bastardo…ahhh…me, me…lastimas-replicó Ran sintiendo como sus piernas flaqueaban por aquella intrusión, Tohma exageraba con sus peticiones.
-pues tu cuerpo me dice lo contrario-contestó Tohma con voz sensual al notar como por reflejo, Ran intentaba pegarse aún más a él-además…me encanta escucharte gemir y gritar-volvió a adentrase en aquel cuerpo más violentamente que hace rato.
-¿acaso no te gusto?-Tohma tomo la barbilla de aquel chico, deleitándose con aquel pequeño cuerpo cubierto de una delicada capa de sudor, aquellos tiernos ojos violáceos semi abiertos, sus mejillas color carmesí, su cabellera castaña rebelde con pequeños mechones pegados a su rostro y sus labios hinchados de los cuales aún salían gemiditos.
Intentando respirar normalmente Ran pudo responder-sí, aunque…Akemi lo hace menos violento-contestó con una sonrisa burlona-pero…de todos nosotros… ¿por qué soy tu favorito en esto?-preguntó.
Tohma no respondió, se paró, tomo sus cosas y dijo.
-eso no te incumbe-volteo a ver al chico que seguí mostrando su piel desnuda-te veo el Lunes-luego salio del edificio para irse a su departamento.
Ese era el rito de casi todas las semanas, normalmente siempre acababa teniendo sexo con alguno de esos chicos para luego volver a su casa, pero…la pregunta de Ran le seguía en la cabeza.
Jamás lo diría, pero la razón era por que de los cuatro, Ran era el más parecido físicamente a Ryuichi.
Toru tenía el cabello negro con ojos verde, pero su madurez era la de Ryuichi, Kyo era pelirrojo con ojos azules como los de Ryuichi, Akemi era peliazul con ojos dorados y al cantar su voz sonaba igual de sensual, embelesadora y cautivante como la de Ryuichi. Ran era castaño, con las modalidades empalagosas de Ryuichi, con su forma de sonreír de Ryuichi y con el cuerpo de Ryuichi. En ellos descargaba todo, aunque ellos sabían que si lo mantenían contento, él les daría lo que desearan.
De por si entre ellos cuatro tenían relaciones.
Al llegar al departamento se fue a duchar por el olor a sexo que cargaba.
Dentro, dejaba el agua caer y mojar sus cabellos, su rostro y cuerpo.
Su mirada estaba algo perdida mientras las gotas de agua seguían su camino, delineando su bien formado cuerpo.
Encerrado en ese baño de lujo, de azulejos blancos y regadera hecha de cuarzo verde esmeralda con sus llaves (o grifos) de oro y cuarzo rojo.
Salió envuelto por la cintura con una toalla roja y las iniciales TS bordadas en amarillo. Se sirvió una bebida algo fuerte y se dirigió a su habitación, decorada con tonos rojos oscuros y dorados. Llegando, se recostó en su cama, suspirando, dejando las pocas gotas de agua escurrirse y mojar las finas cobijas de color vino; se levantó y miró fijamente su cama…aquella que compartía con su amado Ryuichi, en la que se amaban con locura…y ahora vacía.
Al igual que su vida.
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DRAK: escrito por mi
EIRI: (gotita)
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