Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Cuando es así por naturaleza por finnxjake

[Reviews - 34]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola chicas, por fin les traigo el siguiente capítulo, quería subirlo ya a media noche, pero lo termine de editar antes, me disculpo si hay algún error, ya cuando tenga tiempo los editare para una mejor lectura.

Ya no las entretengo más y dejo que disfruten la lectura.

-¿Qué haces Hookfang?- camino el morocho a lado de su amigo.

 No era algo especial ver a esos dos juntos durante todo el santo día. Ellos eran como uña y mugre y los dragones del pueblo lo agradecía. Si no fuera por el pelirojo ellos sufrirían las eternas travesuras del menor.

 -voy a entrenar- comentó feliz mientras se adentraba aún más en el bosque.                                                                                                        

¿puedo ir a verte?- menciono emocionado el esmeralda. 

-no lose, aun eres muy pequeño-

 -solo me ganas por dos meses,  no exageres Fang- se quejó el chico.

 

 Sabia de la extraña obsesión de su compañero por tratar a todos como niños,  incluso a sus padres los tomaba por igual. Eso sí era raro.

 

 -bien- aceptó. El morocho no se daría por vencido hasta lograr su cometido- pero solo puedes observar. De acuerdo-

 

 -de acuerdo- sonrió feliz. Su amigo siempre caía.

 

 Cuando Toothless quiso apresurar su paso para quedar nuevamente a lado del rojizo, la trompeta de la tribu sonó fuertemente por todo el lugar.

 

 -¿qué habrá pasado?- se interrogó a si mismo Toothless.

 

 -hay que ir a ver- hablo Hookfang.

 

 La trompeta no sonaba específicamente para avisar de una amenaza, en realidad había muchas cosas que representaba ese sonido; como juntas, reuniones familiares, avisos de último momento y claro la llegada de visitantes.

 

Los chicos corrieron lo más rápido que sus piernas les permitieron, se hubieran transformado en dragones, pero eso hubiera llevado mucho tiempo.

 

 -¿qué pasa?- hablo Toothless preocupado al llegar a la sala de juntas.

 

 No habían entrado aun al salón, se habían detenido fuera al ver a su amigo.

 

 -tu viejo convoco a todo los jóvenes de la aldea- hablo Barf despreocupado.

 

 -¿para qué?, ¿o qué?- se cruzó de brazos Hookfang. Odiaba perder horas de entrenamiento.

 

 -es el gran día- llego Belch- tu padre nos dará la piedra.

 

 

 -¿qué hacen ahí chicos?  Entren- hizo una seña la dragona.

 

-si-

 

 Al entrar los cuatro tomaron asiento, uno al lado del otro.

 

 -Seguro que la mayoría ya saben porque están aquí. Están aquí para que entiendan los que es; la responsabilidad,  el respeto,  la tolerancia, el amor, pasión y entre muchas cosas más- hablo despacio Cloudjumper.

 

 Todos prestaban total atención.  Este ritual era sagrado para el pueblo.

 

 -ahora que poseen una edad adecuada para comprender esto, es mi responsabilidad explicarles cada detalle- camino por el pequeño escenario.

 

 Estaba un poco nervioso, su niño estaba ahí observándolo con demasiada admiración. Le llenaba el pecho de orgullo, pero igual se sentía nervioso.

 

 -esto es una piedra preciosa- mostro la piedra a los jóvenes- ha sido hechizada para parecer solo una piedra ante nuestros ojos. Sera su deber cuidarla y convertirla en joyería- alzo su brazo para que la presenciaran más la piedra- y dársela a la persona que ustedes crean correcta-

Los ojos verdes tóxicos del morocho brillaron con intensidad.

 

 Amaba esas pláticas.

 

 -deben tener cuidado, si se la dan a alguien que no los ama con la misma intensidad estarán atados a ella por siempre - medito un poco sus palabras- así que sean exigentes al escoger a ese alguien-

 

 Los jóvenes asistieron.

 

 -ahora las damas les entregaran un par de estas piedras-

 

 

 

-¿qué joyería harán?- preguntó Barf emocionado.

 

 La platicaba había acabado hace media hora y ahora los chicos se encontraban sentado en unas bancas en medio del pueblo, bueno a excepción de Hookfang,  él prefirió ir a entrenar un rato.

 

 -yo haré unos aretes- sonrió Belch.

 

 -yo me quedare con lo tradicional, los collares me gustan más que otra cosa- hablo Toothless mientas miraba las piedras- y tú Barf, ¿qué harás? -

 

 -unos anillos. Así transmitiré más la idea de unión-

 

 -eso es lindo- jamás creyó que su amigo pensara tanto estas cosas.

 

 -no puedo creerlo- rio Belch- estamos tan emocionados por estas pequeñas rocas. Somos unos hormonales-

 

- no es nuestra culpa- se cruzó de brazos ofendido el gemelo.

 

 -es normal que actuemos así, estamos en plena pubertad- se defendió Toothless.

 

 -digan lo que quieran, pero parecemos chicas enamoradas- comento Belch.

 

 -creo que peor- comento su gemelo mientras ambos veían a Toothless. El morocho estaba embobado viendo las rocas.

 

 -sí, estamos peor-

 

 -¿quién creen que será su alma gemela?- Meatlug llego de la nada espantando a los chicos.

 

 Los tres la miraron enojados y esta solo rio. 

 

"Sean hombres, bebés" fue lo que pensó la castaña.

 

 -pues yo... me voy por Stormfly - hablo Barf.

 

 -sigue soñando- contestó su hermano.

 

 -es lo que hago- respondió- ¿y tú Meatlug?-

 

 -me gustaría quedar en una cita con Hookfang, pero lo dudo- su cara se tornó triste- veo que hace más química con Stormfly-

 

 -vamos anímate- hablo Toothless- si no es él, habrá alguien mejor, ¿no?- lo comento como si fuera lo más obvio.

 

 Y es que lo era, si esa persona no te ama no vale la pena aferrarse.

 

 -lo dices como si fuera fácil.  Además te veo con más posibilidades de quedarte con Hookfang que cualquier otro dragón de la isla- se cruzó de brazos la hembra mientras hacía pucheros.

 

 -¡No homo!- frito enojado el morocho.

 

 -con que no sea un humano- se acercó la hembra Nadder al escuchar la plática de sus amigos. La verdad ya llevaba un buen rato escuchando y ya quería opinar algo.

 

 -¿humano?-

 

 Voltearon a verla extrañados por su comentario.

 

 La hembra siempre sacaba temas raros y extraños, eso era la especialidad de Stormfly,  pero eso era aún más extraño.

 

 ¿Un humano? Y un ¿dragón?  ¡JUNTOS!

 

 -¿por qué lo dices?-

 

 -no han escuchado la leyenda del gran Giganticus maximus y el hombre llamado Hipo- sonrió de oreja a oreja. Era hora de que sus amigos conocieran un poco más sobre la leyenda más romántica jamás contada... bueno, hasta ahora.

 

 -¿Hipo?- miraron confusos a su amiga.

 

 -¿qué clase de nombre es ese?- rio la pecosa.

 

 -los humanos les ponen nombres feos a sus crías para protegerlos de los trollas- explicó Barf.

 

 -cierto y ahora silencio que les contare la leyenda.

 

 

Hubo un humano y un dragón.

Ambos se amaban con pasión.

Pero pronto todo se tornó...

Gris y frio sin razón.

 

Hipo no sabía que su amado era un dragón.

Y el día que se lo confesó... se desmayó.

 

Cuando despertó, solo a él lo vio.

Un joven apuesto y con su sonrisa ideal.

Se asustó, no lo negó,  pero pronto se olvidó.

 

Lo amaba y él a él, pero lo suyo no podía ser.

 

A ambos se les prohibió.

Consumar su amor y se les separó.

 

Ninguno quiso aceptarlo y escaparon tomados de las manos.

 

Humano y dragón.

Dragón y humano.

 

Fue raro para ambos pero lo aceptaron.

 

Y eso es todo- amaba esa leyenda. Parecía más canción y poema.

 -parece poema- hablo Meatlug.

 

 -puedes tomarlo como quieras, pero es hermoso.  Los humanos no son mi primera opción, y para ser sincera no creo que llegue a congeniar con uno, pero sin duda sería interesante encontrar un humano con sentimientos tan fuertes y leales como los de un dragón- medito Stormfly un momento.

 

 -lo dudo- comento fastidiado el esmeralda- los humanos son las criatura más egoístas e interesadas del mundo- giro su cabeza enojado- no me interesa emparejarme con uno-

 

-di lo que quieras ogro, pero ten por seguro que te terminaras enamorando de uno- se burló la zafiro.

 

 -ni en mil años- la miro enojado.

 

-¿cuál era el nombre completo del humano Stormfly? - hablo Belch.

 

 -Hipo Horrendo Abadejo, si mal no lo recuerdo-

 

 -pobre chico,  espero que haya sido atractivo porque su nombre no llama mucho la atención- 

 

 -lo era Meatlug.  Su cabello como el fuego y su linda cara llena de pecas, era una belleza-

 

 -parece que estas más enamorada de él que el dragón que si es su pareja-

 

 -no seas tan gruñón Toothless- se defendió la zafiro- es interesante-

 

 -más bien excitante- contra atacó Barf.

 

 -como sea los dejo, mamá quiere que recoja unas moras, hará pastel mañana,  por si quieren ir- se despidió.  Y se fue rápido de ahí.

 

Uno por uno los adolescentes se despidieron y se marcharon a casa. Ya se había puesto el sol y el cielo estaba forrado por la inmensa oscuridad de la noche.

 Toothless se sentó un momento fuera de la casa. Amaba contemplar la oscuridad y ver el resplandor de las estrellas.

 

 Se quedó pensando asustado, y si Stormfly tenía razón.  Y si su alma gemela era un humano, ¿qué haría? 

 

 No quería estar unido a una de esas cosas, preferiría morir solo que estar con uno de ellos.

 

 Lo rechazaría,  definitivamente eso haría si eso le llegará a pasar.

 

 Respiro profundo.

 

 No debía pensar mucho en eso, se estaba haciendo un lio el solo.

 

 Con ese pensar entro a su casa para descansar.

 

Notas finales:

 

Y bien… ¿les gusto?

Relámete siento que voy algo lento con la trama, yapara el siguiente capítulo quiero poner más cosas, pero las 5 hojas que escribo me limitan demasiado, así que… ¿quieren los capítulos más largos? La verdad no sé si ustedes quieren, por mi no habría problema, pero si a ustedes se les hace muy tedioso leer tanto, lo dejare como están.

Les quería preguntar desde hace tiempo, hay alguien que le guste la pareja de HipoxCamicazi, a mí me gusta más que con Astrid, jejeje. No se preocupen, aquí en mi historia, Hipo, ni Camicazi tendrán un pasado como pareja, me gusta la amistad que tienen dentro de mi historia. Solo me da curiosidad.

Bueno ya me despido, nos leemos la otra semana, adiós.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).