Era de noche y el vecindario esta en completo silencio, nada se oia en ningún lado y la casa Midoriya esta completamente calmado, todos estan acostados y durmiendo, excepto un pequeño niño quien esta cómodo en la cama.
Tomura está durmiendo a lado de su maestro Izuku, el pequeño esta risueño de estar tan cerca de su maestro favorito, era tan bonito y a la vez tierno para ser un adulto, aproximó su cara por encima del brazo del doncel para formar un abrazo y sonrió-Lo quiero maestro...-se atrevió a levantarse para acercarse y darle un beso en su mejilla causando un pequeño sonrojó e inmediatamente cerro rápidamente los ojos, acostándose pues temia que se despertara pero no fue asi, dejando que se tranquilice y finalmente durmiera.
Al dia siguiente Izuku despertó y vio al pequeño encima suyo, no supo como pero esta ahi, guió su mano para sobar su cabello de manera cariñosa-Tomu ¿Estas dormido?...Creo que si-lo movio un poco con lentitud para bajarlo hacia la cama.
Se preparó primero para ayudar a Tomura a cambiar de ropa, al terminar fue por el pequeño y éste era un completo angelito-Tomu...hay que irnos-lo movió levemente, acariciando su pancita provocando cosquillas al niño.
-Maestro jajaja...Buenos dias-sonrio para levantarse rápido como si fuera de madrugada para abrir regalos de navidad.
-¡Bien es hora de ir de paseo!-lo ayudó a cambiarse, al parecer su ropa era toda negra y vio uno del cual le pareció tierno, era una sudadera de oso-¡Estas muy guapo! Me gusta como te queda...-.
El pequeño villano se avergonzado fue corriendo al espejo para verse y después se colocó el gorro para la cabeza, enseñando a su maestro como se veía, ganando unos aplausos por parte de el-¡Raww...soy un oso!-.
Tomo al niño de la cintura y lo eleva como si fuera avión-¡Aqui vamos!-.
-¡Wiii!-sentia felicidad al jugar con Izuku.
Al llegar a la sala la señora Midoriya se encontraba ya ahi abajo haciendo el desayuno-¡Oh hace tiempo que la casa no se oía risas de niño! ¡Eso me pone muy feliz! Esperó algún dia tengas niños Izuku-.
Izuku sentó al niño para que desayunara y sin evitarlo Tomura hablo sin pensarlo-¡Le escribiremos a la cigüeña!-levantó sus bracitos mientras se le era colocado por su babero.
Los adultos rieron por su inocente propuesta-¡Bien le escribiremos pronto Tomura y seguramente será tan tierno como tú!-le acaricia su mejilla.
Terminaron de desayunar e Izuku se levantó para ir al baño-Volvere un momento Tomu...mami ¿Podrias?-also sus dos manos en forma de disculpas y la mujer solamente le dio su aprobación.
El niño inevitablemente se levantó para ver las cosas que hay en la casa, sin evitarlo miró un álbum de foto-¿Quieres verlo?-le preguntó amablemente la mujer y esté asintió.
-Aqui está Izuku de niño...¡Era muy tierno y tímido!-le mostró las fotos y Tomura sonrió al ver las fotos sobre todo porque tenia que ver con su profesor-Espera deje el agua hirviendo...en un momento llegó-se marcha dejando al pequeño sólo.
Vio a dos niños ahí, su maestro y un rubio, conforme observó las fotos notó un detalle que quizás su madre no vio, su sonrisa iba convirtiéndose en una mueca de miedo discreta para los que no eran observadores y el niño de lado con el quien siempre lo acompaña era el causante "habia un niño que le gustaba jugar rudo" recordó sus palabras-Ese...cretino-.
-Tomura ¡¿Estas listo?! ¿Quieres ir al baño?-vio al niño que esta con el álbum-¡Ah! Ese era yo jaja...-señalo al que obviamente era el.
-No, esta bien ¡¡¡Siempre fue tan guapo maestro!!!-cerro de inmediato para evitar que se incomode al hablar de ella sobre todo de otro niño, este fin de semana era para ellos dos y nadie se lo iba arruinar-¡¡Estoy listo para ir al acuario con usted!!-.
El doncel sonrió caminando hacia un lado y tomo una mochila-Antes vamos a la tienda, tenemos que comprar un refrigerio para después-vio que el niño corrió para agarrar su mano para comenzar a marcharse.
-¡¡Adiós mami!!-.
-¡¡Adiós señora yo cuidaré a su hijo!!-.
Fueron a la tienda que esta a unas cuadras mas adelante e Izuku puso al niño en el carrito-Bien si ves algo que quieras me avisas-tomo una botella de agua.
Paso a la esquina y choco con otro carrito-¡Izuku! ¡Hola!-era una mujer adulta y rubia, la madre de Bakugou, Mitsuki.
-¡Hola!-se separó un minuto del niño y abrazo a la señora, era una mujer hermosa y muy buena con el, la indiferencia solo era con Katsuki pero con sus padres no tenía intención de ser malo, eran bastante geniales.
-¿Quién es este pequeño hermoso?-se acercó al peli gris y este se encoge un poco incomodo por ser el centro de su atención-¡Esta bonito!-.
-Es el hijo de mi jefe tuvo algunos asuntos y pues iremos al acuario para divertirnos-.
-Cierto inauguró uno cerca del centro...¡Oh cierto Katsuki ven aqui y saluda!-.
-¡¡¡Vieja estoy...!!! Izu...Midoriya hola-el rubio estaba eligiendo tipo de vegetales pero aun no se decidía eso lo frustró, pero al ser llamado y ver a su persona favorita le cambió su actitud.
-Ah hola...-saludo por cortesía y por su madre nada mas.
-El idiota de mi hijo no sabe elegir sus cosas asi que lo acompañe al súper, muy independiente para unas cosas y otra no...bueno te dejamos con el niño encantador ¡Que te diviertas en el acuario!-.
-¿Acuario? ¿Si quieres te dejamos enfrente?-Katsuki detuvo su paso y aprovecha que por la presencia de su mamá le hablo de puro milagro-Es decir esta ciudad es peligrosa y no hay nada que...-.
Izuku claramente iba a rechazar su oferta, pero la señora Bakugou era otro tema-Anda Izuku deja que el torpe de mi hijo sirva para algo para variar-.
El pequeño Tomura se desesperó un poco al ver que nada pasaba hasta que volteo hacia atras y rápidamente lo reconoció, ese rubio era quien lastima a su profesor-¡¡Izu...Izu...quiero galletas!!-.
-Oh perdón pero Tomu necesita galletas, no quisiera incomodar, aun es pequeño ya sabe-volvio al mando de su carrito y su mano se despidió.
-No es molestia ¡Me encanta los nenes! ¡Espero que algún dia te animes, seran hermosos como tu!...-al decir eso incómodo un poco a su hijo e Izuku solo río del comentario-Pero talvez tengas razón a Katsuki no le gusta los niños...fue un gusto pequeño Tomu, adios Izu lindo-.
El niño sonrió un poco malicioso, solo tenía que ponerse un poco berrinchudo y se irían de inmediato.
-¡¡Que dices vieja yo soy bueno con los niños!!-nadie se lo iba arruinar, pasaria un momento con Izuku a como de lugar y si tenia que estar con ese chiquillo lo hará. El plan era simple los llevará cerca y pues misteriosamente su auto quedaria sin combustible y tendrian que esperar para llenarlo, en lo que esperan podrian ir al acuario juntos, el plan es perfecto-Anda Midoriya...porfavor-.
El doncel indiferente arqueo sus ojos fastidiado de su insistencia, pero la mirada que lo convenció fue la de Mitsuki-Esta bien...-pensó que si acepta ya lo dejaria en paz.
Pero no sabia que se habia ganado un enemigo, uno pequeño pero poderoso, si el no iba a pasarlo bien a lado de Izuku nadie lo haría...se arrepentiría por arruinarlo-Izu también quiero helado de chocolate...porfavor-.
Subieron al automóvil , los adultos en los lados y el villano en medio, tomo sus galletas, empezando a masticar con la intención de dejar moronas en su automóvil que parecía costoso y parecía funcionar pues el rubio lo miraba con irritación atraves del retrovisor-Izu...Izu...quiero mi helado-.
"¡Oh si mira como tiro chocolate en tu fino asiento!"-Gracias Izu era tan amable, también me agrada señora Mitsuki-.
-¡Hay es una monada!-le tomo su mejilla palpando un poco.
-¡Tomura es tan tierno! Cuidado con el chocolate no quieres que Bakugou se enoje...-paso su servilleta por su rostro para limpiarlo, pero por alguna razón no pudo evitar que se ensucie al igual que el asiento.
Katsuki respiró hondo y contaba mentalmente para que no explotara enfrente del doncel que amaba-No te preocupes es solo un auto...-mostro una sonrisa algo falsa pero se forzó a verse idéntica, parecía que el niño lo hacia a propósito.
Finalmente se estacionó pero se "apagó" su coche-Hay hijo se te olvidó cargar la gasolina, le llamaré a tu padre y eso que te pedí varias veces que lo hicieras-la mujer busco su bolsa sacando su celular y le llamo a su esposo pidiendo que de favor fuera hacia ellos-Claro cariño ¡Si el bobo de tu hijo lo olvido!...por supuesto bebé aquí te esperamos-colgo y le dijo al rubio que esperarían como cuatro horas en lo que salia de su trabajo.
-Vaya que pena ¿Y si vamos con ellos en lo que viene mi viejo...?-ese comentario provocó que Tomura se fastidiara, una cosa era el viaje otra que quisiera incomodar su paseó.
-No lose ¿Mitsuki que piensas?-.
-¡Por mi esta bien!-.
Katsuki se acercó un momento para acercarse a Izuku pasando su brazo por sus hombros como si fueran pareja, el doncel se tensó al tacto del varón pero que podía hacer.
-No quiero caminar Izu me duele mi pié ¿Puedes cargarme?-alzo sus manos y su mirada inconsciente, esa táctica lo utiliza con su padre cada vez que se mete en problemas y siempre gana.
-¡Oh! Claro ¿Te duele mucho?-tomo al niño y este se interpuso nuevamente con el rubio pues después le pidió que lo cargara de a caballito.
Entonces ahí estaba con Izuku, su madre y ese pequeño monstruo, de alguna manera sabia que algo traía en contra de él pero no podía comprobarlo, todo sus intentos de quedarse con el doncel un rato, el salia con sus cosas de niño.
-Midoriya... ¿Son bonitos peces? ¿No?-.
-Supongo...si son lindos-porfin se le ablandó el corazón, pues realmente se esforzaba por disculparse.
-Izu...Izu...tengo mucha sed...¿Podrias comprarme un jugo? Por favor-ya era suficiente ese tipo lo iba escuchar.
-¡Hey amiguito!-se puso nervioso por estar con el pequeño solo y se agachó para poder estar viéndolo a su rostro-Sabes yo trabajo como héroe...-.
-¡No me importa! ¿Porque no te vas con tu mami? Que por cierto es una buena mujer...¿Y no te vas de una buena vez? ¡Izu es mio!-sono amenazador.
Bakugou se sorprendió un poco pero sabia que tenia algo en contra de el-¡¡Lo sabia mocoso de mierda!!-.
-Oh si...quieres que me ponga rudo ¡¡¡Izu, Izu el señor Bakugou me dijo la palabra con m!!!-grito mientras sus ojitos empezaron a llorar y rápidamente el doncel se interpuso al escucharlo.
-Bakugou es solo un niño ¡¿Que te pasa?! ¡¿Por que le enseñas esas palabras?!-lo abrazó para cargarlo y se gano que lo mirara con repulsión, cagando lo que habia logrado hace rato y como si fuera poco se gano un golpe por parte de su madre.
-Una disculpa Izuku ¡Discúlpate con Tomu!-.
-¡¡No voy a disculparme ése niño es un maldito cretino!! ¡¡Tienen que creerme!!-.
-¡¡¡Es muy malo Izu!!!-lloro logrando que fueran el centro de atención de los demás que están en el acuario, haciendo que vieran mal al rubio.
-Bakugou ¡¡Basta!! Lo siento Misuki pero es mejor que nos vayamos por nuestro lado...-se despidió de la mujer rubia y vio con indiferencia a Bakugou.
-Disculpame tu a mi por no educar adecuadamente a mi cretino hijo...adios-.
-¡¡¡Espera!!! ¡¡Tienes que verlo!!-su madre lo jaloneo al otro extremo y el explosivo solo veia la sonrisa de triunfo en el niño mientras le enseña el dedo de en medio e Izuku le consolaba dándole palmaditas en su espalda.
Su profesor lo llevó al estanque del tiburón-Lo siento Tomu, no debi dejarte con el pensé...que habia cambiado-se sentaron juntos en la banca que esta enfrente de la pecera.
-Izu ¿Ese es el niño que le gustaba jugar rudo?-pregunto mientras que lleva su mano en la pierna del pecoso, se puso melancólico y triste.
-Si...pero eso no importa ¡¿Esta increíble el tiburón?!-sonrio señalando al animal y el pequeño también sonrió.
-Izu le juro...que yo lo protejo...puede confiar en que lo haré, no pienso dejar que ese tal Bakugou lo maltrate nuevamente-solto de la nada e Izuku le sonrió pues le pareció una promesa hermosa.
-Gracias Tomu...me siento mas seguro ahora-abrazo al niño para que se recostara.
Tomura pensó que después de todo su día no se había arruinado, había pasado a ver al tiburón con la persona que más quería en el mundo.
CONTINUARÁ...