Estoy sentado en el piso de mi habitación sin absolutamente nada que decir, mirando por la ventana, está lloviendo, lo cual es muy raro, en Malibú no llueve nunca, pero probablemente el sol no tarde en salir, y tal vez haya un arcoíris, pero eso ya no es trascendental, te llevaste todos los colores contigo, he pensado en salir y conducir con alguno de mis autos, ja, en verdad nunca pensé que nosotros podríamos llegar tan lejos; conduzco unas cuantas millas y después estaciono el auto, creo que es mejor caminar, vaya, en verdad te amo mucho. También he comenzado a ver la televisión, creo que eso es muy duro, todas las mierdas que hablan de mí después de todo lo que pasó con Thanos, pero incluso eso no es tan duro como no tenerte aquí a mi lado, sé que fumabas cigarrillos, pero tal vez un poco de weed no te hubiera disgustado, ahora estoy fumándola solo, y en verdad estoy muy aburrido porque no estás aquí para hacerme reír.
Desde que te fuiste he comenzado a beber y a veces eso me hace pensar demasiado y entonces es ahí cuando comienzo a llorar, creo que me estoy muriendo sin ti, es como si estuviera cayendo en espiral en un agujero sin fondo, Loki, Loki, Loki, en verdad te extraño, y sé que esto no es por tu magia haciéndome un hechizo o algo, en verdad te amo, Cada que recuerdo lo que te hice me siento como una mierda, supongo que solo estaba tratando de no dejarme a mi mismo sentirme culpable, porque tú me haces sentir como si estuviera muriendo con cada segundo, pero de todos modos es lo que hago, mi mayor miedo es no estar contigo y el dolor por el que estoy pasando se está volviendo tan insoportable… ambos nos hicimos veganos de alguna manera, eso me hacía fácil saber que no eras capas de dañar nuevamente, incluso a un animal, o no por lo menos a nadie que no se lo mereciera.
Estoy como ahhhh, incluso decirlo es complicado ¿Qué quieres de mí? Quise tener tu corazón, pero creo que no soy suficiente para tener algo tan caro, parece que amo caer en pedazos, te culparía, pero todo fue absolutamente mi culpa, el miedo de no ser suficiente para ti es muy fuerte.
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La puerta se abrió y Loki vio a Tony tirado en el piso, su primer instinto fue querer tirarse junto a él y salvarle la vida una vez más, curar sus heridas y llevarlo a su cama para recostarlo, pero se detuvo, tomó un poco de aire y llamó a algún sirviente, le indico que lo llevaran al área de sanación y que hicieran todo lo posible por salvarlo y por quitarle las cosas que tenía en su cuerpo. Entró de nuevo a su habitación y cerró la puerta tras de sí, se recargó en ella con su espalda y se deslizo hasta estar sentado en el piso, tenía sus manos sosteniendo su cabeza, ese hombre en verdad iba a volverlo loco, en primer lugar ¿Cómo llegó hasta la puerta de su habitación? ¿Por qué tenía esas cosas puestas? Las preguntas eran muchas y las respuestas eran pocas, pero ahora Loki debía de tener dignidad, si bien ya no era un Dios, por lo menos podía seguirse comportando como uno.
Tony había despertado en un lugar que no conocía, quiso levantarse, pero no pudo hacerlo, la posición en la que estaba era incomoda, aún con las esposas en sus muñecas y el bozal en su boca, nadie pudo separar las cosas de su cuerpo, aún cuando intentaron todo, todo tipo de magia conocida en Asgard nada había funcionado.
Loki seguía tirado en el piso de su habitación, esperaba una respuesta a todas sus preguntas, y la respuesta cayó del cielo una hoja de papel brillante atada con un Cordón azul cayó sobre su cama. El primer movimiento en que Loki pensó fue en defensa, pero al ver que nada pasaba, simplemente caminó hasta la cama y con un poco de desconfianza la tomó entre sus manos.
“El verdadero amor no necesita nada más que amor.”
Entonces Loki lo comprendió, Zeus tenía todo que ver con Tony en ese estado; Loki iba a seguir dilucidando sobre el tema, pero alguien tocó la puerta de su cuarto.
- ¿Quién es? –
- Príncipe Loki, algo está pasando con su invitado y no podemos estabilizarlo. –
- Voy en un segundo. –
Loki quería sonar totalmente indiferente, aunque obviamente no lo estaba, no importaba cuanto había peleado con Tony, solo quería alcanzarlo, abrazarlo, hacerle el amor y llenarlo de vida, pero nada de eso iba a ser posible ahora. Salió de su habitación y caminó hasta donde estaba el área de curación, Tony estaba de rodillas sobre una de las camillas, seguía con las manos esposadas y el bozal sobre su boca.
- ¿Por qué no le han quitado eso? – Preguntó Loki fingiendo molestia con sus subordinados, él sabía que no iban a poder quitárselo nunca.
- Lo hemos intentado de todas las maneras posibles príncipe, pero los artefactos siempre repelen nuestra magia, parecen estar hechizados también. –
- Bueno… entonces creo que yo me voy a hacer cargo de la situación, pueden retirarse. –
Todos salieron de la habitación, Loki miraba entretenido a Tony, el verlo amordazado y vulnerable le ponía, pero no debía tener esos pensamientos ahora, necesitaba ayudarlo; concentró sus poderes, había sentido un poco más de fuerza últimamente, de sus manos salió una especie de vapor verde que se dirigió a los amarres que tenía Tony sobre su cuerpo, Loki ejerció un poco de fuerza sobre ellos, pero no logró moverlos de su lugar. Después de varios intentos de querer liberar a Tony, Loki regresó su magia a su cuerpo.
- Bueno Edward, vamos a intentar hacer esto de la manera más fácil para ambos, no sé como funcione este juego, tampoco tengo ganas de entenderlo, usé mi magia y no pude hacer nada, entonces me voy, y le voy a decir a Thor de la situación para que él se haga cargo de ti y de hacer que regreses a tu mundo. –
Tony no pudo responder nada, levantó la mirada y miró a Loki directo a los ojos, sostuvo su mirada como un reto al dios, pero una corriente eléctrica salió de las esposas e impactó todo su cuerpo, sus venas se marcaron y sus ojos se pusieron en blanco haciéndolo caer desmayado desde la camilla hasta el piso, haciendo que su cabeza sangrara otra vez, ahora Loki no pudo fingir, se dejó caer de rodillas al piso y sostuvo el cuerpo tembloroso de Tony sobre su regazo.
- Tranquilo Tony, ya terminó, descuida… - Loki acariciaba la cabeza de Tony y acomodaba los cabellos llenos de sudor sobre su frente.
En un instante Tony quedó de rodillas nuevamente la mirada al piso y sus manos sobre sus piernas. De la nada la hoja que Loki había visto sobre su cama cayó sobre la cabeza de Tony, tenía la misma frase, los designios de Zeus le estaban volviendo loco, eso fue uno de los principales motivos de que lo suyo no funcionara.
- ¿Puedes hablar Tony? –
Tony solo negó con la cabeza como respuesta.
- ¿Puedes ponerte de pie? –
Ahora levantó los hombros para indicar que no sabía.
- No podemos hacer nada si no logramos comunicarnos. –
No hubo respuesta por parte de Tony, su cara era pálida, las bolsas bajo sus ojos eran ya casi negras, el sudor que para el tacto de Loki se sentía caliente en el rostro de Tony se sentía como cubos de hielo escurriendo por su frente, su mirada volvió a ponerse borrosa y sus ojos comenzaron a cerrarse por si solos, los amarres estaban drenándole energía, llevaba varias horas sin comida y con un peso de por lo menos 50 kilos sobre su cuerpo, Zeus no había escatimado en hacerlo sufrir.
Todo se había juntado sobre el cuerpo de Tony, el viajar a un lugar con una atmosfera diferente a la de la Tierra en prácticamente un segundo, todo el peso que las ataduras ponían sobre su cuerpo, las horas que llevaba de rodillas y sin tomar ni siquiera agua o ingerir cualquier otra cosa, el bozal hacía que sus dientes se juntaran con mucha presión, era como tener dolor de muelas en toda la boca. Cuando Loki notó el estado físico de Tony fue muy tarde, el mortal cayó al piso inconsciente, el golpe fue peor que el anterior, la sangre estaba saliendo de nuevo y haciendo un charco considerable en el piso, Loki intentó hacer que la sangre parara, uso su magia, y al ver que no funcionaba intentó curar su herida con material de curación, pero el cuerpo de Tony repelía los materiales con una fuerza instintiva. La vida se le estaba yendo de las manos una vez más, no había opciones, tenía un trato con Zeus y no podía dar más energía, Hela ni siquiera venía para intentar negociar, el alma de Tony, por estar en esclavitud no merecía ninguno de los reinos.
Las respiraciones del mortal se hacían cada vez más lentas y pausadas, débiles e inexistentes, el fin de sus días estaba llegando.
- Aún con todo lo que hiciste Tony, yo te amo, estoy seguro que te amo incluso más de lo que me amo a mí, lo sé porque haces que tenga sensaciones que nunca había experimentado, me duele todo lo que hagas y lo que te pase, siento tu dolor como mío y quiero protegerte de todo aquello que te haga daño, no sé que clase de trato hayas tenido con Zeus pero no puedo hacer nada para sacarte de ahí, tu vida se está yendo y yo no quiero la mía si no la puedo compartir contigo nunca más… -
Loki estaba en un colapso nervioso contundente, estaba dispuesto y convencido de terminar con su vida por no tener a Tony a su lado; las lágrimas escurrían por sus mejillas por no poder hacer nada, y con la última respiración de Tony una de sus lágrimas salió de sus ojos. El tiempo pareció detenerse en ese momento, mientras la lágrima recorría toda la distancia que había entre ellos y entraba por un costado de las esposas, Loki invocaba una de sus dagas para clavarla en su corazón. Cuando estaba a milímetros de insertar la daga en su pecho, un resplandor salió del cuerpo de Tony, comenzó a hacerse más y más fuerte hasta que cubrió toda la habitación. Cuando la luz se fue, Tony estaba de pie, frente a Loki, como si nada hubiera pasado, Loki sorprendido se puso de pie también, después de ver por unos segundos a los ojos de Tony, lo primero que hizo fue darle una bofetada que casi tira al hombre, para después acercarse y besarlo en los labios de manera efusiva, había sentido perderlo y ahora estaba ahí, pasando por una tercera muerte para poder estar con él. Loki estaba entendiendo todo, desde un principio ese fue el plan de Zeus, “El amor no necesita nada más que amor” Loki solo sentía amor por Tony, uno puro y verdadero, y sin él no encontraría nada más porque vivir, y Tony, estuvo dispuesto a no ingerir ningún alimento y tampoco a recibir curación alguna, solo necesitaba del verdadero amor de Loki para que fuera libre de sus ataduras.
- ¿Me perdonas Príncipe Bonito? – La cara de Tony era de completo arrepentimiento y vergüenza.
- ¿Te queda alguna duda? – Loki se acercó de nuevo y terminó con la distancia juntando sus labios.
- Espero que algún día puedas perdonarme completamente Loki, tuve demasiado miedo, no quería que estuvieras atado a mí por el resto de MÍ vida, tú mereces más que esto, y sería demasiado egoísta hacer que pasaras por mi muerte solo porque quiero que estés a mí lado, y si te decía que te fueras no ibas a acceder, no ibas a irte y yo iba a declinar y a ser tuyo nuevamente, así que provocarte para que me atacaras y tuvieras a todo el equipo en tu contra fue lo único que se me ocurrió y creo que funcionó, incluso tuve que tratar un poco mal a Peter para que quisiera venir contigo y con tu hermano, el chico te quiere y aun cuando yo lo quiero como si fuera mi hijo, sé que tú lo quieres más y no podía quitarte el derecho de verlo crecer. –
- Peter me dijo lo de Pepper, creo que tengo que hablar con ella. –
- No le hagas daño… estoy seguro de que solo quiere protegerme, ella sabe como funcionan las cosas, y su plan funcionó, o por lo menos por un momento, cree que eres malo y por eso quiere alejarme de ti. –
- Bueno, como sea no tienes que preocuparte por “mi inmortalidad” soy mortal lo recuerdas. –
- No Loki, no lo eres, cuando yo acepte ser esclavizado y encadenado, sin importar si mi vida se iba en ello fue para que Zeus te regresara a tu antiguo estado, eres inmortal de nuevo. –
- ¿Por qué hiciste algo como eso? –
- No puedo dejar que renuncies a lo que eres solo por estar conmigo, debes de entender que eres un Dios, no puedes simplemente dejar de serlo por mí, no soy para tanto ni tú para tan poco. –
- No vuelvas a decir algo como eso, y hablar sobre esas cosas ahora solo va a arruinarlo todo, vamos a dejarlo para otro momento. ¿Qué quieres hacer? ¿Quieres comer algo primero? -
- Muéstreme su palacio majestad, se lo imploro. – La voz de Tony tenía un dejo de burla en su tono.
- Podría mostrarle algunas otras cosas si así lo prefiere forastero. –
- ¿Forastero? –
- ¿Por qué no dejamos los juegos para otra ocasión y hacemos algo de eso que te sale tan bien? –
- Su oferta es muy tentadora majestad, me gustaría no importunarlo en su reino. –
- Entonces vamos a que cumplas con tus obligaciones. - Loki dijo esto y tomó una de las nalgas de Tony con una de sus manos y la estrujó con algo de fuerza.
Desde otro lado de la bóveda celeste estaba Zeus mirando todo lo que estaba pasando, nunca pensó que pudieran reconciliarse y los más difícil, descifrar el mensaje con tanta rapidez, eso solo significaba una cosa, en verdad se amaban, el amor que tenía era lo único que necesitaban, iban a seguir pasando por diferentes obstáculos, y la recién renovada inmortalidad de Loki iba a ser una de ellas, pero nada que no pudieran superar.