Finalmente Izuku se preparó para ir de visita al restaurante de Todoroki Shoto, fue por su amigo en dónde habían quedado de verse, de hecho vio como su novio le había dejado enfrente de la plaza comercial-¡Toya! ¡Dabi! ¡Hola!-los fue a saludar, abrazando a su amigo rubio y sonriendo al gótico.
Dabi sonrió al pequeño doncel y de manera divertida le agitó un poco su cabello-Los dejo, quedé con Kai y Tomura para salir a tomar unos tragos, te veo al rato amor, paso por ti-le dio un leve beso a Toya, sonriendo con ternura y después se despidió de Izuku-Gusto verte, espero verte algún día aceptar una cena a mi hermano a nuestra casa-con eso fue hacia su auto, lo encendió y se fue.
No caminaron mucho, de hecho estaban a una cuadra de la plaza y realmente el lugar estaba de lujo, nada comparado a su acogedor barrio. Aunque no tenía su encanto, si podía ser chiquito pero la gente lo hacía acogedor y único-Aqui es...-miro el lugar bastante asombrado, era un restaurante bastante grande y muy elegante.
Su amigo vio que se quedo bastante quieto y no podía culparlo, realmente el lugar lucia maravilloso-Vaya, es muy lindo ¿Entramos?-preguntó, moviendolo levemente hacia adelante.
-¡¡Buenas tardes!!-le saludó, bastante entusiasmado un tipo con gafas y vestido de chef-Mi nombre es Iida, encantado ¿Usted debe ser el joven Midoriya? ¿O me equivoco?-Todoroki, le habia encargado el asunto para recibir al doncel de la manera mas cordial posible, le hablo de sus características pecas y su cabello verde, en toda la semana se habia equivocado con tres clientes, que tenian curiosamente esas descripciones también.
Pestañeó bastante extraño, no creía que le iban a recibir y mucho menos a esperar a que viniera-¿Uh...? Si soy yo, un gusto conocerlo-se inclinó levemente para saludarlo de manera cortes-El es mi amigo Toya, vino a acompañarme-presento a su amigo e igualmente le imito en su saludo.
El varón sonrió muy amable, incluso se sintió aliviado de esta vez haber acertado-Bienvenidos, adelante, porfavor por aqui...-levantando su mano para señalar la entrada y con ello los llevó a la mejor mesa del lugar, esta en el centro del comedor y con ello les dejo su carta para que eligieran cualquier platillo.
Realmente el servicio de amabilidad le habia ganado, ya que al sentarse los camareros estan preparados para moverles sus sillas-Gracias...muy amable-tomo asiento a lado de su amigo y derrepente apareció enfrente su rival.
Todoroki se dio el tiempo para salir a desayunar junto a el, queria ver su expresión al probar sus platillos-Me apetece verte aqui, como habíamos acordado, veo que si tienes amigos normales después de todo...-se sentó enfrente de ellos dos, mirando con suma atención.
Al oírsu comentario sobre sus amistades, se molestó bastante y no pudo evitar fruncir el ceño-Mis amigos son bastante normales...-pronuncio con enojo, sin dejar de mirar los ojos de Todoroki.
Shoto al ver la firmeza y desicion en su mirada, no pudo evitar contenerse de seguirle en el juego del reto de miradas, pero al hacerlo no pudo evitar notar la belleza de sus ojos esmeraldas, eran bastante hermosos y al notarlo sus mejillas no pudieron evitar sonrojarse, su rival era bastante bonito pero con actitud y eso le gusta-Claro lo que sea, puedes empezar a ordenar-se reprimio en seguir apreciando su hermosa mirada, no podía coquetear con el, tenian una competencia.
-Solo esperaba a que me lo dijeras, presuntuoso-le contesto con bastante ironía, observando rápidamente la carta, eligiendo cualquier cosa.
Toya se mantiene callado, observando algo completamente divertido, parecía que estaba con una parejita, de lejos se notaba que el chef le gustaba a su amigo, pero era demasiado orgulloso para admitirlo y sobretodo para decirlo. Quizas sera un desayuno bastante interesante de ver-Yo ordenare esto porfavor...-.
Izuku se sintió bastante ansioso por salir, eligiendo algo sencillo y rápido para que pudieran salir lo antes posible de ahi e ir con su amigo a disfrutar de unas compras, al ver que tenia su pedido listo se lo dijo al camarero, aunque no sabia que hacia el chef en su mesa-¿Tu no vas a cocinar?-quedo bastante irritable tenerlo cerca y queria que se fuera.
-Mis chefs son los mejores, hacen con exactitud mis recetas, al pie de la letra, además quiero acompañarlos a desayunar-hablo con bastante calma, empezando a acomodarse la servilleta encima de sus piernas e igualmente le pidió a su empleado que le trajera un plato a el tambien de lo que pidiera Izuku.
El pecoso se quedó bastante estático, nunca había conocido un tipo asi, donde esta el amor en eso. Se supone que es el que debería estar cocinando para sus clientes, haciéndolos felices al entregarles un buen platillo. Pero tenía que respetar sus métodos, ya que no se encontraba en su restaurante.
Fueron unos minutos de tensión entre Shoto e Izuku, ya que tenían que esperar y el silencio era bastante incómodo, el varón no podía dejar de mirarlo, admiraba cada detalle de su rostro, sus pequeñas pecas y sus enormes ojos, emanaba un la luz tan cálida e incluso tierna-¿Desde cuando cocinas?-pregunto el bicolor, bastante curioso.
Al estar aburrido de no decir palabra alguna decidió contestar-A los diez-fue la primera vez que cocino a lado de su padre, fue un momento bastante maravilloso para el, ya que no solo estaban ellos dos, si no también su madre, ella y su padre eran la razón del porqué le gusta cocinar.
-Ja...yo empecé desde los ocho-lo dijo con un tono arrogante, moviendo su cabeza levemente a un lado y cerrando los párpados, mostrando una sonrisa prepotente.
Nuevamente le habia hecho enfadar su comentario-¿Para ti todo es competencia verdad? ¿Por que te gusto la cocina?-también tenia curiosidad por saber algo de su rival y queria saber cómo inicio su amor por la gastronomía.
No hubo respuesta, de hecho parecia que habia empeorado las cosas, ya que su rostro se mantuvo bastante frio y su mente fue invadida por imágenes de su infancia desastrosa, de las cuales no queria hablar-Prefiero no hablar de ello...si me disculpan voy al baño-se levantó de inmediato, dejando sin más a sus invitados.
Los donceles se mantuvieron en silencio, pero Izuku se sintió mas confundido-¿Que fue lo que le dije para que se molestara?-preguntó bastante preocupado, le caía bastante mal pero no lo suficiente como para lastimar sus sentimientos, era sentimental aún que fuera un poco rudo.
-Ni idea...parecen llevarse de maravilla-hablo el rubio bastante extrañado al ver como se había marchado el varon.
Una pequeña risita invadió un momento su estancia en la mesa-Ja ¿Bromeas? A leguas se nota que me detesta-miro de manera divertida a su amigo Toya.
-Como siempre no estas atentó a los detalles...como Shinsou-.
Izuku no entiende a que se refiere, empezando a cambiar la conversación-Su método me parece distinto, tiene gente que cocina como él ¿Y eso que lo hace especial? Aunque no me sorprende, este tipo de lugares son así...-los tipo como él olvidaban lo más divertido de ser chef y es cocinar, hacer platos nuevos y probar nuevos sabores qué explotan tu paladar.
-¡Miren nada más si es mi cocinero favorito! ¡¿Como estas Izuku?!-una voz se hizo presente.
Al girar su rostro, noto a su cliente más fiel y sobretodo muy amable-¡Katsuki! ¡¿Que haces aquí?!-le saludo bastante amigable, pues era una persona bastante agradable y gracioso.
-El chef de aquí insistió en que viniera en este momento, lo iba ignorar pero el maldito me dijo que estabas aquí y no le creía, inmediatamente vine ¡¿El maldito dos caras te hizo algo?!-tomo haciendo, comenzando a dialogar con el y entonces noto la presencia de alguien mas-Oh...¡¿Que tal?! Disculpa es que realmente me vine los más rápido que no puede saludar...mi nombre es Katsuki Bakugou ¡¿Este inútil nos tendrá esperando?!-busca con el gesto fruncido al chef odioso que le había insistido tanto en venir-¡Tengo otros restaurantes que ver y es estúpido cree que tengo su maldito tiempo!-grito bastante irritable.
Toya negó con la cabeza y se mostró amable-No hay problema un gusto, mi nombre es Toya Setsuno, es bueno conocer otro amigo de Izuku, dijo que iba ir al baño, no creo que tarde demasiado...-.
Izuku por lo mientras reía bastante divertido, el rubio era un acompañante bastante cómico, ya que sus comentarios eran bastante geniales y los mejora al decirlo con un tono de sarcasmo e ironía-¡¿No se porque estas aquí?! ¡Pero me alegra que estés! ¡Toya este tipo es una persona bastante divertida! ¡Creo que te va a agradar!-seguia riendo al oír sus quejas y el silencio se rompió al tener otro tipo de acompañante en la mesa.
Shoto se refresca un poco su rostro, debía calmarse y no perder nuevamente los estribos. Pero es que la pregunta del tema era bastante complicado para el. Su padre era un famoso chef, el tercer mejor reconocido, pero no fue por el la razón por lo cual quería ser el mejor chef, si no por su madre,ella nunca fue prestigiosa o tenía si quiera una estrella michelín, pero sus platos le causaba bastante emoción y ahí fue en donde nació su amor por la cocina.
Al estar calmado volvió a la mesa y vio que el crítico había llegado, pero por alguna razón, este parecía muy amable con Izuku, sin saber la razón se molestó al ver su extraña relación parecían llevarse muy bien, demasiado bien para su gusto.
CONTINUARÁ...