Yuuri se despertó en su mesita de noche aun con lápiz en mano y el diario abierto, al parecer se había quedado dormido mientras escribía.
No tenía clases pues era domingo, tal vez se iría a dar un paseo.
Se vistió, desayuno y se fue, dio una vuelta por todo el centro de la ciudad, hasta que llego a un parque y se sentó en uno de los columpios a pensar.
¿Por qué Murata le había pedido salir? El bien sabía que estaba comprometido con Wolfram, tal vez había sido una broma, sí, eso tenía que ser, una broma pesada que le había gastado su amigo solo eso.
-Shibuya
Yuuri dio un salto al escuchar aquella voz conocida que lo sacaba de sus pensamientos.
-Fui a buscarte a tu casa pero tu mamá me dijo que no estabas asa que pensó que podrías estar por aquí.
-¿Por qué me buscabas? ¿Paso algo en Shin Makoku?
-No, simplemente quería verte- dijo mientras el moreno tomaba asiento al lado del ojinegro.
-¿Por qué?-pregunto Yuuri cabizbaja
-¿Mmm?
-¿Fue una broma verdad?
-¿Qué se supone que fue una broma?
-Eso…de que si quería salir contigo
-¿En verdad crees que fue una broma?
-Bueno yo…
-Si fuera una broma, no hubiera ido tan lejos, no te hubiera besado- de tan solo recordarlo Yuuri se puso rojo.
-Pero tú sabes que estoy comprometido con Wolfram
-Así es…
-Entonces si lo sabes ¿Por qué-?- Murata interrumpió
-En la tierra yo seré tu novio, en Shin Makoku volverás a pertenecerle a Von Bielefield
-¡Pe-pero eso-!
-A menos de que cambies de opinión y termines con Lord Von Bielefield
-Pe…pero y si decido… ¿terminar contigo?
-Terminar conmigo va a ser muy difícil Shibuya, me costó mucho conseguirte, no voy a dejarte ir fácilmente, ya una vez en otro vida me quitaron lo que yo más quería, no voy a dejar que suceda de nuevo.
-Murata…- dijo algo sorprendido por aquellas palabras anteriormente dichas por su amigo, no, por su ahora novio-Yo…-
-Bien ya que estamos aquí demos un paseo… ¡Perfecto, tengamos una cita!
-Una… ¡¿Una cita?!
-Vamos-dijo mientras obligaba a Yuuri a dejar el columpio y aceptar su invitación.
Mientras otros se divertían en lo que parecía ser una “cita”, en otro mundo un rubio esperaba impaciente a que su amado regresara.
Ya habían pasado días y no se aparecía, la inquietud y sus celos no lo dejaban dormir.
Qué tal si su amado enclenque le estaba siendo infiel y esa era la razón por la que no volvía.
Al parecer el rubio no estaba muy equivocado, su intuición era correcta, pero el aún no lo sabía.
-Vuelve pronto Yuuri, te estaré esperando- dijo Wolfram con una voz algo apaga mientras se retiraba a su habitación a descansar un poco.
Mientras al otro lado de aquella fuente en otro mundo.
-Adiós Shibuya nos vemos mañana, después de clases volvemos a Shin Makoku, ya han pasado días desde que no volvemos, deben estar preocupados.
-pero si solo ha pasado un…- antes de terminar recordó que Shin Makoku y la tierra tenían diferentes tiempos.
Mientras lo recordaba, sentía que un calor acogedor, se apoderaba de él, había vuelto a pasar lo mismo que anoche, recibió otro beso de “buenas noches” solo que este era más cálido y apasionado que el que había recibido el otro día, peor fue su sorpresa, cuando se dio cuenta de que no se estaba resistiendo.
-¡mm-…!! Mu…-Murata…mm…ah-…espe…ra- Murata aprovecho el momento en que Yuuri abrió la boca para introducir su lengua, Yuuri trato de sacarlo pero esto se interpretó de otra manera.
Cuando Murata decidió que era suficiente se alejó de Yuuri.
-jajaja, deberías verte Shibuya estas completamente rojo.
Yuuri no sabía que decir, solo balbuceando cosas sin sentido, simplemente era incapaz de hilar palabra alguna.
-Bueno ahora si ya me voy, nos vemos mañana.
Yuuri estaba aún más confundido que ayer.
No tenía ni siquiera ganas de cenar, así que subió a su cuarto ignorando los llamados de su madre y hermano.
Se recostó en su cama e intento pensar un poco, pero fue inútil, todo dentro de su cabeza estaba hecho un desastre.
Saco su diario y se puso a escribir, eso le ayudo bastante a acomodar un poco las cosas, hasta que el sueño lo venció y se volvió a quedar dormido en su mesita de noche.