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How To Save A Life por Sabaku No Ferchis

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Notas del capitulo:

Hola n.n

Bueno, después de mucho (MUCHÍSIMO) tiempo aquí me tienen de vuelta jejeje, see, no dejo de molestar xP

Bueno pues, tego que decir que esto me está costando mucho trabajo; a veces se me hace dificil escribir y creo que estoy perdiendo la habilidad de... No sé... ¿Ustedes qué piensan? Jajaja, bueno, primero lean el capítulo (que por cierto me quedó muy (MUY) Saca-caries xDDD)

Sin más qué decir, gracias por sus reviews :3 Y bueno, espero que les guste, así que....

 

¡A leer! xDD

 

N/A: El texto en cursiva más largo es FlashBack, y se identifica por estos simbolitos: °°° n.n

Capítulo 9

 

 

Somewhere Only We Know.

 

 

 

°°°


La pesadez de sus lágrimas era muy gruesa, ya no quería seguir sintiéndolas resbalar por su rostro. Sólo estaban manchando su orgullo ya deshecho.



Volvió a soltar otro gemido ahogado y se sintió como un estúpido, allí, llorando en media noche, apoyado sobre el tronco de un gran árbol al que le descargaba todos sus sentimientos. Su cabeza hundida en sus brazos, estos a su vez pegados contra el tronco, y él sufriendo... Salpicando lágrimas porque no sabía siquiera que era lo que él quería...


Por supuesto que sentía pena por sí mismo porque... ¿Qué demonios hacía un chico como él llorando de esa manera? ¿Qué demonios le pasaba...? A él, al gran Sasuke Uchiha, a aquel que se robaba el corazón de cualquiera que se cruzara por su camino. Era algo ilógico, él pensaba que las lágrimas eran para los débiles y allí estaba él, sin siquiera poder controlarlas. Pero es que aquello en verdad le dolía mucho...



El pelirrojo... ¿Por qué no lo dejaba acercarse a él? ¿Por qué lo evitaba incluso cuando quería brindarle su ayuda? ¿Qué era lo que tenía qué hacer para acercarse al menor...?


Tragó saliva y abrió los ojos rápidamente. El viento nocturno se alzó contra él y voló sus cabellos del color de la noche, mientras él no paraba de maldecir a ciertas personas —incluyéndose— Itachi no tenía por qué meterse en su vida y creerse su madre, es decir, sí, bien, era su hermano y se preocupaba por él, pero no tenía derecho a decirle de quién debería enamorarse y de quién no ¿Qué se creía el idiota diciéndole que si se enamoraba de Gaara no haría más que meterse en problemas? ¿¡Qué sabía él!? Y bien, aquello pudo haberlo pasado por alto de no ser porque su mejor amigo compartía la ideología de Itachi. Naruto le dijo lo mismo, es más, se lo gritó, y se lo repitió infinidad de veces como si el pelinegro fuera a cometer un acto suicida. Ellos no tenían derecho a decidir por él... Él había golpeado a Deidara porque quería defender a su misterioso pelirrojo. Y si bien por golpear al rubio se había metido en problemas con su hermano y su amigo, con Gaara había sido peor; la gota que derramó el vaso de su ya inestable estado mental...


Gaara no quería tenerlo cerca, eso se lo había dejado más que claro. Lo rechazó, lo aventó, lo apartó de él como si se tratara de un bicho raro. Y tenía qué aceptarlo, eso le llegó como daga al corazón. Se sintió miserable y un idiota por seguir aferrándose a alguien que no le quería. Algo en su interior le decía que lo dejara, que no valía la pena seguir sufriendo por ese chico si tenía mucho más de dónde elegir. Y claro que intentó hacerle caso a ese pequeño pedazo de conciencia, se alejó de Gaara lo más que pudo, dejó de mirarle y de hablarle, pero eso simplemente lo mataba por dentro.



Llegó al momento en el que no sabía qué hacer, no quería seguir con la farsa de que ya no le importaba Gaara cuando en realidad su corazón se estaba haciendo añicos de no poder verlo. Pero tampoco quería sufrir porque el pelirrojo no le correspondía... No estaba en sus planes ser quien le rogara.


Entonces, ¿Qué quería?


Si no deseaba ser lastimado, pero se moría por ver al pelirrojo... ¿Qué era lo que necesitaba para no seguir sufriendo? Si de todas maneras tenía que elegir una opción.



¿Por qué las cosas eran así? ¿¡Por qué demonios se enamoró de Gaara!?


Fácil, simplemente lo había hecho; no era necesario tener una explicación. Era imposible saber por qué cada vez que lo veía los ojos le brillaban, porque sentía la asfixiante necesidad de estar junto a él no sólo para besarlo o hacerle el amor, sino para contemplarlo, escucharlo y compartir su silencio... Deseaba estar con él en todos sentidos, y fue entonces cuando se dio cuenta: Lo que él quería no era besar al menor, no la dicha de poder poseerlo; lo que en verdad anhelaba su corazón era al mismo pelirrojo en todo su cuerpo y alma. Lo quería para él, sus ojos, sus labios, su cabello, todo Gaara era lo que quería; lo demás podía irse a la mierda...


Las lágrimas cesaron y él se incorporó con una diminuta sonrisa en los labios. Miró el árbol frente a él por segundos que parecieron ser horas y después sacó una navaja de su bolsillo.


Rasgó la madera, el césped comenzó a llenarse de astillas...



Uno, dos, tres minutos y aquel árbol tenía tallada una hermosa inscripción en el centro, tan legible y profunda que seguramente permanecería allí hasta después de la muerte de los biznietos de Sasuke. Era superficial, claro que sí, pero tan pura como los sentimientos de un chico frío como él. Y decía:


"SasuGaa Forever"



Pues de aquella manera se había comprometido con el árbol, de que haría que el pelirrojo se enamorara de él a toda costa, sin importar qué. Y él mismo perdería su orgullo, ya no le importaba... Ni eso ni las palabrerías de Itachi y Naruto. Lo único que quería, ya lo habíamos dicho, era a Gaara.

°°°


Era una extraña sensación, aquella que se colaba desde su mano hasta cada rincón de su cuerpo. Se sentía bien, claro que sí, y lo hacía sonrojarse inconscientemente mientras su mirada se perdía en su mano siendo sujetada por la de Sasuke fuertemente, abstrayéndose de todos aquellos que les lanzaban una mirada extrañada y en ocasiones asqueada (para Gaara)


No sabía hacia dónde lo llevaba; el azabache simplemente había tocado la puerta de su habitación y le tomó de la mano, jalándolo a quién sabe dónde. Gaara le había preguntado qué era lo que le pasaba, pero no tuvo respuesta alguna, así que se dejó guiar —o más bien se había perdido en el momento en el que se dio cuenta de que sus manos estaban entrelazadas— Y miraba con los ojos fijos la espalda de mayor, sus cabellos negros moviéndose al compás de sus pasos y su mano amarrada posesivamente a la suya, a pesar de que estuviera sudada.


Salieron del instituto y el pelinegro se detuvo de pronto.


Se encontró con aquellos ojos aguamarina y suavizó el agarre.



—Necesito que te cubras los ojos— dijo, deshaciendo el nudo de su delgada corbata azul. El pelirrojo encaró una —inexistente— ceja.



— ¿Para qué?— preguntó en tono serio, retrocediendo un paso, desconfiado.



—Es una sorpresa— dijo para tomar al menor por los hombros y atraerlo hacia él para poder vendar sus ojos con la corbata.


Gaara dudó... ¿Qué demonios se traía ese Uchiha? Bueno, ya era demasiado tarde para escapar; sus ojos estaban cubiertos y volvía a caminar inconscientemente de la mano de Sasuke.


Por su parte, el azabache extendía una sutil sonrisa sobre sus labios. Estaba ansioso por llegar, tanto que había aumentado la velocidad de sus pasos y casi hacía que Gaara se tropezara en dos ocasiones. Habían salido del campus, y caminaban al lado lateral de la carretera. Llevaban así más o menos veinte minutos. Gaara comenzaba a cansarse... Pero el Uchiha estaba feliz, no faltaba mucho para llegar.


De súbito, el moreno detuvo el paso y soltó la mano de Gaara, volteándose para recibir entre sus brazos el cuerpo descontrolado del menor. Ambos perdieron el control y cayeron, pero Gaara se encontró a sí mismo atrapado entre dos fuertes brazos, que hacían posesión de su cuerpo y lo pegaban en extremo al ajeno. Tardó unos segundos, pero terminó por responder al contacto con el azabache, y lentamente subió sus manos por la espalda del mayor, aferrándose a ella y soltando un pequeño suspiro.



...


Pasaban los segundos y ninguno de los dos parecía querer romper ese contacto. Estaban en silencio, escuchando simplemente el latir del corazón del otro contra el suyo. Sasuke sonrió y se separó del pelirrojo. Gaara aún tenía los ojos cubiertos, así que aprovechó para plantarle un beso malicioso en los labios y le quitó la corbata del rostro.


Gaara parpadeó repetidamente, sus dedos estaban sobre sus labios, avergonzado aún por la atrevida acción del pelinegro. Después miró a su alrededor. Parecían estar en un campo verde, los rayos de sol se colaban por las ramas de los árboles y chocaban contra su rostro. Era un lugar hermoso, silencioso; tal como a él le gustaba. Siguió recorriendo el panorama con la mirada y al final volvió a encontrarse con aquellos ojos profundos, que le miraban de una manera encantadora y excéntrica.


— ¿Por qué me trajiste aquí?— preguntó tranquilamente.



—Hoy es 19 de Enero— contestó. Gaara estuvo seguro de haber visto una sonrisa delinear los labios de Sasuke. Sí, era 19 de Enero, ¿Y eso qué?



El pelirrojo le miró confuso.



— ¿Y~— no tuvo tiempo de extender la consonante. Unos labios habían sellado su boca en un casto beso. La lengua del mayor no pidió permiso para entrar a jugar con la suya, simplemente le lamió los labios rosados y se separó un poco.


—Feliz cumpleaños, Gaara— dijo en un susurró que estremeció por completo al taheño.


¿Era su cumpleaños?... ¿De verdad?



No, no lo recordaba. Más bien, nadie nunca se lo hacía recordar. En ningún día del año había un "feliz cumpleaños", nada de regalos ni abrazos afectuosos. No era que los anhelara, de hecho aquello para él sólo era de gente hipócrita. Sólo sabía que tenía 17 años porque sus compañeros tenían la misma edad.


Pero no podía negar que en ocasiones se sentía solo... No había nadie que le regalara una sonrisa en aquellos días en los que se supone deben pasarse en compañía. Por eso sintió que su corazón dio un fuerte latido cuando escuchó a Sasuke decir aquellas palabras, con esa hermosa curvatura de labios en su rostro, tan cerca del suyo...


Estaba seguro de que iba a llorar, y bajó la mirada rápidamente, pero la voz del otro le hizo volver a mirarlo al instante. Y se encontró con esos ojos profundos y excéntricos, que se posaban en él de manera indescifrable... Podía ver su propio rostro sonrojado a través de ellos.



Entonces, el moreno desvió la vista hacia arriba, dándole a entender a Gaara que también hiciera lo mismo. Y se encontró con el grueso tronco de un sauce blanco.



Había algo escrito ahí, pero no alcanzaba a ver bien qué era.



Agudizó la mirada...



Y los ojos se le abrieron como platos, y sus labios se entreabrieron asombrosamente...


"SasuGaa Forever"


¿Qué pensar...? Si no había nada en qué pensar. Sólo se quedó mirando la inscripción fijamente, sintiéndose de manera extraña. Algo en su estómago vibraba, y le daba cosquillas. Pero no le molestaba, se sentía a gusto.


— Ese día yo estaba muy triste— interrumpió la voz del azabache; sin embargo, Gaara no desvió la mirada —. Me odiaba a mí mismo por no poder elegir entre lo que dijo mi hermano o en lo que yo pensaba que quería — continuó, sin apartar la mirada del pelirrojo — Y me decidí por ti, yo me dispuse a enamorarte a como dé lugar, por eso tallé nuestros nombres allí. Al final de todo mandé las palabrerías de mi hermano a la mierda, porque yo te quería, no, te quiero a ti por sobre todas las cosas, eso es algo que nadie podrá cambiar. Decidirme por ti fue lo mejor que pude haber hecho en mi vida...


Gaara se incorporó y caminó lentamente hasta llegar a la corteza de aquel árbol, con sus dedos delineó la inscripción suavemente y entrecerró los ojos. Nunca hubiera creído que alguien se tomara la molestia de darle un detalle así por su cumpleaños —ni ninguna otra cosa— Y de pronto se sintió feliz, como cada vez que lo hacía cuando estaba con Sasuke.


Las manos del moreno se posaron sobre su cadera y Gaara dobló un poco el cuello para dejar al mayor acomodarse sobre su hombro.


—Te amo— susurró contra su oído y el pelirrojo volteó a verle con los ojos entrecerrados. Aún tenía miedo de ser él quien tomara la iniciativa, así que simplemente se quedó mirando al mayor, esperando a que este entendiera y se acercara a besarle.



Así lo hizo.


Habían caído sobre el césped, con Sasuke encima de Gaara. Sus lenguas unidas y sus manos entrelazadas. Era un beso cargado de pasión más que de lujuria, como si para vivir necesitaran besar al otro, como si cada roce con los labios ajenos significara un año más de vida.


El azabache adentró sus manos por la camisa de Gaara y comenzó a acariciar aquella piel tan suave y tersa. El pelirrojo gimió dentro del beso y Sasuke sintió como si una descarga eléctrica le recorriera todo el cuerpo. No había mejor excitación.


Mentiría si les digo que no iban a llegar más lejos, pero la verdad era que Sasuke aún tenía un regalo más para Gaara. Así que se apartó el cuerpo del menor y quedó sentado sobre el césped. Extendió su mano a Gaara para que él hiciera lo mismo.



—A las ocho y media empezará una lluvia de estrellas, quiero verlas contigo— dijo mirando al cielo. Aquello era algo que iba a hacer sin importar lo que el menor dijera.


Y no era como si Gaara hubiera tratado de oponerse...



Ambos se recargaron sobre el tronco de aquel árbol y esperaron pacientemente, en silencio; Sasuke amaba el silencio de Gaara.



El firmamento fue atravesado por una estrella fugaz que viajaba a la velocidad de la luz, dejando su marca sobre el cielo estrellado. Muchas más comenzaron a seguirla y teñir el manto nocturno, empezando con un hermoso fenómeno astrológico.



Tanto los ojos negros como los de color  aguamarina se entrecerraron, reflejando en sus pupilas las estrellas de luz. Su mundo se paró en un momento mágico que se quedaría grabado en su mente por el resto de sus vidas...



La gente dice que si le pides un deseo a una estrella fugaz, este se te concede. Puede que sea verdad, puede que no, pero cuando dos personas escépticas caen en garras del amor pueden olvidarse de las leyes de la física.



Ojalá este sueño nunca termine... 



Notas finales:

Y.... ¿Bien o mal? ¡Por favor, necesito sus críticas! Siento que quedó (aparte de cursi) muy enrredadizo... dificil la lectura... TToTT Sí es así, lo siento, trataré (ME OBLIGARÉ A) de mejorar xDD

En cuestión al FanFic... Ahora sí, para el próximo empezarán los problemas muajajaja ¬w¬

Sin más qué decir, muchas gracias por leer...

 

Cuídense mucho, mucho n.n


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