Mi madre me fue a despertar para que fuera a clases, pero al verme, sin pensarlo me dijo que descansara, no se si sería por mi aspecto o porque pudo comprender lo que me sucedía, no tuve ni ánimos para levantarme a desayunar, mi hermana Tsurumi intentaba muchas formas para hacerme comer, pero fueron en vanos; Caminé al baño con un dolor de cabeza como si tuviese resaca, la luz de la habitación me cegaba y hacía que me dolieran aun mas los ojos, mi aspecto era un desastre, ojeras y los ojos hinchados, como si hubiese llorado toda la noche, lo hice, pero no pensé que podría quedar de esa manera, eso que no soy llorón y de un momento a otro recordé varias cosas, dándole paso a mi llanto de infante, pero no tenía a Ryuuki para que me consolara y no permito que nadie mas vea mis lagrimas descontroladas, mi madre le daría mucha importancia, mi padre me ignoraría y molestaría con que soy un inmaduro.
-Quiero dormir- Dije bostezando y caminando por los pasillos para llegar a la cocina
-Mira Shion, quieres tener novias, ¿no?- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-¿Por que de pronto te interesas con quien estoy?- Dije molesto
-Ya acepté que nunca estarás con Thomas, eres un inútil, así que te ayudaré a buscar novia- Dijo mi hermana con una sonrisa
-Ni te esfuerces, simplemente no sirvo para eso- Dije molesto y avanzando
-Ya veo, ¿tienes miedo?- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-¿Miedo? ¡Ja! Bien, te escucharé- Dije molesto sentándome en la silla
-Tengo unas amigas de tu edad, siempre les habló de ti, parecen muy interesadas en conocerte, ¿aceptas una salida?- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-Bien, pero solo un rato- Dije molesto
-¡Entonces vámonos!- Dijo Tsurumi arrastrándome al baño
-Que flojera- Dije dando un suspiro
-No te quejes y métete al agua- Dijo Tsurumi alegremente
-Si, ya voy- Dije desganado metiéndome a la ducha
-Yo escogeré tu ropa- Dijo Tsurumi con una sonrisa yéndose del baño
Me mantuve en la ducha por media hora, mirando todo como si fuese la primera vez que entraba a ese lugar, me sentía mal, pero muy bien me sirve haber sacado la sonrisa falsa de mi madre, supongo que algo me servirá en este momento. Tsurumi me arrastró hacia la pieza y me vistió rápidamente, yo solo observaba con una mirada fría, como la de mi padre, pero con una dulce sonrisa diciéndole que no se apresurara tanto, ella simplemente me sonreía, que fácil era fingir, al menos con ella, habría sacado la ingenuidad de mi madre, o sabía muy bien lo que me pasaba pero quería animarme, cualquiera que fuera el motivo no me era de mucha importancia.
-Date prisa- Decía Tsurumi mientras me arrastraba hacia el parque
-Como sea- Dije dando un suspiro molesto
-¿Él es tu hermano?- Dijo una chica un poco mas baja que yo con una dulce sonrisa, vestía un vestido blanco escotado que le llegaba un poco mas arriba de las rodillas, sus cabellos negros hacia juego con sus ojos azules
-Es un lindo chico- Dijo la otra que llevaba un vestido rosa que le quedaba casi al porte de una mini falda, con un cinturón negro, de cabellos rubios y ojos canelas
-Tus amigas son más lindas que tú, Tsurumi- Dije con una sonrisa nerviosa
-Que malo eres Shion- Dijo Tsurumi enojada
-Solo bromeaba- Dije con una sonrisa
-Miyami, yo lo quiero primero- Dijo la rubia con una sonrisa desafiante
-N-No es justo, Kanna- Dijo la de cabellos negros un tanto tímida
-Bien Shion, tu escoges- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-¿Como eso de que escojo?- Dije molesto
-Te dije que mis amigas querían conocerte, en todos los ámbitos por supuesto- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-¿Hasta en “eso”?- Dije con una sonrisa nerviosa
-Que te pasa, mis amigas no son zorras- Dijo Tsurumi molesta
-¿Qué tanto hablan?- Dijo Kanna molesta
-No es nada, Shion saldrá con las dos al mismo tiempo- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-¿Cuando lo dije?- Dije molesto
-N-No tiene por qué… Que Kanna salga primero con él- Dijo la ojiazul con una sonrisa
-Que chica más dulce- Me dije en los pensamientos con una sonrisa dulce
-Bien, ¡entonces vamos!- Dijo Kanna arrastrándome a una heladería
Kanna me pidió que le comprara el helado más grande, relacionado… el más caro, perdí toda mi mesada en poder complacer a esta niña, muy bien pude haberla rechazado, pero de alguna forma tengo que distraerme, Kanna atraía la atención de todos los chicos, además de ser muy extrovertida y coqueta, Tsurumi entretenía a Miyami, la actitud de Miyami era tan dulce y tranquila, pero ninguna de las dos me llamó la atención…
-Es turno de Miyami- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-¡No es justo!- Dijo Kanna molesta
-Oye si no aprovechaste el tiempo no es mi culpa- Dijo Tsurumi con una sonrisa
-Bien- Dijo Kanna molesta yéndose al lado de Tsurumi
-S-Supongo que me toca- Dijo Miyami con una sonrisa
-Si- Dije alegremente tomándole de la mano
-¡No es justo! ¿¡Por qué conmigo no!?- Dijo Kanna molesta
-Amiga, como estás vestida, pareces cualquier cosa- Dijo Tsurumi con una sonrisa nerviosa
-N-No te enojes, Kanna- Dijo Miyami asustada
-Además, a Shion dudo que le guste Miyami, él ya tiene a alguien- Dijo Tsurumi con una sonrisa maliciosa
-Cállate- Dije molesto y desviando mi mirada
-Aprovechemos el tiempo entonces- Dijo Miyami con una sonrisa
Con Miyami pasamos a la pastelería y a los videojuegos, teníamos cosas en común, pero su personalidad era tan dulce como la de mi madre con mi padre, me imaginé que se repetiría la misma historia, de alguna forma sentí como si le fuese infiel a Thomas, aunque no fuésemos nada; También sentí como un aura maligna nos mirara a ambos, más una vista que me deseaba la muerte.
La tarde iba pasando, Miyami se le notaba nerviosa, así que le dije que yo personalmente la iría a dejar por si llegase a tener problemas, Tsurumi sonrió y Kanna me miró pidiendo que me muriera, pero no era esa la mirada que sentía posada en mí; Caminé con Miyami, ésta me agradecía que le acompañase hasta su casa, me conversaba sobre su día y que le gustaría tener otra cita de juegos, que no se lo había tomado como una verdadera cita, si no mas una de entretención.
-Entonces nos vemos- Dijo Miyami con una sonrisa tomándome las manos
-Si, supongo- Dije con una sonrisa nerviosa
-Tsurumi me contó sobre tu confusión amorosa- Dijo Miyami con una sonrisa
-Esa Tsurumi- Me dije en los pensamientos pensando en mil formas para vengarme
-Haces mal en negar lo que sientes- Dijo Miyami dando un suspiro molesto
-Tú no sabes como me siento- Dije molesto
-No debes tener miedo a que te rechace, por lo que me ha contado un pajarito, será correspondido- Dijo Miyami con una sonrisa
-¿Q-Que quieres decir?- Dije confundido
-Bueno, mi padre se enojará, nos vemos- Dijo con una sonrisa finalmente entrando a su casa
Confundido, avancé por el callejón oscuro, sentí una presencia, en guardia saqué mi katana y mantuve la calma para que no se sintiera la mía, esperando a que se mostrara lo que se acercaba, la respiración comenzó a sentirse y sin pensarlo me lancé sobre esa persona poniéndole la katana cerca del cuello.
-Maldición, ¿Qué demonios te pasa?- Dijo Thomas dando un suspiro molesto
-¿Que haces aquí?- Dije molesto
-Tsurumi me dijo que si quería saber lo que sentías te siguiera- Dijo Thomas molesto
-¿Lo que yo sentía? ¿Para que quieres saberlo?- Dije confundido
-Pero supongo que se equivocó- Dijo Thomas dando un suspiro
-¡Nunca me respondes nada! ¿¡Que demonios pasa contigo!?- Dije molesto enterrando la katana en el suelo
-No seas un crío- Dijo Thomas seriamente
-¡El que está actuando como un crío eres tú!- Dije enojado
-Puedes decir lo que quieras, no me afecta- Dijo Thomas desviando la mirada
-Siempre haces lo mismo…- Dije molesto apretando los dientes
-¿Que…? ¿Vas a golpearme?- Dijo Thomas molesto
-No seas idiota, no podría golpear a alguien tan débil- Dije molesto y levantándome
Al darme vuelta para sacudirme, Thomas se lanzó sobre mí y comenzó a golpearme, lo intentaba, su rostro mostraba una fría mirada y sus golpes eran débiles, algo así para reírse, pero no quería burlarme, de alguna manera sentí que me lo merecía y solo lo miraba, esperando a que se detuviera; Mi rostro estaba quedando hinchado… mi nariz como mi boca comenzaron a sangrar, fue en ese entonces en donde se detuvo y respiró agitado por el cansancio de tanto golpearme, me miró con la misma mirada con la que me había comenzado a golpear, yo me levanté como si nada y me limpie el rostro con mi manga.
-¿Cómo puedes estar bien?- Dijo Thomas molesto respirando entrecortado
-He pasado por peores cosas, Thomas- suspiré y lo miré- Espero que con esto se te haya quitado el odio contra mí- Dije finalmente mirándome la manga
-Se puede decir que me desahogué- Dijo Thomas viéndose las manos
-¿Te duelen?- Dije acercándome y tomándole las manos- Eso te pasa, por no saber golpear- Dije molesto
Thomas desvió la mirada, pero en vez de salir huyendo como tantas veces o golpearme, se quedó quieto con la vista dirigida hacia otro lado, le sobé las manos y lo tomé en brazos.
-Te llevaré a mi casa y te curaré- Dije molesto y comenzando a avanzar
-¡Bájame idiota! ¡¿Qué crees que haces?!- Gritaba Thomas molesto
-Por mi culpa quedaste así- Lo miré con una mirada fría- Si no te curo me sentiré culpable
-B-Bien, me quedo tranquilo entonces- Dijo Thomas dando un suspiro
-¿Mi cara asustó?- Dije confundido
-Un poco, pero ya me iré acostumbrando- Dijo Thomas mirando hacia otro lado
-Lo lamento, supongo- Dije abriendo la puerta y entrando
-Shion, ¿vas a cenar?- Gritó mi madre desde la cocina
-Después voy por la comida- Le grité como respuesta entrando a mi habitación
Thomas se sentó en la cama y comenzó a mirar mi habitación con extrañeza, mientras buscaba algo para curarle las manos, busqué algunos vendajes y parches curitas para mi rostro, que aún ardía.
-Pensé que serías como Zouta- Dijo Thomas aun mirando al alrededor
-¿Desordenado?- Dije con una sonrisa- Lo soy, pero hasta un cierto límite- Dije sentándome al lado de él y cogiendo sus manos
-¿No deberías curarte primero?- Dijo Thomas mirando hacia otro lado
-Tú primero, me curaste la ultima vez ¿recuerdas?, estamos a mano- Dije con una sonrisa curándole las heridas en ambas manos y poniéndole las vendas
-Pero yo empecé… que complicado eres- Dijo Thomas molesto
-Eso debería decirlo yo- Sonreí dulcemente- Ya estás- Dije guardando las vendas sobrantes
-Gracias- Dijo Thomas mirándose las manos
-¿Te las apreté mucho?- Dije confundido
-No, están bien- Dijo Thomas sonriendo
-Sonreíste…- Dije alegremente
-Claro que no, viste mal- Dijo Thomas molesto
-Puedes decir lo que quieras, pero mis ojos no me engañan- Dije alegremente
-Hm, guárdalo como secreto, ¿si?- Dijo Thomas mirando hacia otro lado
-Bueno- Dije con una sonrisa y curándome el rostro
-¿Te duele aún?- Dijo Thomas mirándome fijamente
-Algo, pero se pasará- Dije alegremente
-¿Te atreverías a golpearme?- Dijo Thomas seriamente
-¿Golpearte?- Dije confundido
-Si…- Dijo Thomas molesto
-No podría- Dije pensativo
-¿¡Por qué!?- Dijo Thomas molesto
-P-Porque no- Dije con una sonrisa nerviosa
-Oye Shion, ¿estás con Thomas?- Dijo mi madre al otro lado de la puerta
-¡Si, mamá!- Dije dando un suspiro molesto
-Es que Rhys lo estaba buscando, bueno supongo que lo irás a dejar después- Dijo mi madre con una sonrisa
-¡¿Yo que?!- Grité molesto
-Eres el novio, ¿no? Tu deber es protegerlo- Dijo mi madre molesta
-¡Ya te he dicho que no es como tu crees!- Grité ruborizado
De pronto sentí un click, miré a Thomas, pero este parecía estar simplemente mirándome, supongo que fue mi imaginación, los pasos de mi madre se sintieron cada vez más lejanos, me dio a entender que se había ido.
-Me puedo ir solo no te preocupes- Dijo Thomas molesto
-Claro que no, te puede pasar algo- Dije seriamente
-Te preocupas demasiado- Dijo Thomas dando un suspiro molesto
-¡Solo lo suficiente!- Dije molesto
-Hm, entonces me quedaré- Dijo Thomas molesto lanzándose a mi cama
-¡¿Qué?!- Grité molesto
-Llamaré a mi padre para quedarme, no tienes problemas, ¿o si?- Dijo Thomas con una sonrisa
-C-Claro que no- Dije desviando mi mirada
-Decidido- Dijo Thomas sacando su celular y marcando- Papá…
-¿F-Fui engañado?- Me dije en los pensamientos, un tanto confundido
-Bien, temprano me iré- Fue lo ultimo que escuché de la conversación y guardó el celular
-Supongo que dormiré en la cama inflable- Dije bostezando
-Eres un cobarde- Dijo Thomas molesto
-¿A que te refieres?- Dije seriamente
-¿Tienes miedo de lo que pueda pasar?- Dijo Thomas con una sonrisa
-Tsk, claro que no- Dije molesto
-Demuéstralo- Dijo Thomas con una sonrisa desafiante
-Bien, pero haremos un muro con las almohadas- Dije molesto
-Como quieras- Dijo Thomas alegremente
-E-Está utilizando su sonrisa- Me dije en los pensamientos dudosamente
Thomas se durmió al rincón y yo a la orilla, Thomas miraba al rincón y yo al contrario, me pregunto que ganaré con esto, de seguro no mucho, Thomas peleaba en sueños y por accidente me pasaba a pegar patadas, como también rodar en la cama, al punto en que me botó de ésta, no teniendo mas remedio que armar la cama inflable y dormirme allí, estuve tal vez mas de una hora pensando en que hacer para darme cuenta de mis sentimientos, pero la preocupación por él, ¿es parte del amor?, o también puede ser una fuerte amistad… lo que sea, no quiero demorarme mucho, Thomas tiene admiradoras y admiradores, si llego a demorarme mas de lo que espera, podría aburrirse y si es así perderé torpemente y sin haberme dado cuenta.
-¡Malditos pensamientos, déjenme dormir!- Grité molesto y me oculté bajo las sábanas