Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

De Orgullo Y Malentendidos por KuroAshi_ZxS

[Reviews - 7]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

One Piece es propiedad de Eiichiro Oda, si no quien sabe...

Mil disculpas por las posibles faltas ortograficas y XD esta vez no pueden molestarme, traje a tiempo la conti de este fic ah! XD y si hay algun seguidor por aqui de Ciego Por Tu Oscuridad, entre mañana y el martes actualizare sin falta ewé

Saludos especiales a: lizz_cerezo, Mero-Mero-San, miri414 y NaghiTan, muchas gracias por comentar! x33

Nos leemos abajo ewé

-Creo que ya entiendo que es lo que ocurre, y créeme que me siento un estúpido por no haberme dado cuenta antes de tu sufrimiento, Sanji…-susurro con suavidad el chico, soltando lentamente sus manos para luego estrechar el delgado cuerpo de su acompañante entre sus fornidos brazos- no sabes cuánto lo lamento, ni cuan idiota me siento por habernos llevado y haberte llevado a un límite como este. Pero te mostrare, me encargare de demostrarte que nunca has sido un juguete para mí, sino todo lo contrario…-

xxxxx

Sanji no podía creer las palabras que le había dedicado el peli verde en aquellos instantes, tan llenas de ternura y de amor como siempre había soñado escuchar de su parte. Todo el miedo, el dolor y la desesperación que había sentido hasta aquellos momentos se desvanecieron en el segundo en que Zoro rodeo su cuerpo con sus fuertes brazos, estrechándolo en ellos con un cariño que nunca creyó sentir; reconfortándolo poco a poco e invitándolo a desahogarse en su fornido pecho, como nunca antes había tenido oportunidad.

El espadachín sonrió suavemente al sentir como su rubio se aferraba con fuerza a su pecho, llorando como nunca lo había hecho en su vida y esperaba que nunca más volviese a hacerlo, al menos por su causa. Acaricio con cariño poco creíble en él su lacio y sedoso cabello, sin poder evitar dejar escapar una pequeña carcajada al darse cuenta de lo estúpidos que habían sido ambos y el enorme malentendido que habían creado por culpa de sus orgullos corazones.

Zoro nunca había tenido la intención de herir a su cocinero de aquella manera, pero los celos más que latentes que sentía desde que habían iniciado aquella bizarra situación le habían hecho explotar hace un par de horas atrás, cuando había visto a Sanji coquetear con cuanta sirena se cruzase en su camino y sin siquiera importarle que por culpa de ellas había estado a punto de morir. Se había sentido molesto por la irresponsabilidad del rubio y el terror que le generaba el simple hecho de saber que podía perderlo a manos de cualquier mujer (o inclusive hombre) con el que se topasen en sus siguientes aventuras…sus celos habían tomado el control y había dañado a la persona que mas amaba en todo el mundo, juzgando sus sueños y sus virtudes aun y a sabiendas de su personalidad y del caballero que era con cualquier fémina que se cruzase en su camino…

Al ver que el oji azul ya se encontraba más calmado, el moreno tomo con suavidad su pálido rostro entre sus toscas manos y unió sus labios con inesperada delicadeza, moviéndolos con lentitud y armonía como hacia deseado hacer hacia ya tanto tiempo atrás. Cerro su único ojo, perdiéndose en las sensaciones que aquel ínfimo roce creaban en su cuerpo; empezando a quitarle el saco a su querido rubio para demostrarle que sus palabras eran sinceras, que haría lo que fuese para demostrarle a través de sus actos que él nunca, ni siquiera en el principio, había sido un juguete para él.

Deshizo el contacto entre sus labios al sentir como Sanji empezaba a colaborar con sus movimientos, quitándole su abrigo con suavidad mientras cerraba los ojos al sentir como este mordía su cuello con algo de fuerza, dejándole una pequeña marca que sin duda reclamaría después. Poco a poco empezaron a quitarse su ropa, mientras Zoro recostaba con ínfimo cuidado el cuerpo de su amante en el suelo, relamiéndose los labios ante la deliciosa vista que este le ofrecía.

Bajo sus pantalones negros con lentitud, apreciando en el proceso las torneadas piernas del oji azul y, sin poder resistirlo, empezó a recorrerlas a base de besos y lamidas que lograron calentar aun mas a su pareja de ser posible. Rio suavemente al sentir como Sanji gemía con fuerza en el instante en que una de sus manos había atrapado su erecto sexo, masajeándolo a conciencia mientras que dirigía un par de dedos a su boca entreabierta y jugueteaba con su cuello y sus pezones.

-¿Qué-Que haces?-pregunto confundido el cocinero al ver como su espadachín se separa de él y se recostaba en el piso, sintiendo como sus mejillas empezaban a arder fuertemente al ver como el moreno llevaba sus húmedos dedos a su entrada y empezaba a dilatarse a sí mismo- ¿Zo-Zoro…?-

Las palabras se habían atorado en la garganta del rubio al ver como Zoro empezaba a gemir suavemente por sus propios movimientos, quedando hipnotizado al ver como empezaba poco a poco a mover sus caderas, buscando aun mas placer. Sin poder soportarlo un segundo mas, Sanji se abalanzo sobre el peli verde, besando furiosamente sus labios mientras el mismo introducía un par de dedos dentro de su estrecha entrada; haciéndolo gemir por la sorpresa en medio del beso.

-¿estás seguro que esto es lo que quieres?-le pregunto el cocinero con voz ronca, mordiendo levemente su oído mientras su otra mano se encargaba de masturbar su miembro- no es necesario que lo hagas para demostrar que tus palabras son ciertas, se que eres un espadachín hecho y derecho y no mentirías en un tema tan delicado como lo es el amor-le sonrió con suavidad, quitando los dedos de su interior mientras sentaba al espadachín sobre sus caderas- yo…yo estoy feliz de que todo haya sido un malentendido…no me importa haber sufrido todo este tiempo solo…odio haberte hecho sufrir a ti…-

Zoro sonrió suavemente ante las sinceras palabras del cocinero, besando sus labios suavemente mientras el mismo empezaba a penetrarse con lentitud, disfrutando del dolor de aquella primera vez mientras sentía como Sanji le rodeaba entre sus brazos, reconfortándolo y cuidándolo. El rubio limpio con suavidad las lagrimas que descendieron por sus sonrojadas mejillas, esperando tranquilo el momento en que el espadachín le diese el visto bueno para empezar con el traqueteo.

Sabía cuanto dolía la primera vez, así como sabia que el espadachín nunca antes se había dejado tocar por otro hombre que no fuera él. Era un inmenso idiota, pensó el cocinero mientras empezaba suavemente a moverse, que su amor por el fuese tan grande que incluso había permitido hacerle suyo como siempre había fantaseado aun y a pesar de sus estándares y de su inmenso orgullo.

El peli verde gimió sonoramente al sentir como el miembro del oji azul había alcanzado un punto dentro de él que le había hecho jadear de gozo, empezando a moverse al son de sus embestidas mientras le besaba apasionadamente, perdiéndose en cada una de sus caricias. Su mimbro se frotaba insistentemente contra el musculoso abdomen del rubio, haciéndole gemir de placer hasta que poco a poco, ambos lograron alcanzar la cúspide.

Ambos lograron ahogar con éxito sus fuertes gritos mientras llegaban al clímax a la par, aun manteniéndose abrazados mientras sus respiraciones se calmaban y su pulso volvía a la normalidad. Exhausto, Zoro intento levantarse mientras sacaba el ahora flácido miembro del cocinero de su interior, sonrojándose furiosamente al sentir como el semen se deslizaba por sus piernas.

Soltando una fresca carcajada, Sanji tomo al moreno en brazos al ver como este aun no salía de su shock, recordando todas las ocasiones en que el había pasado por lo mismo y el peli verde se había reído de el en días por ser tan vergonzoso de algo que el estimaba completamente normal. Zoro dejo que su rubio le bañase como el había hecho un par de veces en el pasado, vistiéndose luego con lentitud sin dejar de apreciar sus cuerpos ahora mucho más musculoso gracias a su pasado entrenamiento.

Para su sorpresa, fue Zoro quien esta vez cargo al cocinero mientras salían del baño, subiendo con él en brazos hasta el puesto de vigía en donde hizo una cama improvisada con las mantas que ocupaba en las noches frías que tenía que vigilar por las órdenes de la navegante. Sonrió ampliamente al ver como Sanji se acurrucaba en su pecho, cerrando los ojos mientras poco a poco empezaba a caer dormido producto del cansancio acumulado y de las tensiones que había tenido durante su última aventura en la isla de los tritones.

-¿sabes, cocinero? Creo que tienes razón, tienes toda la razón-murmuro el espadachín tomando al fin la palabra, sintiendo como el chico entre sus brazos abría los ojos desconcertado ante su tono de voz- no importa lo que hayamos sufrido en el pasado, o las estupideces que hicimos y que nos terminaron dañando mutuamente. No me importa haber llorado tantas noches durante estos dos años por la falta que me hacías, ni haber tenido que humillarme para conseguir tu amor. No me importa el modo en que empezó todo, porque si ahora te tengo a mi lado se que podre llegar a ser el mejor solo para poder protegerte-limpio con suavidad las lagrimas que descendían por sus cristalinas orbes, estrechando su delgado cuerpo entre sus morenos brazos-ambos somos unos idiotas orgullosos que malentendieron todo desde un principio y que no fueron capaces de arreglar las cosas por miedo a la soledad o al rechazo. Pero que te quede una cosa en claro Sanji, dese ahora en adelante eres y siempre serás, el único en mi corazón-finalizo Zoro con una sonrisa socarrona en los labios, viendo como Sanji asentía emocionado por sus palabras y besaba sus labios con ternura, abrazándose al hombre que, desde que le había conocido, se había convertido el dueño de su corazón…-

¿The End?

Notas finales:

Espero les haya gustado y sus rew, nos vemos en mis proximos fics (o en los suyos XD) cuidense~ owo/

Nos Leemos!!! x33

Kuro-Chan!!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).