Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

BREAKOUT por sleeping god

[Reviews - 72]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Pequeños cortos.

Para evitar que Grimmjow nunca más me dejará ir al trabajo inventamos estas confesiones en la cama, es decir, cada mañana antes de levantarnos a vestirnos, (eso de tener sexo diario no creo que se lo pueda quitar) alguno de los dos haría preguntas de cualquier cosa que le preocupara de ese tiempo que pasó o algo que no comprenda del todo.

En realidad, me dio miedo su primera pregunta.

-¿Con cuánta gente de acostaste? ¿Cuáles son sus nombres y, si tienes, sus direcciones?

-Nunca fue nada serio—intente tranquilizarlo aunque parecía demasiado sumiso acostado en mis piernas.

-Esa no fue la pregunta.

-¿Qué… planeas hacer?

Una sonrisa felina.

Quizá no… no debí dárselos porque no supe más de algunos pero era eso o dejarle que tuviéramos sexo cada mañana también.

 

 ******

-¿Qué tal tu vida haya?

-Difícil, supongo—contesta mientras prende otro cigarrillo y me lo pasa—Llegué hablando un 6% del idioma y tuve que aprendérmelo en un par de meses, aunque sea lo suficiente para entender algo de las clases y las preguntas de los exámenes. Joder, en el primero no sabía ni que me preguntaban. Después fue sencillo,  ofertas de empleo por aquí, por allá, viajes de negocios y mucho dinero.

-Aja.

-De verdad. Me pudro en dinero.  Hice 15 hospitales con patrocinio basado en mi encanto, Ichigo. Los administradores me responden a mí. Si por mí es ya no tengo necesidad de que trabajes pero tienes razón, yo te hice ese hospital así que sería incongruente quitártelo, pero te reduciré horas.

-Donaste el hospital.

-El administrador es… mi amigo.

-¿A qué te referías con “encanto”?

Traga hondo.

-Yo no tenía amantes, tenía relaciones de trabajo.

Entiendo que lo hizo por mí pero…

-Despídelo.

-De inmediato, mi amor.

Mandilón.

 

 ******

-¿y Ulquiorra?

-Casado, tiene dos hijos.

-Vaya. ¿Y Renji?

-Con Rukia, fui el padrino de bodas. Están esperando a su primer hijo.

-Creo que no esperarán nada de nosotros.

-No, pues no—no quiero hablar aun de hijos.

-¿Y… mi padre?

-Toma—le arrojo el teléfono y le obligo a llamarle.

Sea lo que sea que hayan dicho ese par de locos debió ser bueno. Cuando le cuelga siempre se ríe.

 

******

-¿Estás listo?

-No.

Escucho como abren la puerta.

-¿Grimmjow? ¡Dios, que gusto verte!—entonces mi padre lo abraza efusivamente mientras yo paso a su costado, entrando a saludar a mis hermanas— ¿A qué debo el milagro?

-Ah, venía a volver a presentarme, esta vez como el novio de Ichigo.

-¡imbécil! ¡Cuando dije que debíamos decirlo no quería decir inmediatamente!

Mi padre lo abraza más fuerte.

-¡Ya estaba temiendo que no hubieras escogido a otro!

¿Qué?

-Por favor, chicos, era obvio. Incluso tenía ganas de dejarlos solos para que arreglaran sus problemas—le da la mano como si hubiera hecho un excelente trato y emprende camino al comedor mientras me dice—Estaba a poco de castigarte por un año cuando lo rechazaste ¿Cuándo ibas a encontrar a otro ser humano que te tolerara, Ichigo?

-¡¿Qué?! ¡Él es el que tiene problemas!

-Ichigo, arruinaras la cena—alega Grimmjow con una gran sonrisa.

-¡Es adorable!—dice mi familia.

Lo detesto.

 

******

Le abrazo por la espalda. Me recuerda tantas cosas verlo vestido con mezclilla rota, botas, su cabello alborotado pero con suéter a rombos.

Mi Grimmjow.

-Hablaremos por la noche—me dice pues hoy tiene que irse temprano a hacer negocios.

-Luces muy bien—se ríe, luego toma dos pastillas.

Mi Grimmjow, este, el que sea. Al final ¿Qué importa?

-Hay algo que no puedo arreglar si no es físicamente. La semana entrante iré a Alemania.

 

Es por eso que la siguiente ocasión debo cuestionar.

-¿Te casaste?

-¿Qué?

-Yo… lo sé. Una mujer y un bebé. Fui a tu casa y ahí… lo supe.

Aun trabajando con niños he dejado a uno sufriendo.

-Te romperé el culo ahora mismo.

-¡¿Qué?!—le alejo mientras intenta subírseme encima y abrirme las piernas—¡Basta! ¡¿Qué haces?!

Se ríe y me besa, no sin que note que abre mis piernas y empieza a rosar su pene en mi entrada.

-Escogiste joder a mi esposa e hijo por tenerme. Tú no eres de esa manera pero aun así lo escogiste.

No sé si está decepcionado y feliz.

-¡Ahhh! ¡Con cuidado!—le pido al meterse sin avisar—No, no…—le pido a que no embista y ahora sin contestarme.

-La vista desde mi casa era fabulosa, panorámica—empuja hasta el fondo—Yo vivía en un departamento en el penthouse.

-¿Cómo?

-Sabes que en alemán se pronuncia diferente de cómo se escribe, ¿verdad? No te habrán dado la dirección y la habrás apuntado como sonaba, ¿verdad? ¿Verdad?

Se ríe en mi cara.

Una madre cantando, un niño llorando y mi imaginación a qué pasaría si tocaba esa puerta.

-Entonces…

-Sí, nunca me casé ni tuve hijos. Aunque tú decidiste secuestrarme en tu imaginación, ahora atente a las consecuencias.

-¡No hice nada malo entonces!

-Pero lo habrías hecho—afirma clavando su mirada en mí, los ojos de un felino que se rompió, reflejados en los de un chico que tampoco está entero.

Me hizo algo muy malo. Yo también le hice lo mismo.

Si, y lo haría de nuevo.

¿Tú no?

Notas finales:

Gracias a todos los que me acompañaron a lo largo de este trayecto.

Como siempre, gracias por leer.

No me despido, me quedo con un: Hasta la próxima.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).