Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Juego de Placer por Jemi-chan

[Reviews - 142]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Mi querer ofrecer disculpas por la demora u.u

No tengo justificación, vamos azotenme como la mala chica que soy? okay eso sonó raro .-. XD

 

Bueno Les traigo noticias. Abajo se las dejo.

Lean! :3

       

¿De las discusiones al amor?

 

Ritsu contaba los minutos en el reloj.  Eran como las 3 am y ya no podía conciliar el sueño. Hace apenas unos minutos había escuchado un muy fuerte golpe en el cuarto de al lado, y no sabía exactamente qué había sido o qué lo había ocasionado.

 

-¿Qué demonios estará haciendo ese idiota? ¡Es demasiado temprano! – Estaba de brazos cruzados envuelto en las sabanas, escuchando aun esos estrépitos del vecino.

 

El primer día con Takano, si bien no se habían visto mucho desde esa vez en el estudio de Akihiko, y durante la cena, eso no retiraba la idea de que era un pesado total. Si no fuera por los invitados de seguro y habrían hecho la tercera guerra mundial en plena cena.

 

Aun recordaba esas constantes miradas de burla que le daba en cierto tiempo cuando se pasaban la ensalada o la sal.

 

-¿Qué? – le preguntó con un poco de comida en la boca.

 

-Nada, solo…no te vayas a atorar.-

 

-¿Ah?! De ningún mo...- De un momento a otro comenzó a toser.

 

-Respira más despacio. – Le sugirió Kirishima pasándole un poco de agua al mismo tiempo que le daba pequeños golpecitos en la espalda.

 

-Pobre Ritsu-kun. – Comentó Hitomi. Por su parte Nami solo se limitaba a seguir comiendo.

 

-¿Ves? Te  lo dije. – El azabache no ayudaba en nada, solo tuvo un solo efecto sobre él, y obvio, no fue agradable. De pronto un poco de ensalada fue a parar a su cara. - ¿Qué crees que…? –Recibió esta vez parte del pastel de chocolate. – ¡Pequeño idiota! – Cogió el pure de papa y lo mandó en su dirección confiado en su puntería.

 

El castaño no se quedó atrás, al mismo tiempo que recibía el impacto, aun con las mejillas rojas de la rabia, le lanzó un poco de pasta.

 

-Parecen un par de niños. –

 

-Son niños Nami .- Le siguió el doctor.

 

-Qué envidia ¡Yo quiero unirme! -  los tazones de arroces se veían tentadores. Ambos, directos en ambas caras. -¡A jugar! –

 

-¡No es un juego! – Le reclamaron al mismo tiempo. 

 

El castaño se paró de golpe. – ¡Estoy cansado de esto! Me retiro, con permiso. -  Cogió una servilleta para limpiarse en el trayecto y salió para su habitación.

 

-Yo también me voy, esto fue absurdo. –  Y desapareció también.

 

 No mentiría si dijera que fue difícil deshacerse del olor a comida. Tuvo que bañarse como unas 3 veces. Pero ese no era el punto.  Sus intenciones era el dormirse temprano para poder disfrutar de una buena noche de sueño, y despertar por lo menos con un buen humor. ¿Por qué sería que Takano siempre le frustraba sus planes? “Es una piedra en mi zapato” Lo acusaba.

 

<<Bam>> Se escuchó. Era algo parecido al sonido de cuando uno rebusca algo con euforia en los cajones de su cómoda.  

 

-Por favor…quiero dormir. – Se derrumbó bocabajo tapándose los oídos con la almohada. – Esto es de lo peor. –

 

<<Bam>>

-Ignóralo. – Se decía

 

<<Bam>>

 

-Ya pasará. –

 

<<Bam>>

 

-Solo aguan…- Apretó los puños.

 

<<Bam>>

 

-¡Suficiente! – Se levantó , se puso las pantuflas y salió azotando la puerta hasta dar con la del ojiavellana. -¡Takano-san! – Prácticamente  quería derrumbar esa puerta y matar al hombre del otro lado.

 

-¿Qué demonios quieres? Es muy temprano para que hagas ruido. -   “A pesar de que el ruidoso es otro”. Pasó por la mente del castaño, que ponía sus brazos en su cadera y lo miraba regañándolo. 

 

-Discúlpeme si soy ruidoso, pero me temo que no soy yo quien debería hacer silencio. -  Recurrió a su fase educada a ver si sacaba algo bueno.

 

-¿Qué mosca te picó? ¿Estás ebrio? –

 

Su paciencia se fue por la borda.

 

-¡Qué te calles maldita sea! ¡Quiero dormir y ese sonido molesto de <<Bam Bam>> no me deja! – Respiraba entrecortado. Era la primera vez que se exaltaba de esa forma.  Todo por su culpa. Si tan solo no fuera tan irritante, podría incluso soportarlo, pero era evidente. Sus personalidades no eran para nada compatibles.

 

Takano no dijo nada. Su mirada cambió de repente haciendo que un frío desconocido recorriera la espalda de Ritsu. Esos ojos parecían estar devorándolo vivo, y ni siquiera conocía la razón.

 

-Linda apariencia. – Allí cayó en cuenta. Por el enojo, no se había preocupado por ponerse la bata de dormir; sino que salió como estaba, con unos shorts cortos de color negro,  mostrando sus delineadas piernas y acentuado trasero; una camisa de mangas cortas con un estampado de conejo que no le dejaba mucho a la imaginación y por último el cabello despeinado con algo de sudor.  Hacía calor, no podía evitarlo.

 

Entonces tomó atención en cómo estaba también el azabache. Llevaba simplemente calentadores con el abdomen descubierto. ¡Santo Dios!

 

-¡No me mires! – como si pudiera taparlo por completo intentó ocultarse detrás de sus brazos. Mierda, su corazón estaba descontrolado, la sangre le hervía por completo, recorriendo cada fibra de su cuerpo hasta dejar su piel ardiente.  Esto era otro asunto que le molestaba de Takano. Esas sensaciones nuevas que desconocía, solo él las provocaba.

 

-Esa es una petición irracional. – Sonrió divertido por su reacción.  – Entiendo que tengas calor, pero…- acercó su mano a la barbilla del otro para levantarla a su rostro, mientras que con la otra mano apartaba los brazos del menor para dejarlo indefenso. – No vaya a ser que te vayas a resfriar. – Le dio un soplo en el oído sintiendo el vibrar del contrario. Masamune conocía el efecto que provocaba, y no era poco, le encantaba molestarlo con eso.  

 

-¡C-Cállate! Y-Ya lo sé-  Gritó zafándose del agarre empujando unos cuantos centímetros.  – S-Solo d-deja de hacer tanto escándalo. -  En medio del nerviosismo casi se estrella con la puerta de su cuarto, además de que en su intento por girar la perilla, el sudor que provenían de sus manos, las hacían resbalar haciendo que pareciera un completo espectáculo de bromas. - ¡Buenas noches! – Dijo para terminar, entrar y arrojarse avergonzado a la cama.

 

-Que niño…- Murmuro con ternura el otro al  verlo tan inocente.

 

El resto de la noche no pudo pegar un ojo, a pesar de que los ruidos habían cesado, Bueno casi todos. Ese sonido del latir de su corazón, aún estaban presentes…Y en aumento.

 

 

 

No encontraba nada,  y eso que estaba seguro que estaba guardado en sus cajones. Ese sobre que guardó hace mucho había desaparecido como por arte de magia. Y eso era un problema. Allí estaba información valiosa y secreta de la corporación Usami. En ese sobre, se guardaban pruebas de negocios…y no todas eran a su favor.  Si alguien que odiase a esa familia las tuviera en sus manos. De seguro, los Usami estarían en peligro, y por ende, él también.

 

-¡Demonios! ¡¿Dónde lo dejé?! – Reprochó.

 

Pero al finalizar la noche no pudo encontrarlo.  La pregunta que rondaba era ¿Quién la habría tomado?  Esto sería problemático.  En su mente se dibujaba todo lo que sucedería después.

 

Y eso no  sería para nada conveniente.

 

 

 

 

-------------------------Mansión principal  Usami--------------------------------

 

Esa mañana era un día nublado. Parecía que fuese a llover de un momento a otro, pero le daba igual, pues le gustaba la lluvia. Desde pequeño siempre le gustó.  La sensación del agua sobre su piel era indescriptible, como si limpiara cada parte de su ser. Así, no le vía nada de malo.  Sin embargo ahora la situación era distinta. Cuando estaba viviendo con su hermano, en medio del bosque,  podía ir a fuera y dejar que sus pies se mojaran, saltando sobre los charcos de agua y jugar con el barro; pero ahora, solo podía limitarse a ver desde su ventana  caer las gotas; pues su amo se lo había prohibido.

 

<<No debes comportarte de esa manera, ya no eres un simple campesino, ahora eres un empleado de la honorable familia Usami. Eres mío. Debes comportarte como alguien que esté a nuestra altura sino quieres que se burlen de ti. Recuérdalo Misaki, tú vida es mía y yo la manejo como quiero. >> 

A pesar de ello a veces volvía  a comportarse como un chico cualquiera. Yendo al jardín en días de lluvia para divertirse un poco. Ese era su momento de libertad.

 

-¿Podré hacerlo hoy también? – Se preguntó viendo las primeras gotas de lluvia caer. – Pero es casi imposible,  ni siquiera estoy en la mansión de Usagi-san…- Era una lástima.  Se  inclinó un poco más en el barandal del balcón para estirar la mano y dejar que se moje un poco (El balcón tenía una especie de techo). Su cadera le dolía como mil demonios. La noche anterior se habían sobrepasado en las rondas de sexo con el peliplata, era obvio que su cuerpo no respondería tan fácilmente.  También le dolía el trasero.

 

Sin embargo, no le molestaba, a diferencia de muchas veces anteriores. Esa noche fue la primera vez y tal vez única, que no fue tratado como un objeto de pura satisfacción sexual, sino como persona, esa noche, fue abrazado, besado, y tratado como un ser humano. Además Usagi actuó diferente también, nunca se había dejado tratar como esa vez, dejándole todo el control en sus manos. Era algo magnifico y totalmente excitante.

 

En su interior esperaba que se repitiera…

 

-Definitivamente soy un masoquista. – Comentó. Y en algo tenía razón. – Mira que enamorarme de alguien así. Soy un idiota. – Ya para qué negarlo, si era tan evidente, al menos sus compañeros lo notaron antes que él mismo. Pero se había cerrado ante la verdad, pensando que así se protegería del dolor que le causaría después. Y no estaba equivocado. Justamente el solo hecho de que el ojilila le perteneciera a Ritsu le parecía insoportable. Pero no podía hacer nada al respecto. 

 

Incluso ese mismo amanecer. Al final Akihiko se había ido dejándolo solo en la cama, dejándole una nota que decía que se fuera a su cuarto apenas despertara. Eso era algo cruel de su parte.

 

-¡Baka-usagi! – Gritó al mismo tiempo que comenzaba a aumentar la intensidad de la lluvia. – Me da lo mismo. – Dejó sus preocupaciones de lado, y salió de su habitación a escondidas para ir al jardín. Cuando llegó, hizo justamente lo que tenía planeado hacer. Se sacó los zapatos. - ¡Hora de jugar! –Saltó sobre el fango con lodo y agua. Salía y volvía a saltar en charcos mucho más grandes. Era como antes, sin reglas, sin ataduras, solo él y la naturaleza. Simplemente eso.

 

La lluvia caía cada vez más hasta mojarlo completamente.

 

-Que bien se siente…-Murmuró.

 

-Sí, es una buena vista. – Una voz detrás de él lo hizo parar en seco para detenerse en frente de la persona que había hablado. Esos ojos y ese cabello marrón ya habían sido mencionados antes. Ijuuin Kyo.

 

-¿Q-Q-Qué hace aquí? – Preguntó tartamudeando y de una forma avergonzado por el espectáculo tan bochornoso que le había mostrado antes.  –Y-Yo no estaba haciendo n-nada malo, tan solo…- Quería explicarse, tenía miedo que se lo comentara a Usagi, o que se burlara de él, pero sobretodo lo primero.

 

-Tranquilo. –Dio unos pasos para acercarse a él y taparlo con su paraguas. – No le diré a nadie de esto, sería un desperdicio hacerlo. –Le sonrió cálidamente haciendo que el corazón agitado de Misaki dejara de lado la preocupación. Esta persona a pesar de ser conocido del ojilila no se parecían en nada. Ijjuin era mucho más amable y atento. El detalle del paraguas era algo muy lindo de su parte, además está la ropa que le había regalado con anterioridad ¿Por qué se molestaría tanto en él? Y sobre todo, si realmente era la persona que vio esa noche que fue a buscar el vino ¿Cuál sería el motivo de que haya estado allí? Eso era un misterio  y de cierta forma le intrigaba conocer la respuesta. –Deberías cambiarte o te enfermarás. –Otro punto a su favor era su tono de voz, tan reconfortante y dulce.

 

-S-Sí…muchas gracias. – No iba a decir nada en contra. -¿Qué hace aquí? –Le preguntó en medio de su camino para ir dentro.

 

-Te vi tratando de pasar desapercibido mientras te infiltrabas al jardín, me pareció divertido y te seguí. – Misaki vio la sonrisa juguetona  que se formaba en sus labios, y casi le pareció compartir esa misma gracia.

 

-Misaki ¿Puedo preguntarte algo? - 

 

Mientras no sea nada imprudente lo haría.

 

-D-Depende. –

Hubo un poco de silencio. Ambos se detuvieron dentro del invernadero (Que quedaba a un lado de la puerta para entrar a la mansión),a manera de refugio momentáneo.

 

-Bien pues…¿Qué tipo de relación tienes con Akihiko? –Su mirada era seria. No tenía dudas de la respuesta que tendría pero, necesitaba comprobarlo. No solo porque se lo habían pedido, sino de manera personal.

 

Eso era sí era imprudente.

 

El contestar era algo que estaba fuera de cuestión, había respondido a este tipo de preguntas antes, pero siempre le pareció incómodo.

 

-Yo, soy solo un simple sirviente de Usami-sama. –Repitió esas palabras metódicamente, dando origen a una opresión fuerte en su pecho.

 

-Ya veo. – Pero no pareció convencido. Para Ijuuin el ver a este niño con la mirada perdida y vacía le resultaba ¿doloroso? Eso era extraño pues jamás lo había sentido, pero el que Akihiko sea el responsable de que Misaki tenga esa mirada, lo enojaba demasiado. Apretó los dientes para que no se le escapara alguna imprudencia. –Debo entrar, aún llueve demasiado, tú espera hasta que disminuya un poco, te dejaré el paraguas. –Le acarició el cabello mojado mirando por última vez su silueta mojada. Se lo veía muy sexy, era casi imposible controlarse ante eso. Mejor irse antes que  hacer algo, además estaba…- Bien, te veo luego.- Terminó sonriéndole para irse cubriéndose del agua.

 

-Qué persona más extraña. – Pero eso no lo molestaba. Una sonrisa estaba en su rostro.

 

Sin embargo no se debía confiar.

 

-¿Y? ¿Qué te dijo? –Haruhiko lo esperaba con una toalla en la entrada. Ijuuin lo miró irritado cogiéndole la prenda para secarse. Esto no le gustaba nada, simplemente estaba  siguiendo los hilos manipuladores Fuyuhiko, a quien simplemente no podía desobedecer aunque quisiera. Le debía mucho,  y él fue su principal patrocinador para convertirse en dueño de su propia corporación, siendo Fuyuhiko su mayor accionista.

 

-Ya te imaginarás. – Pero, si bien antes había aceptado la misión de espiar  los sucesos de la mansión Usami, jamás imaginó toparse con aquel niño tan hermoso. Y esto era una muy grande distracción ante su objetivo principal.  Vigilar a Onodera Ritsu.

 

Fuyuhiko tenía conciencia del rencor que tenían los Onodera hacia él, y era muy probable que el casamiento fuera una trampa, y que estuvieran planeando algo para derrumbar su empresa. Pero esto era algo riesgoso. Fuyuhiko también podía utilizar las mismas tácticas que ellos, y ponerlas  a su favor. Pero de todas formas no podía dejar de vigilarlo, mejor era prevenir. Ese mocoso de los Onodera podría ser su perdición.

 

-¿Deberíamos decirle esto a padre? – preguntó el de lentes.

 

-No, si lo hacemos, Misaki podría parecerle un estorbo y es posible que se deshaga de él. Lo conoces. – Esa era una hipótesis muy válida.

 

-Tienes razón. Y ambos sabemos que eso no nos gustaría. –

 

-Tenemos los mismos gustos. –

 

-Por supuesto. –

 

 

 

 

 

-----------------------------Mansión de Akihiko-------------------------

 

Algo estaba mal. Takano no actuaba como de costumbre, bueno si es que se le podía llamar costumbre a un hábito que ni siquiera conocía al 100%. Simplemente, que en el laxo de tiempo que lo llevaba conociendo, nunca  lo vio de esa forma. Ido, y molesto, no molesto de la forma común, típica de cuando se peleaban como niños, sino, molesto enserio, con ganas de romper algo o golpear a alguien. Se lo notaba preocupado y  ansioso, y por la cabeza de Ritsu no encontraba la respuesta de qué sería la causa.

 

Antes en el desayuno ni siquiera le prestó atención a sus constantes muecas de desagrado.  Es más, ni siquiera  lo miró. Y, no es que le importase, ni que le preocupara, poco le importaba como se encontrara el idiota de Takano Masamune, simplemente le incomodaba y eso le parecía desagradable.

 

-Hey, si te pasa algo entonces dilo, es molesto que estés de esta forma. – Le dijo sin más remedio cuando se lo encontró en el pasillo de su cuarto antes de entrar. Ya llevaba así prácticamente todo el día. 

 

-No entiendo a qué te refieres. – Lo volvió a hacer. Desvió la mirada ignorándolo.

 

-¡A eso me refiero idiota! ¡Es irritante que actúes de esa manera! – Gritó.

 

-¿Estás preocupado por mí? – Pareció sonreír, la primera sonrisa del día. 

 

-¡N-N-Nada que ver! Es solo que a los demás les incomoda. – Era mentira. Al único que notó el cambio fue él. Eso creía por lo menos.

 

-No es nada, simplemente no encuentro algo. –

 

-¿Es algo importante? – Sonó curioso.

 

-Entonces, sí estás preocupado. – Le tomó del brazo para atraerlo hacia él. Una manera suya de distraerse y dejar de lado sus problemas.  El otro meneaba la cabeza en señal de negación, esa reacción desesperada de tratar de esconder sus emociones era lindo y adictivo. Más, quería ver más. – Estás rojo. –

 

-¡C-Cállate! – Intentó zafarse, pero era inútil.

 

-Tu piel está erizada ¿Tanto te afecto? – Su voz cambió. Ese tono era mucho más profundo que antes. Ritsu lo comprendió, trataba de hacer que sus defensas caigan con eso, y lo estaba consiguiendo. Sus piernas le  temblaban y por alguna razón quería llorar. Pero por otra aunque le daba miedo, quería que permanecieran así. 

 

-Y-Yo…-

 

-¿Por qué no hacemos algo divertido? –Mordió su oreja. –Y no me refiero a una pelea de comida. –

 

“Esta persona…¿Qué está pensando?...Pero no puedo negarme, las palabras no salen de mi boca. Su cuerpo está caliente. Su tacto, se me hace muy conocido…¿De dónde lo conozco? ¿Qué es esto?...¿Por qué…por qué me siento tan excitado?”

 

 

 

       
Notas finales:

Owww que linda forma de proteger a Misaki por parte de Haruhiko y Kyo <3 ¿No lo creen? XD Por su parte Usagi es un hijo de fruta :v ya me lo han dicho. Pero igual, espero que no lo odien uwu

 

Ya se resolvieron algunos misterios, pero aun quedan otros por resolver jajajajaj soy malisima lo sé muajajaja!!! ¿Quién habrá robado esos documentos? ¿Qué clase de cosas divertidas harán los nostalgicos?! ¿Habrá otra pelea de comida?!!! XD yo espero que si.

Bueno las noticias. Este fic se actualizara los fines de semana puede que sea Domingo o Sabado eso demende la hora de cada país XD espero me apoyen con eso. Mi agenda por fin está organizada uwu.

 

Gracias por leer!!! *--*)/

Besos ^*^)/


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).